Carta de SITRAHSAN al presidente Rodrigo Chaves

Excelentísimo Señor presidente Rodrigo Chaves.

Su persona cuando fungió como ministro de Hacienda, desarrolló una serie de estrategias para mejorar los indicadores fiscales y en su teoría de una planificación tributaria nacional, obtendría en mayor o menor grado incidencia favorable de esos indicadores.

La inflación, el déficit fiscal, la evasión, tema al que se refirió recientemente en un medio de comunicación, y muchos tópicos más ocuparon su atención.

Hoy con la investidura como nuestro presidente, goza de la popularidad y aceptación de muchos y humildes costarricenses, al observar su determinación y coraje para resolver los mal llamados “cuellos de botella” que tienen estancada esta gran nación.

No dudamos que, con su experiencia, como director de una gran orquesta, busque el camino adecuado para llevarnos a los indicadores sociales que ocupa un país en vías de desarrollo, situación desde hace años o lustros pretendida pero difícilmente alcanzada.

Lamentamos en mucho el engranaje jurídico para lograrlo que debe atravesar, pero no dudamos que ciertamente, sin el vil decreto, pueda lograr dicho cometido. Hay medidas administrativas que, con el fundamento jurídico actual, permiten a pesar de las potenciales trabas, seguir avanzando. Nosotros les llamamos, medidas administrativas sobre el marco jurídico vigente.

No obstante lo anterior en el Sindicato SITRAHSAN, como en muchas organizaciones sociales de esta gran nación, nos preocupa el confort de sectores financieros, los cuales hoy día se evidencia el cumplimiento de un delito de “lesa humanidad” y siguen impunes, abrigados en la prescripción pero sobre todo, en la no fiscalización oportuna, porque aquella entidad sea física o jurídica, que violente o eluda el control fiscal y no pague los tributos de una operación financiera, pues simplemente está robándole al pobre, al enfermo en medicina idónea para el tratamiento de su patología, le está robando a las escuelas o la educación misma, por no darles los recursos o nombrar los docentes necesarios, porque al final esos actos reprochables, también tienen consecuencia en que favorecen en mucho la oferta privada y eso no se vale. Por ejemplo, si no hay aulas y la aglomeración de estudiantes supera los 35 en cada aula, muchos pretenderían quizás, mejorar el conocimiento de sus hijos en colegios privados con una atención más personalizada, entre otros flagelos como la seguridad y la salud.

Actuaciones de fraude de simulación, señaladas dentro del injusto penal, impunes no es de recibo Señor Presidente, precisamente, porque a nuestro Ministerio en mucho llegan a dirigirlo banqueros de carrera, y se blindan con normas que hasta con el secreto bancario juegan, y en muchos casos, los obligados tributarios ante la Administración tributaria, presentan estados con un espejo de quiebra, pero cuando ostentan condiciones financieras, presentan un estado de solvencia, liquidez y apalancamiento como la mejor empresa saludable del ramo.

Señor Presidente, las fiscalizaciones a los “poderosos” casi no llegan; algo parece estar mal y debe investigarse, no puede ser quizás que con el estribillo “ facilitación del comercio” no se fiscalice en rojo ni el uno por ciento en materia de comercio internacional, y a lo interno, tengamos un promedio de no menos de 18 mil declarantes por cada auditor fiscal, segregado en mucho en GTs, para un auditor significan 50 o más casos asignados, con capacidad de no más de ocho fiscalizaciones integrales al año de esas 50 grandes empresas tributarias, y si obtiene una simple razón numérica, es de una vez cada seis años poder volver a fiscalizar esa GT, dándole quizás oportunidad, de que lo determinado en la auditoria, se nos vaya diluyendo en el siguiente año, y cuando volvemos a auditarla, ese periodo ya está prescrito, como sucedió con un Banquero, Ex Ministro, según señalan las redes sociales.

Requerimos tecnología, si claro, pero como el TicA al principio dio resultados maravillosos, pero luego se maleo, porque el obligado a pagar los impuestos es vivillo, no ve que eso le genera grandes ganancias, la probabilidad de llegarle a una empresa no supera el 2,5% de riesgo subjetivo, si cambiamos eso, le está dando el Gobierno y con la complacencia de Políticos que no legislan o blindan, una probabilidad de éxito del 97,5% para el delito tributario, la evasión o el fraude mismo, al no poder contratar más personal en fiscalización o mejorar la norma legal.

Señor Presidente, no basta la tecnología sin recurso humano capacitado y bien pagado, no podemos; sólo pensar que auditar las pulperías de barrio es donde está el problema, es donde están los “ huevos de oro” o “clavos quizás “ disfrazados en mucho de normas jurídicas insuficientes en su alcance o competencia, también en sectores blindados en mucho por compadrazgo político, quizás a partir de la amistad de un Ex Director de Aduanas o de Tributación, en fin, nombran Directores que vienen, aprenden y se emiten normas o directrices que luego ellos mismos objetan con conocimiento de causa, ante una operación de control fiscal. Sugerimos aquí se instaure la cláusula de confidencialidad del funcionario Hacendario, de tal manera, que no pueda ejercer actuaciones contra el Estado mismo, si gozó del nombramiento en el Ministerio de Hacienda.

Señor Presidente, tenemos personal nombrado de carrera muy solventes en conocimiento técnico y profesional, pero muchas veces no se les permiten desarrollarse o realizar las actuaciones de la mejor manera, por una legislación tributaria complaciente, por ello; la reforma tributaria es necesaria, para fortalecer la actuación, no con más impuestos, pero si con mejores determinaciones y actuaciones del profesional mismo, en la búsqueda de la verdad real, ante una declaración jurada del sujeto pasivo, y pueda sin mayor dilación hacer efectivo, por tratarse de materia tributaria, hacer más efectivo e inmediato el proceso de determinación y cobro de los tributos determinados al descubierto. Debe revisarse la cuantía de expedientes y montos que representan los expedientes en Cobros Judiciales de este Ministerio. No esperamos se asuste cuando tenga ese detalle.

Señor Presidente, el ROP se está desapareciendo, son billones lo que señalan la estadística, pero creemos eso es mero papel, y estamos frente al ROBO del siglo, mediante artimañas de inversiones fraudulentas o quizás una malversación de fondos y eso debemos detenerlo, y aunque el CONAFIC sea un ente desconcentrado de su actuación como Presidente, permite recurrir al recurso de lesividad en defensa de todos los Costarricenses, y pretender dejar sin efecto acuerdos como el nombramiento de la señora Rocío Aguiar y la posibilidad que los operadores de Fondos de Pensión inviertan en el extranjero esos recursos.

Hay cosas, que pueden salvar al trabajador mismo; las amenazas de un marco jurídico regulatorio para el funcionario público, actor público que se ha visto amenazado constantemente por la “prensa canalla” dejándole como si fuera un mal crónico en la sociedad, debe desaparecer, acaso el médico de la CCSS es malo, el enfermero en la CCSS es malo, el misceláneo de la CCSS es malo, el Policía es malo, el misceláneo en la escuela pública es malo, el chofer de la ambulancia es malo, o el maestro es malo quizás, en fin la pandemia demostró la valía de estos servidores y ellos con recursos limitados que el Estado proveyó, pudieron cumplir a cabalidad esa obligación con la patria, quizás muchas muertes de inocentes se pudieron evitar y el dolor de un hijo al ver a su madre o padre que hoy falta en su casa, porque el Sector Político fue tolerante y no legislar para no tener recursos suficientes y fiscalizar a los “peces gordos” y eso generó la carencia de recursos. Si hubiéramos tomado responsablemente el tema, en materia Tributaria y de control fiscal Costa Rica estaría volando.

Señor Presidente; debemos instaurar un nuevo concepto en la Hacienda Pública, denominado CODIGO PROCESAL TRIBUTARIO, donde los funcionarios del Ministerio de Hacienda, tengamos más competencia territorial o material y atribuciones para que ese ocho por ciento del PIB que se estima es fraude, evasión o contrabando disminuya, ese dinero alguien se lo está embolsando, y se está haciendo millonario a costa del Estado mismo, no es posible observar millonarios en pasarela y saber que viven de cero fiscalizaciones o de vulnerar la norma tributaria, y ostenten en sus mansiones vehículos en ediciones limitadas o de gran valía, o sus yates aparcados esperándolos para atender como reyes su estructura paralela.

Señor Presidente; no estamos en contra de los inversionistas, sanos inversionistas, los que promueven el trabajo de miles de Costarricenses, los que con su visión quizás, desarrollan un proyecto turístico de primer mundo, pero tampoco se vale que se le exonere todo o que simple, como es amigote de “Juan Pérez” ( nombre figurativo) se le brinden todas las facilidades para invertir y después que el país mismo le ofrece un clima político estable y mano de obra calificada, el Estado mismo no tenga garantía del pago de las cargas sociales, y burlen el régimen jurídico con simulaciones constantes que sirven para evitar ser condenados o que el país mismo, no tenga la posibilidad jurídica de aplicar medidas cautelares para garantizar esas deudas, aunque hoy la Ley lo señala, los funcionarios no son suficientes y muchos empresarios se van y dejan cualquier cantidad de “perros amarrados”, hasta las prestaciones de los empleados se van en sus valijas.

Señor Presidente, mucho por hacer ciertamente, muchos sectores que debe volver su mirada, pero el Sector social sindical no es su enemigo, somos vigilantes muchas veces de las “ argollas” incrustadas quizás en una organización publica, que se sirven en bandeja de plata, somos denunciante de actos dolosos, y muchas veces caemos mal por eso, porque muchos dicen, no nos dejan trabajar, y no es eso, es que quizás tengamos más arraigado el nacionalismo mismo, que amamos tanto a nuestra patria, que un “vivazo” nos provoca reproche, porque no es bueno a nuestra óptica, que salgan del país el viernes y regresen el domingo en la tarde, y esa actuación sea reiterada y nadie los investigue, y quizás son personas que ostentan un poder solapado, porque debemos también señalar, que mucho alto funcionario, llegó ahí por méritos propios, sacrificio y amor a la camiseta, y nuestro respeto hacia ellos siempre, no todo está perdido, pero que hay algunas “fichas” en el camino, eso debemos confirmarlo y detenerlo.

Como siempre deseamos éxitos en su gestión, el balance de la deuda, depende en mucho de la estrategia de los eurobonos y la venta de activos según percibimos de los medios de comunicación, pero nosotros desde años atrás hemos propuesto responsablemente, una sana administración tributaria, el golpe a los deudores principalmente hipotecarios es alto con la tasa básica pasiva, podemos de otras maneras obtener ingresos frescos, y es promoviendo la producción local, el trabajo y aquellos sectores que gozan de exoneración, revisarlos para readecuar ese balance.

Por último, recordar el estribillo actual y que palabras más o menos usted dijo en un medio de comunicación creemos, no estamos mal, lo que estamos es mal administrados, no requerimos más impuestos, lo que debemos es recuperarlos.

De nuestra parte decirle, o reiterarle, el frio no está en las cobijas de los proyectos como empleo público o desembolso del ROP, al parecer esas son simples desviaciones mediáticas.