Ir al contenido principal

Lloran el bosque y sus criaturas

Freddy Pacheco León

Freddy Pacheco León

Los troncos llorosos, recién arrancados a pedazos, de los centenarios árboles extraídos del bosque, en el área de conservación en el Caribe sur, son testimonio de una acción criminal, ejecutada impunemente. Aunque grandes, las mentiras conque pretenden justificar la acción de las motosierras y equipos pesados, no son tan grandes como algunos de los monumentales árboles destrozados. Los gigantescos almendros de montaña, «torres de condominio» para infinidad de valiosos animales, son algunas de las víctimas. Igual las caobillas, balas de cañón, cativos, cedros maría, chilamates, escobos negro, indios desnudo, entre otros, son el desmentido innegable a las falsedades oficiales, de que, en Limón, “todo está en regla, solo estamos respetando los derechos adquiridos”, de sus amigos vecinos, les faltó decir.

Y es que, solo cuando prestamos un poquito de atención, hacia las criaturas, generalmente esquivas del bosque, es cuando adquirimos conciencia del maltrato a que están expuestas, incluso en áreas de conservación, formalmente protegidas por leyes de la República.

Detrás de lo que, con desprecio, el presidente Chaves y el ministro de Ambiente Tattenbach, llaman despreciativamente, esos «monos», que «los que se oponen al desarrollo dicen querer proteger”, existe una formidable, e invaluable, biodiversidad, que, pese al desdén de esas autoridades, ha sobrevivido cientos de años.

Destacan, más de 1.200 especies de plantas vasculares, donde más del 90% son nativas, parte fundamental del hábitat, en que se interrelacionan con infinidad de anfibios, reptiles, monos congo y cariblanco, el simbólico perezoso, ardillas, guatusas, osos colmenero, armadillos, tolomucos, mapaches, pizotes, zorros, serafín del platanar, así como más de un millar de especies de mariposas, escarabajos, dípteros, hormigas, avispas y abejas. Y, sin olvidar, nada menos, que, a las 377 especies de aves, ¡cerca de la mitad existente en el país!, que, sin duda, son de gran valor biológico.

En fin, plantas y animales, grandes y pequeños, algunos diminutos, pero cumpliendo una función ecológica insustituible, aunque todos indefensos ante la avaricia destructiva. «Cada criatura en desgracia tiene el mismo derecho a ser protegida», clamó sabiamente San Francisco de Asís. Sentencia que desdeñada en Gandoca-Manzanillo; en ese privilegiado lugar de Costa Rica, que forma parte de las áreas de conservación que caracterizan a nuestro pequeño pero gran país, que demanda ser conservado.

15.8.2024.

Necesitamos miles de Locas de Gandoca (*)

Osvaldo Durán-Castro
Profesor ITCR, ecologista FECON

“Hay días en que no llueve, llora”, dijo Max Jiménez Huete. Yo creo que desde hace más de treinta años, cuando la “La loca de Gandoca” (1991), andaba por el Caribe sur de Costa Rica, allí no ha dejado de “llorar”. Hay historias hechas libro que trascienden el momento histórico en el cual fueron escritas y que nos recuerdan que las sociedades pueden acumular problemas y mentiras y vivir en el simulacro de que son impolutas.

Los atentados contra el Refugio de vida silvestre Gandoca Manzanillo cometidos por el hijo del señor de los 10 bypasses, son un problema nacional y global. Los humedales, el agua, los árboles y en general los ecosistemas de Gandoca Manzanillo estorban tanto como los de cualquier otra parte del planeta. Lo que persiguen el multimillonario Elon Musk y puñado de sus colegas, son los bosques, el subsuelo, el agua de la Amazonía, el coltán del Congo, el litio de Uyuni en Bolivia, Atacama en Chile y Salta y Jujuy en Argentina, que requieren para sus negocios. No por casualidad dijo Musk que darían golpes de estado contra quien fuera y cuando fuera, lo mismo que de otra manera dice la general Laura Richardson, jefa del Comando Sur de las Fuerzas Armadas estadounidenses, cuando habla de todos nuestros recursos como si fueran de su país.

En Gandoca Manzanillo se vive la depredación en tiempo real a pesar de que se repite que somos un país verde. Mucha gente vive en el fanatismo impuesto de creer que toda la gente protege la naturaleza, cuando en realidad enfrentemos el saqueo de nuestros ecosistemas. Es la historia repetida pues fue así como se establecieron los enclaves bananeros de la UFCO hace casi siglo y medio en este país y ahora los enclaves del megaturismo avanzan en el mismo camino.

El megaturismo y la urbanización de la zona marítimo terrestre de Costa Rica tienen la misma lógica de la inversión externa directa del enclave bananero, que es la que ataca directamente al refugio de vida silvestre Gandoca Manzanillo. Veamos al menos 4 marcas de esto:

  • Primero, es capital externo -de la región o del país- que se aloja en una determinada zona gracias a las facilidades que se le brinda. Esto puede incluir acuerdos y permisos por amistades políticas y tráfico de influencias, y esto conduce a la corrupción institucional.
  • Segundo, explotación indiscriminada de la Tierra, a veces en el interior del país, pero en el caso del turismo, de la zona marítimo terrestre.
  • En tercer lugar, utilización-explotación de mano de obra local pagada con salarios locales y muchísimas veces por debajo de los mínimos legales establecidos en el país. De esto da cuenta el hotel Riu, donde un trabajador nicaragüense murió prácticamente en condiciones de esclavitud. Es el mismo hotel que fue inaugurado por el presidente Arias Sánchez. «Por fin tenemos un hotel en este maravilloso país, ejemplo mundial de sostenibilidad, de preservación de la naturaleza”, dijo la vocera de la empresa. Riu es uno de los enclaves hoteleros que han llevado a incontables conflictos por la explotación y privatización de hecho del agua, la destrucción de ecosistemas y la gentrificación, o dicho en términos más llanos, que han llevado al desplazamiento, expulsión y exclusión social en Guanacaste por el encarecimiento prohibitivo de la vida y de la tierra; el costo de vivir en allí llegó a niveles que son sencillamente imposibles e insoportables para la sociedad pobre de Guanacaste.
  • Y cuarto, evasión fiscal, riqueza generada acumulada en el país por una élite, pero fundamentalmente expatriada. Entonces, enclave bananero y enclave turístico, funcionaron y se rigen por las mismas reglas reforzadas por el modelo de sociedad neoliberal que sufrimos las mayorías del mundo.

¿Por qué adquiere más vigencia “La loca de Gandoca” que el presidente no conoce? Porque nos sacudió y nos repitió que no éramos, ni somos, una “postalita verde”. Anacristina Rossi no se conformó con describir aquella miseria diciendo algo como “en este paraíso está ocurriendo una desgracia”. El libro fue previsorio y visionario y eso solo ocurre cuando alguien conoce a profundidad su contexto social y hace que sus personajes asuman la tarea de denunciar. Es vigente porque persiste la idea de urbanizar del Caribe sur que buscaba la “compañía Ecodólares S.A.” con su ‘estilo’ de construcción de obras de megaturismo en áreas de naturaleza vulnerable, como el Refugio Natural de Vida Silvestre Gandoca-Mazanillo”.

Los hechos expuestos en la obra “La Loca de Gandoca” no eran únicamente narrativa de ficción para denunciar corrupción, tráfico de influencias, redes políticas actuando contra ecosistemas, comunidades y organizaciones sociales. La presión de grupos empresariales, políticamente influyentes era y es realidad en la Costa Rica actual. Ayer como hoy “…hemos sabido que sobre el refugio Gandoca pesan inmensas presiones económicas”. “Usted sabe que las presiones económicas son presiones políticas”, como le dijo el embajador a Daniela.

El Caribe sur de Costa Rica se está guanacastequisando. Pero la inminente amenaza contra Gandoca Manzanillo ya se extendió a todo el país; desde La Cruz hasta al Pacífico central y hasta Punta Burica. Osa es el siguiente “tesoro” por explotar en los planes de gobiernos y empresas turísticas locales y foráneas. Un aeropuerto llenará algunas cuentas bancarias y acabará con los ecosistemas, y no hará que la gente salga de la pobreza; hay que mirar Guanacaste y el Pacífico central. Es la misma avalancha que amenaza con bajar desde Barra del Colorado hasta el Sixaola. Los 2.471.150 turistas que vinieron por aire al país en 2023 (90% del total, ICT, 2023. Situación del turismo en Costa Rica) sin duda representan un logro económico, pero la estela no negativa que el modelo de megaturismo de enclave deja en muchas partes no se borra con los billetes. Detrás y por debajo del éxito financiero hay corrupción por parte de autoridades que en lugar de regular, limitar y hacer cumplir las leyes para evitar la destrucción, se divierten en juergas en las mansiones de la familia del empresario heredero del “hombre de los 10 bypasses”. Y como dijo Daniela: “…según las autoridades no había manera de regular estas inversiones pues si el capital de extranjeros se regula, se va”.

Igual que ayer, se hace patente que hay incompetencia en las jerarquías y gente del Minae y que a pesar de eso quieren adjudicarle más poderes políticos para tomar decisiones que deben ser de carácter técnico y científico. Esto se expresa en el proyecto de ley “Fortalecimiento de competencias del Ministerio de ambiente y energía”, expediente 23.213. En el caso Gandoca Manzanillo, tanto hace décadas como ahora, mediaron visitas y reuniones en Casa presidencial, documentos y permisos espurios y arreglados a la medida, falseados, para que los perennes amigos de los gobiernos puedan continuar el proceso de cementación del Caribe Sur.

Los libros que trascienden el momento histórico en el cual fueron escritos solo son posibles porque hay escritoras valientes que se animan a decir las verdades y desgracias que vive una sociedad. No se trata de literatura complaciente y cómplice. A Anacristina Rossi le debemos el mérito de haberse plantado, primero como mujer, y luego como escritora, ante todos los poderes y las amenazas, incluidas las amenazas de muerte (que se repiten hoy contra otras personas) para decirnos hace más de 30 años que ya estaba ocurriendo lo que hoy es un escándalo por la destrucción negada por el presidente de la República y su escudero de ambiente.

Gandoca Manzanillo es una foto actual de Costa Rica: una amalgama de destrucción, corrupción, tráfico de influencias, todo tapado por un discurso falaz en el que los gobiernos y los inversionistas privados juran que el ecoturismo sí consiste en “que los hoteles no sean más altos que la palmera más alta”. Y en paralelo estamos viviendo una época en la que pensar críticamente está escaseando, es poco menos que prohibido y es perseguido. La disidencia es condenada. El presidente se burla de sus detractores, no les debate con argumentos, les descalifica.

Lo que hoy se vive en el Caribe Sur no es tan solo la colusión entre empresarios y gobiernos que los favorecen. Es la disyuntiva entre intereses privados frente al interés común y colectivo, al patrimonio natural del estado, a los derechos de los ecosistemas, del agua, de los árboles, de los animales, de los ríos. Esto no es una pendejada: se trata de que tenemos que aprender a convivir y detener la destrucción.

Necesitamos urgentemente buena materia prima: información seria, crítica, fundamentada. Pero sobre todo necesitamos indignarnos, actuar y generar un nuevo pensamiento crítico que nos permita superar la desinformación en todas sus variantes. Cuando en la cabeza se instala la idea de que hay que estudiar para tener más dinero, podemos decir que el individualismo pregonado por el modelo social neoliberal ha triunfado. Ojalá no suframos de aquel espantoso presagio de Óscar Wilde de hace más de 150 años: “Vivimos en una época de hiperproducción y de instrucción escasa, una época en que la gente, tan ocupada en producir, se ha olvidado de ser inteligente”. No permitamos que nuestra universidad se convierta en un nicho para reforzar una sociedad contraria a lo que dictan los Estatutos orgánicos de nuestras U públicas. Necesitamos estudiar para construir sociedades más justas, más equitativas, en las que la educación sea efectivamente una oportunidad real, pero colectiva, de conseguir mejor calidad de vida.

¡Gracias…totales! Anacristina Rossi por haber acatado la “orden” de Robinson: “Ahora mismo vas a empezar a escribirlo”. “La loca de Gandoca” nos develó lo que estaba pasando en aquel tiempo aciago. Desgraciadamente la historia se está repitiendo como tragedia y nos relanza el desafío de si salvaremos el Caribe sur o si termina de desbarrancarse y al fin logran construir “un Miami de la selva” en Gandoca.

Su presencia es un honor inconmensurable para nuestro Tecnológico de Costa Rica, por ser Usted una escritora vastamente reconocida por toda su producción y sus méritos literarios, pero además por haber “atravesado el amor y la muerte”, por romper el miedo y por su coraje, cualidades cada vez más disminuidas entre la intelectualidad.

Necesitamos miles de “locas de Gandoca” y espero que muchas y muchos estén en esta universidad.

(*) (Discurso de apertura del foro “Historia y vigencia del conflicto en Gandoca Manzanillo” con la escritora Anacristina Rossi. 14 de agosto 2024, ITCR).

Foro con Anacristina Rossi sobre Gandoca-Manzanillo – 14-08 a las 9:30 presencial y YouTube

Este miércoles 14 de agosto, a las 9:30 a.m., se desarrollará un foro con la escritora Anacristina Rossi sobre la situación en el Refugio Natural de Vida Silvestre Gandoca-Manzanillo, donde se han dado varios cuestionamientos por permisos de explotación de los recursos naturales.

La actividad se desarrollará en el auditorio D3, es organizada por la Escuela de Ciencias Sociales TEC y auspiciada por la Rectoría del Tecnológico de Costa Rica. También se transmitirá en vivo, por el canal de YouTube del TEC.

“Desde hace más de cuatro décadas persisten y se han agudizado los conflictos sociales en el Caribe sur de Costa Rica, asociados con el ‘estilo’ de crecimiento económico invasivo y construcción de obras de megaturismo en áreas de naturaleza vulnerable, incluido el Refugio Natural de Vida Silvestre Gandoca-Mazanillo”, comenta Osvaldo Durán-Castro, organizador del foro.

Según Durán, los hechos expuestos en la obra La Loca de Gandoca, de Anacristina Rossi (1991), no eran “únicamente narrativa de ficción para denunciar corrupción, tráfico de influencias, redes políticas actuando contra ecosistemas, comunidades, organizaciones sociales y amenazando incluso de muerte a personas; esto se dio hace décadas y ahora se repite. La presión de grupos empresariales, políticamente influyentes era y es realidad en la Costa Rica actual que se promociona y subasta como ‘paraíso verde”. 

En el foro se conversará con la escritora Rossi sobre la historia y la vigencia de la lucha por salvar Gandoca-Manzanillo.

La organización del foro recomienda re-leer el libro La loca de Gandoca.

Además, ese día, a las 5 p.m., se desarrollára el Foro: “El dudoso ‘triunfo’ del Gobierno en Crucitas”.

Imagen tomada de UCR.AC.CR

Minería amenaza agua y ecosistemas del río Ario en Cóbano

Comunidad organizada de Cóbano emprende acciones legales para evitar explotación de río vital para el abastecimiento de agua

  • Comunidad organizada presenta recurso de amparo contra viabilidad ambiental por proceso irregular y en defensa de derecho constitucional al agua, la vida y un ambiente sano.

  • Director General de SETENA investigado por otorgar viabilidades irregulares autorizó viabilidad ambiental a empresa constructora cuestionada por actos de corrupción en caso “Cochinilla”.

  • Extracción se pretende en río ubicado en el Corredor Biológico Peninsular amenzando con contaminar las fuentes de agua cercanas para consumo humano del AyA.

Cóbano, miércoles 14 de agosto de 2024. La Alianza Comunitaria para el Ordenamiento Territorial (ACOT), conformada por diversas organizaciones locales y ambientales, presentó un recurso de amparo ante la Sala Constitucional contra la Secretaría Técnica Nacional (SETENA) por otorgar la viabilidad ambiental a la empresa Constructora Herrera SA para su proyecto de extracción de material del cauce del río Ario. Mediante dcho recurso, el cual es tramitado bajo el expediente 24-020703-0007-CO, solicitan al Tribunal que ordene dejar sin efectos la resolución número 1078-2023-SETENA y que proteja al río Ario y a las comunidades de Cóbano, según lo exigen los derechos constitucionales al agua, a un ambiente sano, y a la vida.

El río Ario, ubicado a solo 240 metros del Refugio de Vida Silvestre Caleta-Ario, es un ecosistema de vital importancia biológica y ecológica. Forma parte del Corredor Biológico Peninsular, que conecta las áreas protegidas de la Península de Nicoya, y es crucial para la conservación de cuatro especies de tortugas marinas en peligro de extinción, así como para la preservación de manglares, estuarios y una rica biodiversidad terrestre y marina.

El barrido de los suelos del río para la extracción de materiales según se pretende amenaza este frágil ecosistema, poniendo en riesgo no solo la vida silvestre, sino también el recurso hídrico que abastece de agua potable a las comunidades locales de Bajos de Ario, Manzanillo, Bello Horizonte, Playa Hemosa, Santa Teresa y Mal País. Además, el río Ario fue identificado por el SINAC como un sitio prioritario para la conservación y es utilizado tradicionalmente por las comunidades locales para actividades recreativas y de subsistencia. Cualquier intervención en esta zona podría tener consecuencias irreversibles para la biodiversidad, los servicios ecosistémicos, y el bienestar de las comunidades vecinas.

La extracción de materiales en el río Ario comenzó hace pocos años con permisos municipales para la reparación de caminos tras eventos naturales destructivos. Sin embargo, durante 2023, se observó un aumento significativo en las actividades extractivas, sin el debido control ambiental ni supervisión técnica, lo que resultó en contaminación por hidrocarburos y deterioro de la calidad del agua. Según un análisis realizado por el componente de Geografía y Diálogo de Saberes del Programa de Kioscos Socioambientales de la Universidad de Costa Rica, existen 8 concesiones que han sido dadas y que han puesto en riesgo al río, las cuales se detallan en el siguiente cuadro.

Cuadro 1. Solicitudes en causes de dominio público (CDP) en Río Ario de Cóbano, Puntarenas

Como es posible notar, en algunos casos el estado de la concesión no es claro, esto da paso a mayor incertidumbre y preocupación por la acumulación de impactos y proyectos en un mismo río. La información anterior, geolocalizada por el Programa de Kioscos Socioambientales, permite ubicar las zonas más afectadas y donde se encuentra mayor parte de las concesiones, según se evidencia en los siguientes mapa. En este se identifica con claridad la cercanía de la concesión pretendida por la empresa constructora con la unión entre el río Bongo y el Ario en Bajos de Ario (señalado en rojo).

Actualmente, la empresa Constructora Herrera S.A. ha solicitado una concesión de 10 años para extraer y procesar materiales pétreos en el río y la SETENA le ha otorgado la viabilidad ambiental para hacerlo. Preocupa que la decisión de SETENA se basara principalmente en declaraciones del gerente ambiental contratado por la empresa solicitante, sin considerar estudios exhaustivos sobre el impacto real ni realizar consultas con las comunidades. La SETENA desestimó las gestiones presentadas por ACOT y la denuncia de la ADI de San Ramón de Ario ante la Fiscalía, aceptando medidas de compensación insuficientes para mitigar el posible impacto, como por ejemplo la instalación de un aire acondicionado en una escuela pública.

La viabilidad ambiental otorgada está siendo fuertemente cuestionada debido a la grave preocupación generada entre la comunidad y los ambientalistas por el impacto potencial a largo plazo. Ante la alarmante afectación de la cuenca del río Ario que generaría la concesión minera, y frente al aparente desinterés de SETENA y la Dirección de Geología y Minas, la comunidad se mantiene unida en su lucha por la defensa de los derechos constitucionales. Desde el 27 de diciembre del 2023, organizaciones comunales del Distrito de Cóbano realizaron una petición expresando su posición ante la amenaza de minería de extracción en el cauce del río, la cual a la fecha cuenta con más de 2150 firmas. En este contexto, ACOT hace un llamado urgente al Gobierno Local y al MINAE para que promuevan una veda en el otorgamiento de permisos temporales para la extracción de recursos naturales en los ríos del distrito de Cóbano, y fomenten programas de conservación y restauración del entorno del río para preservar su biodiversidad y hábitat natural.

Foro: “El dudoso ‘triunfo’ del Gobierno en Crucitas”

Este miércoles 14 de agosto, a las 5 p.m., se desarrollará el foro titulado “El dudoso ‘triunfo’ del Gobierno en Crucitas”, con los especialistas Nicolás Boeglin, Jorge Lobo y Bernal Gamboa. 

La actividad se desarrollará en el auditorio D3 y es organizada por la Escuela de Ciencias Sociales. Además, es auspiciado por la Rectoría del Tecnológico de Costa Rica.

A pesar de que el pasado 15 de julio el Gobierno anunció un “acuerdo” y un “triunfo” en el caso frente a la empresa minera canadiense Infinito Gold, por la fallida concesión de la mina en Crucitas, persisten dudas de este proceso y de las intenciones de reabrir un portillo para la explotación minera en la zona.

“Un Estado, oficialmente, no gana laudo en derecho internacional público”, señala Nicolas Boeglin, profesor de Derecho Internacional Público, de la Facultad de Derecho de la Universidad de Costa Rica.

Mientras que para Osvaldo Durán Castro, docente de la Escuela de Ciencias Sociales y organizador de la actividad, “son muchas las dudas que persisten ante las confusas declaraciones del Gobierno sobre el supuesto ‘acuerdo’ entre Costa Rica e Infinito Gold, en el Centro Internacional de Arreglo de Disputas entre Inversionista Extranjero y Estado (CIADI), del Banco Mundial, donde se tramita el caso”. 

La explicación detallada de este proceso estará a cargo del profesor Boeglin bajo el título: «El oro de Crucitas: de sombras y nubarrones pasados a … ¿alguna nueva ocurrencia?».

Por otra parte, los impactos destructivos de la minería en Crucitas desde que el entonces presidente Oscar Arias firmó el decreto ilegal para permitirla, hasta la actualidad y sus consecuencias, no han sido expuestas por las autoridades nacionales en todas sus dimensiones ecológicas y sociales.  Se han ocultado para permitir que la minería ilegal se desarrolle mientras a la población se le presenta un espejismo de protección ambiental y policial en la zona.  Sobre estos impactos expondrá el biólogo Jorge Lobo Segura (UCR), quien desde hace décadas ha advertido y explicado al país el impacto real de la minería en Crucitas y el mundo.

También participará el abogado Bernal Gamboa Mora, representante de la Asociación Presevacionista de Flora y Fauna Silvestre (Apreflofas), organización que ha tenido una participación preponderante en el caso.  

Apreflofas es una ONG ecologista fundada en 1985 y ha sido determinante en la defensa de los ecosistemas, el patrimonio natural del Estado y la sociedad civil, en el caso de Crucitas ante el Tribunal Contencioso Administrativo y Sala Primera, y como Amicus Curiae en el arbitraje internacional ante el CIADI. La organización es reconocida nacional e internacionalmente y es integrante de la Federación ecologista de Costa Rica (FECON).

La organización del foro recomienda re-leer el texto “Infinito Gold c. Costa Rica ante el CIADI: el CIADI informó algo que Costa Rica oficialmente omitió” (https://derechointernacionalcr.blogspot.com/2024/07/infinito-gold-vs-costa-rica-ante-el.html).

También, el artículo de opinión «La prohibición de la minería a cielo abiero en Costa Rica debe permanecer», de Jorge Lobo.

Además, ese mismo día, a las 9:30 a.m., se desarrollará el foro: Foro con Anacristina Rossi sobre Gandoca-Manzanillo.

Imagen tomada del Semanario Universidad.

Fuente: https://www.tec.ac.cr/foro-dudoso-triunfo-gobierno-crucitas

Festival de las bolas de barro

El festival de las bolas de barro, celebrado el domingo 11 de agosto, fue un evento diseñado para promover la conciencia y el compromiso en la comunidad hacia la protección de los cuerpos de agua. Durante el festival, se utilizó la biorremediación mediante esferas de barro tratadas con microorganismos efectivos (EM) con el objetivo de reducir la contaminación en ríos y lagunas.

Las actividades del evento incluyeron lanzar las bolas de barro al río, un conversatorio entre los participantes para intercambiar experiencias, un picnic compartido y presentaciones de bailes folclóricos a cargo del grupo estudiantil del Colegio Santa María.

El punto de encuentro fue en la terminal de buses de Salitrillos arriba, y el evento fue organizado por el Observatorio Ciudadano del Agua Río Cañas, junto con la participación de la comunidad y el colegio. 

Convocatoria Proceso de reflexión Extractivismos Urbanos ¿Qué está pasando en nuestras ciudades?

Observatorio de Bienes Comunes

Los extractivismos urbanos son fenómenos socioambientales que cada vez más presentes en nuestras comunidades urbanas, dado que la expansión de la “mancha gris”, unido a la revalorización de los terrenos o la construcción de megainfraestructuras están siendo impulsadas a través de las lógicas de mercantilización, más que de las necesidades de las personas.

Esto empieza a dar como resultado la privatización de la ciudad a través de la mercantilización del espacio por medio de proyectos urbanísticos y comerciales excluyentes, pero también, empieza a depredar las fronteras naturales, es decir, empieza a expandirse sobre los espacios donde aún se conservaban bosques, tales como los Cerros de Escazú o Loma Salitral en Alajuelita por citar ejemplos.

Algunas de las tendencias que encontramos son:

-Priorizan las áreas “rentables” para los negocios sobre los espacios públicos.

-Deterioro de la calidad de vida de las personas ante el incremento de la contaminación, erosión de los derechos y servicios públicos.

-La «mancha» de cemento impermeabiliza los suelos provocando la sobrecarga en el caudal de los ríos (riesgos de inundaciones), la desaparición de los hábitats de las especies, entre otras afectaciones.

La urgencia de este tema, recae que ante la presión de los intereses corporativos, se empiezan a flexibilizar, por no decir ignorar, la reglamentación y regulación más básica, procurando cambios en la legislación para garantizar el desarrollo intensivo de las actividades urbanísticas como comerciales.

Este proceso de reflexión se plantea desde la lógica de proceso, es decir se construyen los aprendizajes desde el diálogo y debate entre las personas participantes.

Fechas:

  • 4 septiembre 2024
  • 11  septiembre 2024
  • 18  septiembre 2024
  • 25 septiembre 2024
  • 2 octubre 2024
Horario: 9:00 a 12:00 md.
Aula por definir.
Lugar: Instalaciones UCR .San Pedro Montes de Oca

Formulario de inscripción

Para más información pueden ver la convocatoria aquí.

Territorio indígena de Cabagra avanza en la implementación del Plan Ambiental Forestal y Territorial

Por Uriel Rojas

Como parte del proceso de implementación del Plan Ambiental Territorial-PAFT- la ADICABAGRA avanza en la ejecución de proyectos prioritarios para este territorio.

Dentro de las actividades ejecutadas se encuentran la entrega de insumos a productores de chile, la adquisición de dos motocicletas para el fortalecimiento del trabajo de la brigada forestal, un binocular, un dron para la brigada de monitorio biológico, así como una piladora de arroz para los productores locales.

De igual manera se ha concluido la construcción del mini acueducto escolar en Brazo de Oro, el mejoramiento de la casa de salud de San Juan y se dotó de equipo, mobiliario de oficina y artículos de cocina a la organización Iriria Sätkök.

El PAFT es una herramienta de planificación que se financia con recursos del fondo verde del clima, Banco Mundial, impulsados por el MINAET y construido con apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

Agradecimiento y reconocimiento al colaborativo esfuerzo en la implementación de pasos de fauna aéreos para la ruta 32 en Costa Rica

El documento es una carta de agradecimiento de la Comisión Vías y Vida Silvestre (CVVS-UNED) dirigida a varias personas e instituciones que colaboraron en el diseño de pasos de fauna aéreos para la Ruta 32 en Costa Rica, proyecto bajo la responsabilidad del MOPT-CONAVI.

El agradecimiento se centra en la Ingeniera Sonia Vargas por conectar a la comisión con la Escuela de Ingeniería en Construcción del ITCR y a los estudiantes de último año que participaron activamente en el proyecto, bajo la guía de los profesores Giannina Ortiz y Ángel Navarro. También se agradece a las ONG, especialmente a Vínculo Animal, por su apoyo logístico, y a la Dra. Irena Villalobos Hoffmann por su aporte.

La carta destaca que el éxito del proyecto se debió al compromiso y esfuerzo colectivo, a pesar de los desafíos, y expresa el deseo de continuar con la misión de proteger la fauna silvestre a través de la implementación de pasos de fauna en toda la red de carreteras nacionales y más allá.

Del informe final del proyecto de taller de diseño realizado por estudiantes del ITCR se extrae que este incluyó un análisis detallado del estado del arte y la justificación del problema, así como la identificación de las especies de fauna que se beneficiarían de los pasos aéreos, tales como el mono Congo, el mono Carablanca, y el Perezoso de tres dedos, entre otros. Se diseñaron y evaluaron varias alternativas antes de seleccionar la solución óptima, utilizando herramientas de ingeniería avanzada y siguiendo las especificaciones técnicas necesarias para garantizar la seguridad y funcionalidad de los pasos de fauna.

Además, se sugiere la posibilidad de publicar un informe sobre la contribución de la CVVS, incluyendo las organizaciones Ambio, YIski, Vínculo Animal, el consultor Ronald Villalobos H., la Ingeniera Sonia Torres, así como los profesores y estudiantes de último año de la Escuela de Ingeniería en Construcción del ITCR y VEXVT-UNED, en la construcción de los pasos de fauna aéreos de la ampliación de la Ruta 32. Se destaca la importante labor de coordinación técnica y biológica realizada por Ronald Villalobos con el equipo del ITCR.

Finalmente, la carta está firmada por varios miembros de la Comisión Vías y Vida Silvestre, junto con otros colaboradores de diferentes organizaciones conservacionistas, y se cierra con un agradecimiento de parte de Ma. Elena Fournier S.

Foro sobre el impacto de los plaguicidas en ecosistemas y salud humana

El 7 de agosto la Comisión de Salud Global de la Academia Nacional de Ciencias de Costa Rica organizó el foro titulado «Plaguicidas: impactos ecológicos y en salud pública y posibles soluciones para Costa Rica». En este foro se presentaron diferentes ángulos de este tema y se propusieron soluciones para reducir el impacto de los plaguicidas, los cuales afectan drásticamente los ecosistemas y la salud humana y animal.

El foro se puede seguir en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=umHHuOx-Wpo

Se adjunta el pronunciamiento que sobre este tema emitió la Comisión de Salud Global de la Academia Nacional de Ciencias.

Pronunciamiento de la Comisión de Salud Global de la Academia Nacional de Ciencias sobre el uso de plaguicidas en Costa Rica

Los plaguicidas son sustancias químicas que se utilizan para tratar de controlar organismos considerados plagas, los cuales afectan los sistemas productivos, con el consecuente impacto en la economía y la producción. Costa Rica es uno de los países a nivel mundial que aplica más plaguicidas por área agrícola (las estimaciones oscilan entre 10 y 35 kg/hectárea cultivada de acuerdo con diferentes fuentes). En la actualidad hay registrados en nuestro país más de 250 diferentes ingredientes activos con diversas acciones biocidas, de los cuales se usan activamente cerca de 200. Aproximadamente la mitad de los ingredientes activos usados en nuestro país en los últimos años se consideran Plaguicidas Altamente Peligrosos (PAPs) de acuerdo con criterios internacionales (FAO, OMS) y, por volumen de uso, se estima que alrededor de un 90% de los plaguicidas usados son PAPs. Al aplicarse en los campos agrícolas, los PAPs pueden causar graves problemas agudos y crónicos de salud y contaminar recursos valiosos como el agua y el suelo, además de perjudicar a organismos benéficos como los polinizadores. Otra consecuencia del uso intensivo de plaguicidas es el aumento en la presión de selección y la evolución de resistencia de las plagas a este tipo de sustancias, lo que año a año reduce la eficacia de varios productos.

Debido a su amplio uso, los plaguicidas a menudo se dispersan fuera de las fincas y han sido detectados en múltiples compartimentos ambientales en Costa Rica. Su presencia en suelos agrícolas es alta y en el aire tienen potencial de transportarse a largas distancias de las zonas de cultivo, detectándose incluso en zonas montañosas con ecosistemas prístinos. También se ha demostrado que se infiltran hacia las aguas subterráneas, como es el caso del fungicida clorotalonil y el herbicida bromacil, que fueron ampliamente utilizados en muchos cultivos hasta su prohibición en 2017 y 2023, respectivamente, y afectaron las fuentes de consumo humano; además, la escorrentía superficial los transporta hacia aguas superficiales como ríos y quebradas.

Específicamente, en las aguas superficiales han sido detectados 32 plaguicidas en concentraciones que exceden uno o más criterios de calidad ambiental internacional para la protección de la biodiversidad, lo que implica que pueden ser tóxicos sobre diversos organismos (plantas, invertebrados, peces) y afectar la funcionalidad de los ecosistemas acuáticos. Asimismo, los estudios demuestran que incluso concentraciones bajas de plaguicidas pueden generar efectos bioquímicos, fisiológicos y/o en el comportamiento de los organismos vivos. En los casos más graves se ha asociado estas sustancias a múltiples eventos de mortandades masivas de fauna, tanto en ecosistemas acuáticos (peces) como terrestres (abejas).

El riesgo para los organismos vivos se incrementa ya que en las muestras ambientales típicamente se detectan varios plaguicidas simultáneamente. Algunos de los plaguicidas que han generado altos riesgos para los ecosistemas en la última década (su concentración en el ambiente es mayor que la que causa toxicidad aguda para algunos organismos) son los herbicidas ametrina, bromacil, diuron, hexazinona y terbutrina; los fungicidas azoxistrobina, clorotalonil, epoxiconazol y los insecticidas carbofuran, clorpirifos, diazinon, etoprofos, fenamifos, fipronil y terbufos. Cabe destacar que algunos de estos ya fueron prohibidos en Costa Rica, por ejemplo, el carbofuran (en 2014), el bromacil (en 2017) y el clorotalonil (en 2023), y existen restricciones de uso para el clorpirifos; sin embargo, estas sustancias continúan detectándose en muestras ambientales tomadas en los años 2022 y 2023.

En el ámbito de la salud humana, un informe de análisis de verduras frescas por parte del Servicio Fitosanitario del Estado, del Ministerio de Agricultura y Ganadería, mostró que, en el 2020, un 20% de las muestras nacionales de vegetales frescos presentaron residuos de plaguicidas por encima de los límites máximos aceptados, y que las personas que viven o trabajan en la cercanía de plantaciones agrícolas se exponen a niveles elevados de múltiples plaguicidas. Por otra parte, estudios realizados en Costa Rica por la Universidad Nacional, en colaboración con universidades de Suecia y Estados Unidos, demostraron que los niveles de contaminación por fungicidas aplicados por vía aérea (pirimetanil, clorotalonil, mancozeb) y el insecticida clorpirifos son más altos en muestras biológicas obtenidas de personas residentes en la cercanía de fincas agrícolas. Un análisis de riesgo para la exposición al fungicida mancozeb en mujeres embarazadas estimó que un 72% de las participantes en el estudio sobrepasaba los niveles de referencia considerados seguros. El riesgo para la salud de la exposición de plaguicidas depende del grado de toxicidad inherente a la sustancia y del grado de exposición a la misma por parte de las personas que los utilizan.

Resultados de estudios epidemiológicos realizados en Costa Rica han demostrado que el contacto con ciertos plaguicidas puede afectar la salud humana de formas diversas. Algunos ejemplos son:

  1. El contacto con el fungicida mancozeb, y su metabolito etilentiourea, se ha asociado con la inhibición de la hormona tiroidea tiroxina libre (LT4) en mujeres embarazadas, cambios en la circunferencia cefálica de recién nacidos, desarrollo socioemocional inferior en niñas de un año, incremento en infecciones del tracto respiratorio inferior en infantes durante el primer año de vida e inferior aprendizaje verbal medido en niñas y niños de edad escolar.
  2. La exposición al fungicida pirimetanil se ha asociado tanto con la inhibición de la hormona tiroidea tiroxina libre (LT4) como con una menor capacidad lingüística en niñas de un año.
  3. El contacto con el insecticida clorpirifos se ha asociado con un menor peso al nacer, un menor perímetro cefálico y un inferior neurodesarrollo de niñas y niños.
  4. El contacto prenatal con el herbicida 2,4-D se asoció con un menor peso, un menor perímetro cefálico, y una menor longitud corporal al nacer, así como con un desarrollo inferior del lenguaje y la motricidad infantil.
  5. En trabajadores agrícolas, el contacto con clorpirifos y piretroides se ha asociado con una reducción de la activación cortical cerebral prefrontal durante la realización de tareas de memoria de trabajo.

Estas evidencias muestran que los riesgos de los plaguicidas en los ecosistemas y en la salud humana son preocupantes. El tema es complejo y demanda un abordaje multifactorial que tome en cuenta diversos aspectos, considerando el peligro y la toxicidad de las sustancias y el grado de exposición a las mismas. Sin embargo, las medidas de protección y prevención implementadas hasta ahora no han logrado cumplir con su propósito de salvaguarda ambiental y de la salud humana. A manera de ejemplo, la normativa nacional de distancias de no-aplicación de plaguicidas es una de las más laxas en América Latina.

Es necesario que exista un monitoreo sistemático y científicamente sólido de plaguicidas en el país. Asimismo, es indispensable instar a las autoridades y a la sociedad civil a considerar:

  1. La re-evaluación de riesgo ambiental (ERA) para los plaguicidas cuyo registro no incorporó métodos de ERA actuales, tales como los registrados antes del año 2004.
  2. La aplicación inmediata de medidas de reducción del uso de agroquímicos en la producción agrícola.
  3. La prohibición al uso de Plaguicidas Altamente Peligrosos (PAPs) en caso de existir otras opciones viables, y la restricción y sustitución paulatina de PAPs en los casos en que, en la actualidad, no existan alternativas.
  4. El desarrollo de plaguicidas que tengan menor toxicidad en las personas y el ambiente, tanto en el ámbito de los productos de origen natural (biológicos, extractos de plantas, microorganismos o animales) como en la propia industria agroquímica, mediante el desarrollo de nuevas moléculas con mejores perfiles toxicológicos y ecotoxicológicos.
  5. La promoción del uso de buenas prácticas agrícolas para evitar exposiciones innecesarias y peligrosas, la incorporación de nuevas tecnologías de aplicación y de monitoreo de plagas para reducir las cantidades aplicadas y, lo más importante, la generación de prácticas de manejo de cultivos que reduzcan la necesidad de intervenir con aplicaciones de insumos.
  6. El aumento de las distancias de no-aplicación de plaguicidas y el fortalecimiento de la implementación de las legislaciones ya existentes.
  7. La posibilidad de otorgar un pago por servicios ambientales a los terrenos con agricultura ecológica, como una medida de protección de la biodiversidad, conservación de suelo y motivación para la disminución gradual del área cultivada con prácticas de agricultura convencional.
  8. Instar a los diferentes sectores de la sociedad a dar preferencia y promover una mayor oferta de productos provenientes de prácticas agroecológicas o que empleen bajas cantidades de plaguicidas.

Para reducir el impacto del uso de plaguicidas en Costa Rica debe darse una combinación estratégica de todos estos elementos. Con este abordaje integral y multifactorial podríamos aspirar a una disminución sustancial en el volumen aplicado de plaguicidas en Costa Rica en un plazo relativamente corto.

La Comisión de Salud Global de la Academia Nacional de Ciencias de Costa Rica hace un vehemente llamado de atención a la población, a las autoridades de gobierno y locales, al sector académico, a las organizaciones comunitarias, a las empresas del sector agrícola, y a las agricultoras y los agricultores, para que se tomen decisiones claras, sobre una base científica sólida, y se implementen acciones inmediatas que reduzcan significativamente los impactos negativos en la salud humana y los ecosistemas derivados del uso de plaguicidas.

Documento preparado por la Comisión de Salud Global de la Academia Nacional de Ciencias, con los aportes de Fernando Ramírez, Silvia Echeverría, Berna van Wendel de Joode y Luis Felipe Arauz.

*Los datos presentados en este pronunciamiento provienen de publicaciones en revistas científicas y en documentos diversos, y las referencias bibliográficas correspondientes se pueden consultar en la página web de la Academia Nacional de Ciencias (www.anc.cr).

7 de agosto del 2024.