Feliz martes- feliz día de San Francisco de Asís – felicidades a los Franciscos y Franciscas

José Luis Pacheco Murillo

Las elecciones en Brasil y sus resultados han sido sorpresivos en el tanto que lo que se esperaba fuera una victoria contundente de Lula resultó en una cerrada disputa que obliga a una segunda ronda el próximo 30 de octubre. Bolsonaro tuvo un apoyo superior al que manifestaban las encuestas, es decir, los votantes prefieren no identificarse con el candidato, pero apoyarlo al final. Lo mismo sucedió con el apoyo a Trump en Estados Unidos.

Fue una campaña encarnizada y la que ya se está dando lo será mucho más. Y cualquiera que sea el resultado lo que ya sabemos es que, al igual que otros países latinoamericanos, la polarización es un hecho.

Las estrategias para sumar votos ya se han empezado a dar y eso obligará a alianzas y a acuerdos que alentarán a algunos y molestarán a otros. Lula y Bolsonaro deberán de ceder espacios incluso a nivel de gobierno para quienes deseen apoyarlos y eso posiblemente moleste a quienes creían tener puestos seguros.

Nuevamente el abstencionismo, superior al 20% es el que ha hecho que no haya un ganador y que por ende tengan que ir a una segunda ronda. Esos que no votaron también adquieren relevancia en la segunda ronda o balotaje y efectivamente pueden decidir la elección.

Estas elecciones en Brasil son de suma importancia para Latinoamérica, pues con su liderazgo en el sur pueden venir cosas diferentes en el panorama geopolítico.

Dios quiera que logren concluirse estas elecciones en Brasil sin que haya violencia y que los brasileños puedan escoger lo mejor para su país y para latinoamericana.