La jornada 4-3 es pura y simplemente una vía para rebajar el salario de los trabajadores de las grandes empresas. Hablo de las grandes porque solo las grandes pueden aplicar una operación continua de 24 horas todos los días de la semana. Lo digo, lo redigo y lo pruebo con un ejemplo muy sencillo.
Supongamos una empresa de 500 trabajadores con un salario/hora promedio de 2000 colones.
Con las reglas actuales por una jornada diurna de 12 horas se pagan 8 horas ordinarias y 4 extras, en la jornada nocturna de 12 horas se pagan 8 horas ordinarias y 6 horas dobles. El domingo es día de descanso y se paga doble. En el proyecto 4-3 el día de descanso no es el domingo, es variable y es uno de los días que el trabajador no labora. Prácticamente no hay horas extras con la jornada 4-3, solo hay horas de pago doble en el horario nocturno.
Por un mes de trabajo continuo la empresa con 500 trabajadores paga actualmente lo siguiente:
104 millones por horas ordinarias diurnas
78 millones por horas extras diurnas
24 millones por horas dobles diurnas
104 millones por horas ordinarias nocturnas
180 millones por horas dobles nocturnas
Total 490 millones.
Por un mes de trabajo continuo la empresa con 500 trabajadores pagaría con la jornada 4-3 lo siguiente:
180 millones por horas ordinarias diurnas
120 millones por horas ordinarias nocturnas
90 millones por horas dobles nocturnas
Total 390 millones
100 millones menos para los trabajadores, 100 millones más para los dueños de la empresa. Una rebaja de salario del 20.41%, eso es la jornada 4-3. Sangre y sudor de los trabajadores que tendrán que madrugar y llegar muy tarde a sus hogares para desprenderse de una quinta parte de su salario en beneficio de los dueños de las grandes empresas.
¿Eso es todo? No, no es todo. ¿Puede haber algo peor aún? Si, hay algo peor y está en el mismo proyecto de jornada 4-3, es la jornada anualizada. De eso hablaremos luego.
Compartido con SURCOS por Juan Carlos Cruz Barrientos.