¿La diputada mentirosa, seguidora de Goebbels?

Vladimir de la Cruz

Pilar Cisneros Gallo, diputada oficial del Partido que está gobernando, el Partido Progreso Social Democrático, y activista política de uno de esos otros partidos recién paridos, “Aquí manda Costa Rica”, por la misma argolla oficialista de Zapote, donde se han originado esos partidos para las municipales, se ha declarado públicamente diputada mentirosa. Sin ninguna vergüenza, con altivez, con dignidad y expresivo placer lo manifestó, en una entrevista que le hiciera un periodista en un programa televisivo. En esa posición, defendiendo la tesis de que ella asesoraba en cómo mentir se le sentía cómoda, realizada, profesionalmente habituada en ese arte, ¿o ciencia?, de mentir. Era una expresión sincera de desnudar su conducta, su intimidad de mentirosa, de mostrarse como falsa, en todo o en parte de ella. Ella sabrá cuánto.

Hizo alarde de su patología de mentirosa compulsiva. Dijo claramente que ella aconseja a ministros y otras autoridades institucionales y estatales, seguramente al Presidente también, en cómo mentir; en cómo deben mentir en el cargo de su gestión, partiendo afirmó, de la base enfermiza de su enfermedad patológica, de que “todos mentimos”, aunque sea un poquito.

Mentir como medio, como instrumento de la política, me recordó al gran líder de la imagen pública, del discurso político nazista; de quien actuaba a cargo de los instrumentos estatales de comunicación de la Alemania nazi, a Joseph Goebbels, el gran fiel Ministro de Adolfo Hitler.

¿Será Goebbels su gran Maestro, pensé?, el Jefe y mano derecha de Hitler, como ella es la mano derecha del Presidente Chaves, en sus enseñanzas políticas y propagandísticas.

“Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá”, repetía Goebbels. Es el efecto de la ilusión, la esperanza, como verdad. Es el aprovecharse de la debilidad sicológica humana. La repetición de la mentira hace creer que es cierta, aunque no lo sea.

Es el efecto que se ha querido desarrollar con los troles manejados e inducidos desde el Poder Ejecutivo, como se ha tenido por demostrado, ¿o desde la oficina de la diputada mentirosa?; o de fabricación de las llamadas fake news, las noticias falsas; las historias, los artículos engañosos y ataques personales a los opositores políticos, que provocan desinformación en las redes sociales o por medio de ellas, con intensión también de alarmar, escandalizar y manipular la opinión pública y a los ciudadanos.

El objetivo político de esa frase, la de Goebbels, es que la mentira suene como verdadera. Lo más importante de esta filosofía de la mentira es que entre más grande sea la mentira más fácilmente va a ser creíble.

Para Goebbels era más importante una mentira que no pudiera ser desmentida que una verdad que no fuera creída; así como que si no se podía negar una mala noticia, había que inventar otras que la distrajeran. Políticamente había que silenciar las cuestiones en que no se tenían argumentos y disimular las noticias que favorecían a los opositores. Las autoridades de Gobierno, el presidente especialmente en sus mesas de prensa actúa de esta forma.

Finalmente, es el rosario de las mentiras, de modo que cuando se impulsa o se dice una mentira, hay que desarrollar otras para sostener la primera. Esto es lo que enseña, seguramente, en sus asesoramientos la diputada mentirosa. Así, tenemos el gobierno de la mentira y de los mentirosos…

Para Goebbels la centralización de la vida social, cultural, educativa, intelectual, política, institucional, comunicacional debía estar centralizada, como se quiere hacer en Costa Rica, desde el Poder Ejecutivo con el control que se está impulsando comunicacional e institucionalmente.

Para Goebbels había que cargarle a la oposición política, a los adversarios políticos todos los errores, los defectos, las faltas; había que responder los ataques con ataques; había que negar las noticias malas o las noticias críticas con otras inventadas que distrajeran la atención. En las mesas de prensa, de los miércoles, muy caricaturescamente se aprecian estas cosas, con preguntas, claramente dadas a personas del set, para que se las hagan al presidente que ya lleva todos los datos y respuestas de esas preguntas; y… hasta un feliz cumpleaños celebrado le hicieron anunciado ocho días antes de que llegara la fecha… lo más burdo de ese miércoles…

Para Goebbels la propaganda como los mensajes políticos debían ser populares, como “la señora de Purral”, al más bajo nivel intelectual posible para que le llegue al mayor público. “Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar”, afirmaba Goebbels. La idea clave es que la gente sienta que se piensa como todo mundo porque provoca la sensación de una mayor unanimidad.

Para Goebbels la orientación política, la censura de los adversarios, y el discurso de consignas, por la prensa y la radio, en esa época, era la clave del control político. Prensa y radio controladas, como se quiere hacer ahora, colocando a los medios informativos en el paredón económico de la publicidad institucional y estatal, favoreciendo a los medios doblegados y sometidos, urbanos y rurales.

Actos de masas impulsaba Goebbels en apoyo al gobierno nazi. Aquí se están promoviendo, poco a poco, esos actos; en uno de los cuales se llegó a pedir a viva voz, y a gritos, “muerte” para un Magistrado, por una persona aparentemente culta y educada, con conocimiento de la tradición de la abolición de la pena de muerte en el país; y, en otro acto de estas turbas que las movilizan de vez en cuando, se agredió en la gradería de público de la Asamblea Legislativa, al “judío” del Congreso, que paradójicamente es un colaborador político parlamentario del Gobierno y del Presidente.

Si Goebbels era la voz de Alemania, en la época de Hitler; la diputada patológicamente mentirosa es la mejor voz que tiene el Gobierno del Presidente Chaves, la que responde en todos los frentes, la que por sus asesorías y consejos orienta la opinión mentirosa de los ministros.

Igual que Goebbels la diputada mentirosa tiene voz fuerte, es apasionada; su discurso es de campaña electoral victoriosa, de que la victoria todavía está por alcanzarse; siguen en lucha por vencer.

Como Goebbels con Hitler, la diputada asesora en mentiras ha declarado que sobre todo el aparato político parlamentario que ella tiene; ella es absolutamente fiel y está totalmente identificada con el Presidente, y con nadie más. En este sentido no tiene partido ni sigue disciplinas partidarias; lo hace a conciencia. Solo al Presidente le debe su lealtad y su permanencia en la Asamblea Legislativa.

En el ambiente nacional trabajan, quienes están con la política oficial de la mentira, para que se desarrolle una megalomanía, una locura colectiva, una desconfianza generalizada e injustificada hacia las personas, incluso las que rodean al mandatario; y un altísimo poder concentrado en el Presidente. Las casi 40 destituciones que se han hecho, o renuncias forzadas, en menos de dos años de gobierno, evidencian la conducción hacia un modelo dictatorial autoritario de gobernabilidad ejecutiva. Para esto se necesitan esas mentiras políticas.

El megalómano presidente vive atemorizado de sus opositores, incluso de los opositores fantasmas como los “comunistas” que constantemente cita, y que no tienen diputados y casi ni existen, Vanguardia Popular, como partido político, auto inventándose un intento revolucionario por desplazarlo del poder o de acabar con la democracia.

Incluso, una de sus chachalacas, recordó, atacando personas, el ambiente de la guerra fría anticomunista, olvidando que él mismo era parte de esa militancia comunista, vanguardista o izquierdista de los años 70s. El tiempo es grandioso, sobre todo cuando se pierde la memoria…por los tiempos y años idos. Pero no olvidemos a Goebbels…

Todos los partidos políticos que participan en procesos electorales están obligados a hacer una declaración pública, programática y estatutaria, de que defenderán y consolidarán el régimen constitucional democrático que vivimos. Los partidos estigmatizados de izquierda, con diputados actuales, han jurado defender el régimen constitucional democrático nacional. Hasta ahora no conocemos nada que hayan propuesto en oposición a este sistema.

Para Goebbels la sociedad había perdido sus valores y carecía de liderazgos. El Presidente Chaves dice constantemente que en el país no hay falta de gobernabilidad, como afirmaban los anteriores presidentes; que lo que ha faltado es gobernante y qué él es el Gobernante que el país necesita; y que está para gobernar y ejercer el Gobierno, contra viento y marea…comprándose broncas. Sus discursos descansan en la idea, que el mismo presidente Chaves dice, de que él es el Salvador del desastre del país que heredó.

Si los nazis le echaban la culpa a los judíos de la situación de Alemania, por lo que había que “vengarse de la judería internacional”, por el control político que también les atribuía; el Presidente Chaves no deja de echarle la culpa de todos los males del país a quienes han gobernado antes que él, a los Presidentes y a los partidos políticos que han gobernado; por eso también hay que exterminarlos y acabarlos.

Para Goebbels había que enfrentar todos los males, aunque fueran simples. Para la asesora en mentiras, es igual; respuestas claras, inmediatas, eficaces, contundentes.

El punto para los ciudadanos es hacerse ciego ante esta situación…el chavismo exacerbado, y el deschave nacional, hasta el límite como se impulsa; la liquidación de todas las fuerzas opositoras, especialmente parlamentarias, como las de los partidos Liberación Nacional y el Frente Amplio. La liquidación de estos partidos, como lo quiere hacer el gobierno, conduce inevitablemente a la liquidación de la democracia nacional hoy. Los otros partidos parlamentarios lamentablemente están de furgón de cola del gobierno, pero van a salir también afectados.

Las figuras del Presidente Chaves y la de su principal asesora, la mentirosa diputada, son claves para entender la vida política nacional hoy.

Queda claro, muy claro, que la Diputada mitómana, mentirosa, asesora del Consejo de Gobierno, de los ministros y otras autoridades estatales e institucionales, les enseña a mentir; que a los costarricenses, a los ciudadanos, nos están mintiendo oficialmente; que el resentimiento social que ha existido y también se ha estimulado contra la Política en general, contra los políticos y contra los partidos políticos, en cierta forma contra la Democracia como sistema político se sigue atizando.

De seguir por este camino, el berrinche social, el enojo social, el rechazo social político que se pueda provocar nadie lo va a controlar.

En estos tiempos, los caminos autoritarios y populistas son los más peligros de recorrer para los costarricenses, si queremos conservar y desarrollar progresivamente la democracia nacional hasta hoy lograda.