El Índice de Desarrollo Social (IDS) es una medida que evalúa el bienestar y progreso de una sociedad en diversos aspectos, como la salud, la educación, lo económico, la seguridad y participación electoral. El IDS es importante por varias razones:
Medición del progreso social: El IDS proporciona una evaluación integral del desarrollo social en Costa Rica, lo que permite a los responsables políticos y a la sociedad en general comprender mejor el estado actual y las tendencias del bienestar social en el país.
Guía para políticas públicas: Con base en el IDS, se pueden identificar áreas de mejora y diseñar políticas públicas más efectivas y focalizadas para abordar los problemas sociales prioritarios, como la pobreza, la desigualdad, la salud pública y la educación.
Atracción de inversión y turismo: Un alto nivel de desarrollo social puede ser atractivo para inversores y turistas, ya que indica un entorno favorable para la calidad de vida y el bienestar general de la población. Esto puede impulsar el crecimiento económico sostenible y la prosperidad a largo plazo.
Bienestar de la población: El IDS no sólo se trata de números y estadísticas, sino que también refleja la calidad de vida de las personas. Un alto IDS implica mejores condiciones de vida, acceso a servicios básicos, oportunidades de educación y empleo, y una sociedad más inclusiva y equitativa en general.
En este reporte se presentan los resultados del cálculo del IDS 2023, donde se exploran los cambios del 2023 en comparación con el 2017, cuando se realizó el estudio anterior.
Tomando en cuenta los indicadores que se utilizan para el cálculo del IDS, se llegaron a las siguientes conclusiones para los distritos:
Algunos lo llaman “el milagro económico” para explicar cómo un país colonizado, con guerras, saqueado, expoliado, paso de la extrema pobreza de su población a convertirse en una de las economías con mayor crecimiento en el mundo. Sin embargo, este resultado no se le puede achacar a la suerte: China lleva más de un siglo teorizando y desarrollando la idea de modernización. Después de 1978 y hasta 2014, el Producto Interno Bruto del gigante asiático aumentó en 177 veces, 2.8 veces más del promedio mundial.
La historia china ha tenido lugar en un enorme espacio asiático (en extensión, es el tercer país del mundo), con gran número de regiones, etnias y lenguas, además de una diversidad de los diversos poderes políticos que las han dominado a lo largo de los siglos en sus distintas capitales (Beijing, Chong-qing, Guangzhou, Nanjing).
Pese a ese difícil escenario, siempre se ha defendido el concepto de “una sola China”, gracias a una sabiduría histórica.
Si bien en un momento fue un país extremadamente pobre y desigual, la apuesta del gobierno fue llevar a cabo una modernización íntegra, sistemática, sostenible, que beneficie al pueblo y que sea lidereada por el Partido Comunista Chino (PCCH). Se basa en el trabajo duro y en las propias condiciones nacionales, a diferencia de los países occidentales hegemónicos que parte de la colonización, la expansión exterior y las intervenciones expoliadoras. También difiere de las teorías de la dependencia y desarrollismo de una parte de América Latina.
El mercado es el centro de la modernización y se apuesta por el progreso I+D científico y tecnológico y las innovaciones industriales. Es, en definitiva, un patrón de desarrollo económico propio que no imita a otras potencias, aunque si ha abierto un nuevo camino para que los países en desarrollo avancen hacia la modernización, a partir de esa experiencia histórica inédita.
“La modernización china, que es la modernización socialista dirigida por el Partido Comunista de China, tiene no solo las características comunes de la modernización de los diversos países, sino, más aún, las peculiaridades chinas basadas en nuestras condiciones nacionales propias”, aseguró Xi Jinping, presidente del país asiático durante el informe presentado en el XX Congreso Nacional del PCCh.
Precisamente, el proceso de modernización que lleve adelante el país se puede entender desde cinco aristas:
1- Se toma en cuenta la enorme magnitud poblacional
2- Parte de la prosperidad común de todo el pueblo
3- Coordinación entre la civilización material y espiritual
4- Coexistencia armoniosa del ser humano y la naturaleza
5- Seguimiento del camino del desarrollo pacífico
Un poco de historia
Las Cuatro Modernizaciones fueron objetivos establecidos por el ex ministro de Relaciones Exteriores, Zhou Enlai, en 1963, y promulgados por Deng Xiaoping a partir de 1977, para fortalecer la agricultura, industria, defensa nacional, ciencia y tecnología de China. Luego, fueron adoptadas en 1978, tras la muerte de Mao Zedong, como un medio de rejuvenecer la economía de China.
Antecedentes de las Cuatro modernizaciones
Agricultura: Hasta 1978 la agricultura se había basado en la colectivización. La mayor parte de la tierra era propiedad pública. Deng puso en marcha dos reformas para un aumento en la productividad: la extensión de las parcelas privadas y el trabajo de tierras.
Industria: Abandona la autosuficiencia económica y la desconfianza extranjera. Abre distintas zonas a favor de aumentar las industrias. Se les permitió incentivos a los trabajadores, y la libre elección del trabajo. Se terminó parcialmente la fijación de precios por parte del estado. Se concedió más libertad para fijar salario, contratar y despedir los trabajadores. Se permitió la creación de empresas privadas.
Defensa nacional: Fueron re introducidos los grados militares, la milicia perdió su independencia y fue reducida a una reserva utilizada en caso de guerra. Aumentó el ejército.
Ciencia y tecnología: Aportó dinero a escuelas de calidad, los mejores estudiantes fueron enviados a las mejores universidades en el extranjero para aprender su cultura y progreso. Todo esto se hizo para mejorar su educación y así la ciencia y tecnología.
La estrategia de Deng Xiaoping se basó en una fórmula amplia conocida como “cuatro más cuatro”: las cuatro modernizaciones citadas, más los cuatro principios (la vía socialista, la dictadura del proletariado, el liderazgo del Partido y el pensamiento de Marx-Lenin-Mao Zedong)
Este proceso fue entendido por los líderes chinos como clave para la transformación de la industria y la economía, aunque en un primer momento era un objetivo más teórico que alcanzable por el aislamiento durante décadas de los científicos chinos de la comunidad internacional occidental, universidades anticuadas, y una falta general de acceso a equipamiento científico avanzado, tecnologías de la información y conocimientos de gestión.
Todo dio un giro de 180 grados en otoño de 1978 cuando el Gobierno Chino obtuvo el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDP) para proporcionar recursos financieros para la implementación de un conjunto inicial de proyectos específicos que incluían el establecimiento de programas de formación en el extranjero, programas académicos, centros de procesamiento de información como unidades clave del gobierno, y el desarrollo de métodos para tomar decisiones informadas en el contexto chino basadas en los principios del mercado.
Luego, el gobierno decidió acelerar el proceso de modernización aumentando el volumen de comercio extranjero, para lo que abrió sus mercados, destacando especialmente la adquisición de maquinaria de Japón y el Mundo Occidental.
Logros y aspiraciones
De acuerdo al Banco Mundial, China dobló su PIB en nueve años, volvió a doblarlo en otros nueve y mejoró esa marca en los nueve siguientes. Según la misma fuente, Inglaterra, en el apogeo de la Revolución Industrial, invirtió sesenta años en doblar su PIB, mientras que Estados Unidos, para doblarlo en el siglo XIX, cincuenta. Esos datos dan una medida del ascenso vertiginoso de la economía del gigante asiático.
Uno de los elementos claves fue que en 1978 se inauguró la denominada apertura al exterior, en la cual el comercio internacional adquirió mayor importancia como factor de crecimiento. Se toma la decisión de desarrollar las ciudades costeras y las Zonas Económicas Especiales, política que reprodujo también otro modelo histórico exitoso que dinamizó a fondo el crecimiento de la economía europea a través del comercio internacional de sus ciudades costeras.
En 1984 es realmente cuando el gigante asiático se abre al mundo, por medio de la integración de 14 ciudades costeras al proceso de expansión del comercio exterior; al año siguiente se añaden también el Delta del Yangtzé y el del Río de las Perlas.
A finales de 2020, China cumplió, diez años antes de lo previsto, con el objetivo de erradicar la pobreza en la nueva era; 98.99 millones de personas con recursos económicos vulnerables en las zonas rurales saldrían de la pobreza según las normas vigentes.
Desde el proceso de reforma y apertura, de conformidad con las normas internacionales vigentes sobre la pobreza del Banco Mundial, 770 millones de pobres rurales de China han salido de la pobreza, lo que representa más del 70 por ciento de la reducción de la pobreza de todo el mundo en el mismo periodo.
La modernización y un reflejo en cifras
El 2023 es el primer año de China después de la transición estable del control de la epidemia de covid-19 en tres años, el desarrollo económico se reinicia y se logran resultados destacados.
Según los datos de crecimiento, la economía creció el pasado año en un 5.2%, por encima de Estados Unidos (2.5%), la zona del euro (0.5%) y Japón (1.9%) y otras de las principales economías del mundo. Se espera que la contribución al crecimiento económico mundial supere el 30%.
Según los indicadores físicos, el valor agregado de la industria por encima de cierto tamaño aumentó un 4.6% interanual durante todo el año, la generación de energía aumentó un 6.9%, el consumo total de energía aumentó un 5.7%, el volumen total de transporte de mercancías aumentó un 8.1%, se construyeron 2,776 kilómetros de nueva línea de ferrocarril de alta velocidad y se alcanzó un total de 3.38 millones de estaciones base 5G.
En cuanto a la protección de la calidad de vida de la población, durante todo el año se crearon 12.44 millones de nuevos empleos en áreas urbanas, más de 33 millones de personas que habían salido de la pobreza encontraron empleo, los ingresos disponibles per cápita de los residentes aumentaron un 6.1% interanual, la inversión en la producción y suministro de electricidad, calor, gas y agua creció un 23%, y la inversión en agricultura aumentó un 9.3%.
Desde la perspectiva del impulso del crecimiento, la inversión en la modernización tecnológica de la industria manufacturera aumentó un 3.8% interanual durante todo el año, y la proporción del valor agregado de la industria manufacturera de alta tecnología y la industria de fabricación de equipos en el total de la industria por encima de cierto tamaño aumentó al 15.7% y 33.6% respectivamente.
La integración sólida de la tecnología digital y la economía real continuó avanzando, con un aumento del 11.9% en el valor agregado de la industria de transmisión de información, software y servicios de tecnología de la información. Las exportaciones de “nuevos productos” como vehículos eléctricos, baterías de litio y productos fotovoltaicos aumentaron casi un 30%…
La modernización de China en tiempos de Xi Jinping no afronta aquel reto sumario de la pobreza y el subdesarrollo. El Informe de la Labor del Gobierno del 2024 colocó en primer lugar de las tareas de trabajo para el año 2024 “impulsar en gran medida la construcción del sistema industrial modernizado y acelerar el desarrollo de nuevas fuerzas productivas de alta calidad”.
La modernización es de otro signo, con la justicia social, ambiental y lo tecnológico como desafíos. No parte de un proyecto anticolonial y antiimperialista sino que es deudor de una celosa soberanía a la vez apegada a la construcción de un nuevo orden multipolar.
En video, Una senda propia: El camino de China hacia la modernización
Bank of America cataloga la economía de Costa Rica como un “jaguar” gracias a zonas francas y modelo exportador.
En tanto el tigre ronda a los pobres, excluidos, marginados, las becas a estudiantes de escasos recursos, viudas, huérfanos, pensiones no contributivas, usuarios del Seguro Social.
Nogui, guanacasteco con raíces de maíz, bizcocho, tanelas; el Hijo del chofer de don Pepe, profeta en otras tierras, olvidaron sus raíces.
Los asistentes al circo son alentados a mirar atrás, aplauden, caminan al despeñadero de la incubadora de violencia e injusticias.
Luis Gilberto Martínez Sandoval MBA Lic. Bach. Académico Universitario Titular Carreras Comercio Exterior, Administración Aduanera Sede Central UTN www.utn.ac.cr Especialista en Relaciones Económicas y Políticas Internacionales, MBA Administrador de Empresas énfasis Mercados Globales y Negocios Internacionales. Ex Funcionario Banco Mundial IFC – Ecuador- y, América Latina, Escritor, Directivo JD SSN ANEP UTN, Científico Social Candidato Decano de Sede Central UTN Elecciones 2024 Contácteme: luis.martinez.sandoval@gmail.com Cel. 506 62 76 41 33
El mercado global tan apetecido por los empresarios exportadores es altamente monopólico, oligopólico y, transnacional; poco más de 650 CMN controlan el comercio mundial y 16 la industria del petróleo. Pero los economistas llaman a ello “competencia en mercado global”.
Como estudioso de la ciencia de la economía no deja de llamarme la atención que esta ciencia dada las nuevas realidades TICs en el Siglo XXI está en bancarrota y los economistas también…Sus predicciones no aciertan dado su componente subjetivo. El mejor laboratorio de ello es Argentina guiada por un Economista. La Física y la Medicina avanzan más rápido que la Ciencia Económica. Su componente es subjetivo ante una sociedad de alta complejidad y su método experimental no es igual a las ciencias duras. Manuel Arellano et al, nos exponen que en cuanto a logros la ciencia económica no ha podido “conseguir una vacuna para erradicar la pobreza, (…) ni ha podido evitar la especulación de los mercados.” La economía es una “ciencia social no exacta”, que tiene como objetivo resolver el problema económico: ¿qué?, ¿cómo? y ¿para quién producir y distribuir bienes y servicios?
El PNB y PIB están obsoletos como medidas de contabilidad nacional y, conceptos como rendimiento, productividad, competitividad, beneficios son arbitrarios, subjetivos y parciales.
¿Qué hacer con la Economía? Necesitamos diseñar nuevas bases conceptuales, metodológicas y técnicas para la nueva economía del siglo XXI. Debemos empezar desechando viejos conceptos, métodos y técnicas económicas. ¡Debemos hacer una reforma curricular total en todas las Escuelas de Economía de las Universidades Públicas y Privadas de Costa Rica! ¡Es urgente y prioritario!
La economía camina por supuestos: las necesidades humanas son ilimitadas, los recursos escasos, el costo de oportunidad, los incentivos, la teoría de la expectativa, la elección del consumidor, los individuos se enfrentan a disyuntivas, las personas son racionales y actúan en términos marginales, los individuos responden a incentivos, el comercio puede mejorar el bienestar, los mercados son un mecanismo de auto regulación, el Estado mejora a veces los resultados evitando las fallas en el mercado (distorsiones: colusiones, crisis, fraudes, evasión de impuestos, falta de bienes y servicios, contaminación de una empresa sobre los ciudadanos, subida de precios de un solo sector productivo, tráfico de información y no transparentar, no rendir cuentas ), la productividad mejora el nivel de vida, imprimir demasiado dinero genera subida de precios y, la inflación genera baja en el desempleo dado que estimula a contratar trabajadores. ¡Supuestos!
En su enfoque la ciencia económica es fragmentaria.
En sus modelos excluye las dimensiones bioecológicas, sociales, políticas, teológicas y psicológicas. Al basarse en suposiciones degenera en “ideología disfrazada”. La economía se enfoca en el “nivel de vida” y olvida la “calidad de vida” y la felicidad interna bruta. Los bosques, ríos, suelos y minerales que son activos naturales para la economía son bienes de consumo y recursos ilimitados que se deben explotar al máximo sacando la utilidad mayor. Para ello se utiliza la famosa fórmula macroeconómica: DA = C + I + G + (X – M) pero siempre colapsa la demanda agregada. Por no hablar de la gran distancia entre el Big Data y la economía. La ciencia económica no logra administrar la incertidumbre en cualquier escenario posible y con todos los datos dados. ¿Qué sucederá macroeconómica y microeconómicamente en la Argentina de Javier Milei?
Como “ciencia” está viviendo una profunda “crisis existencial” en sus métodos, técnicas y conceptos. La “ciencia de la economía” está produciendo costes ambientales irreversibles al planeta, dado que los modelos económicos son altamente depredadores de los recursos naturales, seres vivos y minerales y sumamente contaminadores. El mundo de la ciencia económica del Siglo XXI no es el mundo en el cual escribió Adam Smith su libro “Una investigación sobre la naturaleza y las causas de las riquezas de las naciones” ni el mundo en el cual Karl Marx escribió el “Manifiesto Comunista” o “El Capital”.
La economía para funcionar requiere de hidrocarburos (combustibles fósiles) sin ello no funciona y cuando estos suben o bajan todas las predicciones se caen. La ciencia económica se volvió obsesiva-compulsiva con el crecimiento económico (PIB) y dejó de lado el desarrollo económico autosostenible.
La economía siempre ha considerado que se puede redistribuir la riqueza, proveer bienes y servicios, corregir problemas de funcionamiento del mercado (externalidades y monopolios) y estabilizar los ciclos económicos, pero… el Estado (Gobierno) siempre tendrá déficit fiscal, déficit comercial en cuenta corriente y gastos constantes y crecientes que siempre se van a financiar vía política fiscal o endeudamiento externo que estrangula las presentes y futuras generaciones.
La economía no puede sostener en el largo plazo la inflación ni bajar el desempleo, porque todas las economías están ancladas al sistema económico global. Por ejemplo, un cambio ínfimo en las tasas de interés de la Reserva Federal y dinamita nuestro Programa Macroeconómico del Banco Central de Costa Rica que es la economía número 85 por volumen del PIB. Siendo su deuda pública en 2022 de 41.379 millones de euros, 43.608 millones de dólares, con una deuda del 63,78% del PIB. Y su deuda per cápita es de 7.913 € euros por habitante, 8.340 $ dólares por habitante.
La “ciencia de la economía” sigue desconectada de la realidad concreta y muy afianzada en la realidad subjetiva.
Los mercados libres altamente competitivos, la planificación económica y la economía mixta solo existen en la academia universitaria y en los libros. La realidad va por otro lado.
En conclusión, para sentar las bases de una nueva economía requerimos realizar un cambio radical en los conceptos, métodos, sistema de valores y la estructura del pensamiento económico actual.
Debemos volver a releer a John Rawls, Robert Nozik (Sociedad Económica Justa), Thomas Robert Malthus (Teoría de la población), Joseph Alois Schumpeter y al geólogo M. King Hubbert o E. F. Schumacher principalmente todos sus escritos sobre Economía Budista, allí es donde podemos encontrar la verdadera salida a la bancarrota en que se encuentra la Economía y los economistas. Junto a ello deberíamos hacer un esfuerzo para comprender la economía budista y sus principios rectores −la vía intermedia que evita los extremos de los estilos de vida−, el máximo de bienestar humano con paz e iluminación perfectas, que está libre de deseos (consumo obsesivo) y sufrimiento por las cosas materiales (tener). ¿Será posible aplicarla en Costa Rica en el Siglo XXI? Como estudioso de la ciencia económica debo ser consecuente, no lo sé…
La economía costarricense podría transitar, a lo largo de este 2024, sin muchos malabares. En criterio de economistas de la Universidad Nacional (UNA), los principales indicadores macroeconómicos tenderían a moverse bajo la perspectiva de la prudencia, luego de un año más convulso.
Uno de esos indicadores es la inflación, que vivió un subibaja desde que en agosto del 2022 alcanzara un crecimiento interanual del 12,3%. Dieciséis meses después (diciembre 2023), la tendencia se revirtió drásticamente, al punto de que el país registró una deflación interanual del -1,77%.
¿Qué factores incidieron para que el índice de precios cayera de esta manera en el 2023? “A nivel internacional muchos insumos importados bajaron de precio, sumado a que, a nivel interno, el precio de bienes relacionados con los sectores de la alimentación y la información disminuyeron. Nos queda claro entonces que hubo controles de precios que justifican estos resultados”, manifestó el académico e investigador Fernando Montero.
El Banco Central de Costa Rica (BCCR) tiene como misión principal el control en el aumento de los precios, reflejado a través de la inflación. Para ello, ha determinado un rango meta sobre el cual este indicador debería establecerse, el cual oscila entre un 2% y 4%. Evidentemente, este objetivo al cierre del 2023 no se cumplió.
Lo que sí está previsto es que, durante el 2024, la inflación sí logre ajustarse a este rango, al salir del campo de la deflación en la que se encuentra. El momento preciso en que ocurra ese salto es algo aún indeterminado.
Lo cierto del caso es que en enero entró a regir un aumento de hasta un 15% en el precio de la electricidad, aprobado por la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos. Solo este aspecto, en criterio del economista Fernando Rodríguez, puede significar un ajuste hacia el alza en la inflación.
Tasas de interés
Cuando la inflación comenzó a crecer aceleradamente, y afectó de manera directa el bolsillo de las familias al tener que destinar más recursos para solventar sus gastos, el Banco Central se vio en la necesidad de aumentar la Tasa de Política Monetaria (TPM), de manera que este efecto incidiera sobre las tasas de interés locales y sobre el consumo nacional.
Sin embargo, la caída abrupta de la inflación abrió el camino para que la entidad monetaria redujera este indicador, que llegó a ubicarse en un 9% en su punto más alto.
A pesar de ello, las reducciones a lo largo del 2023 fueron más paulatinas y timoratas, lo que provocó que el 2024 abriera con un porcentaje del 6% en la TPM. Anoche, la autoridad monetaria aprobó una reducción de 25 puntos base, para ubicarla en 5,75%.
Precisamente, desde el sector empresarial ha aumentado la presión en los primeros días de este año, para que el Banco Central aplique una reducción mayor a la TPM, que genere una disminución más sustantiva en las tasas de interés, lo que a su vez fomentaría el crédito, la competitividad y la actividad comercial.
Para el experto Fernando Rodríguez, más allá de la inflación, el Banco Central ha sostenido las tasas como una estrategia para evitar que haya un movimiento de dólares hacia adentro o hacia afuera en la economía, que incida sobre el tipo de cambio. “Entonces, el Central va a tener que sopesar qué va a hacer con la TPM si de repente estamos en un contexto donde haya más inflación, que es lo que se prevé, pero también en una circunstancia donde hay exceso de dólares y mucho endeudamiento externo. Es probable entonces que haya ajustes pequeños en el 2024 para calibrar lo que vaya ocurriendo y esperar también lo que pase con las tasas a nivel internacional”, agregó.
Por su parte, Fernando Montero espera que ese ajuste hacia la baja se realice en el transcurso del primer semestre de este año. “Lo que haría con esta eventual reducción es aplicar una especie de contrapeso al anuncio que ya han hecho las autoridades monetarias de un incremento en las tasas de interés. De esta manera, el Banco Central está planteando un escenario que busca la estabilidad en los precios y en las tasas”, indicó.
Tipo de cambio
El valor del dólar con respecto al colón tuvo un 2023 de descensos escalonados. Y recibió el 2024 bajo la misma tendencia: apenas el pasado 15 de enero, el precio registrado en el Mercado de Monedas Extranjeras (Monex) fue el más bajo en una década, al ubicarse en 518,5 colones.
De acuerdo con cálculos elaborados por el investigador Fernando Montero, el 2023 registró un promedio de precio de compra del dólar de 542 colones, mientras que el de venta de 548 colones. La devaluación de la moneda a lo largo del año fue del 12%.
Para este 2024, el precio de la divisa tendería a mantenerse estable, pero con un valor bajo, que podrían oscilar entre 510 colones y un máximo de 560 colones.
La abundancia de dólares en el mercado local explicaría en mayor medida la baja en su precio. “No se ven presiones importantes para devaluaciones fuertes. El Gobierno está acudiendo a endeudamiento externo, lo que quiere decir que atrae dólares para cubrir sus necesidades de financiamiento, provocando que el tipo de cambio baje”, reflexionó por su parte Fernando Rodríguez, de la Escuela de Economía de la UNA.
El exceso de oferta de dólares se da por factores internos como el aumento en la llegada de turistas al país (2,75 millones de visitantes extranjeros, a setiembre 2023 de acuerdo con datos anunciados ayer por el Instituto Costarricense de Turismo), por el aumento en la Inversión Extranjera Directa (IED) (a setiembre del año anterior registró un incremento del 16%, que representó la llegada al país de 2.691 millones de dólares, según el Ministerio de Comercio Exterior), así como por la gestión que realiza el Gobierno para aprobar préstamos con entidades financieras multilaterales.
Una de las medidas que aplicó el Banco Central para evitar una baja más pronunciada en el valor del dólar fue su intervención en Monex, realizando compra de divisas, por un lado, para satisfacer la demanda de dólares del sector público no financiero (SPNB) y por otro lado, para aumentar sus reservas monetarias internacionales.
Ante este panorama, Fernando Montero prevé una intervención cambiaria más comedida en este 2024. “El Banco Central participaría solo cuando haya una sobreoferta de dólares por encima del precio promedio establecido. Además, con una inflación del 2% que se prevé, no veo un cambio abrupto en el tipo de cambio”, aseguró.
Tanto Montero como Rodríguez coincidieron en que, en un contexto de tipo de cambio bajo, sectores como el exportador y el turismo continuarían viéndose afectados desde el punto de vista de su competitividad, a pesar del crecimiento que han venido registrando.
Crecimiento económico
A pesar del equilibrio que mostrarían, en el papel, estos indicadores, la previsión de crecimiento tendería a la baja en este 2024. De cerrar el 2023 con un porcentaje del 5,3% (que Fernando Montero calcula que podría ser de hasta el 6%), la expectativa es que ronde el 3,6%, según lo anunció en noviembre el modelo macroeconómico del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (Cinpe).
“Ya no se habla de una recesión global, pero sí va a haber una caída en el crecimiento de las grandes economías como Estados Unidos y China. Situaciones como los conflictos geopolíticos, la sequía en el canal de Panamá producto del cambio climático y la burbuja inmobiliaria en China podrían afectar el desempeño del comercio”, valoró Fernando Rodríguez.
Conjugando todos los factores y escenarios, y sin considerar eventualidades, el rumbo económico del 2024 parece despejar el camino hacia un tránsito sin muchas curvas.
Oficina de Comunicación Universidad Nacional, Costa Rica
Con el prólogo del político estadounidense Bernie Sanders, en un documento de OXFAM se hace una invitación a reflexionar sobre las problemáticas del poder empresarial y la necesidad de una acción pública transformadora.
El escrito inicial en el informe de enero de 2024 de la Oxfam ofrece una serie de reflexiones importantes sobre la realidad económica actual. De esta manera, el senador Sanders coloca en discusión aspectos como la concentración de la propiedad extrema a la que se enfrenta la economía recurrentemente, el poder político sin precedentes —ostentado en manos escasas— y la desigualdad entre el ingreso monetario y la riqueza de las sociedades contemporáneas.
Sanders, también, señala que éstos aspectos repercuten en la economía actual, provocando que aquellos individuos en condición de pobreza se vean bajo situaciones de desesperación considerables al no poseer una claridad sobre su devenir económico. Así pues, señala que el estudio de éstas problemáticas, tal como ofrece el presente informe de la Oxfam, puede auxiliar a estas personas a comprender el vínculo desigual entre su ingreso y su riqueza, así como el comportamiento destructivo de la industria ultracapitalista actual.
En relación a ésto, Sanders (2024) señala en su prólogo para el informe: “Si perseveramos en nuestra unión, basada en nuestra humanidad común, tendremos un sinfín de oportunidades de construir una vida mejor para todas las personas” (p. 5). De ésta manera, el conocimiento y la acción funcionan en conjunto, propiciando que las cuestiones anteriormente mencionadas no provoquen consecuencias tan desastrosas sobre los individuos en condición de pobreza. Con ésto, puede fomentarse la acción en equipo, herramienta qué, según Sanders (2024) lograría “acabar con la avaricia y la ideología de la élite milmillonaria, y de liderar el camino hacia un mundo basado en la justicia económica, social y medioambiental” (p. 5).
Además, el resumen ejecutivo del informe señala algunos aspectos que han acrecentado la desigualdad en los años recientes, cuestiones tales como la ascensión de Jeff Bezos como uno de los directivos más ricos del mundo y los intentos de la compañía Amazon por evitar la formación de sindicatos entre sus empleados, el maltrato a los trabajadores de empresas de procesamiento de alimentos y suministros, dónde se les niega el derecho al descanso y al ocio, entre otros. El informe señala que los individuos más adinerados adquieren un beneficio sobre el comportamiento de la economía actual, sino que también se confieren del derecho de controlarla.
Existen, también, otra serie de consecuencias provocadas por la ostentación de la riqueza en manos reducidas. El informe señala, en el punto cuatro del resumen ejecutivo, que los multimillonarios contemporáneos poseen el control sobre megaprocesos económicos que emiten una cantidad considerable de gases invernadero, silenciando a aquellos individuos que difunden información sobre las problemáticas asociadas a ésto.
El informe señala, además, una serie de medidas que pueden efectuarse para disminuir la problemática de la ostentación desigual de la riqueza, así como las consecuencias que ésto provoca. De ésta manera, convoca a los gobiernos actuales a oficializar y desarrollar proyectos que reduzcan las condiciones de desigualdad, con objetivos concretos y adaptables a la realidad de cada nación. Asimismo, indica que es fundamental erradicar los monopolios privados y establecer un límite ante el poder empresarial, produciendo planes que se adapten a las necesidades del país que procuren evitar la acumulación monopólica de las empresas privadas.
Si desea consultar el informe completo, puede hacerlo observando el documento adjunto. Agradecemos a Germán Masís Morales por compartir el escrito con SURCOS.
La idea de construir un tren entre los océanos Pacífico y Atlántico viene planteándose con fuerza en Mesoamérica en los últimos años, en parte como deriva de la imposibilidad del histórico Canal de Panamá de atender toda la demanda del transporte de mercancías y también como una medida económica que se considera salvadora para los países, al conectar Asía con la costa este de los Estados Unidos. No se considera que el tren interoceánico se convierta en competencia del Canal de Panamá, sino en un complemento.
En México en diciembre de este año 2023 se está inaugurando el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (303 kilómetros de costa a costa), recorriendo desde Coatzacoalcos, Veracruz, hasta Salina Cruz, Oaxaca. El presidente Andrés Manuel López Obrador (conocido como AMLO), hizo un viaje de prueba con una duración de 6 horas y 20 minutos. Tendrá conexión con el Tren Maya que también este mes ha sido inaugurado y va de Palenque, Chiapas, hasta Cancún, Quintana Roo, y en otra línea sigue hasta Ciudad Hidalgo, Guatemala. Los trenes serán de carga y de pasajeros. La construcción de los trenes es vista como vía para reactivar la economía, con la creación de parques industriales y el incentivo del turismo a lo largo de las vías férreas. Los proyectos ferroviarios se han financiado con recursos del gobierno y encargados a empresas privadas.
Nicaragua por su parte apuesta a una relación estratégica con la República Popular China. Aprovechando el Foro de la Franja y la Ruta la delegación nicaragüense adelantó la negociación de varias obras de infraestructura, entre ellas los estudios, diseños y construcción de dos trenes. El llamado Plan Maestro Ferroviario que iría de Managua a Bluefields, pasando por Corinto, sería un canal seco que uniría el Pacífico y el Caribe Sur de Nicaragua. El otro tren iría de Managua a Granada, pasando por Masaya. Ambos proyectos serían negociados con la empresa china CCECC.
En Honduras la presidente Xiomara Castro anunció la conformación de comisiones para la construcción de un tren interoceánico a partir del año 2024, partiendo de estudios de factibilidad de gobiernos anteriores que servirán de insumo. Dice el gobierno haber recibido ofertas de financiamiento de Estados Unidos, aunque no descarta que la construcción sea a través de China o Corea. El discurso es bastante ambicioso, hablan de convertir a Honduras en el Centro Logístico Interoceánico de América, un proyecto que se desarrollaría en 10-15 años, permitiría construir varios parques industriales y serviría al comercio de Estados Unidos, Asia y Europa. Este tren conectaría tres puertos, Cortés, Castilla y Amapala.
El Corredor Interoceánico de Guatemala es una iniciativa empresarial que se propuso desde 2011, la construcción de un canal seco con vías férreas, carretera y oleoducto a través de propiedades privadas, el proyecto incluye la construcción de dos puertos de aguas profundas. En 2022 el Consorcio Interoceánico de Guatemala, S.A., anunció que se mantenía en procesos legales, que buscaba fuentes de financiamiento en Colombia y que proyectaba que el proyecto iniciaría operaciones en 2028.
En Costa Rica la iniciativa también ha sido privada, pero el Concejo Nacional de Concesiones (CNS) ha rechazado en dos ocasiones el proyecto de Canal Seco Interoceánico, que recorrería el país por el Norte, e igual que en Guatemala, supondría vías férreas, autopista y oleoducto. La primera vez fue rechazado en 2018, por no cumplir los requisitos. La segunda ocasión fue en 2020, aunque se les dio espacio para resolver inconsistencias, se consignó que el Consorcio Canal Seco de Costa Rica (CANSEC) no pudo demostrar solvencia económica para hacer desde los estudios preliminares hasta la construcción de la obra, no había viabilidad técnica ni ambiental tampoco (se supone una afectación en áreas protegidas y ríos). A partir de 2022 la empresaria presidenta del consorcio ha venido insistiendo en el proyecto, visitando comunidades de Limón y diciendo que cuenta con el respaldo del presidente Rodrigo Chaves, el ministro Luis Amador y varias candidaturas a alcaldías.
Como se podrá advertir esta carrera del tren interoceánico ya la ganó México. La tenacidad del presidente López Obrador es ejemplar y por eso está inaugurando, antes de terminar su mandato, varias mega obras públicas. Es iluso creer que en Mesoamérica hay espacio para otros cuatro trenes más que recorran del Pacífico al Atlántico, que sean económicamente viables y rentables. De todos modos, los de Nicaragua y Honduras apenas arrancan planes de diseño, mientras las iniciativas privadas de Guatemala y Costa Rica naufragan en un mar de dudas, incluyendo la falta de financiamiento y el tufo a corrupción.
Lo sensato sería dar por concluido ese intento de tren interoceánico que no tiene viabilidad económica, dado el gran salto de México, y darle aires al tren eléctrico en el Caribe, conocido como TELCA, que ayudaría a las deprimidas economías de los cantones de Limón y Sarapiquí, al igual que al tren eléctrico metropolitano, vital para mejorar la calidad de vida de cientos de miles de personas; dos proyectos que caminan a paso de tortuga en este gobierno.
Fernando Montero Cordero, investigador académico de la Escuela de Administración
Uno de los objetivos más importantes del Banco Central de Costa Rica (BCCR) es lograr la estabilidad de precios en la economía.
Dentro de los instrumentos que tiene el BCCR para administrar el nivel general de precios, es el uso de instrumentos monetarios, como por ejemplo la tasa de política monetaria (TPM), que es la tasa que cobra el Banco Central en sus préstamos a un día plazo en el Mercado Interbancario de Dinero y ésta influye directamente en la tasa básica pasiva y en la de colocación para los entes de intermediación financiera.
Una política monetaria restrictiva podría traducirse en un aumento de la TPM con el fin de controlar el crecimiento de precios y de crédito del sector financiero.
El mecanismo monetario ha surtido efecto sobre la inflación al punto de que el Banco Central ya ha logrado alcanzar sus propias metas de inflación establecidas para el presente período. La variación acumulada interanual de la inflación en el primer semestre del año alcanza la cifra de -1,52, monto que sobrepasa las expectativas del ente rector financiero.
El costo de oportunidad de tener una inflación controlada ha sido la volatilidad sufrida por el tipo de cambio, el cual ha tendido a la baja por un periodo prolongado de tiempo, principalmente en los últimos seis meses del presente periodo.
Para el 9 de diciembre del 2022 el tipo de cambio del colón respecto al dólar tenía un precio de venta de 595,62, al 1º de octubre cerró en 542,35, con un diferencial de -53,27. El promedio de comportamiento de dicho indicador en los últimos cuatro meses ha sido de 537,50 compra y 544,09 para la venta. El mayor diferencial se presentó el día 11 de julio con un monto de 9,51 colones por dólar.
Las principales causas de esta caída se deben principalmente a:
1) Ingreso de dólares producto de una mayor inversión extranjera directa, principalmente en equipamientos médicos, industrias intensivas en tecnología y telecomunicaciones, la mayoría provenientes de Estados Unidos (73%). Se proyecta que para este año se sobrepasen los $3.500 millones en este ámbito.
2) El mercado privado también tiene una gran influencia en este aspecto, básicamente por la compra y venta de dólares (oferta y demanda). Hay fuertes capitales que han venido a Costa Rica en busca de inversiones turísticas, recreativas y de ocio.
3) En este mismo sentido el turismo ha jugado un papel básico como “atrayente” de la moneda (dólares principalmente) de turistas que han incrementado la visitación en prácticamente todo el periodo, solo el primer semestre se recibió 1,3 millones de turistas que aportan alrededor del 6,3% del PIB.
4) Aunque la Reserva Federal Estadounidense ha dado una pausa al incremento de las tasas de intereses, podría mantenerse una política contractiva generando menos posibilidades a los inversionistas de invertir en mercados como los centroamericanos. Esto es un hecho que impactaría directamente la toma de decisiones del BCCR respecto a la TPM y de la política cambiaria.
5) En un menor grado, pero no menos importante es la volatilidad del colon, que continua según el modelo Garch en volatilidad media, tendiendo a la baja. Esto conduce a grados de incertidumbre, sobre todo porque las tasas de colones pierden atractivo en el mercado financiero.
¿Qué nos espera al cierre de año?
La estacionalidad podría compensar los efectos de la revaluación del colón respecto al exceso de dólares en el mercado, es decir las compras de insumos, bienes y servicios internos, la llegada de ahorros navideños, ahorros anuales, reparto de excedentes, dividendos y aguinaldos podrían ejercer presión y equilibrar la caída del tipo de cambio. Todo dependerá más de factores externos que internos, tales como el comportamiento del dólar en el mundo, los efectos de la geopolítica, el precio del petróleo y los conflictos bélicos internacionales.
Es necesario ante ellos tener mucha cautela y ser cuidadosos en compras y deudas en dólares, ya que la incertidumbre cada vez se hace más fuerte y no se visualiza que el BCCR haga algún tipo de intervención en el Mercado de Monedas Extranjeras (MONEX) para estabilizar el tipo de cambio, ya que su interés es claro: mantener la estabilidad de precios y “quedar bien” con la OCDE y organismos prestatarios internacionales.
Oficina de Comunicación Universidad Nacional, Costa Rica