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Etiqueta: Esperanza

Sobre lo esencial, un apunte breve

Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)

En el año 2019 fui invitado al XV Festival Internacional de Poesía de Quetzaltenango, Guatemala. Año con año, este Festival lleva poesía y reflexión a distintos rincones de la geografía guatemalteca. Escuelas, colegios, teatros, comunidades, cárceles, hospitales y albergues son sedes donde se recrea la palabra y su magnífico acto transformador.

En sus últimas ediciones, conscientes del potencial comunicativo de la actividad en una sociedad como la guatemalteca, seleccionaron temas profundos como las desapariciones forzadas, las migraciones de niños y niñas y mujeres y los procesos de desplazamientos forzados, para hacerlas visibles desde la actividad creativa y liberadora de la poesía.

Cada inicio de los recitales poéticos que convocan escritores y escritoras internacionales, se daba lectura a un texto manifiesto que ubica a las personas asistentes en el contexto temático del momento.

Ese año junto a Lucy Chau (Panamá) Negma Coy (Guatemala) y Chary Gumeta (México) fui asignado a una lectura en uno de los denominados Hogares Seguros, sitios donde se albergan y resguardan niñas que han experimentado todo tipo de violencias.

La lectura de esa tarde transcurrió en medio de un absoluto silencio y atención dispuesta por las niñas. Dediqué un rato a observar sus caras. Vi niñas madres, niñas tristes, niñas llenas de furia y de ternura. Estaba frente a un escenario que esta misma sociedad violenta y agresora ha generado, en múltiples dimensiones. Y lo estábamos revistiendo con palabras dulces como la de Chary, melodiosas y musicales en la ocarina poética de Negma y sentidas y profundas en la voz de Lucy.

Al finalizar las lecturas generalmente se abre un conversatorio que incluye intercambios y preguntas sobre el oficio de escribir. En esas actividades los niños y niñas suelen ser los más directos y honestos con sus preguntas. Esa tarde una niña de la cual no retengo su nombre ahora (Ana, María, quizá Daniela, no lo sé) nos interpeló y nos hizo conocer la dimensión del dolor y la esperanza por partes iguales.

Nos interrogó sobre nuestro primer libro, nuestra poesía preferida, como escribíamos y por qué. Ya en un pequeño refrigerio nos mostró su realidad directa, pura y violenta. Una niña que a lo sumo tendría 14 años contaba ya con cerca de 20 marcas de intento de suicidio en sus brazos. Mientras nos percatábamos de su historia, nos mostraba su amor por los dibujos y la pintura.

Su destreza artística la salva una y otra vez del desenlace final al que ha intentado llegar como consecuencia de la violencia que vive en su hogar. Por eso su interés por la poesía que le llevamos y compartimos.

Ya hemos dicho en otros momentos que creemos profundamente en el potencial transformador, movilizador y vital del arte y la cultura en todas sus variantes. En contextos tan complejos y desiguales como los nuestros, es necesario el arte como recurso y herramienta y no solo (pero también) como propuesta estética. Es una actividad esencial, como la vida misma.

En los últimos días, consecuentes con una estrategia política y simbólica de aniquilamiento del estado social en Costa Rica, surgió una propuesta en el seno del sector empresarial costarricense para cerrar instituciones dedicadas a la cultura, la investigación social y la educación.

La propuesta emanada por un grupo feligrés empresarial surgido en los años setenta en Costa Rica llamado ANFE (Asociación Nacional de Fomento Económico) muestra un enfoque abiertamente inhumano basado en la premisa de que la economía es lo principal y que lo demás sobra.

Mostrando un absoluto desprecio por la vida y en tono irónico, lanzan la idea que estas actividades no son «esenciales» y que deben sacrificarse por el bien colectivo ahorrándose con ello presupuesto que, aducen, sería destinado a combatir la pandemia. Han recibido resonancia en medios hegemónicos, pero también han encontrado espacio en una gestión gubernamental absolutamente alineada con los intereses corporativos. Alguien les dejó la puerta abierta y entraron.

He pensado en la niña del Hogar Seguro de Quetzaltenango en estos días. Rememoro su profunda relación con el arte como recurso para resistir y la contrapongo a estas voces recortistas y retrógradas ya recurrentes en una sociedad como la costarricense.

Pienso que es la hora de la disputa semántica, discursiva y política con quienes intentan silenciar la expresión y la investigación social en nuestros países. Es importante reivindicar el significado de lo esencial para darle su contenido real. La tarea es hoy.

 

Foto Semanario Universidad.

Día Mundial del Futuro

Dr. Juan Carlos Mora Montero
Académico
Escuela de Planificación y Promoción Social-EPPS-UNA

Este 1 de marzo del 2021 celebraremos a nivel global el día del futuro. Ante tan extraordinario evento, la Escuela de Planificación y Promoción Social de la Universidad Nacional (EPPS-UNA), se une y destaca la importancia de recordar que el futuro representan el espacio donde se concretarán las decisiones que se tomen en el presente.

El día mundial del futuro se ha venido celebrando de manera ininterrumpida desde hace siete años y es convocado por los principales tanques de pensamiento y organizaciones futuristas del planeta.

El motivo de celebración para este 2021, girará en torno al “derecho al futuro”; es decir el derecho que tiene cada persona, organización, empresa, familia a construir su propio futuro y trabajar día a día para alcanzarlo. Uno de los temas que se tratará en los diferentes foros que estarán llevando a cabo de manera simultánea alrededor del mundo será ¿cómo combatir el miedo al futuro?

Sin excepción, los distintos tanques de pensamiento y organizaciones futuristas han coincidido en que en la actualidad existe un temor generalizado a pensar el futuro; y se han generado más bien reacciones de “bloqueo” hacia el porvenir, cayendo en un “presentismo” desmedido y un cortoplacismo que se ha constituido en una amenaza significativa para la esperanza de que vienen tiempos mejores.

La EPPS-UNA desea resaltar en este contexto de alta incertidumbre que vivimos, que la planificación, y en especial la función prospectiva que hace parte consustancial de ella, nos ofrece la oportunidad de darnos método y técnicas para reducir la incertidumbre sobre el futuro y poder tomar las decisiones que nos permitan construirlo como lo deseamos y no sufrirlo como espectadores pasivos.

Los padres de la prospectiva francesa le llamaron a la prospectiva la “ciencia de la esperanza”; y Michel Godet en específico nos recordó que esta disciplina es la que nos permite iluminar el presente con la luz del futuro.

Bienvenido el futuro y hagamos valer nuestro derecho a poder imaginar y construir un futuro mejor para las actuales y futuras generaciones y que nadie lo haga por nosotros.

Imagen: conmasfuturo.com

El mundo recupera la esperanza

Mujeres por Costa Rica

Con el triunfo electoral de Biden-Harris, el mundo recupera la esperanza de hacer cambios impostergables para el cuido de los ecosistemas del planeta y la superación de las condiciones de desigualdad que empujan a millones de personas a vivir en la pobreza y con hambre.

Celebramos la llegada de Kamala Harris.  Ella será la primera mujer, y la primera persona de ascendencia afroasiática en ocupar dicho cargo. Su agenda en favor de las minorías y con enfoque de género, revive esperanzas en momentos en que el supremacismo blanco amenaza los derechos civiles alcanzados desde la década de 1960.

Felicitamos a los movimientos de mujeres de los Estados Unidos y del mundo que se unieron en una sola voz para impedir la reelección y la consolidación de un gobierno negacionista de la pandemia, la ciencia, los derechos de las mujeres, las minorías étnicas y raciales y defensor del capitalismo salvaje.

El nuevo mundo demanda el respeto a los derechos humanos, el reconocimiento del multilateralismo, la solidaridad internacional y el cuido de la naturaleza como la única vía posible para la construcción de una comunidad internacional que viva en paz.

 

Solidaridad UCR: recolecta de víveres

Solidaridad con las personas afectadas por el paso de la depresión tropical ETA.

¿Cómo puede ayudar?

  • Aportando con artículos especificados en la lista adjunta
  • Contribuyendo de manera monetaria mediante SINPE Móvil al 6194 1026 a nombre del Erick Cubillo Valerín con el detalle “somosucr”
  • Compartiendo esta información.

Ver más detalles en las siguientes imágenes.

Unidos por la esperanza: donación de víveres para el estudiantado de la UCR afectado por Eta

Las donaciones se recibirán del 7 al 13 de noviembre en el salón multiusos de la Escuela de Estudios Generales en la Ciudad Universitaria Rodrigo Facio

La comunidad de la UCR puede colaborar con los estudiantes afectados por el huracán Eta,mediante donación de productos no perecederos y con ayuda económica a las cuentas bancarias de la UCR. Foto Karla Richmond, UCR.

Las autoridades de la Sede del Sur de la Universidad de Costa Rica alertaron sobre la alta afectación de la población estudiantil que reside en los cantones de Corredores y Coto Brus. Ambas localidades fueron declaradas en alerta roja por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), debido a las condiciones climáticas provocadas por el huracán Eta. Muchos estudiantes se encuentran ubicados en albergues.

También se está a la espera de conocer las condiciones de estudiantes de la Sede de Puntarenas y Guanacaste.

Por lo anterior, las autoridades de la Universidad de Costa Rica le invitan a unirse a la campaña de donación de víveres, del 7 y al 13 de noviembre. Las donaciones de productos no perecederos, se recibirán en el salón multiusos de la Escuela de Estudios Generales de la Sede Rodrigo Facio Brenes.

Los horarios de recibo serán del sábado 7 al domingo 8 de noviembre, de 9:00 a. m. a 4:00 p. m., y del lunes 9 al viernes 13 de noviembre, de 7:00 a. m. a 4:00 p. m.

“Unidos por la esperanza” es una campaña de donación que desde el mes de octubre promueve la solidaridad de la comunidad universitaria con las personas afectadas por la crisis económica provocada por el COVID-19. Ahora, se amplía a la donación de víveres para ofrecer esperanza a nuestra población estudiantil afectada por Eta.

La información logística de la campaña de donación la ofrecerá la Oficina de Servicios Generales (OSG) al correo servicios.generales@ucr.ac.cr y al teléfono 2511-3652.

Asimismo, la Oficina de Recursos Humanos de la UCR pone a disposición varias cuentas bancarias para donaciones dirigidas hacia dicho fin, las cuales son:

Banco

Cuentas

 

 

Banco de Costa Rica

Cuenta colones: 001-0038439-9
Cuenta IBAN: CR40015201001003843991

Cuenta dólares: 001-0204993-7
Cuenta IBAN dólares: CR67015201001020499375

 

 

 

Banco Nacional de Costa Rica

Cuenta colones: 100-01-080-000980-6
Cuenta IBAN: CR17015108010010009801
 

Cuenta dólares: 100-02-000-061357-0
Cuenta IBAN dólares: CR97015100010020613577

La personería jurídica de la UCR es 4-0000-42149 y se debe incluir el siguiente texto en el depósito que se vaya a realizar: AYUDA AFECTADOS HURACÁN ETA.

 

Gabriela Mayorga López
Editora digital y periodista, Oficina de Divulgación e Información

Tejer Historias, comunicar esperanza en tiempos de pandemia

Treinta historias de periodistas… ofrecen sus reflexiones y sus historias. Escritos, sin duda, de gran calidad en los que el lector encontrará inspiración y esperanza para vivir estos difíciles momentos en que, sin un horizonte temporal claro, se vive prácticamente en confinamiento doméstico y, bombardeados por datos escalofriantes, no es difícil sucumbir en la desesperanza.

180 páginas de “historias tejidas” que quieren llegar a todas las personas y ofrecer una perspectiva positiva y esperanzadora en medio de la situación tan complicada.

Para descargar:

Tejer Historias, Comunicar esperanza en tiempos de pandemia

 

Compartido con SURCOS por Lili León.

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El Amanecer de la Indignación y la Esperanza

German Masís Morales

Hemos asistido en los últimos días, a las mayores muestras de indignación que hemos observado posiblemente desde la muerte de Martin Luther King y los años de la guerra de Vietnam.

La indignación de la población mundial por la muerte de George Floyd nos ha permitido participar de la indignación no sólo de la población afrodescendiente si no de la población de todos los países y de todos los orígenes étnicos.

A pesar de la pandemia y de las recomendaciones sanitarias la gente ha salido a las calles a protestar, a manifestarse, a hacerse sentir contra la discriminación racial, contra la violencia policial y contra la represión, en Minnesota, en Nueva York, en Los Ángeles, en Chicago, en Atlanta, pero también en Londres, en París, en Berlín, en Bruselas, en Roma.  La indignación ha recorrido el mundo en 10 días y seguirá, la capacidad de indignación ha surgido, se ha puesto en evidencia, el repudio hacia la violencia institucionalizada y hacia la impunidad de las fuerzas de policía y de todos los organismos represivos.

La indignación se ha expresado de todas las formas posibles, en pancartas, en canciones, en discursos y en campos de futbol en posiciones de puños cerrados, en rodillas al piso, en camisetas negras el clamor popular se ha escuchado, “La Vida de los Negros Importa” no sólo en Estados Unidos, sino también en Inglaterra, en Sudáfrica, en Brasil, en Europa, la vida de los migrantes africanos y del Caribe importa.

Las frases y consignas de las marchas y movilizaciones de estos días han removido los cimientos de la vida en sociedad y de la solidaridad internacional.

“Sin Justicia no hay Paz”, “el Silencio es Violencia” y “El Racismo es la peor Pandemia” Mientras la brecha racial se siga ensanchando, “el Mundo no podrá Respirar” Junto a la indignación, se ha visto florecer en estos días la Esperanza. La esperanza de que la discriminación racial va a ser erradicada … para siempre.

Foto: https://www.enfoquederecho.com/2020/06/05/entrevista-a-rosa-celorio-la-discriminacion-racial-en-estados-unidos/

De un lado la conspiración… del otro la esperanza

Jaime Gerardo Delgado Rojas

Las teorías de las conspiraciones se han puesto de moda, aunque tienen su historia. En los tiempos recientes empataron fríamente con la visión de Fukuyama del Fin de la Historia que, aunque de ingrata memoria, muchos lo replican en sus contenidos: ya no hay esperanza. Fueron, esas teorías, las que rindieron frutos en el mercado de libros Best seller escritos por Dan Brown, no solo El código Da Vinci sino también, su Conspiración. En el fondo, el tema es sencillo: hay una serie de acontecimientos, posiblemente inconexos y hasta distantes que una mente fría y diabólica los ha ido tejiendo sabiamente y a escondidas. Pueda que esa mente sean los del Opus dei, las cúpulas político militares de USA, o bien, fundamentalistas políticos y religiosos, de los desayunos presidenciales en USA bajo el mensaje de Jesús. Pero la parte más elocuente de “la conspiración” es que los que están en el otro lado sufren las consecuencias del tejido de acontecimientos ayunos de información y sin posibilidad de acción. Al final, el resultado es plenamente previsible, aunque la novela pueda que deje alguna puerta para lo imprevisto.

Es desde esa perspectiva que han aparecido, a raíz de la última pandemia del Coronavirs Covid 19 sus explicaciones esotéricas y hasta el maestro Chomsky nos enuncia la propia: una historia reciente en la cual el imperio del Norte tenía que hacer a un lado las fuerzas económicas poderosas emergentes en el oriente y etapa por etapa va controlando el mundo en una novedosa guerra fría. De ahí que la pandemia inicie en China. Los que no somos norteamericanos, pero tampoco chinos, rusos, europeos, no tenemos vela en ese entierro, solo el llevar nuestros muertos al campo santo: América Latina y África, al lado de los pueblos sojuzgados y vaciados de acción política del resto del mundo.

Sin embargo, la coyuntura actual va dando señales de otro orden que no están en el tejido de acontecimientos hecho por el genio maligno y por el intelectual intérprete.

No quiero exculpar la fiereza y voracidad del imperio en esta guerra internacional que se da en este nuevo siglo: el imperio no ha cambiado en nada su naturaleza e incluso, en su apocalipsis pueda que sea más peligroso, como un tigre herido de muerte. Pero lo que se ha visto, a propósito de la pandemia es que aquellos que les tocaba llevar los muertos, más bien van adquiriendo una suerte de constitución de nuevos sujetos. Y los chinos, valorando que han contenido su enfermedad, se lanzan al mundo a colaborar con los pueblos afectados. Y también Cuba, como siempre lo ha hecho con sus misiones médicas.

Solo un ejemplo de esta otra forma de ver la situación actual. En Costa Rica las instituciones cimeras frente a esta crisis han sido las más vilipendiadas por los neoliberales admiradores de las aperturas y las privatizaciones, bajo el dictado ideológico de los organismos del Consenso de Washington. Acaba de salir en redes sociales que el nuevo hospital de oxigenoterapia fue hecho en las instalaciones del Instituto Nacional de Seguros, bajo la dirección de la Caja del Seguro Social y construido por el Instituto Costarricense de Electricidad. Sabemos que la Fábrica Nacional de Licores hace el alcohol que se está requiriendo en esta crisis y lo distribuye equitativamente a través de Correos de Costa Rica hasta la casa del demandante.

Recuerdo que cuando era estudiante de Ciencia Política en FLACSO México, que el maestro René Zavaleta nos hablaba de los momentos constitutivos que dan origen a una nueva historia nacional: eran las grandes mortandades posiblemente provocada por las guerras, las catástrofes naturales y las pestes. La emergencia de esos sujetos históricos era posible gracias a la solidaridad humana que se ponía en evidencia en la colaboración inmediata entre el damnificado y el vecino, entre el voluntario y el que está caído. Entre el profesional, de la Cruz Roja, los bomberos o el cuerpo médico con los heridos. Tal vez en esta crisis la relación personal no pueda darse como la habría pensado el maestro Zavaleta; sin embargo, hay acontecimientos que generan gran esperanza. En Europa entre los conjuntos de edificios que albergan a los vecinos encerrados, surgen espontáneos espectáculos artísticos: de ventana a ventana se ejecutan melodías (Bella ciao en Italia, o alguna soprano con el brindis de la Traviata desde su ventana), o bien, el aplauso masivo, a las 8 de la noche hacia la labor del personal médico en los hospitales, los verdaderos héroes en esta tragedia. Ya en Costa Rica una heladería está convocando a algo parecido.

El otro instrumento que acompaña esta gran marcha de humanos que no se tocan, ni se abrazan ni se besan son las redes sociales: algunos mensajes mienten, otros dicen verdades a medias y otros son más sinceras. Pero todos, de alguna forma van forjando ese tejido social del nuevo sujeto que pueda surgir para que mantengamos la utopía. Es por estas redes que hemos sabido que los trabajadores de la Caja del Seguro no son los vagos que defienden gollerías en sus convenciones, sino los héroes que ponen en peligro su vida y al de sus familias; que FANAL no está en quiebra por sus deudas y que, al contrario es la que le hace el alcohol a la Caja del Seguro a precio de costo y que el ICE o el INS no deben ser sometidos a ninguna privatización.

Nada de esto está en el manual de la conspiración. Más bien está en el fondo de la Caja de Pandora como una expresión de la esperanza.

Esperanza Jurado sigue con nosotras

Esperanza Jurado sigue con nosotras
Esperanza Jurado Mendoza. Dirigente indígena de la Red de Mujeres Rurales, Ngöbe de Abrojo Montezuma.

A mediados del 2009 llegó Esperanza a la Red, fue la primera mujer indígena participante en la Red. Abrió el camino para que la organización ampliara su quehacer, sus visiones, su conocimiento, su diversidad , su hermandad, su lucha.

Y se sintió tan bien, encontró ahí el espacio donde como mujer indígena coincidía con las mujeres del campo en sus luchas, en sus sentires, coincidía en muchas de las discriminaciones que había sufrido a lo largo de su vida, encontró oídos atentos a escuchar sus demandas, sus posiciones, sus experiencias, sus saberes y encontró sobre todo mujeres con quiénes acompañarse en sus luchas.

Y decimos que se sintió tan bien, que con ella fue trayendo mujeres indígenas de muchos lados; mujeres indígenas que sin duda reconocían su liderazgo, su urgencia de lucha por todas las demandas de los pueblos indígenas y por los derechos de las mujeres indígenas en particular. Donde quiera que iba les hablaba de la Red. Así, en cada actividad vinieron con ella nuevas compañeras indígenas de diversos territorios y comunidades: Abrojo Montezuma, Casona, Cabagra, Alto Laguna, Rey Curré, Guácimo, Lagarto, y la Red se fue extendiendo, ya no solo ella multiplicaba las invitaciones, sino que otras y otras de otros territorios también lo hacían y vinieron mujeres de Térraba y Salitre.

Estuvo siempre dispuesta a compartir con las compañeras campesinas, intercambió conocimientos y semillas con las compañeras en diversas comunidades del país. Hoy recuerdo a otras compañeras diciendo que querían ser como Esperanza, conocer tanto como ella, teniendo la lucha tan clara y teniendo tanta fuerza para luchar.

La conocimos viviendo en Abrojo, pero la lucha por el reconocimiento a su derecho como mujer a elegir su pareja la llevó a Curré. Porque también defendió ese derecho a decidir sobre su vida y su cuerpo. Desde la casa del Consejo Indígena del Sur siguió su quehacer en defensa de los derechos humanos de las indígenas. En Curré encontró oponentes, temerosos de que las mujeres indígenas conocieran sus derechos, pero también contó con el apoyo y el reconocimiento de un sector importante y beligerante en la defensa de los pueblos indígenas y sus territorios.

En 2010 participó en la delegación indígena que se presentó a la Asamblea Legislativa a reclamar respeto al Convenio 169 de la OIT, a reclamar el respeto a la autonomía indígena y en palabras de ella “fuimos arrastrados por los antimotines del gobierno”.

Y fue más allá, recupera con su pareja, un terreno en Lagarto, del Territorio Indígena Curré, eso significa que tomó el terreno, para vivir y producir, para cuidar y proteger la Madre Tierra. Ahí levantan su rancho, que ella llamaba “mi palacio”, porque “ahí es donde quiero estar”. Cuando la conminaron a salir, ella les dijo: me voy después de que se vayan todos los no indígenas que están en el territorio”. Y ahí defendió su relación con la tierra, ahí sembraron y cosecharon: arroz, maíz, frijoles y otras muchas cosas, Y ahí siguió haciendo artesanías, procesando maíz para atol, semillas que preparaba de diversas formas, para llevar a los mercados solidarios. Desde ahí también defendió la biodiversidad, llevando y trayendo semillas y compartiendo usos de las plantas. Y en cada una de sus acciones estaba la lucha, porque amaba la tierra, su cultura, su sangre y en cada acción estaba la defensa de los derechos indígenas y en particular de las mujeres indígenas.

Luego vinieron tiempos duros con su enfermedad, que le minaron el cuerpo, pero no el espíritu. También se debatió entre el uso de la medicina alopática convencional y la medicina tradicional. La primera le aliviaba, pero no terminaba de sentirse cómoda con ella. Y optó por la medicina tradicional. Con ello también nos da una lección de cultura, que nos muestra nuestro desconocimiento y que respetamos.

Aún en su enfermedad no paraba de hacer, de luchar: hacía planes, convocaba a actividades, denunciaba, y con muchas dificultades estuvo en el Foro que organizara la Red, junto con otros apoyos, en el Territorio Indígena de Térraba el 17 de abril recién pasado, en el Día Internacional de la Lucha Campesina, dando su discurso en representación de las mujeres del campo, en representación de las mujeres indígenas, ante más de 250 personas, de Territorios, de comunidades y de organizaciones amigas.

Hoy la Red de Mujeres Rurales llora su partida, pero queremos decirle a Esperanza que seguimos su ejemplo, y decirle a la comunidad que nos rodea, que cada uno de los caminos que Esperanza nos señaló están en nuestra ruta.

“Como mujeres hemos visto hace tiempo lo que tenemos que hacer, tenemos muchas necesidades, nuestro pueblo tiene muchas grandes necesidades, pero no hay quien hable, quien diga la verdad. Todos se callan, por pequeñas mentiras. Los políticos llegan a mentir a nuestros pueblos y nosotros nos dejamos a llevar, nosotros estamos acegados. Hoy por hoy es hora de despertarnos hermanas y hermanos campesinas e indígenas. Yo vengo luchando durante años , por nuestra Madre Tierra, a la defensa de Nuestra Madre Tierra, llevando el memoria el Convenio 169 de la OIT, como mujeres defensoras de nuestros derechos . Como mujeres luchadoras por el Nuestra Tierra y el buen vivir, defendemos nuestras semillas criollas y la soberanía alimentaria”. (Fragmento del discurso de Esperanza Jurado, el 17 de abril 2013, en Foro “Por la tierra y las semillas”, en Territorio Indígena Térraba).

 

Tomada para SURCOS Digital de http://mujeresrurales.org/

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