Skip to main content

Etiqueta: ecocidio

Hoy no hay nada que celebrar – Costa Rica celebra el Día de la Madre Tierra en medio de un ecocidio impune

(Bloqueverde 22-4-25).Costa Rica, país megadiverso y reconocido internacionalmente por su imagen verde, atraviesa hoy una de las crisis ambientales más graves de su historia reciente. Mientras el mundo conmemora el Día de la Madre Tierra, el gobierno costarricense impulsa reformas, toma decisiones y mantiene omisiones que profundizan un modelo de desarrollo basado en el extractivismo, el saqueo de la naturaleza y la impunidad ambiental.

Una de las amenazas más urgentes es la reforma normativa que permitiría legalizar la contaminación por plaguicidas en el agua destinada al consumo humano. El Ministerio de Salud pretende modificar el reglamento actual para que ya no se prohíba la presencia de agroquímicos en las fuentes abastecidas por el AyA y las Asadas. De firmarse este decreto, el agua contaminada seguiría distribuyéndose sin garantía sanitaria, violando los principios precautorio e in dubio pro aqua, así como el artículo 50 de la Constitución Política.

A esto se suma el incumplimiento sistemático de leyes ambientales, marítimas, de ordenamiento territorial y de protección de la Zona Marítimo-Terrestre. Los manglares, humedales y refugios de vida silvestre están siendo arrasados para abrir paso a proyectos inmobiliarios y turísticos que se desarrollan sin controles efectivos. En tierra, la tala ilegal y la expansión urbanística se imponen sobre los ecosistemas. En el mar, la sobrepesca, la pesca ilegal y la permisividad estatal provocan un ecocidio silencioso y constante.

La situación de los tiburones expone esta contradicción con crudeza: Costa Rica es el quinto país exportador de aletas de tiburón en el mundo. Lejos de proteger estas especies clave para el equilibrio marino, las políticas actuales promueven su exterminio bajo la fachada de la sostenibilidad.

La erosión de la imagen ambiental del país es evidente. A tan solo un mes de coorganizar la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Océano (junio 2025), el gobierno eliminó la financiación y el respaldo institucional al decreto que daba seguimiento al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Esta acción compromete la capacidad del país para articular esfuerzos nacionales e internacionales y pone en duda su legitimidad como líder ambiental global.

¿Cómo puede una nación hablar de liderazgo oceánico mientras incumple los compromisos ambientales en su propio territorio? ¿Cómo puede celebrar la vida silvestre cuando se permite que los ecosistemas colapsen y las especies desaparezcan?

Costa Rica alberga más de 8.500 especies de plantas, 220 especies de reptiles, 205 de mamíferos y 850 especies de aves. Sin embargo, más de 200 especies de fauna están amenazadas y 40 están en peligro de extinción, entre ellas la lapa roja, la lapa verde y el oso hormiguero gigante.

Hoy no hay nada que celebrar. Hoy alzamos la voz por los ecosistemas devastados, por el agua envenenada, por la biodiversidad arrinconada. Exigimos que el Estado costarricense cumpla con sus obligaciones constitucionales, que las leyes se respeten, que la conservación deje de ser un discurso vacío.

Hoy, en conmemoración del Día de la Tierra, rendimos homenaje a las personas valientes que, día tras día, defienden la naturaleza y sus territorios.  

La Universidad Bíblica Latinoamericana, la Embajada del Estado Plurinacional de Bolivia en Costa Rica, FECON, Bloqueverde, CoecoCeiba Amigos de la Tierra Costa Rica, y la Universidad de Costa Rica, a través del programa Kioscos Socioambientales, se unen para visibilizar a los defensores ambientales, activistas, organizaciones comunitarias y comunidades indígenas en resistencia.

Ecocidio en Costa Rica: La destrucción de los hábitats y la falta de protección oficial

En el marco del Día Internacional de la Vida Silvestre, es urgente alzar la voz sobre la devastación ambiental en Costa Rica. A pesar de su imagen de país verde y comprometido con la conservación, la realidad muestra un panorama alarmante de ecocidio y destrucción de hábitats esenciales para la biodiversidad. La deforestación, la expansión urbanística descontrolada, el monocultivo, la contaminación y la pesca industrial están acabando con ecosistemas fundamentales para la vida silvestre en tierra y mar.

El Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), responsable de la protección ambiental, ha fallado en su deber de resguardar estos espacios. En tierra, la tala ilegal y los proyectos inmobiliarios avanzan sin un control efectivo, destruyendo bosques y desplazando especies. En el mar, la sobrepesca, la pesca ilegal y la falta de regulación efectiva permiten que los ecosistemas marinos se degraden rápidamente, afectando especies clave para el equilibrio ecológico.

Entre estas especies, los tiburones destacan como vida silvestre amenazada. Sin embargo, en lugar de ser protegidos, Costa Rica es el quinto país que más exporta aletas de tiburón en el mundo. Esto es una contradicción inaceptable para una nación que se jacta de ser un líder ambiental. Proteger la vida silvestre significa reconocer que los océanos también son parte de nuestro patrimonio natural y que sin tiburones, los ecosistemas marinos colapsan. La conservación no puede ser solo un discurso: es hora de exigir acciones reales y contundentes.

El Día Mundial de la Vida Silvestre, celebrado cada 3 de marzo, fue proclamado en 2013 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Esta fecha conmemora el aniversario de la firma de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, en 1973.

Costa Rica es un país megadiverso, con una gran cantidad de especies animales y vegetales. Según datos del SINAC, el país alberga más de 8.500 especies de plantas, 220 especies de reptiles, 160 especies de anfibios, 205 especies de mamíferos y 850 especies de aves. Se estima que existen más de 360.000 especies de insectos, incluidos mariposas, abejones, hormigas y abejas.

No obstante, más de 200 especies de fauna se encuentran en peligro debido a la reducción de sus poblaciones, y 40 especies están registradas como en peligro de extinción. Entre estas se destacan la lapa roja, la lapa verde y el oso hormiguero gigante, cuyas poblaciones están seriamente amenazadas.

Es hora de que Costa Rica se comprometa de manera firme y efectiva con la protección de su rica biodiversidad y que su imagen como líder en conservación sea respaldada por acciones concretas y responsables.

Imagen ilustrativa: UCR.

Ecocidio en Manzanillo, Limón: Bosque transformado en lotes para la venta

El ciudadano de Limón Marco Levy Virgo ha presentado una denuncia formal por un presunto ecocidio que está ocurriendo en la Zona de Manzanillo de Limón.

En el documento, Marco Levy  señala que el 7 de abril de 2021 recibió una alarma ambiental que indicaba la venta de lotes pertenecientes a la señora Aurora Gámez, propietaria del hotel Almendros y Corales, en terrenos que anteriormente formaban parte del bosque costero de Playa Grande. La denuncia se ve sustentada gracias a una resolución de la Sala Constitucional que declara con lugar el recurso presentado, sin una condenatoria especial en costas, daños y perjuicios. La Magistrada Hernández López, junto con el Magistrado Salazar Alvarado, han salvado parcialmente el voto y han dispuesto la condenatoria en daños, perjuicios y costas. Por su parte, la Magistrada Garro Vargas ha salvado parcialmente el voto y ha ordenado la condenatoria en daños y perjuicios, pero no en costas. Las autoridades recurridas han sido notificadas para tomar nota de lo indicado en la sentencia.

En la denuncia se menciona que estos terrenos fueron parte del bosque costero y desde 1985 se consideran como tal, sin embargo, la administración no ha reconocido la importancia de su reintegración a la zona 1 del Refugio de Vida Silvestre Gandoca-Manzanillo. Además, se señala que hace unos veinte años, se construyó un Canopy Tour llamado Crazy Monkey Canopy Tour en estos terrenos, destacando la belleza del bosque tropical en su publicidad. Estos terrenos albergan una gran biodiversidad, incluso tienen especies en peligro de extinción, pero estos no están protegidos adecuadamente por las autoridades competentes.

Además, han habido cambios legislativos recientes, como la Ley 9223, que parecen permitir la segregación de terrenos en esta área, lo que contribuiría al detrimento de los bosques. 

Ante esta denuncia, se espera una respuesta pronta por parte de las autoridades competentes y una investigación exhaustiva sobre el presunto ecocidio en la Zona de Manzanillo de Limón.

 

Imagen ilustrativa.