Skip to main content

Etiqueta: inteligencia colectiva

Alcemos la voz por los animales silvestres que están en cautiverio, explotados e incumpliendo el bienestar animal y la ley de vida silvestre

Celebración ante el cierre del Zoológico Nacional Simón Bolívar

Este próximo sábado 11 de mayo, a partir de las 11:00 am y hasta 2:00 pm, habrá una concentración a la entrada del Zoológico Nacional Simón Bolívar, para celebrar su cierre definitivo. 

A partir de este día 11 de mayo concluye el contrato de Fundazoo-Minae y estos establecimientos pasan nuevamente a administración del Minae-Sinac.

Habrá actividades variadas como pantalla gigante durante todo el evento, mostrando la situación de los zoológicos del país, mascaradas, cimarrona, obra de teatro, bailes folclóricos, carnavalito y mucho más. 

Costa Rica celebra por ser uno de los pocos países del mundo sin zoológicos estatales. Por el respeto a todas las formas de vida, por el derecho a un ambiente sano y sin explotación animal.

Consultas adicionales: https://chat.whatsapp.com/DvacnypKOfII89ZFFhAmBL

Mayor información: https://facebook.com/events/s/celebramos-el-cierre-del-simon/837526131527928/

Entre coronavirus y cometas: el declive de la inteligencia

Marcos Chinchilla Montes

En “No miren arriba” (Don´t look up), protagonizada entre otras por Jennifer Lawrence, Leonardo DiCaprio y Meryl Streep, la humanidad se enfrenta al desafío de un enorme cometa que impactará contra el planeta Tierra, los denominados eventos de extinción.

Es una película que se distancia de otras producciones apocalípticas que pululan en el cine comercial hollywoodense, y viene a tender puentes con la actualidad política, económica y cultural que vive nuestra sociedad en torno a la pandemia generada por el SARS-Cov-2.

En primer lugar, la película permite destacar el abismo que se presenta entre tecnócratas, ciudadanía y ciencia, negando y hasta retrasando reconocer el riesgo que un cometa tiene para la existencia del planeta (situación de la que tenemos conocimiento con el impacto Chicxulub de hace poco más de 60 millones de años).

Sin bien en los medios de comunicación y en las redes sociales ha existido amplia información sobre el SARS-Cov-2, existe también un correlato desinformativo que lamentablemente ha generado y reforzado un negacionismo del más variado cuño: desde que el virus no existe, que las vacunas generan control vía chips, asociar vacunas y tecnología 5G, y el absurdo etc. que van ampliando a diario.

El posmodernismo no solo cuestiona abiertamente el conocimiento científico, sino que también ha instalado política y culturalmente prácticas donde se vale de todo, desde rezarle al virus para que desaparezca, enseñar en algunos centros educativos que la evolución no existe, o hasta esperar tres días para que un pastor fundamentalista resucitara de su muerte -cosa que nunca ocurrió.

El entramado político y económico que presenta la película si bien en algunos momentos parece un tanto caricaturesco, lo cierto es que refleja muy bien cómo piensan y actúan las élites políticas y económicas. No se le puede informar a las masas sobre el riesgo que implica el cometa por los efectos políticos que tiene para el gobierno de turno; y cuando se informa, se lo hace procurando obtener réditos políticos.
En materia económica, cuando finalmente se actúa contra el impacto del cometa, se lo hace en términos mercantiles: una élite empresarial que busca apropiarse de los caros y estratégicos minerales raros que se encuentran en el cometa.

El paralelismo que se establece con la situación de pandemia que vivimos en la actualidad es indiscutible: compañías farmacéuticas que hacen clavos de oro con las vacunas; transnacionales y empresas que se hicieron aún más ricas en estos dos años; empresarios, gobiernos, presidentes y ministerios de salud que antepusieron los intereses económicos en contraposición al derecho a la vida y la salud. El empresariado neoliberal de Lombardía es un buen reflejo de ello, el del alcalde de Texas que estaba dispuesto a morir por la economía, Piñera que se negaba a las restricciones, Bolsonaro con su gripecita, Duque que le pedía comprensión y solidaridad a los más pobres, Macrón que descubrió la importancia del Estado interventor, Trump recomendando ingerir cloro, un fugas ministro de Hacienda que también recomendaba solidaridad entre personas desempleadas o la solicitud reciente de las aerolíneas para rebajar la cantidad de días de incapacidad para las personas de sus tripulaciones que dieran positivo al contagio. Dos años después, la mayor parte de la población del planeta sigue sin un sistema de salario universal que le garantice poder enfrentar la pandemia con dignidad y calidad de vida.

“No miren arriba” también nos confronta con la simpleza, manipulación y chabacanería de los medios de comunicación y las redes sociales que tienen la virtud no solo de disociarnos de la realidad social, sino también de normalizar sus contradicciones y sembrarnos el individualismo en su máxima expresión. Se acerca un cometa, el riesgo de extinción está a la vuelta de seis meses, pero importa más la situación afectiva de dos estrellas de la farándula que se intercambian sus peluches, y que es seguida por millones de personas para quienes el cometa no existe pues solo se vive el hoy mediático.

Mejor no mirar hacia arriba, o hacia ningún lado, es mejor vivir en la más absoluta ignorancia y decadencia; el virus ya se acabó -aunque ómicron nos diga lo contrario, que la economía funcione a toda marcha, que las mascarillas se entierren para siempre.

Mejor no mirar hacia ningún lado, no usemos nuestra inteligencia; y para eso nos brindan el mejor soma, adosado con reality shows, influencers, fútbol, toros, redes sociales, socilités con el alma partida y la cuenta bancaria llena. A fin de cuentas, solo llevamos poco más de 5 millones de muertes, y muchas personas dirán con algo de algarabía, que dichosamente no están entre ellas.

Redess solicita diálogo con las nuevas autoridades de gobierno

Uno de los retos más importantes del nuevo gobierno a los que se enfrenta, es convocar a espacios de diálogo institucional entre el sector de la ESS y el sector público, y así demostrar un compromiso con los desafíos pendientes con la economía Social Solidaria / asociativa, la necesidad de participación, visibilización de un sector de la economía con carácter asociativo históricamente excluido, siendo esta situación una de las principales dificultades para superar una realidad en la que se sufre la injusticia y la vulneración de derechos.

Esta nueva administración y su propuesta de gobierno de unidad nacional con los partidos políticos, tiene también la responsabilidad con los movimientos sociales de generar los espacios que permitan cambiar las causas que han generado pobreza y exclusión.

En nuestro caso un dialogo que permita redefinir y establecer políticas públicas orientadas al fortalecimiento de las organizaciones de la ESS, como sujeto capaz de formular y desarrollar propuestas.

Asumir estos retos y darles respuesta desde la inteligencia colectiva y el trabajo colaborativo es la tarea principal que tiene el movimiento de la ESS si quiere aprovechar las oportunidades que ofrece la coyuntura actual para impulsar el crecimiento de las organizaciones de la economía solidaria. Con ello podemos contribuir significativamente a la construcción de una economía más justa y solidaria que ponga en su centro la sostenibilidad de una vida digna y feliz para todas las personas.

La esperanza de otra economía posible.

 

Carlos Hernández Porras Equipo Dinamizador

Red de Economía Social Solidaria

Sitio web: www.redesscr.org │Correo electrónico: ess.redcr@gmail.com │Cel: 8950-9945

 

*Imagen con fines ilustrativos.

Enviado por Carlos Alberto Hernández Porras.