Es inaceptable que la ministra de Educación se niegue a dar cuentas de su gestión

La Ministra de Educación Pública al negarse a comparecer a la convocatoria que le dirigió la señora Defensora de los Habitantes para revisar problemas de pagos de salario a las personas funcionarias del MEP, confirma abiertamente el deplorable estado de la gestión administrativa de la educación pública costarricense y su falta de respeto a la institucionalidad y a las autoridades de control público.

En primer lugar resulta inaudito que una Ministra de Estado se niegue a dar cuentas de su gestión a la Defensoría de los Habitantes. No solo porque es un deber legal, sino porque las mínimas normas de cortesía, educación y respeto lo obligaban a asistir.

Aquí no cabe alegar inmunidad, simplemente doña Katharina Müller Castro, en uno de esos berrinches que la caracterizan, se negó a rendir cuentas como corresponde a todo funcionario o funcionaria pública de su nivel, y de paso desairó a la Defensora, con un desplante impropio de quien dirige la educación del país.

En el fondo lo que queda claro es el vacío político y de poder que está afectando al Ministerio de Educación Pública, dirigido por una Ministra que se esconde, que no da la cara y que se escuda en inmunidades inexistentes para zafar el bulto, exponiendo con ello a los funcionarios técnicos de la Dirección de Gestión de Talento Humano, sobre quienes recayó hoy – en ausencia de la Ministra – la obligación de rendir cuentas sobre el problema salarial del MEP.

El asunto no es tema menor si tomamos en cuenta que el MEP tiene pendientes de atender más de 60 mil reclamos por falta de pago de diferentes componentes salariales, correspondiendo a 37 mil personas trabajadoras de la educación pública, que con el tiempo han venido acumulando incumplimientos de pago, especialmente de carrera profesional y ahora, con la entrada en vigencia del Salario Global, también se están acumulando los reclamos por falta de pago de recargos, aumentos de jornada y de lecciones, y otros componentes salariales, que la ley impide pagar a las personas que ya están en modelo de salario único.

El problema sin embargo no es del personal de la Dirección de Talento Humano, que hoy fueron injustificadamente expuestos por la Ministra; en primer lugar las autoridades – la Ministra en particular – no están defendiendo el presupuesto necesario para pagar esas obligaciones retroactivas; en segundo lugar esa dirección carece de herramientas tecnológicas que le permitan agilizar los procesos y deben levantar la información manualmente, con el agravante de que no hay interfases de conexión con el sistema de planillas Integra 2 que es quien debe realizar los pagos. En tercer lugar, la falta de recurso humano: el MEP es la planilla más grande del país con 88 mil funcionarios o más, compuesta por funcionarios administrativos (del título primero del Estatuto del Servicio Civil) y docentes del título II del Estatuto, lo que la convierte en una planilla sumamente compleja, gobernada por normas técnicas diferentes. Además el MEP tiene 161 clases de puestos y 218 especialidades, integrados en cerca de 8500 servicios educativos. El personal de la Dirección de Gestión del Talento Humano es muy poco, no se han autorizado nuevos nombramientos y en su conjunto deben realizar más de 20 mil movimientos quincenales, entre incapacidades, licencias, aumentos de lecciones, nombramientos y ceses, lo que hace que se trate de un personal que labora en condiciones de ambiente laboral extremas y ya muy afectados por el estrés laboral y las sobre cargas de trabajo.

Haciendo la salvedad de que la responsabilidad de todo lo que está ocurriendo no es de las personas trabajadoras que gestionan la planilla, sino de la Ministra y de sus viceministros, el SEC manifiesta total apoyo a la intervención que realizó la Defensoría de los Habitantes en el MEP en el día de hoy; intervención provocada por la ausencia de la Ministra y absolutamente necesaria para defender los derechos humanos de los y las trabajadoras del MEP, que están burocratizados en más de 60 mil expedientes, con total irrespeto a su dignidad humana y garantías sociales, como el derecho al pago completo de su salario.

Esperemos que la llegada de la Defensora al MEP, obligue finalmente a la Ministra Müller a dar la cara y no esconderse más. Por eso apoyamos la intervención y nos solidarizamos también con todo el personal de planillas que no cuenta con los medios para sacar la tarea.

SEC junto al pueblo