La mirada de un hombre sobre su pasado: lo que su texto nos dice

Rogelio Cedeño Castro,

Sociólogo y escritor

Puedo ver, o al menos intento hacerlo, a aquel hombre probablemente canoso o con muy pocos cabellos quien, muchos años después de unos hechos dramáticos de su vida, se sienta ante una vieja máquina de escribir, una de aquellas que yo también usé en mi juventud, para poner en orden sus recuerdos y transcribirlos en un texto. En su cabeza bullen, de manera vertiginosa pero serena, las ahora lejanas imágenes de un conflicto armado, y de una vida que intentó construir detrás de la gigantesca cordillera, en un extenso valle que se había venido poblando, desde hacía apenas unos setenta años atrás, junto con su familia recién fundada, al lado de una joven esposa y unos hijos que fueron aumentando en número, pero también crecieron en tamaño hasta convertirse en unos niños, quienes eran el centro de su vida, de sus proyectos y esperanzas más hondas.

Franklin Chacón Estrada había venido con su familia desde los valles centrales del país, empeñado en forjar un destino para los suyos en el negocio de los cueros, la talabartería y la zapatería, el que había hecho prosperar en poco tiempo. No sólo había hecho crecer su negocio, rodeado de su familia, sino que un numeroso grupo de artesanos trabajaba junto con él, habiendo construido en el centro de aquella pequeña ciudad del sur, llamada San Isidro de El General, una casa de habitación no sólo para albergar a sus familiares, sino también a su actividad empresarial en la industria del cuero, apenas unos siete años se habían requerido para ello.

El hombre trajo consigo también su utopía y su racionalidad valórica, al mismo tiempo que la de carácter instrumental, las que le permitieron dar impulso al partido político en el que militaba, dándole una estructura consistente y extendida territorialmente por esa región, en la que también había impulsado la entrega de tierras para muchos campesinos. Su mente organizada y su militancia disciplinada le iban a permitir hacerle frente, de manera decidida y sistemática, al conflicto armado que ya se gestaba en el país, un hecho del que los dirigentes de su partido lo habían noticiado, al menos así pensó en su interior: se preparó y dispuso a sus camaradas para el combate que vendría.

Encontrado ante lo inevitable del absurdo, dentro de un bando político que se empeñaba en perder una guerra, desde mucho antes de que sonaran los primeros disparos, trató de hacer uso de toda su racionalidad instrumental, organizando y preparando a los militantes de su partido para lo que ya se anunciaba, habiendo agotado hasta el último momento sus argumentaciones para convencer a sus aliados del gobierno, viendo que los medios de que se disponía eran exiguos o nulos y al no ser escuchado, con prudencia y en orden, se retiró de la escena protegiendo a los suyos en su casa, el sitio donde harían blanco los primeros disparos de aquella guerra que estaba dando inicio, precisamente en ese ámbito del tiempo y la geografía.

Luego, prisionero de sus adversarios sublevados, durante casi siete semanas, preocupado por su familia que debió ocultarse en los montes y en casa de amigos, va a presenciar una de las batallas más importantes de aquella guerra, sin poder intervenir en los combates, para ser trasladado en medio de toda clase de vicisitudes hacia el centro del país, donde será liberado al concluir los hechos bélicos. El azar y las circunstancias de la presencia de la masonería, entre gentes de los dos bandos, le salvarán la vida, al evitarse así su fusilamiento y el de algunos de sus compañeros. Sin ira y con serenidad es que se sienta a recordar este hombre que jamás regresó al lugar donde ocurrieron esos hechos, alguien que puedo ver a través de las líneas de su texto, el que ahora aparece publicado bajo el título de “PRESO PELIGROSO”, por parte de la Editorial Inteligencia Colectiva, San José Costa Rica 2019. Nos encontramos ante el testimonio conmovedor de un hombre verdadero, fiel a sus convicciones, a quien le correspondió enfrentarse muy joven, con uno de los momentos más conflictivos de la historia del país y de la región centroamericana y del Caribe. Los invito a internarse en sus páginas y en sus recuerdos.

 

Enviado por el autor.

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