Libro “Los Demonios de la conciencia”
Por Maynor Sánchez
Los demonios y las sombras están atacando los personajes de este pueblo.
El libro “Los demonios de la conciencia” contiene siete cuentos del género “cuentos de realismo” es un libro que al igual que “La Universitaria que no quería vivir” (mi primer libro) ha sido necesario vivirlo para poder escribirlo, en realidad; me suceden los libros.
Con la presentación escrita por la gran Filóloga Ahiza Vega Montero (viuda del escritor José León Sánchez) y dedicado a la memoria de: mi padre Alexis Sánchez Alvarado, mi madre Teresa Alvarado Morales y al gran escritor José León Sánchez; tres baluartes en mi vida.
La introducción contiene una metáfora muy interesante sobre unos “gusanos que se alimentan de las partes podridas de la manzana” los cuales además han desarrollado la habilidad de emitir un mensaje: que no nos fijemos en las partes podridas de la manzana, que valoremos en cambió las escasas partes buenas que quedan y demos gracias por ellas; mientras tanto ellos continúan comiendo por debajo de la cáscara.
Sus relatos tratan el tema de la esclavitud dentro de la empresa privada, con un personaje muy curioso llamado: La Conciencia, la cual es la miscelánea del lugar, que no para de hablar y hablar pero habla muy quedito y muchos no le entienden lo que dice.
El drama se hace presente mediante un personaje que decide tomar por asalto una sucursal de Banco con tal de poder salvar la vida de su madre en fase terminal.
La Nomofobia (adición al celular) se presenta como un demonio que destruye por completo la vida de una niña del campo a cambio de poseer cinco mil amigos.
Por otro lado el humor se hace presente mediante el histórico robo de un chancho que termina reuniendo en una sola casa a ladrones, policías y protestantes.
También la Municipalidad es personaje especial en este libro; cerrando calles públicas y abriendo calles privadas así como favoreciendo a sus amigotes, donde la historia es relatada por la calle más antigua del cantón.
El flagelo de la droga es relatado por un drogadicto que está sentado en la gamba de un árbol en la montaña de la demencia, donde el escenario de la adición en la zona rural, narra detalles casi imposibles de imaginar.
Y por último una niña con un poder especial logra ver cómo su padre desperdicia su vida mientras cree ser muy exitoso, la filosofía encerrada en este último cuento, la resume esta niña en una sola frase: “Hemos venido a este mundo por un diamante y nos quedamos a la orilla del camino jugando con una bola de barro”.
Este es mi segundo libro que he creado para tratar de sobrellevar la carga que me entrega un mundo que está siendo abatido por una gran inversión de valores.