Geoeconomía y geopolítica: algunos aspectos en el 2023 y en el 2024
Edgar Chacón Morales
Enero, 2024
Estados Unidos es un país en el que las corporaciones, las grandes empresas, tienen un enorme poder; así como todo lo que representa la Reserva Federal, la FED (banco central, las grandes empresas bancarias: el poder financiero); las decisiones que toma el gobierno tienen gran base en los intereses de estos entes; al igual que en países como el Reino Unido, Francia, Alemania. Es el poder del capital financiero internacional, tomando decisiones para el mundo, o para una parte del mundo; lo que algunos llaman la oligarquía financiera internacional, en el que tiene enorme peso el capital no productivo de bienes de consumo, con gran participación del capital especulativo.
Estos son entes emisores de decisiones, representados en lo formal como países, como Estados: en el plano económico, en el G7; en el plano militar, en la OTAN. Por eso hablo de USA/G7/OTAN, porque participan los países involucrados, bajo la indiscutible directriz de Estados Unidos; organizando y dirigiendo al “occidente” decreciente.
En ambas instancias, Estados Unidos también ha logrado someter, o poner bajo sus directrices a otros gobiernos europeos, como Finlandia y Suecia, por ejemplo, que no son parte del G7, y otrora países con relativa mayor independencia de criterio en su actuar internacional.
El mundo “partido” en dos
Cada vez, queda más clara la visión (maniquea, “suma cero”) y posición de Estados Unidos sobre el mundo dividido en dos, liderando a Europa y otros países plegados; liderando al “mundo libre” y “democrático”.
Para liderar este enfrentamiento, es condición sine qua non, anular a las élites de países europeos, o reducirlas a la condición de seguidoras incondicionales, así como a gobiernos; y llevando a cabo su desindustrialización, desgasificación, desenergetización.
Por el otro lado, USA/G7/OTAN trata de vender al mundo la idea de que debe librar una lucha contra “el eje del mal”, antidemocrático y anti-libertad (viejos caballos de batalla), detenerlo en su avance en la conquista de “occidente”. Este eje, según ellos liderado por La Federación Rusa y la República Popular China. Estos dos países, al frente de los países BRICS, organizando el sur emergente.
Una de las ideas que componen esta propaganda, es que la Federación Rusa, después de Ucrania, no parará hasta Lisboa y de ahí saltar a Estados Unidos, lo que abona al estado de angustia y desorganización de las poblaciones, dispuestas a sumarse a cualquier despropósito.
Todo esto, ante lo que parece ser: que el intento de USA/G7/OTAN, siguiendo lo planteado en el informe de la Corporación Rand (“Extending Russia”), de debilitar a la Federación Rusa, está llegando a su fin, con dos cuestiones que pueden dibujarse: ¿la propaganda de USA/G7/OTAN dirá que se detuvo a “los rusos” en su intento de dominar “occidente”? siendo más bien que lo que se asoma es otra cuestión: ¿debiera decirse que, la Federación Rusa no es que derrotó a Ucrania: le puso freno, jáquima y gamarrón a la OTAN y a más de una treintena de países involucrados?
Cerrando Ucrania. El Asia Índica y …
Voy a llamarle Asia Índica, a partes de lo que, con tendencia eurocentrista, se le llama “medio oriente” o, indistintamente “oriente medio”.
Cerrando Ucrania, en el plano militar, la OTAN fue frenada (en algún momento del inicio de las hostilidades, se estaba planteando la negociación luego del 22 de febrero de2022, pero Boris Jonson fue a decir que no, las hostilidades deberían continuar).
En el plano económico, las sanciones contra la Federación Rusa no funcionaron, más bien parecen haberse vuelto en contra, principalmente de Europa (lo que favorece a USA).
En el plano jurídico, institucional, de “las reglas”, los organismos y las instancias “internacionales”, no funcionaron; los cipayos, los vasallos, los delincuentes de cuello blanco, tipo Von der Leyen, con sus bufonadas, siguen haciendo más de ei ridículo.
En el plano ideológico mediático, la propaganda disfrazada de información no ha tenido los efectos deseados: cada vez hay más conciencia en el mundo de los propósitos y políticas (saqueo, dominación y despojo) de USA/G7/OTAN.
En el plano geoestratégico, en el Asia Índica, hay varios puntos, gargantas o estrechos, que en este momento revisten una delicadísima tensión y que ya no están, en gran medida, en manos de “occidente”.
En un mapa podemos visualizar el arco que empieza en el Golfo Pérsico, pasa por el estrecho de Ormuz, sale al Golfo de Omán y al Mar Arábigo, pasa por el Golfo de Adén, el Estrecho de Bab el Mandeb, el Mar rojo y llega al Canal de Suez.
Se puede extender la visualización hacia el oeste, hasta el Estrecho de Gibraltar; hacia el noreste a los estrechos de Los Dardanelos y El Bósforo, pasando por el mar de Mármara, hasta el Mar Negro y el Mar de Azov; y, hacia el este, hasta el Estrecho de Malaca; pasos políticos, comerciales y de otros propósitos, de diversas mercancías y energéticos (petróleo, gas).
Ante los crímenes de lesa humanidad que viene cometiendo USA/G7/OTAN/Israel, en Gaza, los Hutíes de Yemen han iniciado acciones armadas en contra de buques de transporte de bienes vinculados con Israel: bandera, destino, mercancía, propiedad.
Debido a esta situación, hay barcos de compañías (Hapag-Lloyd, Maersk, entre otras) que están evitando ese paso y otras, están dando la vuelta por el sur de África, el Cabo de Buena Esperanza; este costo, encarece de manera sensible el precio las mercancías transportadas, en su consumo final.
En este estado de cosas, Estados unidos ha hecho intentos de constituir una coalición de 10 países (“Operación Guardián de la Prosperidad”, ante la cual España, Italia y Francia se han demarcado), asunto que no ha “cuajado”.
Además, Estados Unidos por un lado envía emisarios (Antony Blinken, Lloyd Austin) para “disminuir” la intensidad del conflicto y las agresiones y muertes contra civiles; y por otro lado veta el alto al fuego en Gaza, en la ONU.
En otro orden de ideas, la importancia del Estrecho de Ormuz es el tránsito de petróleo y gas (principalmente) y la conexión con el Océano Índico; la importancia del Estrecho de Bab el Mandeb es el tránsito: Océano Índico-Mar Rojo-Mediterráneo y viceversa (petróleo, gas y otra variedad inmensa de mercancías).
Es importante la visualización hacia el oeste (Gibraltar), el noreste (Dardanelos y Bósforo) y el este (Malaca), en vista del aumento de tensiones y acciones ante una eventual escalada y extensión de hostilidades.
En sus planes, Estados Unidos no descarta la posibilidad de abrir negociaciones con India en primer lugar y por qué no, también con la República Popular China.
En distintos frentes, mientras que USA/G7/OTAN, en lo económico/comercial muestra intenciones de sabotear la Ruta de la Seda (¿Cómo el Nord Stream?) y otras rutas comerciales, que son iniciativas del este; en una acción/provocación política, Inglaterra trata de enviar buques dragaminas al Mar Negro. Es evidente también interrumpir la recomposición del Pacífico asiático, siendo que asuntos como el Tratado Cuadrilateral y la participación de India con USAG/7/OTAN, no está muy segura.
Un elemento que no puede dejar de considerarse es que en el llamado “oriente medio”, y más, muchos de esos países Irán, India, Irak, por ejemplo, han sido abusados, dominados, invadidos, saqueados, despojados, en su momento, con la complicidad de monarquías y dictaduras.
En lo que respecta a Taiwán, con elecciones a la puerta, este es otro punto que comporta tensiones en el devenir próximo.
Por su parte, América Latina también presenta un punto delicado por la situación entre Venezuela y Guyana en cuanto a los hechos en el Esequibo, escenario en el cual, el buque de guerra que había enviado Inglaterra, en otra acción provocativa, al parecer se retiró y se encuentra la presencia de un submarino ruso.
Para finalizar
Es lamentable observar que, cada vez son más fuertes las muestras de que USA/G7/OTAN, está optando por la guerra.
A mi juicio, el asunto de los dos Estados no es viable en la región Palestina, debido a que los planes de USAG7/OTAN/Israel, no están en el camino de la paz, sino en el de la desestabilización de la región, la guerra y apoderarse de territorios.
Según el analista Ariel Umpierrez, la bandera de Israel, contiene dos líneas azules con la estrella en medio; esas dos líneas son dos ríos: el Nilo en el oeste, y la región y unión, que marcan el Tigris y el Éufrates, en el este: el territorio del gran Israel.
En el mundo hay sectas evangélicas que respaldan al sionismo, pues según ambos, la región Palestina debe estar “limpia”, para la segunda venida del mesías.
La Federación Rusa estará presidiendo los BRICS plus en el 2024, lo cual parece que reforzará el impulso de esta opción política económica mundial.
Las demagogias occidentales, para no decir las democracias occidentales, el sistema demagógico “occidental”, cada vez más, aumenta su descrédito. Son demagogias, porque todo cambia en el aparataje de la superestructura formal, para que nada cambie en la estructura socioeconómica.
En el África, en el Sahel, se consolidan los movimientos con base anticolonialista de US/G7/OTAN.
El G7, cada vez más parece la B7, la banda de los 7 países saqueadores del mundo, a lo cual se le está poniendo un hasta aquí.
Cada vez más desaparece el protagonismo político de Europa, bajo la égida de Estados Unidos, a lo cual, sólo los respectivos pueblos pueden ponerle coto.
En cuanto a América Latina, el futuro inmediato, cada vez más debe perfilar una consigna: abajo la Doctrina Monroe y sus matices.
En fin, en el mundo, para USA/G7/OTAN, cada vez debe sonar con más fuerza, parte de la letra de una composición musical que dice: “…Llegó el comandante y mando a parar”.