La noticia la recibimos de golpe, el Magistrado Román Solís Zelaya, falleció. Es de las noticias que no esperamos recibir, pues es de las personas que viven todos los días con nosotros.
Nos conocimos en nuestra juventud, en Guadalupe, allá por el Cine Reina, de voz sonora y categórica, de ideas de vanguardia, estudioso, serio pero jovial, participábamos en un grupo de análisis de los problemas nacionales.
Nos reencontramos en Guápiles, en el 2011, ya Magistrado de la República, había llevado adelante una experiencia de participación ciudadana en San Carlos, donde se buscaba que el Poder Judicial estuviera más cerca de la ciudadanía y (nunca se lo pregunté, pero lo deduzco) enterado a través del Magistrado Rivas de la experiencia que desarrollábamos en Pococí desde el 2010, articulando el Movimiento de Ciudadanía que Construye Territorios Seguros, nos visitó para conocer de nuestra experiencia, para iniciar un proceso disruptivo en nuestro país, con el cual se comprometió desde el primer día.
La Comisión Nacional Administración para el Mejoramiento de la Justicia (CONAMAJ), era de su cosecha, un esfuerzo para que la ciudadanía comprendiera que la justicia era deber de todos y que la institucionalidad que la tenía bajo su égida, no era un pedestal inalcanzable, que debía estar a la altura del pueblo.
Con él y sus directrices en el seno del Poder Judicial, construimos los procesos metodológicos de rendición de cuentas, que se hicieron ejemplares a nivel nacional, donde la ciudadanía, amparada en el Artículo 11 Constitucional, aprendía a llamar a cuentas a sus funcionarios, sin distingo de jerarquía. Avanzamos en la elaboración de la Política de Transparencia de la Justicia, con él instalamos por primera vez en el Consejo de Administración del II Circuito de Pococí, una persona ciudadana para que representara a El Soberano; impulsamos su añoranza de promover los Facilitadores Judiciales y nuestro Movimiento se volcó a constituirlos en el cantón de Pococí y Sarapiquí y podemos seguir.
Su respaldo público a nuestro esfuerzo, nos ha obligado a superarnos todos los días.
Le apasionaba nuestra elaboración de El Soberano, sustentada en el Artículo 9 de la Carta Magna y se ocupó de abrir espacios y vencer el miedo de los jerarcas de incorporarse a las Actividades de Gala de Rendición de Cuentas realizadas en Pococí y Sarapiquí y después a nivel nacional, donde su presencia era siempre esperada y admirada.
Consejero afable y a la mano, vigilante de nuestras actuaciones para que creciéramos sin desenfocarnos. Crítico de la gestión judicial y de la actuación institucional, directo y contundente en sus apreciaciones.
Compañero Magistrado Román Solís Zelaya, el Movimiento de Ciudadanía que Construye Territorios Seguros, le rinde tributo, conscientes de que el mayor respeto a su amistad y compromiso con nosotros, es cumplir con sus vehementes palabras expresadas en nuestros eventos, demostrar ser cada día mejores, más eficientes en la profundización de lo que establece nuestra Constitución Política en su Art. 9, para que la persona ciudadana se asuma y se construya como El Soberano, cumpliendo cabalmente la tarea de cogobernar esta república, desde el poder que nos asiste constitucionalmente, República que debe ser responsable y Participativa, alfabetizándonos constantemente, rescatando la institucionalidad y transparentando su gestión.
Román Solís Zelaya, magistrado de la Sala Primera, pero especialmente, el impulsor de la participación ciudadana falleció dejando una herencia conceptual en el Poder Judicial: Conamaj.
En una ocasión durante una actividad relacionada con esa propuesta política orientada a incentivar la participación ciudadana consciente Tito, -como le decíamos los amigos desde la UCR de los años 70 y la FEUCR de 74/75-, me dijo: “Hay personas dentro del Poder Judicial que piensan que la reforma al Artículo 9 de la Constitución Política que introdujo el concepto de gobierno participativo no es realizable”.
Pero a pesar de ese dato, Tito, Román Solís Zelaya dedicó su vida de magistrado a impulsar la Comisión Nacional para el Mejoramiento de la Administración de Justicia (CONAMAJ).
Con el desarrollo de los Círculos de Paz, del concepto de Justicia Abierta, de la formación de Personas Facilitadoras Judiciales, y el trabajo con Población Migrante y Refugiada como nombres de los cuatro programas básicos de CONAMAJ (https://www.conamaj.go.cr/), Román dedicó su tiempo, esfuerzo, inteligencia y compromiso social a imaginar y construir una sociedad mejor.
Nos quedó una conversación pendiente, pero tu ejemplo y convicción serán suficientes. Un abrazo por siempre Tito (Román).
Grupo Iriria Buen Vivir CR – enero 2022 – Filosofía y Práctica
El Buen Vivir o vivir bien es una filosofía y práctica de amor y defensa de la Madre Tierra y de la vida misma. Es vivir en igualdad de derechos, tanto de los humanos, como de todos los seres (montañas, ríos, plantas, animales, etc.). Es vivir en justicia (fundamento de la paz).
En Costa Rica hacemos diferencia entre “el Buen Vivir” y “el vivir bien”, en una mansión podríamos vivir bien pero sin practicar el “Buen Vivir”.
El Buen Vivir en Costa Rica, son logros, experiencias y prácticas que al día de hoy se han dado. Es la suma de acciones diarias que se llevan a cabo por personas en las comunidades, que desean poner en práctica esta filosofía de vida. No obstante, el Buen Vivir, no es únicamente la acción consciente bajo el nombre de Buen Vivir, es la acción que desconoce pero que sigue los pasos del pensamiento, de modo que, en muchas comunidades se practica el Buen Vivir desconociendo la filosofía que hoy lo ha aglomerado.
Antecedentes
A los pueblos indígenas les ha tocado enfrentar la cultura de la muerte.
En 1992, se da un ascenso de los pueblos indígenas como sujeto histórico, los pueblos deciden tomar las riendas de su propio camino, como en Bolivia “Suma Qamaña, Vivir Bien” y en el Ecuador “Sumak Kawsay, Buen Vivir”. Igual sucede en pueblos mayas, mapuches, guaraníes, amazónicos, serranos de Colombia, etc.
Se erige una propuesta en permanente construcción según cada pueblo, desde sus cosmovisiones y con los aportes de todas las culturas, incluida la cultura occidental. Tiene un punto de vista biocéntrico. Se trata de construir una propuesta que salve a la Madre Tierra de un sistema que la reduce a proveedora de insumos y al ser humano lo reduce a fuerza de trabajo. Romper la inocencia política con la cual a veces nos manifestamos.
Trabajo en comunidad
El Buen Vivir plantea el hecho de la necesidad de vincularnos con nuestras comunidades, debido a que el sistema capitalista ha gestionado muy bien el trabajo de desvincularnos con nuestras comunidades, y esto, se ha convertido en una seria problemática social, donde nos hemos sometido ante una cultura individualista, egoísta y antropocéntrica (el ser humano antes que la Madre Tierra) Debido a esto el Buen Vivir se propone , en primera instancia, lograr el trabajo comunitario, donde se aporta espiritual y socialmente en cada uno de nosotros mismos con respeto a la opinión y creencias de los demás.
Acciones del Buen Vivir
Luchas y Acciones Comunitarias promovidas o apoyadas por Buen Vivir CR:
A favor de: semillas criollas, agua como derecho humano y de la MadreTierra, Loma Salitral, santuarios MadreTierra en 50 sitios, 11 festivales de poesía y dos de apachetas, comunidades jardín (3), turismo vivencial comunitario, 52 videos Buen Vivir Costa Rica, composición de varios cantos, defensa y protección de ríos, aprovechamiento de espacios públicos, pintura de murales, economía solidaria, Escuela Buen Vivir, etc.
En contra de: minería Crucitas, explotación gas y petróleo, nuevos proyectos hidroeléctricos, transgénicos (Monsanto y otros), monocultivos (piña, etc), pesca de arrastre, paquetes fiscales.
Vivir en Comunidad
Vivir en comunidad, planificar en comunidad, trabajar en comunidad, hablar de desarrollo pensando en todos, pensando en la comunidad. La garantía del Buen Vivir es la organización, en comunidad. El buen Vivir significa servir, el servicio nos da calidad de vida, nos reconforta, nos hace felices. Por eso el servir es una actividad básica en el buen vivir. El servir es parte de la espiritualidad del buen vivir. La comunidad incluso debería valorar el servicio de las personas que están en función de toda la comunidad. Entendiendo que toda la gente de la comunidad debe tener momentos de servir.
Actuar como Movimiento Social
¿Cuál democracia existe? ¿La democracia de los pocos que dominan a los muchos? Costa Rica tiene que avanzar, ¿Qué somos? ¿Chicha, limonada? Soñamos con el momento en que existan organizaciones sociales y políticas que se acerquen. Un movimiento social, cultural, ambiental y político que pueda proponer candidatos a diputados y otros puestos públicos. Tenemos que confrontar el sistema. Si deseamos defender el Buen Vivir, tenemos que defenderlo de quien le agrede, y le agrede un sistema capitalista donde la Madre Tierra y el ser humano están al servicio de unos pocos explotadores.
Buen Vivir tiene que activarse. No obstante, esa lucha por la defensa de la vida, confronta “el pacifismo”. Es necesario salir a la calle a protestar. Es muy conveniente para la dominación en este país mantenernos aislados. Por lo que hoy debemos de unirnos por una causa llamada: el Buen Vivir.
¿Cómo organizarnos como Movimiento Social?
Construcción del Buen Vivir desde nuestras comunidades, desde nuestros espacios, continuar creciendo hasta que tengamos la capacidad de sumarnos a movilizaciones locales, regionales o nacionales.
Hablar y exponer sobre temas importantes, como la crisis climática, la producción alimentaria, el uso y comercialización del agua, la educación, etc.
Llevar a cabo reuniones y cabildos ciudadanos donde podemos tomar decisiones y acuerdos que deban ser tomados en cuenta, fundamentándonos en el poder que nos ha delegado el artículo 9 de nuestra Constitución Política: “Artículo 9- El Gobierno de la República es popular, representativo, participativo, alternativo y responsable. Lo ejercen el pueblo y tres Poderes distintos e independientes entre sí. El Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial. Ninguno de los Poderes puede delegar el ejercicio de funciones que le son propias.”
Se debe de llevar a cabo la construcción de procesos de organización social dentro de las comunidades, desde nuestras organizaciones, y articular con otros sectores comunitarios y populares.
Carlos Manuel Muñoz Jiménez (Naranjo) Edgar Mora Guerrero (Desamparados) Edison Valverde Araya (Pasoancho) Giovanni Beluche Velásquez (La Unión) María Rebeca Álvarez Ramírez (Naranjo) Ronulfo Morera Vargas (Mora) Wilmar Matarrita Matarrita (Nicoya)
Este texto propone una reflexión acerca de la función de las formas de sensibilidad comunitaria como elementos de cohesión, identidad democrática, y cultura de ciudadanía. Se parte del hecho de que una persona ciudadana en términos subjetivos es determinada por su cosmovisión y su materialidad, y puede participar en la agencia de la historicidad de su comunidad mediante la interiorización de paradigmas ético-políticos.
Este artículo es parte del libro La acción social generadora de diálogo con las comunidades del Pacífico Central, el cual es una producción de la Editorial, Universidad de Costa Rica Sede Regional del Pacífico.
En la introducción a mi texto propongo lo siguiente:
La construcción de la democracia participativa implica el desarrollo de una cultura de ciudadanía, esto es, de una disposición de la población hacia el compromiso cívico que entiende ciudadanía no como los hechos simples de habitar un país o portar cédula de identidad, sino como el acto de comprometerse en la mejor realización de la democracia. En la actualidad los valores democráticos de participación son poco apreciados, e incluso existen mecanismos o supra-relaciones (Ferlini Salazar, 2017) que los limitan, lo cual, demanda la construcción y ejecución de una estrategia para construirla contrarrestando esos mecanismos. Así lo postula el proyecto ED-3250 Aportes Comunitarios para la Construcción de la Democracia Participativa de la Sede del Pacífico de la Universidad de Costa Rica. En ese proyecto y en este texto se propone que el espacio para el desarrollo de esa estrategia es el comunitario. Adelante se amplían estos conceptos.
Pero ¿cómo lograr el propósito de construir una identidad ciudadana? Para explicarlo, es necesario contar con algunas definiciones básicas y para ello haremos una distinción conceptual, desde este documento, para los siguientes términos: ciudadanía, construcción de ciudadanía, democracia participativa, gobierno participativo.
Como se mencionó párrafos arriba, a) ciudadanía implica el compromiso con la mejora en la calidad de la democracia; b) construcción de ciudadanía se utiliza en este escrito para referirse al proceso social mediante el cual distintas comunidades ejercitan la vida democrática de toma de decisiones gracias a la calidad de la democracia interna en sus agrupaciones comunitarias; c) democracia participativa no es un momento culminante o punto de llegada sino un proceso de acumulación orientado el logro de un sistema político sustentado en la participación, y según el cual, se supera la democracia representativa (o delegativa) para dar paso a la incorporación efectiva de la ciudadanía en cuatro dimensiones: la formulación de la política pública, su ejecución, el control, y la reformulación de política pública; d) y gobierno participativo se entiende en este documento como el involucramiento de la ciudadanía en las distintas expresiones administrativas del Estado. Será tema de otro texto ampliar la forma de hacer efectiva esa participación ciudadana en cada uno de los tres poderes.
Le invito a descargar el documento, si le parece bien comentarlo, y de ser posible, compartirlo en su comunidad o con personas cercanas.
Palabras de Vínyela Devandas Brenes durante la ceremonia celebrada en la Catedral Metropolitana el sábado 26 de diciembre de 2020.
Unas palabras para celebrar la vida de nuestro hermano Mario DevandasBrenes
Vínyela Devandas Brenes
Hoy nos reunimos en este hermoso templo para celebrar la vida fecunda de Mario Devandas Brenes, líder ejemplar de nuestra Patria, quien con gran inteligencia, ímpetu y valentía ha contribuido significativamente a que Costa Rica sea un mejor lugar para vivir.
Defensor y luchador acérrimo de la Seguridad Social de nuestro país, nunca se cansó de decir a todos los que lo escuchaban, que primero se debía conocer bien la problemática social para luego luchar unidos y conscientemente por la construcción de una Costa Rica más justa, más humana y más digna.
Mario Devandas Brenes defendió con ahínco la transparencia y la eficiencia de la función pública. Combatió furiosamente la corrupción, impulsó importantes proyectos de bien social. Fue un excelente negociador sin claudicar en sus principios y luchó con firmeza e ideas muy claras por nuestra amada Caja Costarricense del Seguro Social. Tenía el poder de su palabra, de su carácter, de su convicción moral para enfrentar cualquier obstáculo y caminar hacia la luz.
Entre los proyectos que él apoyó están la construcción del moderno EBAIS de Tirrases de Curridabat, el fortalecimiento de las Juntas de Salud con las cuales siempre se mantuvo en contacto y se reunió en sus lugares de funcionamiento por lejanos que fueran. También apoyó con entusiasmo la reforma al nuevo Reglamento de las Juntas de Salud. Propugnaba un modelo de salud más eficiente con mayor aplicación de la tecnología, por eso, estuvo de acuerdo con el plan piloto de Limón y la creación del Expediente Digital Único en Salud (EDUS), del que siempre se enorgulleció por ser un instrumento de información de la salud pública único en el mundo. Luchó por un modelo de salud enfocado tanto en la curación de la enfermedad, como en la prevención de la misma. Además apoyó decidida y tenazmente, la Institucionalización de los servicios de salud del Este, en su lucha continua contra la privatización de la Caja. Desafortunadamente, este último logro no lo pudo contemplar por la situación de la pandemia, pero siempre estuvo bien informado de su avance y de su éxito.
Mario Devandas Brenes siempre tuvo conciencia de la trascendencia de sus actos, por eso, en todas sus luchas en defensa de las instituciones más queridas del país como el ICE, por la que se le encarceló injustamente casi tres meses, la no privatización de los servicios de salud y el fortalecimiento del Fondo de Pensiones de la Caja y otros proyectos, sabía que sus posiciones de combate generaban focos contrarios, pero nunca se echó atrás, nunca asumió una posición acomodaticia en beneficio personal. Fue valiente siempre en defender sus ideas con convicción y con entusiasmo que contagiaba a sus compañeros de lucha.
El método propuesto a todas las organizaciones sindicales, juntas de salud, asociaciones y grupos organizados contiene los siguientes pasos:
– Estudiar para conocer bien la problemática social. – Tomar conciencia del problema por resolver. – Buscar soluciones posibles y consensuadas. – Iniciar la lucha a partir de la ejecución de los acuerdos tomados democráticamente. – Por último, lo más importante: estar unidos en la lucha.
Mario nunca claudicó ante las situaciones difíciles. Al contrario, le apasionaba enfrentarlas, para ello, contaba con su gran capacidad intelectual y creatividad para la solución de los problemas.
Como presentía su pronta partida, no soportaba la inercia ni la tardanza en ejecutar las tareas pendientes. A pesar del quebranto de salud, trabajó con pasión y responsabilidad. Durante el último año, lo hizo más intensamente. Cuando se le aconsejaba pausa y descanso, contestaba que trabajando se olvidaba de su enfermedad. Al igual que Martí dijo de Bolívar: “Hay hombres que no se cansan cuando los otros se cansan”. Así era nuestro amado Mario: incansable, imparable, activo, luchador, visionario…
Insistió permanentemente en la aplicación del artículo nueve de la Constitución Política que establece que el gobierno de Costa Rica es democrático, representativo, participativo . alternativo y responsable Esto lo repitió incansablemente a todo grupo organizado para que tomara conciencia de que todos los ciudadanos somos copartícipes y responsables de nuestros gobiernos y de nuestros destinos.
Como diputado, como funcionario público, como dirigente, como directivo de la Caja y como educador fue transparente y responsable, creativo e íntegro. Se pensionó por el Régimen de pensiones de la Caja con lo que renunció a cualquier tipo de privilegios.
Se enorgullecía de los servicios de salud y de los logros de la Caja y abogaba por que fueran iguales para todos los costarricenses tanto de las costas como de los campos y de las ciudades. Por eso, apoyó la construcción de hospitales como el de Puntarenas y el de Cartago, entre otros; combatió con ahínco el desfinanciamiento de la Caja y luchó con tenacidad por el pago de la deuda del gobierno a esta Institución emblemática; además, proponía la inversión de los recursos del estado en obra pública.
Sin duda alguna, la partida de Mario nos deja un gran vacío en nuestros corazones, como educador, tenía la costumbre de dejar tareas, nos dejó muchas que debemos cumplir todos los que compartíamos sus ideales y sus sueños.
Para nuestra familia es una pérdida inmensa. Siempre fue un faro de humor, de conocimiento, de entusiasmo, de diálogo ameno en nuestros numerosos encuentros. El seno del hogar fue el crisol donde se fraguó desde muy niño, su conciencia de cristal, allí se alimentó de principios y valores que lo impulsaron a luchar. Más adelante, cuando entró a laborar en la administración pública, fue donde se consolidó como un combatiente por el decoro nacional y la justicia social. Siempre lo apoyamos porque creímos en él, porque lo conocíamos, porque fue nuestro líder cercano e indiscutible, del que siempre nos sentiremos muy orgullosos.
Quiero resaltar en forma especial la presencia de una persona indispensable en la vida de nuestro hermano Mario. Su esposa María Eugenia Aguilar, Maruja. Más de 50 años compartió la vida con él. Sabía sortear las explosiones de entusiasmo que como un volcán, emanaba Mario de vez en cuando, para después compartir con él, en el sosiego de su hogar, una película, una pieza musical, una lectura o una anécdota simpática de las que siempre tenía Mario a flor de labios.
Tuvieron tres preciosas hijas: Vinyelita, la mayor, de grata memoria, Catalina y Aleida, tres mujeres excepcionales de quienes siempre estuvo muy orgulloso y satisfecho. Las dos últimas, como ramas del Árbol de la vida les dieron cinco nietas: Zoe y Mila; Lara, Aitana y Julia, un manojo de bellezas, quienes hasta el final llenaron de canciones y caricias a su amado abuelo como regalo en la noche de Navidad, en su ocaso de Quijote, de volcán, de patriota, de líder de la clase trabajadora…
A todas estas maravillosas mujeres nuestro cariño de siempre.
Agradecemos a las organizaciones que han estado con él en las luchas por el bien común de nuestro país. Al Sindicato Nacional de Administradores de Servicios de Salud y Afines del Seguro Social, nuestro agradecimiento por el homenaje en el que nominaron su casa sindical con el nombre de Mario Devandas Brenes, homenaje que llenó de regocijo y orgullo a Mario en sus últimos días.
A todas las personas e instituciones les manifestamos nuestro agradecimiento por su solidaridad, cariño y apoyo a Mario desde el inicio de su enfermedad hasta su partida.
A la Conferencia Episcopal, al Padre Luis Alejandro Rojas A. y al Arzobispo José Rafael Quirós Quirós, muchas gracias por compartir luchas importantes de bien común con nuestro amado hermano.
Hemos recibido abundantes mensajes de cariño, de reconocimiento y de ánimo para Mario. Anteayer, cuando nos pidió a sus hermanos que fuéramos a verlo, le preguntamos qué respondíamos a los que le habían enviado esos bellos y sentidos mensajes. Él nos contestó: “Dígales a todos, que les agradezco mucho” …
¡Muchas gracias!
¡Un aplauso bien fuerte para nuestro hermano y nuestro líder Mario Devandas Brenes!
Una solicitud para el cierre preventivo del Caribe Sur dentro de las próximas 24 horas, impidiendo el ingreso a su jurisdicción, con un puesto de Salud y Seguridad en la Subdelegación Tuba Creek, permitiendo sólo el acceso de residentes y de proveedores, regulando el paso o imponiendo cuarentena, de acuerdo con los lineamientos de las autoridades de salud.
Esa es una propuesta ciudadana que ha surgido en el Caribe Sur.
Con esa motivación, un colectivo de Talamanca sustentaría la petición en el Artículo 9 de la Constitución Política que define el gobierno como participativo.
La organización muestra «gran preocupación ante la inminente situación sanitaria que enfrentamos, por la velocidad en la que se está manifestando este coronavirus en el país». Por ello promueve una consulta en la comunidad con estas preocupaciones:
1- El cantón posee una población vulnerable, con escasísimos recursos en Salud y una tremenda escasez de agua,
2- Aún no se ha presentado ningún caso positivo,
3- El país se encuentra en estado de Emergencia y en Alerta Amarilla,
4- El artículo 9º de la Constitución Política de Costa Rica confiere la potestad de participar directamente en la toma de decisiones,
5- En acción de cogobierno, debemos acompañar y reforzar las medidas tomadas por los tres Poderes de la República.
6- Mantener a la comunidad libre del virus por más tiempo no solamente es la estrategia de salud más recomendada por médicos y científicos alrededor del mundo (aplanar la curva para no saturar los servicios de salud y poder brindar atención médica a todos los que lo necesiten) sino que además nos permitirá enfrentar la crisis y reactivar la economía sin tantas pérdidas humanas y materiales.
Las personas promotoras de la iniciativa expresan además su compromiso por acompañar todos los esfuerzos de las autoridades en el combate al COVID-19.
El próximo 25 de febrero vence el plazo para que las
organizaciones de sociedad civil se postulen para ocupar un puesto en la
Comisión Nacional de Datos Abiertos. En esa condición, los grupos comunitarios
y sociales podrán acompañar el proceso de apertura de datos públicos.