25 de febrero, Día Mundial del Implante Coclear

Dr. Julián Chaverri Polini
Otorrinolaringólogo
Miembro de Número
Academia Nacional de Medicina

¿Qué es el implante coclear?

El lenguaje oral que los seres humanos adquirimos se debe fundamentalmente a que tenemos una buena audición desde el nacimiento. Los dos primeros años de vida de un infante son básicos para la adquisición del lenguaje, debido a la gran plasticidad cerebral que hay en ese periodo. Si un recién nacido nace sin audición, anomalía sensorial congénita más frecuente, este bebé no adquirirá lenguaje oral espontáneamente (sordera pre lingual).

El oído está compuesto por un oído externo, un oído medio y un oído interno con funciones diversas. Una estructura del oído es el caracol (cóclea), el cual se encuentra en el oído interno. La cirugía del implante coclear se puede realizar a niños y adultos que presenten una sordera importante generada por una lesión a nivel de las células sensoriales de ambas cócleas principalmente (sordera neurosensorial bilateral); también indicada en aquellos que tengan sordera neurosensorial unilateral. En niños, a partir del primer año de vida se puede realizar el implante coclear y la implantación puede ser bilateral, ya sea simultánea (ambos oídos en la misma cirugía) o secuencial (los dos oídos implantados en diferentes cirugías).

Si el niño o niña nace con problemas auditivos que lo hacen candidato al implante coclear, el paciente no va a adquirir el lenguaje oral por sí solo, requiere de ayuda profesional y de la cirugía respectiva. Entre menos tiempo pase el niño sin audición, mejor será el resultado de la cirugía del implante coclear en lo que a la adquisición del lenguaje se refiere. Si realizamos cirugía del implante coclear a un paciente con sordera pre lingual antes de los 2 años de edad y a otro con 15 años de edad, los resultados en la adquisición del lenguaje serán muy diferentes, siendo obviamente mejor el que se implanta a edad temprana.

Por otra parte, tenemos candidatos que habiendo adquirido el lenguaje, pierden la audición en forma importante y por ende se tornan candidatos al implante coclear. A estos pacientes (niños y adultos) se les cataloga como sordera pos lingual. Entre menos tiempo transcurra entre la pérdida auditiva y la implantación, mejor será el resultado para el paciente en retomar el lenguaje y los sonidos en general.

El implante coclear es un dispositivo electrónico que tiene dos partes. Una porción interna y otra externa. Se requiere de un acto quirúrgico para colocar la parte interna, la cual consta de un transformador con un imán, el cual se coloca detrás de la oreja en la región mastoidea, debajo del cuero cabelludo y de electrodos que se insertan dentro de la cóclea.

El dispositivo externo se le coloca al paciente cuatro semanas posteriores a la cirugía al mismo nivel donde fue colocado el dispositivo interno. Esta porción externa consta de tres partes: un micrófono que capta los sonidos y los transforma en señales eléctricas; un microprocesador del sonido y del lenguaje el cual codifica las señales eléctricas y un transmisor que se encarga por medio de ondas de radio de transmitir la información a las partes internas del implante coclear. Con esto, se logra que la información pueda ser transmitida del medio ambiente al oído interno y a los centros de la comprensión del lenguaje en el cerebro.

El candidato a implante coclear debe someterse a una serie de evaluaciones por diferentes profesionales. Se requiere por lo tanto de un equipo multidisciplinario liderado por un otorrinolaringólogo, en donde colaboran el audiólogo, el terapeuta del lenguaje, el radiólogo y un pediatra en el caso de infantes.