El qué hacer de siempre: ¡Dar un paso adelante!

Ítalo Fera Fallas

Aprendí una lección que me costó unas cuantas décadas asumirla e interiorizarla. A mi criterio las alianzas no se pueden satanizar nunca. Me refiero a ese carácter fanático e inquisidor que, por mucho tiempo, me incluyo, asumimos cuando diferíamos táctica o estratégicamente en nuestras acciones y luchas.

Pero seguimos, aún hoy, con una gran deuda para realizar CONJUNTAMENTE, la evaluación seria, responsable y coherente, principalmente, de los últimos 8 años con las administraciones del PAC. Para no irme aún más lejos.

Todos evaluamos, criticamos, señalamos y «hablamos» de diferentes formas. Eso está bien, si se hiciera con disposición de asumir nuestras tradiciones, valores y direcciones más preciadas. Por cierto, tan tiradas en el basurero de las “cochinillas y cochinotas y rubis», en el mejor de los casos. Valores tan manoseados hoy por tantos y tantas «artistas» de las poses y comunicaciones. Seguimos con esa deuda de la Unión real. Nos dividimos hasta para hacer el minuto de silencio y con una distribución de esas deudas, donde algunos/as tienen una mayor cuota de responsabilidad, sea por sus funciones y liderazgos.

Vemos organizaciones de todo tipo y «sabor», con parte de esa deuda. También responsables según su incidencia en la vida pública y consecuencias de sus acciones y/u omisiones. Aquí el Frente Amplio no está vacunado, para usar la palabra de moda, ni mucho menos. Es un fuerte responsable y con esa deuda por la unidad popular parecida a la «deuda externa», para los que estamos en nuestra acera de izquierda y pro-socialismo. Se los he comunicado de diferentes formas y medios a los integrantes activos del Frente Amplio. No es nada nuevo. Yo les doy el beneficio de la duda y sin que me entierren en «cajita blanca», me parece que es el partido que debe asumirnos y asumir la vanguardia que se ha perdido, ojalá con una veloz reconstrucción y reconversión por la auténtica inclusión para parecerse a un auténtico Frente Amplio. Así lo aspiramos, unos que otros, con más o menos participación en nuestros compromisos socio políticos por décadas, antes y después de su creación.

Participo activamente en el Movimiento Humanista Costarricense desde 1988. Una de nuestras tesis máximas es intencionar con paz, fuerza y alegría en el cambio personal y social, en forma simultánea. Estoy claro, como lo estuvimos luego de las divisiones de todos, que, sin ese cambio personal, igual que los antiguos soviéticos del PCUS y otros tantos, todos nuestros proyectos y organizaciones se derrumbarán como un «castillo de naipes». Seguirán ese camino inevitablemente. Y no es sólo hacer «cuadros» para un trabajo de «masas». Palabrejas muy incorrectas, si revisamos educativamente esa acción que hacíamos en el día a día. Ese enfoque, humana y pedagógicamente, no se sostiene por ningún lado. Frase que fue acuñada en los inicios del siglo XX, o antes, que tampoco vamos a esperar otra cosa.

Una buena parte hicimos lo mejor de nuestra conciencia y convicciones durante años. Muchos como en “capillas» y «carpas».

Hoy también vemos estas y otras realidades de siempre, con seres humanos que cambian o los cambian peor que «marionetas», por un sistema social anacrónico, excluyente y que se derrumba, con accionistas y sus subalternos plumíferos, ingenieros financieros y tecnólogos de todo tipo, que corren con muy buena paga a sostenerlo, pero carcomidos desde sus bases.

Para usar nuestras propias palabras, están dadas las condiciones objetivas en diferentes momentos y con intensidad.

Las condiciones subjetivas se deben seguir construyendo, CON NOSOTROS MISMOS y EN CADA UN0/A. Tenemos valiosas prácticas, a veces teorizadas correcta o incorrectamente. Una academia que se sigue quedando corta, con su «reloj y carreta» de acciones lentas y no oportunas.

Bueno esto se me extendió. Concluyo, diciendo que el Frente Amplio tiene una responsabilidad excepcional, impostergable y requiere de las mejores evaluaciones, lecturas y sobre todo tomar decisiones para llegar a asumir acciones coherentes con el bienestar anhelado de las grandes mayorías de costarricenses. Que se sintonicen con lo mejor de nuestra Escuela de praxis con la sociedad civil y política. Demos nuestros aportes y ojalá en el Frente Amplio sea humilde y sabio para recibirlos.