LOS EMBUSTES DE #FIFCO (segunda entrega)

Gerardo Hernández

Embuste: “mentira disfrazada con artificio” (DRAE)

FIFCO: Florida Ice and Farm Company S.A., más conocida como la Cervecería Costa Rica.

Retomo estos comentarios críticos a la publicación de un video titulado “El que nada debe nada teme”. En el mismo, la señora Gisela Sánchez, Directora de Relaciones Corporativas de FIFCO y el abogado Adrián Torrealba Navas, hacen críticas a informaciones aparecidas en unos videos de un medio de la UCR, donde aparecen fragmentos de entrevistas hechas a investigadores que estudian las grandes riquezas, la desigualdad social y temas fiscales.

Dichos investigadores ya han hecho aclaraciones y reconocido limitaciones de algunas fuentes de información, por ejemplo, la Revista Forbes. De modo que yo no pretendo hablar por ellos o meterme en la discusión metodológica correspondiente. Eso es algo que bien pueden hacer las personas y medios involucrados.

Lo que sí me interpela y me mueve como ciudadano a participar en este debate, son las inconsistencias, medias verdades y hasta falsedades que aparecen en el video de #FIFCO.

Las y los ciudadanos debemos ser críticos con la información que recibimos en redes sociales y en los medios de comunicación convencionales, vengan de donde vengan. Es nuestro derecho. Por eso, con este ejercicio pretendo mostrar justamente que no todo lo que brilla es oro y que, a nombre de la verdad, se puede incurrir también en “mentiras disfrazadas con artificio”.

Por cierto, ¿llamaron ya al teléfono (22-84-50-00) del Ministerio de Hacienda? Si no lo han hecho, les invito a llamar y hacer una simple pregunta: ¿Cuánto han pagado las empresas de FIFCO en impuesto sobre la renta del 2008 al 2018?. Llamen y nos cuentan cómo les va. Porque según doña Gisela Sánchez, con solo llamar a ese número les van a dar la información.

Y si quieren profundizar más, pueden solicitar también las declaraciones de impuesto sobre la renta de esas empresas durante el mismo período, pues según FIFCO cualquier persona las puede revisar y “para cualquier costarricense es facilísimo comprobar” el pago de impuestos de sus empresas (Adjunto una lista para mayor precisión de sus consultas).

Insisto, llamen y nos cuentan. A lo mejor les va bien o a lo mejor comprueban el embuste al que hice referencia en la primera entrega.

Ahora vamos al segundo

  1. CIFRAS QUE NO PODEMOS COMPROBAR, CIFRAS ENGAÑOSAS Y CIFRAS OMITIDAS EN EL VIDEO DE FIFCO

Por lo ya dicho en la primera entrega, NO PODEMOS COMPROBAR la cifra de 245.000 millones de colones supuestamente pagados al Ministerio de Hacienda por las empresas de FIFCO, por impuesto sobre la renta del 2008 al 2018.

Ojalá FIFCO hiciera públicas, no las cifras agregadas de los estados financieros consolidados, sino las declaraciones de todas y cada una de las personas jurídicas (descendientes de la abuelita), para verificarlo ante la ciudadanía. Esa sí que sería una demostración clara y contundente de transparencia fiscal empresarial pues, efectivamente, “el que nada debe nada teme”.

Por ahora, solo se puede dudar o creer, según cada quien elija. Igualmente dudar o suponer verdad, en cuanto a que esa cifra es total y contundentemente la que debían pagar, sin estrategias de evasión, elusión o “planificación tributaria”.

¿Por qué?, porque vivimos en el mundo de la opacidad, no de la transparencia fiscal predicada por FIFCO.

Y sí, sí… es cierto que los estados financieros consolidados y auditados de FIFCO son de acceso público. También es cierto que en esos estados aparecen cifras agregadas del pago de impuestos sobre la renta. Y algo más: hice los cálculos para el período 2008-2018 y la cifra obtenida es bastante cercana a la publicada en el video en cuestión.

¿Pero cuál es el pero? Pues que son cifras agregadas en estados financieros consolidados de toda la compañía, con una larga y variable lista de subsidiarias (digamos que hijas y nietas de la abuela), residentes en Costa Rica, Guatemala, El Salvador, México, EEUU (algunas en Delaware), Gran Caimán, entre otros (Ej. la lista de subsidiarias del 2018).

Entonces… esos datos agregados no permiten comprobar en detalle el pago o no pago del impuesto sobre la renta de cada una de las empresas, como sí lo permitirían las declaraciones que, según FIFCO, cualquier cristiano podría revisar. De manera que no hay en esos estados financieros consolidados la transparencia que pregonan.

Tampoco permiten determinar cuánto y dónde fue pagado el impuesto sobre la renta de las empresas subsidiarias residentes en diferentes países. Por eso, en lugar de claridad y transparencia surge una gran duda: la cifra de los 245.000 millones de colones planteada en el video de FIFCO, ¿refiere a pagos hechos sólo en Costa Rica o a todo lo pagado por todas las empresas en todos los países donde operan subsidiarias? #FIFCO, #Deloitte (firma auditora) o el #MinisteriodeHacienda podrían aclarar esto. Las ciudadanas y ciudadanos lo agradeceríamos.

Por otro lado, en el video se hace referencia a otra cifra fiscal CLARAMENTE ENGAÑOSA: los $2.076 millones de dólares que, supuestamente, FIFCO habría pagado en total por renta y otros impuestos, sin precisar el período.

¿Por qué esa cifra es engañosa? Porque incluye, impuestos como el de de ventas (ahora IVA) que en realidad es pagado por las y los consumidores finales de los productos, donde las empresas funcionan como recaudadoras y simplemente deben trasladar esos recursos a Hacienda. Son impuestos pagados por la gente (ahora hasta por la canasta básica) no por las empresas.

No es la primera vez que FIFCO presume como pago propio, los montos del impuesto de ventas y otros, para inflar discursiva y publicitariamente su aporte fiscal. Ya en el 2018, el programa Doble Check (galardonado con el Premio Pío Víquez) demostró que FIFCO había pagado “de su propio bolsillo” apenas una cuarta parte de lo que pregonaba al incluir esos otros impuestos (Ver: https://doblecheck.cr/cerveceria-costa-rica-ha-pagado-al-fisco-de-su-propio-bolsillo-una-cuarta-parte-del-monto-que-publicito/).

¿Por qué necesitan exagerar, mentir y presumir impuestos que pagamos otros, si el que nada debe, nada teme?

Y en tercer lugar, la OMISIÓN. El video de FIFCO omite el dato de cuánto fue el beneficio obtenido por la Amnistía Fiscal, mediante la cual, algunas de sus empresas pagaron solo el monto principal y no los intereses o sanciones.

Que eso fue legal y producto del combo fiscal aprobado en el 2018 nadie lo duda. Que eso permitió recaudar recursos frescos en momentos que urgía, tampoco. Pero ¿por qué omitir que esas empresas tuvieron un beneficio fiscal y los montos del mismo, en un contexto donde la amnistía ha generado debate porque benefició a grandes empresas al mismo tiempo que se imponía el IVA a la canasta básica?

¿Abona con ello FIFCO a la transparencia o nos presenta más bien sólo una cara, de manera publicitaria y engañosa, sobre su aporte fiscal?

Para cerrar esta entrega y con el permiso de #Delfino, un “bonus track”: Adrián Torrealba Navas, abogado experto tributario, Ex Director de Tributación, dice en el video de FIFCO que todas las empresas de la abuelita tributan con la tarifa del 30%. Pero ¿acaso no se ha demostrado (y así lo acepta doña Gisela) que algunas de esas empresas han declarado 0 utilidades por varios años y por lo tanto no han contribuido, ni siquiera en la tarifa más baja? “No aclares que oscurece”.

Continuará…