Los miedos a la democracia
Lic Rafael A Ugalde Q.*
Dedicado con mucha humildad a Gaspar García Lavaina,hombre y sacerdote excepcional, al cumplirse 45 años de su partida física sonriente por el deber y el fin cumplidos solo por valientes..
Ambos, con sus respectivas tablas enceradas, no cesaban desde sus “poltronas”, con asiento de cuero y su respaldar de madera, bellamente tallado con dos esclavos trayendo a empujones una mujer practicante del oficio más antiguo de la tierra, de hacerse aire con la mano derecha para aliviar el inclemente calor descargado sobre los dos grandes maestros de la humanidad; tan discutidos en pleno siglo XXI.
Coincidían con la creencia ateniense de entonces, en torno a que sudemocracia no era una buena idea como forma de gobierno, por ser demasiada incluyente (participativa y protagónica dirían Russel, los curas Gaspar García Laviana, Camilo Torres o el expresidente mexicano Francisco Madero), dejando de “monazo” sin ninguna participación a las mujeres, los esclavos y los extranjeros, para evitar votaciones irracionales.
Así fue como me sorprendió la luz del día, cuando ya Plantón y Aristóteles, divisándolos borrosamente durante el sueño, salían no con buena cara por la puerta que lleva a la troja trasera de la casa de paredes de barro y cal. Comenzaba en pocos minutos la vida real, cuando me percaté que, aplicada a las sociedades de 2023 su “Asamblea de Ciudadanos”, no estaba del todo bien, aunque la constituyeran solo gente “caché”.
Desde entonces estos “demócratas” en nuestra América, identificados unas veces como “tecnócratas”, lideres de “gobiernos independientes” o cabeza de la “ola libertaria” etc., son presentados a las mayorías para transmitirles una supuesta inexperiencia de ellas en cosas de gobierno. Así atajan cualquier intento de articulación y organización de la población que les pueda hacer “ruido” a quienes, efectivamente, no dejan caer la hoja de un árbol sin su visto bueno.
Quería explicarles mis dudas, pero ni pelota me dieron. Fue años después en una clase de filosofía del derecho que la discusión estuvo bastante movida, entre quienes defendían la democracia como congelada en el tiempo y quienes rechazaban esta opción inaceptable. Los primeros, aceptaban a regañadientes que la democracia evolucionó hacia la concepción tradicional de “republicana”, con un tufillo clasista como el del pupitre del par oloroso a Paco Rabann, cadena de oro de dieciocho kilates y adornada con una estrella de David como dije.
Nuestra democracia como forma de vida, decía casi a gritos este de fuerte cadena de oro y quien con los años fue ministro, aunque les disguste tomamos decisiones basadas en los que sí saben gobernar y se prepararon para ello; para eso tenemos elecciones libres, volando, de paso, el filazo respectivo, contra otros modelos de organización social.
Los segundos hacíamos ver que sí, la democracia es un” modo de vida” como ellos decían, al mejor estilo de la antigua Atenas, entonces dicho sistema hay que transformarlo porque hay quienes no tienen “vida”, al estar excluidos y no ser tomados en cuenta por esta especie de “meritocracia” o “iluminados”. Ellos son insertados en todos los poderes del Estado por los partidos políticos y otros medios de control social para cuidar los intereses de las élites mediante votaciones periódicas, sin importar luego los nuevos “esclavos”, las “nuevas mujeres” y los nuevos “extranjeros” en sus propios países. Hasta el penalista Raúl Eugenio Zaffaroni y su tratado de derecho penal salió rascando.
Y hubo quien demostró a este selecto grupo defensor de la democracia como forma de vida que, tal como la defendían, esta posición resultaba enajenante, racista, injerencista y discriminatoria, porque negaba toda posibilidad de que obreros, campesinos, estudiantes, profesionales, intelectuales honrados, etc., escogieran de abajo hacia arriba a sus líderes, en lugar de arriba hacia abajo, para cumplir los fines del gobierno “para”, “del” y “por” el pueblo, como enumeró Lincoln alguna vez. Hasta una copia del ensayo de Adolfo Sánchez Vásquez sobre “Filosofía e ideología”, que habíamos analizado en la clase de las nueve de la mañana, les dimos subrayadito y gratis para que vieran su posición reaccionaria hasta los huesos. Por cierto, con este pensador radicado entonces en México, terminó la discusión. Los fulminó. Lógicamente, ante la falta de argumentos, como suele presentarse, vinieron los gritos de ateos, chusmas y hasta una muchachita que terminó como juez (rezo por ella todos los días para que no llegue nunca a magistrada), se quejó porque, según ella, su querida facultad, ejemplo de grandes pensadores y juristas, lamentablemente, la había tomado el comunismo ruso y cubano, abriéndose a gente que no debería estar acá.
Desde entonces estos “demócratas” en nuestra América, identificados unas veces como “tecnócratas”, lideres de “gobiernos independientes” o cabeza de la “ola libertaria” etc., son presentados a las mayorías para transmitirles una supuesta inexperiencia de ellas en cosas de gobierno. Así atajan cualquier intento de articulación y organización de la población que les pueda hacer “ruido” a quienes, efectivamente, no dejan caer la hoja de un árbol sin su visto bueno.
Así, la “meritocracia”, “ola libertaria”- o como prefiera llamarla- hace de los llamados “valores democráticos” (consultar https://www.gob.mx/segob/articulos/que-son-los-valores-democraticos) un traje a la medida según la ocasión: Honestidad, sí, honestidad. En Honduras quien estuvo a cargo del Ejecutivo es sindicado como narcotraficante. En Panamá, el gobierno actual, aprobó una “maravillosa” ley que prohíbe las concesiones mineras, después de dar a una compañía canadiense derechos por más de 30 años para que extrajera minerales en zona ecológica. Fue hasta que esas mayorías “ignorantes” en las cuestiones de gobierno se rebelaron contra el criterio de la prensa mediática defensora de la “democracia”, el tribunal constitucional, previendo una guerra civil, echó abajo el turbio negocio de las élites panameñas.
Solidaridad: forma también parte de más de una docena de los “valores democráticos” del llamado Occidente colectivo: ¿Cual solidaridad contra el genocidio palestino, a pesar que muchos de estos demócratas son confesos “cristianos”.? O para el pueblo cubano bloqueado económica, financiera y comercialmente durante más de seis décadas por la primera potencia militar y económica del mundo.
Son, en cambio, la mayoría de estos ignorantes para estos defensores de la democracia congelada en el tiempo, quienes han dicho en las calles de Nueva York, París, Níger, Caracas, Managua, Berlín, etc.: ¡basta ya de bloqueo! ¡Basta ya de genocidio en Palestina! ¡Basta ya de prensa vendida!
Ellos, dentro de la supuesta ignorancia – a la luz de la estratificación de la India estarían entre las castas más bajas- si bien no visten traje entero, nunca se han puesto una corbata y de vacas, producción de chiles y auxilio a quienes necesitan, saben de todo. Los pueblos del mundo fueron los primeros en advertir que aplicar una ley local, dándole alcance extraterritorial para matar de hambre a niños, ancianos y mujeres, es una agresión simulando una defensa de los derechos humanos, violentando la esencia misma de ellos.
En cambio, en enero de 2019, el hombre que hoy da cátedra sobre “valores democráticos” en una universidad norteamericana y vive como millonario en La Florida, se subió en una tarima en un parque de Caracas, tartamudeó como diez minutos, pero bajó de ella convertido en “presidente interino” de Venezuela; reconocido incluso, por el llamado” Grupo de Lima”, todos sus integrantes de probada vocación democrática.
Cuando el pueblo quiere, puede. En Panamá echó abajo la minería contra las élites que defendían la creación de empleo de calidad. (F. BBC).
“Libertad de prensa”: Es otro de la larga lista de valores de la “democracia”. En México la “prensa alquilada” o “independiente” del pueblo, junto a lo que denominan “intelectuales orgánicos”, obligaron al gobierno actual de Andrés Manuel López Obrador a recurrir a las redes sociales y a una conferencia “mañanera” para evitar un “golpe de estado” mediático y desmentir las grandes cadenas de periódicos, tevé y radio. Como suele ocurrir, una buena parte del empresariado acostumbrado a obtener amnistías fiscales, robarse aeropuertos, refinadoras de petróleos, sociedades estatales relacionadas con la electricidad etc., llama a otros empresarios honestos a cerrar filas para congelar sueldos, quitar las pensiones a los adultos mayores, devolver la educación como negocio. En fin: sí el Estado es fuerte no hay libertad, según la consigna de los libertarios como nuevo relanzamiento del neoliberalismo.
Laura Richardson, generala del Comando Sur estadounidense: cerremos Telesur y R.T. (F. Página 12, 14/11/2023).
Acá mismo bajo el recurso de la simulación para lograr el cierre del Canal 13 de Televisión, cuatro conocidos medios de comunicación pelean a muerte para recuperar 14 mil millones de colones anuales de “pauta” publicitaria. Ahora sí, están muy preocupados por la “libertad de prensa” y el “pluralismo” como valores democráticos. Sobre sí un tal “Choreco” los vio escondiendo la mirada y se negó a darles declaraciones, sí la forma de peinarse es la adecuada para un asesor presidencial o usó este o aquel desodorante, es una alerta de cómo nos amenazan la “libertad de prensa”.
No obstante, no violenta el principio democrático de la “libertad de prensa” que haya noticieros que niegan el genocidio palestino, dejando de informar sobre el tema. O que la generala y jefe del comando sur de Estados Unidos, Laura Richardson, sin pelos en la lengua, pidió acabar con las cadenas de noticias Telesur y RT por no ajustarse al periodismo requerido por su país. (Ver https://semanariouniversidad.com/opinion/de-las-palabras-a-los-hechos/ ). Cuando tenga el pronunciamiento de los periodistas o algún editorial de esos cuatro medios sobre este atentado a la libertad de prensa se los comunico.
¡Hey, hey maestros no se vayan sin entregarles este recado de nuestro gran filosofo latinoamericanista, Juan Mario Castellanos, llegado desde el “pulgarcito” de América para el mundo: “Ustedes también tengan feliz navidad y el año venidero ojalá esté movido y articulado entre quienes no temen a la democracia y transforman todo a su paso”, solía decirnos todos los diciembres en familia alrededor de un tamal y un humeante cafecito negro.
*Estudios en geopolítica y petróleo por la U del Zulia; periodista, abogado y notario por la U.C.R.