Participar en las elecciones municipales para acabar con el abstencionismo e impulsar el desarrollo

José Luis Pacheco Murillo

De hoy en 7 meses serán las elecciones municipales. Una oportunidad para que los munícipes de un cantón elijamos a las autoridades de la municipalidad. Una oportunidad para romper con el fantasma del abstencionismo que ha permitido que por más de 30 años sean los mismos de siempre los que logren ganar, incluso con porcentajes sumamente bajos con relación a la totalidad de votantes.

De un en 7 meses tendremos una nueva oportunidad para demostrar que nos interesa lo que suceda en nuestro cantón y que hemos cambiado de actitud y queremos luchar contra la corrupción y la impunidad.

Las elecciones municipales son las que permiten elegir a gente cercana y conocida. A sus vecinos y por ello es que la participación debe ser multitudinaria para sacar a los que no han sabido invertir los impuestos que pagamos y han despilfarrado a manos llenas sin encontrar las soluciones s las problemáticas que vivimos en seguridad, en movilidad, en transparencia, en servicios. A pesar de tener presupuestos multimillonarios no logran realizar las obras que puedan cambiar la vid de las comunidades y las personas.

Las elecciones municipales del 4 de febrero del 2024 serán las que puedan generar el cambio que queremos saliendo a votar y escogiendo a los que proponemos de manera seria y con fundamento en el cómo saber hacer lo que se requiere hacer.

Motive a sus familiares y amigos a que no se queden en casa el domingo 4 de febrero del 2024 y que logremos obtener el triunfo que ocupa nuestro cantón para lograr las metas que permitirán el mejor desarrollo en lo económico, en lo social en lo que a infraestructura, movilidad, transparencia, seguridad y bienestar de trata.

El próximo 4 de febrero del 2024, de hoy en 7 meses podemos decidir si seguimos soportando una municipalidad indiferente a las necesidades de la ciudadanía, una municipalidad voraz para cobrar tributos, pero lenta para la inversión y el desarrollo de infraestructuras y mejores condiciones de vida. Una municipalidad corrupta por la acción de algunos de sus funcionarios, aunque hay muchos otros excelentes que no desean esa corrupción, o una municipalidad limpia y transparente y que utilizará los dineros para lograr el bienestar de la ciudadanía.

Dios quiera que entiendan lo importante que es su participación para acabar con ese abstencionismo que nos ha obligado a tener lo que tenemos, muy a nuestro pesar.