Evidencia
científica revela que existen 1.482 hectáreas de piña sembradas dentro de Áreas
Silvestres Protegidas.
En
2017 se registran 66.266 hectáreas de piña sembradas en el país.
Entre
2016-2017 el monocultivo de piña creció unas 9.000 hectáreas sin controles
estatales.
(FECON, 14-01-2019.) Una
actualización de mapas satelitales vinculados con la N.A.S.A revelan que
existen 66.266 hectáreas de piña sembrada para el año 2017. Según mostraron
las imágenes satelitales del Monitoreo de Cambio de Uso en Paisajes Productivos
(MOCUPP) de Costa Rica, elaborado por el Laboratorio PRIAS del Centro Nacional
de Alta Tecnología (CENAT) del CONARE. (disponibles en el sitio: http://www.snitcr.go.cr/)
Este mismo centro de investigaciones
descubrió que las piñeras cubrían en 2016 unas 57.327 hectáreas del territorio
nacional. Del 2016 al 2017 los empresarios piñeros incrementaron el área
cultivada en 9.000 hectáreas lo cual representa un expansión de un 15,7% en tan
solo un año.
La actividad de la producción de piña
fresca en Costa Rica ha sido señalada como la responsable de contaminar fuentes
de agua de poblaciones aledañas a este monocultivo. Incluso de ha visto
envuelta en denuncias por no cumplir la legislación en materia laboral,
ambiental y fiscal. Se sabe que entre el año 2000 y el 2015 esta industria
deforestó de forma ilegal 5.566 hectáreas de áreas de protección en margenes de
ríos y humedales.
El PRIAS además encontró 1.482
hectáreas dentro de Áreas Silvestres Protegidas, entre estas sobre sale el
Refugio Corredor Fronterizo Norte, el Refugio de Vida Silvestre Maquenque y
Barra del Colorado. El traslape de la piña con las zonas que se supone dedicadas
a la conservación de la naturaleza ya había sido denunciado por la Federación
Costarricense Para la Conservación de la Naturaleza (FECON) en 2017 cuando se
demostró que habían 1.112 hectáreas de piña dentro de ASP. Un año después el
PRIAS revela que hay 370 hectáreas adicionales para el 2017.
Estas casi 1.500 hectáreas de
invasión por parte de las empresas piñeras dentro de las Áreas Silvestres
Protegidas demuestra la inacción estatal. Se sabe que instituciones encargadas
de velar por el cumplimiento de la legislación ambiental no están haciendo su
trabajo o son deficientes. Por lo tanto, son cómplices de la destrucción
ambiental que esta sufriendo el país según el Artículo 57 de la Ley Forestal.
Pese a esto el actual gobierno ha
recortado 2.000 millones de colones para el 2019 al Sistema Nacional de Áreas
de Conservación (SINAC). Esto pone cuesta arriba remediar cualquier impacto de
la expansión irresponsable, ilegal y descontrolada del cultivo de la piña.
Contacto al teléfono: 87609800, Henry
Picado Cerdas, Presidente de la Federación Costarricense para la Conservación
de la Naturaleza.
Científicos de la UCR abordan la problemática de los contaminantes emergentes (CEs) con el objetivo de impulsar el planteamiento de una legislación nacional
Cientos de sustancias de uso común pasan desapercibidas por los reguladores hasta llegar a los ríos, lagos y mantos acuíferos, esto las convierte en una fuente más de contaminación ambiental.
Residuos de fármacos, antibióticos, productos de cuidado personal y hasta la cafeína que los costarricenses consumimos y desechamos a diario terminan depositados en el medio ambiente, principalmente a través de efluentes cercanos a hospitales, plantas depuradoras urbanas, plantas de producción animal y zonas agrícolas e industriales.
El uso generalizado de este tipo de productos preocupa a la comunidad científica, pues la exposición constante a dichas moléculas, a sus metabolitos y a mezclas con otras sustancias puede provocar efectos tóxicos crónicos en los ecosistemas y en la salud humana.
Aunque se trata de una problemática reciente, ya hay estudios que han demostrado potenciales efectos adversos. Por ejemplo, algunos compuestos actúan como disruptores endocrinos, es decir, alteran el funcionamiento del sistema hormonal de ciertos seres vivos y afectan así funciones esenciales como el metabolismo, el crecimiento y desarrollo.
En el 2013, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió sobre los posibles efectos de estas sustancias y solicitó que se sigan investigando, para entender plenamente las relaciones entre esos denominados perturbadores endocrinos (PE) —presentes en muchos productos domésticos e industriales— y determinadas enfermedades y trastornos.
Para abordar esta problemática poco explorada en Costa Rica, científicos del Centro de Investigación en Contaminación Ambiental CICA-UCR desarrollan el proyecto CEmerge – Contaminantes Emergentes: Monitoreo y diseño de estrategias para la mitigación de su impacto ambiental. El objetivo es generar una línea base para detectar el ingreso de estas sustancias a cuerpos de agua en el país, para luego proponer estrategias de remediación y aportar los primeros insumos para el planteamiento de una legislación nacional.
La cafeína, los fármacos, antibióticos y otras sustancias que ingieren los seres humanos y los animales son eliminados a través de las excretas. Estas sustancias van a tanques sépticos o al sistema de alcantarillado sanitario y, luego, a plantas de tratamiento donde no se logran eliminar completamente.
Un nuevo campo de investigación
El único estudio sobre contaminantes emergentes en Costa Rica fue elaborado en el 2011 por la Universidad de Toledo (Estados Unidos), con apoyo del CICA y el Centro de Investigaciones de Ciencias del Mar y Limnología (Cimar). Este estudio brindó información sobre la presencia de 34 fármacos y productos de cuidado personal en ríos y zonas costeras de todo el país, con niveles similares a los obtenidos en estudios alrededor del mundo.
Actualmente, con el uso de tecnología más avanzada, el CICA es capaz de detectar hasta 75 contaminantes diferentes, esto amplía el espectro de la investigación en este novedoso campo. Para ello, se emplea la técnica analítica de cromatografía de líquidos, acoplada a los detectores de espectrometría de masas simple (LC-MS) y de triple cuadrupolo (LC-MS/MS).
El limitado número de datos disponibles sobre la presencia de diversos grupos de productos farmacéuticos en las aguas, así como de sus metabolitos activos, representa un desafío clave para evaluar el riesgo potencial para la salud humana, según ha señalado la OMS.
Proyecto Ucrea
El proyecto CEmerge – Contaminantes Emergentes: Monitoreo y diseño de estrategias para la mitigación de su impacto ambiental, coordinado por el Dr. Carlos Rodríguez Rodríguez, director del CICA, fue premiado en el 2017 con fondos especiales para la investigación en el Espacio Universitario de Estudios Avanzados (Ucrea), el cual promueve la investigación multidisciplinaria e innovadora.
La investigación arrancó en el 2017 y está dividida en cinco etapas. Actualmente, se está realizando la primera fase que consiste en la implementación y desarrollo de métodos analíticos para detectar y cuantificar contaminantes en matrices reales contaminadas.
En una segunda etapa, se realizará monitoreo de presencia y concentración de estas sustancias en diferentes cuerpos de agua contaminados para conocer la realidad nacional. En la tercera etapa, se diseñarán estrategias enfocadas en eliminar contaminantes por medio de microorganismos degradadores (bacterias indígenas, hongos ligninolíticos y consorcios microbianos), así como procesos de oxidación avanzada.
En una cuarta fase, se realizará una evaluación ecotoxicológica para estimar el riesgo real de los efluentes monitoreados y la eficiencia de las estrategias de remediación diseñadas. En la quinta y última fase, se efectuará una capacitación para implementar buenas prácticas pecuarias en fincas de producción animal, por ser esta una de las principales industrias en aplicar altas cantidades de fármacos y antibióticos.
En este estudio también participan el Instituto de Investigación en Educación (INIE), la Escuela de Trabajo Social, la Escuela de Ingeniería Química y la Estación Experimental de Ganado Lechero Alfredo Volio Mata de la UCR. Además, colabora la Escuela de Ingeniería Química de la Universidad Autónoma de Barcelona y el departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Barcelona en España.
Aguas residuales y contaminantes emergentes
En Costa Rica uno de los mayores problemas asociados a los contaminantes emergentes reside en que los sistemas de tratamiento de aguas residuales que se utilizan son incapaces de eliminarlos completamente.
La problemática se agrava, ya que según datos del AyA, un 73% de la población utiliza tanques sépticos y drenajes, pero muchos no reúnen las condiciones técnicas y contaminan las fuentes de agua.
Además, las aguas grises cargadas de diversas sustancias, provenientes del uso doméstico como el lavado de ropa y de utensilios de cocina o del baño, son vertidas en el alcantarillado pluvial o los caños de las calles que luego drenan directamente a los ríos y quebradas.
El impacto de Industrias Infinito en Crucitas hubiera sido al menos 200 veces mayor
Ecologistas piden a Ministerio de Salud intervenir en la finca invadida por “coligalleros”
(FECON. 19-12-18) Ecologistas presentaron una denuncia ante el Ministerio de Salud por posible contaminación con mercurio en Crucitas, en Cutris de San Carlos, y pidieron a las autoridades sentar responsabilidades sobre los dueños de la finca implicada, para que remedien el daño ambiental en la zona.
Según el informe DGM-CMRHN-11-2018 del Departamento de Geología y Minas del Ministerio de Ambiente (MINAE), se han extraído 173.873 m3 de material saprolítico (sobre todo tierra y arenas). Esto significa que se ha sacado alrededor de 0,5% del volumen total de material que Industrias Infinito dijo que extraería, según su Estudio de Impacto Ambiental (Marzo, 2002).
Según Henry Picado, presidente de la Federación Costarricense para la Conservación de la Naturaleza: “La compañía minera planeaba sacar 33 millones de metros cúbicos, mientras tuvieran la concesión. En otra palabras: el impacto ambiental que Industrias Infinito planteaba, era al menos 200 veces mayor que lo que representa el problema actual de la minería ilegal. Hay que recordar que Industrias Infinito planteaba tener un impacto sobre una extensión mínima de 123 hectáreas, con profundidades de hasta 75 metros.”
El impacto de la actividad de los coligalleros (mineros artesanales) es importante, sobre todo en el plano de la salud pública por la contaminación con mercurio de de las aguas superficiales, que posiblemente contamina los alrededores de la Finca Ninvoyet, en Crucitas, de Cutris de San Carlos.
Según la Organización Mundial de la Salud, el mercurio está calificado como una sustancia altamente tóxica y que plantea especiales problemas de salud pública. En el contexto de la minería ilegal en Crucitas representa un peligro para los mineros, sus familias, las comunidades vecinas y la vida en general. En el ambiente, el mercurio emitido por la minería aurífera se acumula principalmente en forma de mercurio metálico (Hg°) y compuestos de Hg + y Hg ++, como sucede con el nitrato de mercurio.
Se estima que para extraer un gramo de oro se requiere al menos de 14 gramos de mercurio. El nitrato de mercurio es producido en la separación química de la amalgama empleada en Crucitas, que se deposita en los sedimentos de los ríos y suelos, donde por la acción bacteriana y bajo ciertas condiciones, se puede convertir en mercurio orgánico, especialmente metil-mercurio.
El mercurio emitido por la minería aurífera -el metil mercurio- es de gran toxicidad para las personas, ya que puede acumularse en los organismos acuáticos y pasar al ser humano; por ejemplo, al consumir pescado contaminado.
No es sencillo proyectar cuándo se pondrá fin a la explotación minera artesanal en Crucitas. Ni siquiera tenemos la valoración exacta de cuántas hectáreas de las 123 hectáreas originales, han sido impactadas. Además, según los datos del Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto Minero Crucitas, los sitios de saprolita que podrían tener oro, no sólo están en la Finca Ninvoyet, sino también en otras fincas aledañas.
Por esta razón las organizaciones ambientales solicitamos al Ministerio de Salud aplique las normas constitucionales 21, 50 y 89; el Convenio de Minamata1 en sus artículos 7, 10, 11 y principalmente 122, y la Ley para la Gestión Integral de Residuos (GIRS).
Según el abogado ambientalista Alvaro Sagot: “Este conjunto de parámetros legales establecen las responsabilidades de los administrados y del Ministerio de Salud, en relación con la prevención, mitigación y remediación de los suelos contaminados. Sumado a esto, reviste de gran importancia el Reglamento sobre valores guía en suelos para descontaminación de sitios afectados por emergencias ambientales y derrames, pues es una norma de vital importancia para sentar las responsabilidades incluso de los propietarios; lo anterior, pues las normas señalan que los dueños deben responder independientemente de la intensión o no de contaminar en sus fincas.”
Hay que tener presente la responsabilidad de los propietarios de los inmuebles, lo cual consta así en el Reglamento citado cuando señala en el artículo 8: “Se presumirá como responsable al propietario registral del sitio contaminado…”
Información:
Álvaro Sagot: 8863 2887
Henry Picado: 8760 9800
1 Que es un tratado mundial para proteger la salud humana y el medio ambiente de los efectos adversos del mercurio ratificado por Costa Rica.
2 El artículo 12 señala en lo que nos interesa: “Cada Parte procurará elaborar estrategias adecuadas para identificar y evaluar los sitios contaminados con mercurio o compuestos de mercurio. 2. Toda medida adoptada para reducir los riesgos que generan esos sitios se llevará a cabo de manera ambientalmente racional incorporando, cuando proceda, una evaluación de los riesgos para la salud humana y el medio ambiente derivados del mercurio o de los compuestos de mercurio que contengan.”
La enzima Pycnoporus sanguineus, cepa CS43, que se encontró en el Cerro de la Silla en Monterrey, resiste a altas temperaturas y es muy estable en el tiempo. Los investigadores del Instituto de Monterrey, México han comprobado que después de 1.000 días sigue teniendo actividad. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.
Un equipo de científicos del Centro de Investigación en Contaminación Ambiental (CICA) de la Universidad de Costa (UCR) iniciará los experimentos con una enzima capaz de degradar ciertos contaminantes que llegan a los ríos.
Utilizando la alta capacidad analítica de este centro, los investigadores Marta Pérez Villanueva, Didier Ramírez Morales y Carlos Rodríguez Rodríguez (director del CICA) enfrentarán la enzima Pycnoporus sanguineus cepa CS43 a diferentes contaminantes, especialmente medicamentos, para probar su eficacia.
Este será uno de los primeros aportes de los costarricenses a la red iberoamericana de Lacasas Inmovilizadas para la Degradación de Compuestos Aromáticos (LIDA) donde cumplen un papel clave a nivel internacional en la búsqueda de alternativas para tratar contaminantes emergentes en las aguas residuales.
Los contaminantes emergentes son sustancias de uso doméstico como los fármacos, los antibióticos, productos de cuidado personal o la cafeína que se descartan a través de las aguas residuales y podrían provocar efectos tóxicos crónicos en los ecosistemas y la salud humana.
La enzima Pycnoporus sanguineus cepa CS43, fue descubierta por un grupo de investigación del Instituto Tecnológico de Monterrey en el Cerro de la Silla en Monterrey. Entre sus ventajas está que resiste a altas temperaturas y sobrevive por más de 1.000 días.
Este tipo de enzimas (llamadas lacasas), que están en los hongos de la podredumbre blanca, son de gran interés para los científicos porque actúan rompiendo las estructuras de moléculas complejas y así pueden degradar diferentes tipos de contaminantes orgánicos como los plaguicidas y los contaminantes emergentes.
Para avanzar en el estudio de estas enzimas a nivel iberoamericano el CICA aportará su capacidad de análisis y experiencia en el estudio de contaminantes orgánicos. “Gracias a la capacidad analítica que tenemos, podremos hacer las determinaciones de estos contaminantes e ir evaluándolos en el tiempo” acotó la investigadora Marta Pérez Villanueva, miembro del equipo investigador del CICA.
El aporte del equipo costarricense a la red LIDA se hará posible mediante el proyecto inscrito en la Vicerrectoría de Investigación de la Universidad de Costa Rica 802-B8-513: Fortalecimiento del uso de lacasas inmovilizadas para la degradación de compuestos aromáticos en aguas residuales en Costa Rica.
El Foro Actividad Piñera en Costa Rica. Aportes, problemas y soluciones: una reflexión académica organizado por la Comisión Especial del Consejo Universitario logró reunir este martes 30 de octubre en la Universidad de Costa Rica (UCR) a actores relacionados con el cultivo de la piña con visiones diametralmente opuestas en un espacio de discusión académico.
Miembros de la Cámara Nacional de Productores de Piña y del Frente Nacional de Sectores Afectados por la Producción Piñera se encontraron en la UCR, donde presentaron las dos caras de la moneda de este polémico cultivo (foto: Laura Rodríguez Rodríguez).
En el foro, que se realizó en el auditorio de la Ciudad de la Investigación, también se dieron a conocer resultados de investigaciones realizadas por diferentes unidades académicas, programas y centros de investigación de la Universidad de Costa Rica (UCR) para aportar al conocimiento de las problemáticas relacionadas con el cultivo y posibles soluciones para reducir su impacto en el ambiente.
Este foro se realizó como antesala a la presentación del nuevo pronunciamiento que prepara el Consejo Universitario sobre la actividad piñera en Costa Rica que será anunciado en los próximos días. Hace 10 años, en 2008, este órgano colegiado había emitido un pronunciamiento donde recomendaba al Gobierno y las Municipalidades una moratoria a la actividad piñera.
Mauricio Álvarez y Karina Valverde del Programa Kioscos Ambientales mostraron su preocupación por la expansión piñera, misma que impulsó a este programa a solicitar al Consejo Universitario una actualización del pronunciamiento del 2008.
Cultivo exitoso
El éxito comercial de la piña es innegable, Costa Rica es hoy el líder mundial del mercado en piña fresca y este cultivo se ha convertido en el principal producto agrícola del país (genera el 30% del PIB agrícola), según datos del Ministerio de Comercio Exterior (Comex) presentados por Víctor Umaña Vargas.
Uno de los puntos a favor que destacó Umaña es que esta actividad genera encadenamientos productivos y casi 32 mil empleos directos y 15 mil indirectos en las zonas más deprimidas del país, en términos económicos y de desarrollo humano, como los son las zonas costeras y fronterizas.
El funcionario de Comex además mostró datos de una encuesta realizada a los productores de piña para evaluar el desempeño de sus fincas en aspectos económicos, ambientales y sociales. El estudio demuestra un grado de cumplimiento satisfactorio de las grandes fincas en casi todas las 75 variables, mientras que las fincas pequeñas (menores a 100 hectáreas) son las que presentan fallas en aspectos como manejo de las aguas, manejo de residuos líquidos, residuos de aplicaciones postcosecha, entre otros.
«La piña tiene años de estar en los primeros tres lugares de calificación de los productos frescos más limpios que llegan al mercado estadounidense» acotó el empresario Alfredo Volio, de Upala Agrícola.
El punto de vista de Comex fue secundado por el empresario Alfredo Volio, de Upala Agrícola, una empresa que emplea a 1.000 personas. Volio, quien además funge como vice-presidente de la Cámara Nacional de Productores de Piña (Canapep) dijo que “esa visión apocalíptica que lo que dice es que la piña es veneno y agroquímicos no es así”. Por el contrario, cada uno los encadenamientos relacionados con la producción de piña genera desarrollo, empleo, riqueza y bienestar a familias que están indirectamente relacionadas con la prestación de servicios y/o productos que se usan para la producción, acotó el empresario.
Volio argumentó que la producción de piña es la actividad agrícola más regulada en Costa Rica por instancias nacionales como el MINAE, el SFE y el Ministerio de Trabajo, entre otras, y en el caso de la empresas exportadoras también están sujetas a certificaciones internacionales que les obliga a cumplir con la normativa nacional e internacional en materia de sostenibilidad ambiental y derechos laborales.
Comunidades en alerta
Por su parte, Erlinda Quesada Angulo, Frente Nacional de Sectores Afectados por la Producción Piñera dio testimonio de las afectaciones que sufren las comunidades de Guácimo rodeadas por las piñeras. Quesada recordó también el caso de la contaminación de las fuentes de agua de la comunidad de Milano de Siquirres que tuvo a la comunidad tomando agua de camiones cisternas por varios años.
Ella señaló que la contaminación provocada por las piñeras en esa zona le costó al AyA y a todos los costarricenses 374.480 millones de colones para la construcción de un nuevo acueducto. Un costo que, según Erlinda, deberían asumir las empresas responsables de la contaminación.
“Lo que pedimos son 5 años de moratoria para que se hagan los estudios y ver si realmente vale la pena el costo humano y ambiental de sembrar piña y si estamos dispuestos a seguirlo pagando” acotó la líder comunal de Guácimo, Erlinda Quesada. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez.
Una de las principales preocupaciones expuestas en este foro por los miembros del programa Kioscos Ambientales de la Vicerectoría de Acción Social (VAS) Karina Valverde Salas y Mauricio Álvarez Mora es el desplazamiento de las actividades agrícolas por la expansión piñera que ha avanzado en los últimos diez años principalmente en cantones fronterizos Upala, Guatuso y Los Chiles.
Valverde explicó que entre el 2004 y 2015 se presentaron 47 proyectos piñeros ante la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (SETENA), sin embargo señalaron que hay muchos proyectos más que no están registrados. De los 30 proyectos que obtuvieron viabilidad se detectaron dos proyectos ubicados dentro de humedales seis ubicados a menos de 300 metros de ríos e incluso cinco casos que tienen ríos que pasan dentro de la propiedad.
Un estudio realizado por el programa de los proyectos piñeros presentados al SETENA para obtener la viabilidad ambiental entre el 2004 y 2015 evidencia un fuerte crecimiento de la actividad en esta zona.
Otros problemas como los incumplimientos de derechos laborales, la contaminación de aguas y los efectos de la actividad piñera en la salud pública fueron expuestos durante el foro. Así mismo, se presentaron dos propuestas para el manejo y valorización de rastrojo de la piña que representa uno de los principales problemas de contaminación de produce esta actividad e información sobre la biología y combate de la mosca de establo.
En este espacio académico los asistentes tuvieron la oportunidad de hacer sus preguntas y cuestionamientos a cada uno de los expositores. Así mismo, cada sector tuvo un espacio para presentar su visión sobre los pros y contras del cultivo de la piña en Costa Rica.
Según una reciente estadística, en Costa Rica más de 550 toneladas de plástico terminan en el mar. A nivel mundial, la producción de plástico se ha duplicado en los últimos 10 años y va en aumento, mientras que sólo una pequeña parte de los residuos de plástico están siendo reciclados.
Este no es un panorama alentador, a menos que tengamos una conciencia de cambio masiva. La Organización Mundial de la Salud ha declarado al plástico como un problema de salud debido a la sobre producción del plástico y son muchas las enfermedades que puede ocasionar en la población.
La mitad del plástico que producimos es de un solo uso. Esto incluye botellas, empaques de alimentos, tazas de café, pajillas, bolsas y comida para llevar, entre otros. Es muy probable que, consciente o no, hoy hayás tirado un tanto de este plástico a la basura. Estos artículos están diseñados para ser usados unos cuantos minutos, pero estarán en nuestro planeta dentro de 100 años.
Cada vez que rechazás el plástico, es un gane para el océano. Si lo pensás, es una pieza de plástico menos en el mar. He aquí algunos consejos para reducir el consumo de plástico:
No más agua embotellada: En lugar de comprar botellas de agua, que luego van a dar a la basura, mejor usá una botella reutilizable en el mercado las hay de diferentes materiales como aluminio y vidrio.
Adiós a las pajillas: ¡Ni de broma! Este es un artículo que realmente no se necesita.
Casáte con las bolsas reutilizables: No requieren mucho espacio, son fácil de lavar, las podés utilizar tantas veces como las necesités y son muy resistentes.
Evitá las carnes congeladas: Usualmente las carnes en los supermercados, ya vienen empacadas en bandejas forradas en plástico. En lugar de eso, llevá tus propios recipientes y decíle no a la bolsa.
¡Cuidado con los empaques!: De ser posible, comprá productos que vengan en empaques de cartón o vidrio.
Productos a granel: Esta es la forma más fácil de olvidarse de las bolsas en granos en general. En Costa Rica hay ciertos lugares donde podés comprar los granos a granel y transportarlos en tus propios recipientes.
Evitá los productos desechables: Si, ya sabemos que es complicado. Pero en la medida de lo posible, tratá de controlar el consumo.
Si tenés bebés, tratá de utilizar pañales de tela.
¿Vos, qué hacés para reducir el consumo de plástico desechable?
Por: Byron Barillas y Luis Bonilla /Académicos de la Escuela de Ciencias Sociales y Humanidades de la UNED
San José, C.R. (2018)
Como parte de la investigación que venimos desarrollando desde mediados del año 2017 en varias zonas del país sobre el tema del agua, a finales de enero y principios de febrero del presente año nos correspondió hacer entrevistas en los cantones de Guápiles y Guácimo. En este último cantón descubrimos algo que para el equipo investigador es un hallazgo relevante, para entender parte de la problemática en torno al agua que se vive en ese cantón, y que de alguna forma, también podría explicar la de las otras zonas involucradas en dicho estudio, aunque con sus propias especificidades.
El contexto específico del hallazgo ocurrió ante la pregunta a una líder y dirigente comunal muy experimentada de Guácimo, que trataba de indagar, cuáles instituciones asumen con responsabilidad sus funciones con respecto al tema de la contaminación del agua, producida por la actividad piñera en varias comunidades. Ante lo cual responde que no hay una responsabilidad de las instituciones que sea parte de una “política institucional”, sí puede notarse el compromiso de personas, que la asumen desde una postura ética de su trabajo, como es el caso de algunas personas del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) que manifiestan un compromiso con el problema de la contaminación del agua y están apoyando a las comunidades.
También considera que, ante algunos lineamientos de política como lo es, el decreto del Estado para producir “piña responsable” orientado a mejorar las prácticas de este cultivo, no existe una reglamentación específica diseñada para hacer efectivo este decreto. Además, aunque hay un cuerpo de leyes ambientales que sirven de marco para que las instituciones hagan su trabajo, tampoco se cumplen; aunque, esto se matiza con el hecho que algunas instituciones carecen de personal para operar la legislación ambiental; por ejemplo cuando algún funcionario se pensiona en algunas instituciones del MINAE no se reponen esas vacantes.
La NO política, en este caso, hace referencia a esa especie de “vacío institucional” en que aparentemente funcionan algunas instituciones; aunque, paradójicamente, exista una nutrida legislación nacional para que estas desarrollen su labor de protección y fiscalización. En la entrevista, sin embargo, se destaca el caso de la municipalidad de Guácimo, donde se indica que no ha existido en el pasado reciente, un esfuerzo del gobierno local por establecer algunas políticas específicas orientadas a la protección del recurso hídrico del cantón. Aunque ha habido iniciativas de algunos líderes comunales para que el gobierno local asumiera por ejemplo alguna medida de protección de las zonas de recarga acuífera en la parte sur del cantón de Guácimo, de donde se obtiene el agua para buena parte de sus habitantes.
Este desinterés por crear políticas específicas de protección del recurso hídrico, asimismo, de apegarse a la normativa del campo ambiental para fiscalizar y corregir los abusos de algunas empresas piñeras o bien de desarrolladores de proyectos habitacionales que contaminan el agua, es lo que estamos entendiendo por el ejercicio de la “NO política”; así, la NO política, es la otra forma de “hacer” política, pero esta vez en términos de omisión e incluso de negligencia.
Por otra parte, la política en su sentido propositivo, que adversa a la “NO política”, la rescatamos de una experiencia de democracia directa llevada a cabo en este cantón, esa experiencia es el plebiscito, una novedosa forma de ejercer la ciudadanía política en contextos donde se deben dirimir temas conflictivos; que en el caso de Guácimo, y creemos que a nivel nacional, constituye un experimento exitoso de protección del recurso hídrico utilizando dicho mecanismo de democracia participativa. Haciendo una breve reseña, ese proceso de plebiscito que comenzó en el año 2001 a iniciativa de organizaciones sociales defensoras del agua para impedir la construcción de una hidroeléctrica por parte de una empresa privada, con el aval inicial del ICE y del mismo gobierno local, tuvo al final un resultado exitoso para la gestión de democracia participativa que logró anular la autorización para que se construya dicha represa.
El proceso fue arduo y rico en enseñanzas, sobre todo para las comunidades de Guácimo que ganaron el plebiscito al gobierno local que favorecía la hidroeléctrica, producto de una labor de convencimiento por parte de líderes comunales que desplegaron mucha energía al seno de las organizaciones populares y comunales. Nos parece válido señalar, que ese ejercicio democrático sigue estando en el reservorio de la memoria colectiva de las comunidades para enfrentar la “NO política” que se ha venido reinstalando como práctica nociva, para una auténtica defensa del recurso hídrico en dicho cantón.
Para fines analíticos del estudio, la categoría de la “NO política”, que surge de indagaciones empíricas, será de mucha utilidad en futuras reflexiones académicas, al brindar nuevos elementos e ir construyendo un marco teórico más elaborado para explicar la problemática del recurso hídrico desde el punto de vista socio-político.
Contaminación de agua preocupa a comunidades vecinas de piñeras
Marco legal costarricense se flexibiliza en beneficio de la venta de venenos
Este 6 y 7 de agosto se reunieron en San José representantes de comunidades afectadas por el agro-negocio. Es de esta forma que personas víctimas del despojo, la contaminación y la explotación producidas por los principales monocultivos expandidos por Costa Rica.
Esta reunión se da en un contexto en el cual el país se encuentra en una crisis de la contaminación del agua con agrotóxicos usados en la expansión piñera. Evidencia son los dados revelados en las últimas semanas sobre la presencia de agroquímicos en Pital de San Carlos y Río Cuarto de Alajuela. Lamentable es además que la Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña (CANAPEP) piensan que la gente tiene que tomar obligatoriamente agua con residuos de sus agroquímicos. Mientras el Estado gasta millones remediando a medias la crisis, las empresas se desmarcan de su acto criminal.
Para Erlinda Quesada del Frente Nacional de Sectores Afectados por la Expansión Piñera “es necesario pedir justicia y que los responsable paguen las consecuencias y que las comunidades reciban agua sin ningún agroquímico.”
Por otro lado el Decreto Nº 35301 MAG-MEIC-S Norma RTCR, de Límites Máximos de Residuos de Plaguicidas en este sentido Henry Picado de la FECON afirma que: “esta es una forma de legalizar la contaminación en nuestra agua pública sirven para hacer legal la contaminación de agua y por lo tanto le dan herramientas a las empresas y el Estado para darnos agua contaminada.”
Desde inicios del mes de julio la Federación Costarricense para la Conservación de la Naturaleza (FECON) le ha solicitado al director del Servicio Fitosanitario del Estado, Fernando Araya Alpizar información sobre el registro de más de cuatrocientos agrovenenos en los últimos años mediante la Ley Nº 8702 sobre el Trámite de las Solicitudes de Registro de Agroquímicos. Muchos de ellos sin análisis ecotoxicológicos o permisos sanitarios, pese a eso estos cuatrocientos agrotóxicos se usan en el país registrados con poca transparencia.
Para Picado la situación “…lejos de parar el riesgo de contaminación el peligro se agrava ya que se sabe que están a la espera de aprobación 28 solicitudes de ingreso al país de nuevos Ingredientes Activos de Grado Técnico (IAGT), la mayoría propiedad de Bayer, Syngenta, Dow, DuPont o BASF. (SFE, 31-05-2018). Todas grandes transaccionales cuestionadas por sus irresponsabilidad en el manejo de los agroquímicos.”
Pero es aún más preocupante cuando sabemos que las puertas giratorias en Costa Rica hacen que representantes de las casas comerciales de agrovenenos entren y salgan del MAG como perros por su casa. Por ejemplo el asesor estrella del Ministro de Agricultura y Ganadería fue representante de la Cámara Nacional de Productos Genéricos y acusado supuesto tráfico de influencias con empresas de agrovenenos (FECON, 21-05-2018) investigado por la misma Asamblea Legislativa.
En resumen en este momento estamos ante un escenario de crisis por la contaminación por agrotóxicos en agua potable mientras los vendedores de los venenos gobiernan la materia de registro y permisos de agroquímicos.
En este contexto representantes de organizaciones comunitarias se reúnen en San José el 6 y 7 de agosto en el II Encuentro de Personas Afectadas por el Agronegocio. Conjuntamente analizan el contexto nacional sobre esta crisis de contaminación. Organizado por CoecoCeiba Amigos de la Tierra, FECON, FRENASAPP, Kioscos Ambientales, Escuela de Ciencias Políticas de la UCR y CEDARENA.
Autoridades no han realizado ninguna acción al respecto y son las comunidades quienes toman cartas en el asunto
Ya se suman cuatro acueductos comunitarios afectados por la expansión piñera en menos de un año
FECON, 24 de julio 2018. Contaminación con herbicida bromacil, prohibido desde 2017, sigue reportándose en agua para consumo humano, además de bromacil se ha encontrado, miclobutanil, oxamil,butóxido de piperonilo y triadimefón en fuentes de agua de Pital y Rio Cuarto, autoridades tienen conocimiento de esto desde 2016 pero no han informado a las poblaciones.
Ha pasado más de un mes de haberse descubierto que le Centro de Investigación en Contaminación Ambiental (CICA) y el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) han escondido datos sobre la contaminación de agua en Pital y Río Cuarto. El CICA pasado jueves 19 de julio en la Comisión Especial de Ambiente de la Asamblea Legislativaadmitió no haber a los miembros de ASADAS afectadas y tampoco a la autoridades de Salud.
Según trascendió de la audiencia la funcionaria del CICA Laura Brenes, afirmó que: “existe un acuerdo verbal para dar confidencialidad al proyecto en general y que toda la información del estudio se canalizara por medio del Servicio Fitosanitario del Estado”. Esta supuesta cláusula de confidencialidad no se ha confirmado y se ha cuestionado que estos datos sobre la calidad de agua para consumo humano se escondieran por más de dos años pese al conocimiento del CICA y del SFE.
Mientras tanto este informe no ha sido difundido aún a la opinión pública pese a confirmar la contaminación con agroquímicos en acueductos de comunidades de Pital y Río Cuarto. Propiamente el informe del estudio mencionado (descargable acá) confirma que la ASADA La Tabla y El Pinar; de la Santa Rita de Río Cuarto; la naciente Nicrodal; la naciente La Flor de la ASADA de Santa Isabel; la ASADA de Cariblanco de Sarapiquí; la ASADA de La Legua; la naciente de Palmar de Pital de la comunidad de Los Ángeles; la ASADA de la comunidad de Chirivico y CoopeIsabel y la ASADA de Veracruz de Pital se encuentran contaminadas desde 2015.
Por su lado esta semana la ASADA de Santa Isabel de Pital decidió clausurar una de sus fuentes de agua por sospecha de contaminación debido a un reporte del Laboratorio Nacional de Aguas del AyA por presencia de bromacil (Santa Isabel, julio 2017).
Además la ASADA de la Tabla y el Pinar de Rio Cuarto también ha reportadoafectación y cierre de fuentes de agua a acusa de contaminación por agroquímicos relacionados a la piña.
Si tomamos en cuenta a Veracruz de Pital (Asada intervenida en 2017 por el AyA) ya se contabilizan cuatro acueductos comunitarios afectados en los últimos meses debido al descontrol de la actividad piñera.
Esta situación causa alarma en la población y por eso ya en Pital el jueves anterior se dio una movilización para solicitar a las autoridades locales no permitir el cultivo de nuevas plantaciones de piña en este distrito de San Carlos.
Esta crisis por contaminación no es nueva ya que se tienen antecedentes lamentables como lo sucedido en Milano, el Cairo y la Francia de Siquirres los cuales en 2003 fue descubierta la contaminación con el herbicida bromacil y otros 22 agroquímicos en las fuentes de agua comunitarias. Hasta la fecha el problema persiste en Milano dónde se han recibido agua en camiones cisterna durante 15 años debido a que la ASADA de la zona sigue encontrando agroquímicos en sus nacientes que están vecinas a la empresa Hacienda Ojo de Agua relacionada con la multinacional Del Monte.
Henry Picado Cerdas
Federación Costarricense Para la Conservación de la Naturaleza
Teléfono: 8760 9800
Imagen ilustrativa tomada de la nota: Persiste la contaminación son agroquímico prohibido.
La investigación del CICA-UCR y del SFE se está realizando desde el 2015 y finalizará este 2018
Los expertos rindieron un informe a la Comisión de Ambiente, en la audiencia de este jueves 19 de julio
El Vicerrector de Investigación, Fernando García Santamaría, y los investigadores del CICA-UCR, Laura Brenes y Greivin Pérez, presentaron los detalles del estudio ante la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa este 19 de julio de 2018.
Los expertos del Centro de Investigación de Contaminación Ambiental (CICA-UCR) junto con el vicerrector de Investigación de la Universidad de Costa Rica (UCR), Dr. Fernando García Santamaría, presentaron ante los diputados y diputadas de la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa los principales resultados del estudio “Caracterización de las prácticas agrícolas y el uso y manejo de agroquímicos en el cultivo de piña, para la implementación de buenas prácticas agrícolas”.
Los resultados parciales del estudio, elaborado por el CICA-UCR para el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), se dieron a conocer a la opinión pública el mes pasado. Estos revelaron la presencia de bromacil y otros plaguicidas como ametrina, hexazinona y diurón en ríos, quebradas, pozos y nacientes de las localidades de Aguas Zarcas, Pital y Venecia de San Carlos, Río Cuarto y Sarapiquí. Sin embargo, el estudio completo concluirá hasta diciembre de este año.
El Vicerrector de Investigación, Fernando García Santamaría, y los investigadores del CICA-UCR, Laura Brenes y Greivin Pérez, fueron los encargados de presentar los detalles del estudio ante la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa. En la fotografía se observa a los investigadores presentando los resultados parciales del estudio, en una conferencia de prensa el pasado junio (foto del Archivo ODI).
Los investigadores detallaron los puntos donde se tomaron las muestras tanto de ríos y quebradas (aguas superficiales) como de pozos y nacientes (aguas subterráneas) que pertenecen a varias Asadas de la zona. Al respecto, el investigador Greivin Pérez acotó que las muestras se tomaron antes de que el agua llegara a la red de distribución y previo al tratamiento por parte de las Asadas.
Bromacil: el plaguicida más detectado
El plaguicida bromacil fue detectado en todas las campañas de muestreo realizadas en aguas superficiales en el 2015, 2016 y 2017, en diferentes puntos de las quebradas Huevo y Pital, así como en diferentes puntos del río Toro y del río Cuarto que incluyen las quebradas Grande, El Suspiro y Sonora y el río Caño Negro. En total se tomaron en cuenta 22 puntos de muestreo de ríos y quebradas que atraviesan los distritos de Pital, Aguas Zarcas, Venecia, Río Cuarto y la Virgen de Sarapiquí.
El bromacil también apareció consistentemente en las aguas de pozos y nacientes durante todas las campañas de muestreo que se realizaron entre el 2015, 2016 y 2017, en las localidades de Veracruz de Pital, La Tabla (La Victoria) y Santa Rita (La Flor) de Río Cuarto. En total se muestrearon 10 puntos de aguas subterráneas que incluyeron La Tabla, Santa Rita (Nicrodal) de Río Cuarto, Cariblanco de Sarapiquí y La Legua, Palmar, Los Ángeles y Chirivico, en Pital.
Durante la comparecencia del 19 de julio de 2018, los diputados y las diputadas de la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa consultaron los resultados del estudio presentado por el CICA-UCR.
Los investigadores del proyecto, Greivin Pérez y Laura Brenes, explicaron que en el 2016 cuando ya contaban con más datos de los muestreos realizados se reunieron con el presidente y el administrador de la Asada de Veracruz de San Carlos y con representantes del AyA y del Ministerio de Salud de la zona para informarlos. Asimismo, atendieron la invitación de la Alcaldía de la Municipalidad de San Carlos para referirse a este tema en el 2016.
De esa forma se respondió a la consulta de los diputados José María Villalta (Frente Amplio) y Mario Castillo Meléndez (Partido Acción Ciudadana), quienes consultaron si el CICA-UCR había informado los hallazgos de esta investigación a las Asadas de las comunidades que podrían estar siendo afectadas, como las de Venecia y Pital de San Carlos.
La Asada de Veracruz de San Carlos solicitó al CICA-UCR realizar más estudios en el agua que los abastece. Con estos resultados se tomó, en el año 2016 por parte del Ministerio de Salud, la medida sanitaria de cerrar dos pozos de la Asada, según admitieron los investigadores.
El mapa presentado por el CICA muestra los puntos donde se tomaron las muestras de aguas superficiales a lo largo de las subcuencas de los ríos Tres amigos, río Cuarto, río Toro y río Sahino, quebrada Pital.
Información clave
Ante las consultas de los diputados, los investigadores y el vicerrector de la UCR detallaron que desde el 2015, el CICA-UCR recomendó al Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) elevar esta información a las autoridades competentes para que se tomaran las medidas del caso. En el 2017, el exministro de Agricultura y Ganadería (MAG) Luis Felipe Arúz informó al Ministerio de Salud, no obstante, ellos manifestaron no tener conocimiento sobre las medidas que tomaría el Ministerio de Salud tras esta misiva.
Los diputados cuestionaron el manejo de la información sobre los resultados del proyecto, a lo cual el vicerrector de Investigación de la Universidad, Fernando García, aclaró que aunque la carta de entendimiento entre la UCR y el SFE para realizar el proyecto no incluye una cláusula de confidencialidad, sí existía un acuerdo verbal de que sería el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) la institución que manejaría la información y divulgación del estudio.
Por su parte, la diputada de Liberación Nacional Aida Montiel consultó si se han realizado más muestreos después de la prohibición del bromacil que hizo el Gobierno en mayo de 2017, tal consulta fue secundada por el diputado Villalta. Los investigadores del CICA-UCR aclararon que no se han realizado muestreos desde inicios de 2017 ya que el SFE decidió no hacer más, a pesar de que ellos recomendaron continuar con los estudios.
Para continuar recabando información sobre este tema, la Comisión de Ambiente, que investiga la contaminación provocada por el cultivo de piña en Costa Rica, recibirá en audiencia a representantes del Servicio Fitosanitario del Estado el próximo lunes 23 de julio.