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Etiqueta: geopolítico

¿Impeachment contra Bolsonaro?

El “escenario teleológico” sería aquel en el que “la finalidad” de los procesos creativos era planeada por modelos finitos que podían intermodelar o simular varios futuros alternativos y en los que primaba la intención, el propósito y la previsión, pero tras el triunfo de Bolsonaro asistimos a la irrupción del “escenario teleonómico” que vendrá marcado por dosis extremas de volatilidad.

Germán Gorraiz López*

Triunfo de Bolsonaro

Tras el khaos surgido en una sociedad brasileña corroída por la corrupción y que alcanzó al entonces Presidente Temer, se produjo el triunfo en el balotaje del ultraderechista Jair Bolsonaro quien conformó un Gobierno tutelado por la Administración Trump con el objetivo confeso de convertir a Brasil en el paradigma del nuevo orden geopolítico y económico del establishment neocon de EE.UU en América Latina y el Caribe. Dicho plan se basaría en lo económico en la absorción por la Alianza del Pacífico de las actuales estructuras económicas supranacionales (ALBA y MERCOSUR) y en lo político en sustituir a los Gobiernos refractarios a los dictados de Washington (Nicaragua y Venezuela) por Gobiernos que gravitarán en la órbita de EEUU. Asimismo, la Administración Trump consideraba a Brasil como un potencial aliado en la escena global al que podría apoyar para su ingreso en el Consejo de Seguridad de la ONU tras la asunción por Brasil del papel de «nuevo gendarme neocon” en Sudamérica. Así, se preparaba la entrada de Brasil en la OTAN como “socio global” como ya hiciera en su día Colombia, con lo que se estaba tejiendo la telaraña que intentará la invasión de Venezuela en el horizonte del 2022 y de lo que sería paradigma la apertura conjunta con EEUU, Perú y Colombia de una base militar en pleno corazón del Amazonas, proyecto conocido con el nombre de Amazonlog 17, proyecto que tras la victoria de Joe Biden quedará en el olvido.

Bolsonaro y la herencia trumpiana

El ideario de Bolsonaro incluyó los puntos esenciales del ideario trumpista: Maniqueísmo, uso de las fake news, culto al líder y finiquito de lo “políticamente correcto”. Así, el pensamiento de Bolsonaro sería rígido e incorregible: no tiene en cuenta las razones contrarias, sólo recoge datos o signos que le confirmen el prejuicio para convertirlo en convicción y sufre de un delirio de grandeza que provoca que “el individuo se crea dotado de un talento y un poder extraordinarios debido a que las deidades le han elegido para una alta misión” (Derrotar al Socialismo). Asimismo poseería un ADN dotado de la triple enzima trumpista (autocracia,instauración del paraíso neoliberal y retorno al “pensamiento único heteropatriarcal”) y perseguiría la instauración de un sistema autocrático, forma de gobierno ejercida por una sola persona.

La autocracia, del griego autos (por sí mismo) y kratos (poder o gobierno), sería la forma de Gobierno ejercida por una sola persona con un poder absoluto e ilimitado, especie de parásito endógeno de otros sistemas de gobierno (incluida la llamada democracia formal), que partiendo de la crisálida de una propuesta partidista elegida mediante elecciones libres llegado al poder se metamorfosea en líder Presidencialista con claros tintes autocráticos (inflexible, centralista y autoritario), lo que corrobora la tesis de Lord Acton “El Poder tiende a corromper y el Poder absoluto, corrompe absolutamente”.

Los sistemas autocráticos (gobiernos de facto), serían pues una especie de dictaduras invisibles sustentados en sólidas estrategias de cohesión (manipulación de masas) y represión social (promulgación de Decretos-Leyes que rozarían la constitucionalidad pero que quedarán revestidos por el barniz democratizador del Tribunal Constitucional), síntomas evidentes de la deriva totalitaria del Gobierno de Bolsonaro tutelado por las Fuerzas Armadas. Como en el caso de Trump, la propaganda de Bolsonaro estuvo dirigida no al sujeto individual sino al Grupo en el que la personalidad del individuo unidimensional se diluye y queda envuelta en retazos de falsas expectativas creadas y anhelos comunes que lo sustenta y su estrategia electoral se basó en el lema de Trump (Ley y Orden) y en la defensa a ultranza del neoliberalismo fascista como último reducto de las libertades individuales frente al “Estado Totalitario Socialista de Lula”.

¿Se prepara el impeachment contra Bolsonaro?

Bolsonaro se habría convertido en el vivo reflejo de la incongruencia trumpiana que consigue desarbolar cualquier estrategia opositora que sea mínimamente racional y como en el caso de Trump, sus controvertidas decisiones y manifestaciones rozarían la megalomanía, “entendido como delirio de grandeza que provoca que el individuo se crea dotado de un talento y un poder extraordinarios debido a que las deidades le han elegido para una alta misión” (implementar el paraíso neoliberal fascista en Brasil ). La paranoia de Bolsonaro se habría agravado al verse afectado por el llamado “sindrome de hydris” citado por el médico y político inglés David Owen en su obra “The Hybris Syndrome: Busch, Blair ant the Intoxication of Power”, término que procede de la palabra griega “hybris” y que significa desmesura.

Así, la frivolización del coronavirus por parte de Bolsonaro ( el coronavirus es una gripecilla) así como su negativa a adoptar medidas quirúrgicas en los principales focos de transmisión del coronavirus de Brasil, ha derivado en una auténtica pesadilla con sus consiguientes efectos colaterales en forma de reguero de contagios (cerca de los 14 millones); de muertos (más de 360.000 fallecidos), colapso de los servicios médicos, paralización de la actividad productiva y entrada en recesión de la economía, panorama dantesco ante el que Bolsonaro sólo es capaz de exclamar que “Brasil es un barril de pólvora” debido a las restricciones implementadas por Gobernadores locales como el de Sao Paulo, Joao Doria que ha calificado a Bolsonaro como “líder psicópata”. Sin embargo, Joe Biden habría dado por amortizado a Bolsonaro y busca su defenestración política y el primer movimiento sería la ratificación por la Corte Suprema brasileña de la creación de una comisión en el Senado para investigar la actuación de Bolsonaro en la actual pandemia, no siendo descartable un próximo impeachment contra él acusado de “dejación de funciones y no salvaguardar la vida de los brasileños” tras el que Bolsonaro quedará abandonado a su suerte y a merced de los futuros procesos judiciales que le aguardan.

* Analista

 

Foto: https://radio.uchile.cl

UCR: Consejo de Sedes denuncia ataques contra universidad estatal

El Consejo de Área de Sedes Regionales publicó en el Semanario Universidad una declaración en la cual denuncia los ataques contra la universidad estatal.

El documento, -que puede leerse también en la página 20 de la edición de esta semana del medio informativo universitario-, señala que esos ataques son organizados por ciertos espacios de difusión con el apoyo de “intereses espurios”. El escrito detalla las circunstancias nacionales e internacionales que motivan los ataques.

El siguiente es el documento publicado por el Consejo de Área de Sedes Regionales de la Universidad de Costa Rica y que fue enviado a SURCOS:

El Consejo de Área de Sedes Regionales: frente a los ataques contra la universidad estatal costarricense

MANIFIESTA:

Ante la sistemática campaña de ataque contra de la universidad estatal costarricense, y en especial, contra la Universidad de Costa Rica, organizada por ciertos medios de comunicación colectiva y apoyada desde intereses espurios, es importante que las y los costarricenses, hagamos uso de las herramientas del análisis crítico y de aquellas acciones, encaminadas a romper con la desinformación y las intenciones que implementan dichos medios.

Es necesario destacar que esta situación, antes que un hecho aislado, responde a un interés estratégico geopolítico, tendiente al debilitamiento del Estado y de sus más importantes instituciones. Esto es común en diversos países de América Latina, donde las universidades estatales han sufrido el embate de los medios de información, en algunos casos, distorsionando hechos y, en otros, difamando el quehacer de estas casas de estudio, afectándolas negativamente y, consecuentemente, deteriorando el desarrollo científico y profesional de las sociedades.

Costa Rica no es excepción, la campaña organizada contra la universidad estatal forma parte de esta estrategia de carácter internacional. Obviamente en nuestro país, existen personas pertenecientes a los grupos dominantes minoritarios, que actúan de esa forma “disconformes” con la labor que realizan las universidades estatales en el marco de un quehacer académico solidario y de transformación social democrático, en un accionar comprometido con el bienestar de la mayoría de los y las costarricenses, en el caso de nuestra Alma mater, a través de sus tres actividades sustantivas: la docencia, la investigación y la acción social, y con la atención humanística e integral concretada para con la población estudiantil.

Estas personas “disconformes”, en confabulación con los medios de comunicación y utilizando los poderosos recursos con que cuentan, tienen como objetivo, convencer a la opinión ciudadana de que la educación superior no es un bien público, que se debe de condicionar el actuar de las universidades y reducir el presupuesto, violentando la autonomía de las mismas. Tales medidas van encaminadas a negar a miles de jóvenes el ingreso a la universidad y expulsar a muchos otros que se encuentran en ella, por su origen económico, cultural, regional. Si permitimos que esta situación se dé, se destruiría el principio de equidad, sostén de una educación democrática, inclusiva y no discriminadora socialmente.

La Universidad de Costa Rica en cumplimiento con observando el mandato de su Estatuto Orgánico, cumple con el propósito de fomentar la conciencia crítica de la ciudadanía costarricense y pone en alerta a la población en relación con los diversos problemas que afectan la justicia social, económica, cultural y ecológica de las mayorías de este país. La condición dialógica y la misión crítica de nuestra universidad, son elementos imprescindibles para formar profesionales de conciencia lúcida, solidarios y seres humanos integrales.

Para algunos intereses, este tipo de educación es un privilegio e incluso un peligro y no debería ser un derecho. Al parecer más convendrían masas de ciudadanos sin nivel crítico y sin formación integral.

Si consideramos seriamente lo anterior, la campaña mediática que hace uso del amarillismo periodístico, ya no es una sorpresa y pierde sus efectos, pues la distorsión, la hiperbolización y la descontextualización de la información sobre situaciones de la vida interna de las universidades, quedan al desvelo por sus pretensiones nefastas y profundas. En todo caso, tampoco se debe pecar de ingenuidad y hay que tener la claridad suficiente para comprender las aristas de esta situación, entre ellas, el hecho que esta campaña se realiza en la coyuntura de la negociación presupuestaria del FEES.

Debe recordarse que el financiamiento de la universidad estatal costarricense, es un mandato constitucional, cuyo porcentaje aun no se cumple, y que corroer la imagen universitaria, para justificar simultáneamente una reducción del presupuesto, no debe ser aceptado desde ninguna perspectiva. Si ello sucediera, se pone particularmente en peligro la regionalización, con lo que se debilitaría el más importante programa democratizador.

El desfinanciamiento de las universidades estatales, afectaría sensiblemente el crecimiento y desarrollo de la regionalización y su labor de ampliación de la oferta académica, en respuesta a las necesidades de cada zona y el país en general.

Ante tan detestable contexto, corresponde a todos los universitarios defender al unísono y sin escatimar esfuerzo a nuestra “Casa de Estudios”, así como su autonomía y su hacienda, y los principios más auténticos de la universidad estatal costarricense. Es por ello, que el Consejo de Área de Sedes Regionales, conformado por Directores y Directoras de Sedes Regionales, manifiesta su preocupación y condena cualquier acción que, desde dentro de la propia institución, se preste a maniobras que ponen entredicho la autonomía universitaria y dañen la imagen del Alma mater, confabulándose con los intereses externos.

Reafirmar los derechos de nuestra ciudadanía implica en este contexto, defender un pilar fundamental de nuestra democracia: la universidad estatal costarricense; baluarte de la formación democratizadora, equitativa, humanística, creativa y transformadora, por lo que hacemos un llamado, a la comunidad universitaria y a la ciudadanía costarricense, a sumarse sin tregua en esta lucha y participar en el movimiento por la defensa universitaria.

 

Licda. Roxana Salazar Bonilla, Directora Sede de Occidente

Dr. Razziel Acevedo Álvarez, Director Sede de Guanacaste

Dr. Alex Murillo Fernández, Director Sede del Atlántico

Lic. Ricardo Wing Argüello, Director Sede del Caribe

Lic. Miguel Alvarado Arias, Director Sede del Pacífico

Mag. Georgina Morera Quesada, Directora Recinto de Golfito

Dr. Eval Araya Vega, Asesor de Rectoría

Srta. Verónica Chaves Fallas, Representante Estudiantil

 

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