Luis Paulino Vargas Solís
Economista / Investigador CICDE-UNED
Al presidente Chaves no le gustó lo que Douglas Soto, gerente general del BCR, dijo ante la comisión legislativa que estudia el proyecto de ley que propone privatizar ese banco. Y como no le gustó, su primerísima y más ruidosa reacción, fue atacarlo personalmente. Es la característico de este gobierno: arrinconar a patadas a quien se atreva a disentir.
Aparte esa chabacanería, el único argumento del presidente consistió en afirmar que el BCR, podría pagar más impuestos, puesto que los bancos privados son “más rentables” que los públicos.
Evidentemente, el presidente tiene un colocho mental, y está gravemente confundido.
Es obvio que el presidente habla de rentabilidad privada, en cuyo caso habría que aclararle un detalle muy básico: no se supone que los bancos públicos deban ser rentables, como son los privados. Claramente el presidente no entiende lo que es propio de una entidad pública. Igual uno podría decir que los servicios privados de salud y educación son más “rentables” que sus contrapartes públicas. Pero es que, sin duda, los servicios públicos de salud y educación no deben ser rentables desde el punto de vista de la rentabilidad privada.
En tales casos, mejor fuera hablar de “rentabilidad social”. Pero parece que ni en Ohio ni en el Banco Mundial le enseñaron al Dr. Chaves lo que eso podría significar.
Además, en algún momento, el presidente habló de “números contundentes”, aunque, a decir verdad, no aportó muchos números que digamos. Ni contundentes ni de los otros.
Pero ¿qué tal si repasamos algunos numeritos para ayudarnos a entender por qué los bancos privados son más “rentables” que los públicos? Los datos que doy a continuación, incluyen al Banco Popular dentro de la categoría de bancos públicos, y en lo que a los bancos privados se refiere, incluye los 8 grupos financieros principales:
1) Número total de agencias y sucursales: bancos públicos 513; bancos privados 123.
2) Porcentaje de sucursales en el área metropolitana de San José: 32,2% los públicos; 47,2%, los privados.
3) Porcentaje de sucursales fuera del área central de Costa Rica: 43,5% los públicos, 22,8% los privados.
4) Un detalle llamativo: los bancos privados tienen 14 agencias en Escazú, o sea, ese opulento cantón, sede de corporaciones transnacionales y residencia de la gente más rica de Costa Rica, acapara el 11,4% de las sucursales de esos bancos. En el caso de los bancos públicos, en Escazú se ubican 9 sucursales, un 1,8% del total respectivo.
Al presidente la fascina la “rentabilidad” de los bancos privados. He aquí una de las razones por las que son más “rentables”: no solo tienen mucho menos sucursales, sino que el 77% de éstas, están en el área central del país, estratégicamente posicionadas en lugares donde mayor riqueza se concentra, como el cantón de Escazú.
¿Quiénes tienen sucursales en Upala, Guatuso, la Cruz, Río Frío, la Virgen de Sarapiquí, Batán, Guácimo, Palmar Norte o Puerto Jiménez? Ningún banco privado. Solo bancos públicos. Por eso los privados son más “rentables”.