Cuidemos nuestras democracias

José Luis Pacheco Murillo

Lo sucedido en Ecuador con relación al asesinato del candidato a la presidencia Fernando Villavicencio es muy lamentable.

Ese asesinato es tan solo una pequeña parte de la violencia que vive Ecuador y quizá sea importante entender que en realidad son varios tipos de violencia.

La política es la que une los dos extremos, es decir, la violencia que genera el narcotráfico y la violencia civil que se ha trasladado a centro penitenciarios.

El candidato presidencial no es el único político asesinado, en julio pasado el alcalde de Manta también fue asesinado y junto a él y como un daño colateral fue se sumada una joven deportista que en el momento menos oportuno se le acercó para pedirle ayuda. Muy lamentable.

Es alarmante la cantidad de muertes que han ocurrido este año, 3.568 personas asesinadas en el primer semestre de 2023. El 79% ligadas al narcotráfico.

Lo que sucede en Ecuador debe ser un llamado de atención para todos los países latinoamericanos. Ya Colombia vivió ese tipo de violencia hace algunos años y de igual forma candidatos fueron asesinados. Debemos echar para nuestro saco y entendamos que cuando la política se corrompe deja de ser política y se convierte en cómplice de los crímenes que se cometen.

Precisamente tenemos una situación alarmante en relación con la cantidad de crímenes, homicidios que estamos teniendo y es muy probable que un porcentaje bastante elevado estén ligados al narcotráfico.

Cuidemos nuestras democracias y no permitamos que se nos vaya de las manos por elecciones contrarias a lo que verdaderamente necesita el país y también las municipalidades.

Dios quiera que la situación de Ecuador se calme y puedan tener las elecciones el próximo 20 de agosto, aún y a pesar de la ausencia de Villavicencio.

Abrazo solidario a todos y en especial a los ecuatorianos.