La Iglesia Católica ha intercedido ante el Presidente de la República para detener el desalojo de las familias que permanecen en los asentamientos “La Bendición I” y “La Bendición II”, ubicados en el distrito de Pavas, cantón Central de la provincia de San José, sobre los cuales pesa una orden judicial que se ejecutará el 1 de octubre.
Esta medida, de carácter jurídico, plantea serios problemas vitales para la población afectada, de modo especial para los niños y niñas que viven con sus familias en este asentamiento –más de 200–.
La nota enviada a SURCOS por el presbítero Luis Alejandro Rojas expone eventuales perjuicios para la niñez que habita en dicho lugar de precario y tugurio.
«El señor Arzobispo de San José ha externado su preocupación y solicita una intervención humanitaria en tiempo de pandemia», señala la nota.
Compartimos el documento enviado al presidente Carlos Alvarado Quesada: