Organización Política Carmen Lyra
Durante esta semana han salido a la luz los presuntos culpables de los asesinatos de María Luisa Cedeño y Allison Bonilla, y en lo que llevamos del año, según el Observatorio de violencia de género contra las mujeres y el acceso a la justicia, se han registrado 9 casos de femicidios reconocidos judicialmente en Costa Rica.
Estos femicidios son una evidencia irrefutable de lo violento que es este sistema patriarcal y machista con el que tenemos que convivir día a día las mujeres, un sistema que quiere mantener siempre el control de nuestro cuerpo, y en caso de que alguna de nosotras reaccione de manera negativa o confrontativa ante este control, se le trate de manera violenta, denigrante y agresiva contra nuestra integridad física, psicológica y sexual.
Las formas bajo las cuales se llevan a cabo estos feminicidios y se realiza su investigación solamente nos recuerda y reafirma la necesidad de reivindicar la condición de humanidad de las mujeres como personas que merecen ejercer su vida con dignidad. El papel trascendental que juegan las mujeres en el desarrollo de una sociedad más justa, digna y equitativa se ve minimizado con las formas de violencia que se normalizan.
Los deficientes procesos judiciales en los cuales no se prioriza la búsqueda de los asesinos ni la claridad de sus condenas evidencia la poca importancia que le dan las autoridades de la materia a las vidas de las mujeres. Pero esta solo es una parte de la cultura de violencia hacia las mujeres que debe de eliminarse. La cultura de prevención de la violencia está sumamente minada y olvidada, y es allí donde se debe promover que las vidas de las mujeres importan tanto como la de cualquier ser humano que habita la tierra.
Las condiciones actuales nos exigen un profundo replanteamiento del valor que se le da a las labores de cuido en esta sociedad. No hay que olvidar que esta labor ha recaído históricamente sobre las mujeres como un papel secundario; sin embargo, es a través del cuido y la crianza que se forman los seres humanos, y es a través de ellos que podremos crear más y mejores condiciones para lograr que las mujeres seamos al fin libres de realizarnos como personas con todo nuestro potencial.
Mientras esta situación no cambie, viviremos con sentimientos de rabia y de tristeza a la vez, y es esta combinación de sentimientos lo que nos permite tomar las acciones que sean requeridas para evitar que las vidas de las mujeres sean asesinadas y ultrajadas de su dignidad.
Desde la Organización Política Carmen Lyra apoyamos y nos solidarizamos con las acciones feministas ejecutadas en el país, y condenamos rotundamente que se sigan cometiendo femicidio, asesinando a las mujeres solo por el hecho de serlo. Hacemos un llamado a las autoridades a que tomen todas las medidas requeridas para que las personas culpables cumplan las penas correspondientes, y a la sociedad para que reflexionemos sobre los principios que están manteniendo nuestras relaciones actuales.
Datos 2020: https://observatoriodegenero.poder-judicial.go.cr/images/Estadisticas/Femicidio/Documentos/Femicidio_2020_28agosto_cdr.pdf
Observatorio de violencia de género contra las mujeres y acceso a la justicia: http://observatorio.mj.go.cr/observatorio-de-violencia-de-genero-contra-las-mujeres-y-acceso-la-justicia