El pasado jueves, a eso del mediodía, el Ministro de Hacienda Rodrigo Chávez anunciaba desde el Museo de los Niños, convertido en Sede de la Asamblea Legislativa como algo muy simbólico, que el Gobierno de Carlos Alvarado enviaría al Primer Poder un proyecto de ley para crear una “contribución solidaria” pagadera por quienes ganaran más de 500.000 mil colones al mes, bien fuera en el sector público o privado, porcentaje que iría subiendo según fuera el monto del suelo. PERO ESO NO ERA LO MAS IMPORTANTE, sino que adelantó que TAMBIEN LAS GANANCIAS DEL CAPITAL serían objeto de la contribución solidaria y ahí, al proyecto le sucedió lo que, según el dicho popular… ¡le pasó a Tere!
¡Todo era soportable, menos tocar al sacrosanto capital!, ¿cómo se le ocurría eso al imberbe que nos gobierna? ¡De inmediato tocaron a rebato!, es de imaginar al representante plutocrático en el gobierno don André Garnier, recibiendo las llamadas de los miembros de los Panamá Paper reclamando semejante desaguisado, que los obligaría a repatriar algunos de sus “cinquillos”.
Así y antes que el cura ñato terminara de santiguarse, la Ministra doña Pilar lee el aguerrido Tweet del Presidente: ¡Mentira!… el gobierno no presentará ningún proyecto, pobrecitos los trabajadores de 500.000 colones!…como mampara para ocultar la verdadera razón de la baja de piso, nada menos, que al Ministro den Hacienda. Y para que no quedara duda, el Ministro Jefe de la Tombería Nacional, que supuestamente ninguna vela tenía en el entierro (¿del Ministro de Hacienda?), ratificaba lo mandado a decir por don Carlos Presidente, como recordando que él tenía la Seguridad en sus manos!
Hoy nuevamente en el marco informativo del Corona Virus, ya más calmados y obedientes, el Presidente y su Ministro de Hacienda de poca autoridad y vergüenza, aclaraban que si habrá ley de aporte solidario para trabajadores del sector público y privado, con salarios de un millón en adelante y escalonado cada medio millón, y de feria, sin temblarles la barbilla, dijeron que lo justo era que, quien ganaba más fuera más solidario y que en eso iban los salarios desde el Presidente para abajo, pero… ¿Y LAS GANANCIAS DEL CAPITAL? Qué cosa… ¡A NINGUN PERIODISTA SE LE OCURRIÓ PREGUNTAR!, ni a Don Ignacio desde el estudio, ni a nadie… qué “extraño” ¿verdad?; omertá o ley del silencio, lo llama la mafia italiana.
Por supuesto que estoy de acuerdo con colaborar solidariamente, pero creo que se debe tomar en cuenta una serie de condiciones antes de poner en difícil situación a muchas personas. Este 27 de marzo, por ejemplo, el Diario Extra trae un editorial infame propio de ese pasquín, donde dice que el 80% de los empleados públicos están en la casa “de vacaciones o haciendo teletrabajo” y que se “echan más de un millón a la bolsa” como si fuera robado. Nada más falso, manipulador y aberrante de un periodismo de baratija, que junto con sus colegas de La Nazi-On y Canal 7, se han dedicado en los últimos años a hacer una sociedad de odios hacia los empleados públicos y los pensionados, que justamente pagaron sus pensiones y LES ROBARON CINCO BILLONES DE COLONES, pero eso no lo dicen… ¡manipuladores!
Así terminó esa historia, con los costarricenses asalariados solidarios, las ganancias de capital ganando intereses en Panamá, Bahamas e Islas Vírgenes y el Presidente, su Gabinete, sus colegas de la prensa todos obedientes…muy bien, muchas gracias.
Esta historia me hizo recordar la película El Gendarme Desconocido de Cantinflas cuando, cuadrado y mano en la visera de su quepis decía… ¡¡A SUS ORDENES…JEFE!!
SURCOS recibió copia de la siguiente carta enviada por el Sindicato de Trabajadores de JAPDEVA y Afines Portuarios (SINTRAJAP) al Presidente de la República Carlos Alvarado Quesada y a la junta directiva de JAPDEVA, en la cual propone fortalece a la CCSS con los recursos del canon de APM:
Limón 26 de marzo del 2020
STJ 168-2020 Señores Carlos Alvarado Quesada Presidente de la Republica Junta Directiva de JAPDEVA Presente
Estimados señores (as):
La organización SINTRAJAP siendo consecuentes con la emergencia que vivimos por el COVID 19, estamos sugiriendo con profunda objetividad la posibilidad de que se utilicen recursos que se encuentran ociosos para proteger la vida y la salud de los costarricenses en general.
Nos referimos a los recursos acumulados por el canon que porta la APM y que en la actualidad no tienen un uso concreto y que podrían ser muy importantes para palear con la emergencia que sufrimos. Solicitamos como organización social y solidaria con el pueblo que estos recursos puedan trasladarse a la CCSS para que permitan dotar de más camas, equipos, y hasta infraestructura en el Hospital Tony Facio u otras instalaciones médicas de la provincia de Limón, para atender a las personas que se ven afectadas por esta pandemia en nuestras comunidades, perfectamente se puede justificar el uso de estos recursos para ese fin.
Estamos seguros que nuestras comunidades apoyarán el uso de estos recursos por tratarse de los intereses más altos, tomando en cuenta que la vida humana y la salud de nuestro pueblo está por encima de cualquier otra necesidad y que cualquiera podría requerir de estos servicios en cualquier momento. Fortaleciendo la CCSS nos fortalecemos todos y todas.
Estamos solicitando que se utilicen estos recursos para financiar proyectos concretos orientados a atender la emergencia y que garanticen la atención completa y de calidad para nuestra gente.
Sin la vida de qué sirve el dinero, es el momento de ser solidarios y dejar los dobles discursos.
M.Sc. Fernando Rodríguez Garro – M.Sc. Roxana Morales Ramos – Dr. Henry Mora Jiménez – M.Sc. Greivin Salazar Álvarez Observatorio Económico y Social de la Escuela de Economía (UNA)
La medida anunciada por el Gobierno de la República el día de hoy, relacionada con la introducción de un impuesto temporal sobre los salarios, abre una discusión importante acerca de posibles medidas de naturaleza solidaria y progresiva que deberían adoptarse ante los efectos económicos y sociales del COVID-19. Consideramos que una iniciativa de modificación de impuestos debe construirse tomando en cuenta la capacidad financiera de los distintos grupos y su resiliencia ante la situación que estamos viviendo; además, debe ser progresiva, con el menor impacto macroeconómico posible y tratando de obtener un aporte de aquellas personas y empresas que puedan resultar gananciosas de la crisis.
En ese sentido, proponemos lo siguiente:
1. Si se quiere introducir un aporte adicional, temporal, en el impuesto sobre la renta que pagan las personas asalariadas, este debería ser creciente, empezando con un porcentaje más bajo sobre los salarios menores -por encima del segundo tramo del impuesto que inicia en 1 233 000 colones mensuales-, y aplicando un porcentaje mayor sobre los salarios más altos. Esto permitiría minimizar el impacto en el consumo de las familias, daría progresividad a la medida (que paguen más los que más tienen) y ayudaría a obtener recursos para ser destinados exclusivamente a la entrega de ayudas a las personas que están perdiendo su empleo.
2. Debe incrementarse también el impuesto a las rentas de capital para aquellos casos en los que las mismas no se vean afectadas por la actual situación. Nos referimos aquí sobre todo a las rentas recibidas por el pago de intereses y dividendos.
3. Se podría incluir un tramo adicional de 30% en el impuesto sobre la renta de las personas físicas con actividad lucrativa, por encima de ₡22 millones de renta neta anual. Para aquellas personas que siguen con actividad independiente, debe pensarse también en pedirles su aporte solidario a esta situación.
4. La idea de capturar la diferencia de valor entre el precio internacional de los combustibles y el precio local, dado que en el transcurso del año el primero ha disminuido en alrededor del 68% y el segundo un 10%, por medio de cualquier figura, es una idea que debe valorarse pero permitiendo que la reducción en el precio llegue a los combustibles usados por la industria, el transporte de carga y el transporte público, a fin de que ese beneficio también lo perciban esas actividades y los consumidores de esos bienes y servicios.
5. El país debe buscar la manera en que los sectores ganadores de esta crisis, que claramente los hay, den un aporte adicional y temporal, a fin de darle una ayuda a los sectores perdedores, en particular al sector turístico y los servicios relacionados con el entretenimiento. Inclusive, aunque esto implique pedir un aporte temporal a las empresas de zonas francas y a las grandes empresas del sector cooperativo.
6. No podemos perder de vista que se requerirá un esfuerzo fiscal adicional de largo plazo para poder encauzar al país en una senda de sostenibilidad de la deuda pública. En ese sentido, desde ahora debemos pensar en cómo gravar las mayores expresiones de riqueza y a aquellos sectores que generan externalidades ambientales negativas, para generar los recursos necesarios para resolver los problemas que enfrentaremos más adelante y empezar a trabajar por garantizar que esos recursos estén disponibles una vez que salgamos de la crisis.
El programa Observatorio Económico y Social de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional, reitera su disposición de aportar en la construcción de una salida a la crisis económica derivada de la atención del COVID-19.
La crisis que genera el Coronavirus nos ha hecho valorar la inmensa riqueza de la medicina desarrollada bajo los principios cardinales de la seguridad social, aun cuando como obra humana es perfectible, sin duda los esfuerzos realizados en casi 80 años de medicina social nos permiten enfrentar con confianza la grave crisis que nos afecta.
Una vez más el cuerpo médico, el personal técnico y de enfermería, el personal administrativo, los misceláneos y todos los que trabajan en el ámbito de la salud han salido y se mantienen como héroes en la dura batalla que libran contra el flagelo que nos afecta. Justamente se han ganado el respeto y la gratitud de los costarricenses.
El liderazgo del señor Ministro de Salud, orientando a toda la comunidad nacional y los plausibles esfuerzos del Gobierno, así como la respuesta ciudadana hasta en el último rincón de todo el territorio nacional, nos hacen sentirnos orgullosos por los valores humanistas más nobles y solidarios del ser costarricense.
Una situación como la que vivimos también despierta en algunos una visión de oportunidad mercantilista para pretender que se reduzca el rol del Estado en la seguridad social y prevalezca una visión de negocio en el tema de la salud pública. Los resultados de algunas medidas que reducen los ingresos de las contribuciones se suman a la pérdida de ingresos por la morosidad acumulada del sector gubernamental y del sector patronal, mermando significativamente el flujo de recursos financieros requeridos para que los trabajadores y los centros de salud que están en primera línea afrontando la crisis, respondan con la celeridad necesaria ante las circunstancias críticas que vivimos. La temporalidad de estas medidas debe acompañarse de un compromiso explícito de todas las fuerzas políticas para minimizar los efectos negativos de la crisis.
Esperamos que el Gobierno y la Asamblea Legislativa no sucumban ante las presiones oportunistas y le garanticen al pueblo de Costa Rica que nuestro sistema de seguridad social siga brillando y perfeccionándose, con logros indiscutibles de alcance mundial reconocidos por múltiples organismos internacionales.
Es oportuno pensar que debemos encontrar los equilibrios para que las instituciones no se conviertan en viñas de enriquecimiento, no solo por los negocios que surjan alrededor de la medicina sino también por el costo desmesurado que generan los privilegios y las consideraciones de aumentos en cascada.
Hoy se convierte en un deber ineludible de las instituciones sociales y hacendarias y del mismo Gobierno de la República, como un imperativo vital para la prosperidad y la solidaridad humana, la determinación de una estrategia técnica-financiera que invoque la cooperación humanitaria internacional y de países amigos para obtener recursos no rembolsables o de largo plazo, que eviten el debilitamiento económico de la Caja Costarricense de Seguro Social, no solo respecto a la medicina sino también en cuanto a la sostenibilidad del régimen de pensiones de los trabajadores.
El Grupo Reflexiones Social Cristianas espera que en el entorno de esta compleja crisis la Fracción Parlamentaria del Partido Unidad Social Cristiana, contribuya a la construcción de propuestas de interés nacional fundamentados en los principios del Humanismo Cristiano y, al mismo tiempo, garantice al pueblo de Costa Rica que no serán lesionados el financiamiento ni la institucionalidad de nuestras entidades de seguridad social en cumplimiento de nuestra razón de ser en política: la salvaguarda de la Caja Costarricense de Seguro Social como columna básica para la vigencia del Estado Social de Derecho. Eso es lo esencial.
Asimismo, instamos al Comité Ejecutivo Nacional del PUSC para que recupere la capacidad propositiva que siempre ha distinguido a los socialcristianos —contribuyendo y marcando los derroteros de nuestro país hacia el bien común y la prosperidad—, convocando de inmediato a los órganos partidarios especializados integrándolos con profesionales y expertos socialcristianos del más alto nivel, para que produzcan soluciones eficaces y concretas a los serios y complejos problemas que enfrentan nuestros empresarios y los trabajadores públicos y privados.
Concluimos, con la cita del parágrafo 89 de la Carta Social Cristiana a Costa Rica, que preveía con claridad y visión de futuro, la necesidad de fortalecer la CCSS colocando al ser humano en primer lugar, para enfrentar crisis como la que nos embarga hoy con la pandemia del COVID-19: “89. La Caja es un medio para lograr el más alto nivel de salud de la población y el pleno goce del derecho a la salud para toda persona que habite en el territorio nacional; de ahí que su eficiente funcionamiento es esencial para el logro de este objetivo.
“La Caja Costarricense del Seguro Social debe estar sometida a un proceso de mejora continua y de actualización científica y tecnológica, humanización, modernización, adecuadas infraestructuras, eficiencia y crecimiento, para seguir cumpliendo con sus objetivos, respondiendo a los cambios demográficos, epidemiológicos, socioeconómicos y ambientales, en el marco de un mundo globalizado, económicamente interdependiente y en constante cambio, en el que tanto la enfermedad y como las crisis económicas se trasmiten de forma rápida impactando los sistemas nacionales. La cooperación internacional es esencial.”
Danilo Chaverri Soto Lineth Saborío Chaverri María del Rocío Sáenz Madrigal Jorge Polinaris Vargas Rosalía Gil Fernández Fernando Gutiérrez Ortiz Bernardo Benavides Benavides Anabelle Lang Ortiz 25 de marzo de 2020. San José, Costa Rica
Trabajemos Solidariamente por la Vida Plena Cuidémonos los unos a los otros
En estos momentos de prueba para toda la humanidad, la Alianza Interreligiosa por la Agenda 2030 desea hacer llegar el siguiente mensaje a los miembros de las comunidades de fe y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad de América Latina y el Caribe:
Somos una red de organizaciones basadas en la Fe que trabajamos por la Justicia, la Paz y la Integridad de la Creación en la Región de América Latina y El Caribe, en vinculación solidaria con redes hermanas que trabajan a nivel global.
Nuestra misión es Impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) adoptados por las Naciones Unidas, aunando esfuerzos y elevando nuestras voces proféticas, para contribuir al cambio transformador que responda a la situación de discriminación, desigualdad y exclusión de los pobres, marginados y excluidos en América Latina y el Caribe.
En medio de estos graves problemas estructurales en nuestra región, se ha sumado la pandemia del COVID-19, que a la fecha viene contagiando a más de 4400 personas y ha causado 65 fallecidos. Esta situación ha llevado a los Gobiernos de la región a tomar diversas medidas de emergencia sanitaria, como el aislamiento social obligatorio, principalmente, con la finalidad de combatir o ralentizar este mal, que podría alcanzar enormes dimensiones como en otras regiones del mundo, en donde los sistemas de salud nacionales están comenzando a colapsar.
Desde nuestra red, llamamos a todos los Gobiernos de América Latina y el Caribe, como ya vienen haciendo algunos de una manera muy efectiva, a profundizar la adopción con responsabilidad y decisión, de las medidas necesarias para proteger y cuidar la vida de todas las personas, principalmente de las poblaciones más vulnerables, y hacer los máximos esfuerzos por combatir esta pandemia que remece la salud pública global.
Reconocemos los notables gestos solidarios que se vienen realizando entre Gobiernos de la región ante esta crítica situación y los animamos a fortalecer los organismos regionales para afrontar de mejor modo y de forma decisiva los desafíos de esta pandemia. Tenemos la esperanza de que la comunidad científica logrará en breve las medicinas necesarias contra el virus. En este sentido, llamamos a reforzar los esfuerzos multilaterales de las Naciones Unidas y su visión de afrontar esta crisis con solidaridad global, superando la tentación de los aislamientos nacionalistas.
También expresamos nuestra consternación por todo el dolor y el sufrimiento que ya están enfrentando hermanos y hermanas en las regiones más afectadas por esta pandemia en Asia, Europa y Norteamérica, confiando que el amor de Dios se transforme en consuelo y solidaridad para las familias y comunidades religiosas que ya cuentan con infectados e incluso fallecidos.
Queremos reconocer y agradecer profundamente los notables esfuerzos de las personas que están en primera línea en esta lucha, como son el personal médico y paramédico de los países, así como los integrantes de las fuerzas del orden que en el respeto de los derechos humanos vienen trabajando con denuedo por salvar vidas. El Señor Todopoderoso les bendiga y los proteja en tan encomiable labor.
También queremos reconocer los enormes esfuerzos de voluntarios y voluntarias que desde las organizaciones solidarias vienen actuando en el cuidado de la vida en las comunidades, especialmente con poblaciones muy vulnerables, como las familias en extrema pobreza, los adultos mayores, los pueblos indígenas y los migrantes. Pedimos a los Gobiernos de la región garantizar la seguridad alimentaria y económica de todas estas poblaciones, así como preservar los derechos sociales, principalmente los laborales, para que el abordaje de la crisis económica profundizada por la pandemia no recaída en las personas en pobreza extrema, ni agudice las desigualdades estructurales.
No cabe duda de que este es el momento en que debemos demostrar en la práctica nuestro cumplimiento de los valores de la responsabilidad, la fraternidad y la solidaridad para velar por la salud del prójimo, velando también por nuestra propia salud y la de nuestras familias y comunidades.
Nos comprometemos a tomar las medidas en nuestras comunidades de fe que permitan salvaguardar la calidad de vida de nuestros fieles y de la sociedad en general, y en igual sentido debemos prever, prepararnos y articularnos para responder a los posibles escenarios posteriores a la pandemia para asegurar el sustento de las poblaciones más vulnerables, y seguramente más empobrecidas, luego de las medidas de contención del virus.
Rogamos a Dios Todopoderoso que este mal termine pronto y convocamos a una jornada de oración unitaria de nuestras comunidades de fe con este ruego y que nos fortalezca en nuestra voluntad de seguir enfrentando con solidaridad y entrega la lucha contra esta pandemia y por la vida plena de la humanidad en esta casa común.
El Coranovirus está tomando velocidad. Los infectados se
duplicaron cada 3 días hasta el 16 de marzo y aunque disminuyó en los últimos
días por las acciones del Ministerio y la Caja, sin embargo, si no interviene
cada comunidad conjuntamente con las autoridades de salud, tendremos 6000
afectados al 15 de abril. Como el 10% debe ser hospitalizado, esto es más de
600 pacientes, se puede saturar la capacidad hospitalaria y los médicos podrían
verse obligados escoger a quien salvar y a quien dejar morir, como está
sucediendo en Italia y España.
Costa Rica está sometida a una prueba de ciudadanía y
solidaridad. Una parte importante de la población está reaccionando
positivamente, siguiendo las indicaciones del Ministerio de Salud y la Caja
estableciendo medidas preventivas y aislando a los ancianos, otra parte aunque
quiere aislarse tiene que salir a las calles para conseguir el alimento vital.
Un tercer grupo, bastante numeroso por cierto, se burla de las disposiciones
sanitarias y organiza fiestas y reuniones donde se difunde exponencialmente el
virus.
La Costa Rica respetuosa y responsable está dando ejemplo de
civismo, sus huestes deben reforzarse con ayuda alimentaria a los miembros del
sector informal que deben salir a la calle a ganarse la vida para que se puedan
aislar. Esto exige un esfuerzo muy grande del Estado y de los gobiernos
locales, de raspar la olla, de tal manera que todos colaboremos
proporcionalmente.
Por otra parte hay que continuar con la información y educación de quienes niegan la gravedad de la situación, para que revisen su comportamiento. Los que no acaten las disposiciones deberán ser llamados a cuentas por atentar contra la salud y el interés público.
Es increíble el egoísmo, cuando la solidaridad se mira de un
solo lado. Hoy la jefa editorial de La Nazi On, a la primera orden de sus
“malas compañías” tocó a rebato y se alinearon en primera fila los coyotes en
la loma, para decir: si hay patadas, ¡hay pa´todos!
Pobre de mí, empecé a leer el artículo creyendo que el
Corona Virus había calado en el alma de estos insensatos, ocultos en la
decadente cueva del neoliberalismo; pero no!, me equivoque, por el contrario
Mora, Feinzag, Meléndez, Mesalles y Thelmo (para variar), lanzaban los aullidos
de coyotes al cielo ( o más elegante…campanas al vuelo) en favor de la
sacrosanta empresa privada y contra el sector público, hacia el cual han
logrado orientar el odio de la opinión pública, producto de la opinión
publicada en sus banales medios de comunicación.
Aclaro que no tengo nada en contra de la ayuda, pronta y
cumplida, a la empresa privada en estos aciagos días; pero no por ello convertir
la tragedia en el trampolín para obtener beneficios más allá de la lógica y el
tiempo requerido para enfrentar el problema. Igualmente, creo que los
funcionarios públicos deben poner de su parte, para ser solidarios, y dejar de
lado algunas situaciones de su beneficio: algunos pluses, horas extras,
exclusividades, pero de eso a pedir cierre de instituciones y paralización de
la acción de Gobierno, es otra cosa.
Para ello, por ejemplo, alegan que en los Estados Unidos, la
Meca de su dios el dinero, 19 veces el Gobierno Federal ha quedado solo con los
servicios esenciales. Y el país no colapsó. Esa falaz comparación es típica de
estos vendedores de falsedades, pues son situaciones absolutamente
incomparables, solo dos cosas: los Estados seguían funcionando y el tiempo fue
corto, no varios meses y por algo todos corrieron a buscar un arreglo en pocos
días, siempre.
Para ellos los trabajadores públicos que están LABORANDO A
DISTANCIA, entre ellos los profesores y universitarios, especialmente, podrían
renunciar a medio salario pues no están haciendo nada. Pero primero reconocer
que LABORAN A DISTANCIA, luego les dicen vagos…y los profesores que tienen que
enviar tareas y dar lecciones por internet, ¿no trabajan? ¡Y los hay…y miles!
Solo un tercer caso más. Dice que hay 450 GRANDES
CONTRIBUYENTES, cuyos negocios saldrán perjudicados porque las familias DEJARÁN
DE CONSUMIR sus productos. Entonces, para que los cientos de miles de
funcionarios consuman, ¡deben tener salario! Y se los quieren quitar. Pero
además, cientos de esos 450 GRANDES CONTRIBUYENTES, son GRANDES DEFRAUDADORES
que, de acuerdo a las listas que el Ministerio de Hacienda se vio obligado a
publicar, deben miles de millones en impuestos, entre ellos el Grupo Nación, la
Florida Ice and Farm Co, la Cervecería Costa Rica, el Hotel Four Season, todas
empresas ligadas familiar y empresarialmente a LA NAZI-ON.
Casi termino de leer el libro de Alain Deneault MEDIOCRACIA,
CUANDO LOS MEDIOCRES TOMAN EL PODER, y en dos subcapítulos “ Escribir Hacia el
Desastre y Los Pequeños Intelectuales” hay dos frases fantásticas que define a
los alineados en la loma: “ …son responsables como colectivo de la producción
de una parte de la prosa más obtusa e impenetrable… Les asegura que nadie pueda
saber de verdad si sus ideas son brillantes, malas o simplemente mediocres –
además, porque- quienes se someten los vincularán más eficazmente a un gran
mecanismo económico y burocrático, dedicando sus mejores años y facultades a
esclavizarse. Están aprovechando todas las oportunidades que se les presentan
para obtener los medios económicos que les permitan ser EXACTAMENTE IGUALES A
TODOS LOS DEMAS…”
Esa mediocridad llega al extremo que ni siquiera pudieron
parafrasear bien al célebre tico GW Villalobos, pues la frase correcta es: SI
NO HAY PA´TODOS…HAY PATADAS…” y si anuncian patadas, con gusto y a pesar de la
prohibición, yo les llevo las mías a domicilio, prometo embetunar el zapato en cada
caso, para que sea individualizado.
…cuando natura, le asesta un golpe a la cultura individualista…
Desde Costa Rica y Centroamérica con visión Latinoamericana. Sujeta a enriquecimiento activo y alegremente esperanzador.
Apuntes para una construcción colaborativa y cooperativa.[1] Carlos Brenes Castillo cooinspirado con Patricia Palma Los centroamericanos podemos
Este apunte es eso, un intento por que nuestra acción colectiva, sea lo mejor pensada posible y lo más recreadora de nuestra cultura, hemos compartido una primera versión, con mucha gente de Centroamérica y Latinoamérica, para que sea eso un “rizoma” diría nuestro maestro Francisco Gutiérrez. Favor moverlo y hacerle lo que requiera. La emergencia exige ciertamente una respuesta ciudadana, y provocara definitivamente una reconformación de la convivencia social, las relaciones sociales. Las relaciones de poder y sobre todo del lugar y modelo de estado y política pública. Esto requiere vivir con inteligencia este paso, y capitalizar socialmente lo mejor para que nuestras sociedades retomen con más garras el bien común, la economía solidaria y participación comunitaria, en clave de Nos…Un nosotros evidentemente global. Desde lo local, reconciliándose con los ecosistemas.
De manera esquemática y sencilla visualizamos un esquema para una
acción colectiva que nos moviliza y coloca en actividad decidida para lograr los
objetivos
reconocidos:
Colocar los diferentes grupos sociales en tareas y roles que contribuyan a las acciones propias de los organismos estatales, construyendo la respuesta viva de nuestra comunidad humana, potenciando el comportamiento solidario y responsabilidad colectiva, y cambiado las formas de relación y convivencia.
Reducir al máximo de la curva de contagiados, en relación con capacidad de respuesta efectiva del sistema de salud nacional, regional y local; prepararnos para los diversos escenarios que nos toque a las diversas personas. (no enfermarse-enfermar y entrar en riesgo de muerte). Organizar la capacidad social, público-privada, para brindar tratamiento exitoso, al quienes enfermen, que eviten o minimicen muertes.
Potenciar la rehabilitación y recuperación rápida, el aprendizaje y la interiorización de nuevos comportamientos que eviten la vuelta de la pandemia y nos prepara mejor para otros eventos de este tipo.
La acción colectiva, no existe, lo que existen son personas y grupos que relacionan y entran en relaciones que generan repuestas colectivas y construyen el bien común desde sus prácticas de vida en situaciones de normalidad o de emergencia como la que estamos viviendo. Por eso mirar y partir de las personas, sus sentimientos, movimientos, acciones, pensamientos y decisiones, es el punto de partida. Reconocer quien soy, quienes somos, donde estamos, cómo y con qué y quienes actuamos y que priorizamos, es la base del punto de partida. La toma progresiva de conciencia y sus implicaciones el hilo conductor, colectivizar la toma de conciencia hacia conciencia colectiva, por convicción o coerción, como parece estarse dando, ante la velocidad y agresividad del virus y los patrones culturales.
EJE DE LA ACCIÓN COLECTIVA: la construcción progresiva de la conciencia activa y colectiva. ESTO TIENE QUE VER CONMIGO Y CON NOSOTROS por eso debemos ACTUAR COLECTIVAMENTE POR EL BIEN COMÚN.
Una vez claro lo anterior para fines de acompañar y organizar nuestro accionar inteligente, máxime en situación de emergencia y posiblemente alta carencia de recursos, tiempo y gente, podemos reconocer al menos 5 grandes etapas:
0. Previo al primer contagio y gran desinformación e inacción social. Alta inconciencia sobre nuestro estilo de vida saludable.
1. Etapa de PROMOCION, dado el desarrollo intenso del contagio, con alto riesgo de romper umbral de respuesta. Inicio de respuesta social, insuficiente. DISTANCIAMIENTO SOCIAL EL MANDATO. Esfuerzo centrado en crear y activar conciencia y combatir la negación y evasión.
Línea de acción: Crear conciencia progresiva y activa, que combata la negación y evasión.
2. Etapa de CONTENCIÓN del desarrollo máximo del contagio y levantamiento de la máxima respuesta social, por conciencia o coerción. PROFUNDIZAR EL DISTANCIAMIENTO SOCIAL y lograr “APLANAR LA CURVA.
Reconocer los tres escenarios posibles.
E1. No enfermarse. (Cuido colaboración).
E2. Enfermar y recuperarse.
E3. En riesgo de muerte. En esta etapa emergen dos grandes grupos, riesgos de exclusión social, los mayores de 60 pueden verse así mismo como ya desahuciado, o estigmatizado. Y los jóvenes, “a mí no me pasara nada”.
Es necesario mirar diversas acciones colectivas según escenario y grupo social. Particular atención sobre la llamada primera línea, el personal de salud, que requiere apoyo, estimulo, y ojalá encontrarse en coyunturas manejables.
Línea de acción: PROFUNDIZAR EL DISTANCIAMIENTO SOCIAL y lograr “APLANAR LA CURVA”, CON EL MAYOR ESFUERZO DE ACCION COLECTIVA DECIDIDA, quedándose en casa.
3. Etapa de TRATAMIENTO INTENSIVO. Salvar vidas, importancia de acciones de respaldo, asistencia y apoyo, así como de correcto abastecimiento de la primera línea, la persona de salud, higiene, limpieza, equipamiento. Procurar aumentar, la capacidad física instalada y la capacidad humana existente. El accionar de soporte emocional y físico a las brigadas de trabajo. Especial atención al sector juvenil que está en plena demanda de relaciones intensas.
Línea de acción: salvar vidas, generar una atmosfera de tranquilidad en la ciudadanía y de asegurar abastecimiento alimentario de la población. Alta conciencia activa en los comportamientos.
4. Etapa de descenso Y CAÍDA DE LA DINÁMICA DE CONTAGIO, conciencia y administración del daño. Mecanismos de respuesta y acompañamiento revitalizador en incubación y estimulación.
En esta etapa la acción colectiva se puede relajar y los comportamientos de distanciamiento social, y de higiene colectiva pueden exceder los niveles de cumplimiento y cuido consciente. Se reconocen y se van haciendo evidentes, en los diversos escenarios y territorios de múltiples prácticas de incubación de buenas iniciativas favorecedoras del logro de los objetivos, y emergen mecanismos estimuladores de la acción -investigación y participación ciudadana.
Línea de acción: No bajar la guardia para evitar una vuelta al fuerte contagio y amenaza del desborde de atención. Interiorización consciente de la acción colectiva.
5. Etapa de REHABILITACION: restablecimiento, reconstrucción y revitalización. Fuerte movilización colectiva solidaria.
El tejido de acciones reconocidas y sugeridas para potenciar nuestra energía social, comportamiento responsable e involucramiento activo, para sanar y restituir tejidos territoriales, según momento y posibilidades, alrededor de la recuperación:
Social
Física
Ambiental
Económica
En esta etapa, posiblemente la de mayor prolongación y más grandes
desafíos. En especial la importancia de CAPITALIZAR AL MAXIMO, el momento
vivido, y centrándose en aquellos CAMBIOS principales derivados, y necesarios a
futuro, para minimizar riesgos en otros eventos, entre ellos:
Cambio radical de los modelos de convivencia, consciente. Cambios en la manera de estar y compartir de manera diferente y más consciente y responsable social y ambiental.
Cambio radical las diversas formas de relacionamiento.
Cambios en los patrones alimentarios en función de esquemas nutricionales que coadyuven en estilos de vida saludable y de fortalecimiento inmunológico.
Cambios en los modelos de gobernanza y de ejercer el poder, redefinición y reacomodo de las relaciones de poder, donde el bien común, el estado social, el reposicionamiento de la institucionalidad publica, la economía, y en especial los liderazgos ciudadanos y políticos
Revalidación de lo cotidiano y de los acercamientos sociales con sentido
Cambio profundo en la conciencia social, en el valor de ciencia y el conocimiento, la ambiental en cuanto los limites la restitución del equilibrio ambiental, la casa común y finalmente la conciencia social en cuanto a NOSOTROS, la participación y gestión ciudadana, alrededor del bien común.
Línea de acción: No dejar de invertir y generar las grandes aprendizajes-enseñanzas y fortalecer las ganancias colectivas desarrolladas, en especial el desarrollo de nueva institucionalidad, nuevas normas y reglas para vivir desde nuestras comunidades y el planeta. Una cultura renovada y resignificada.
ANEXO:
Ideas para aprender e impulsar tareas y actividades en cada etapa.
0. Previo al primer contagio y gran desinformación e inacción social. Alta inconciencia sobre nuestro estilo de vida saludable.
Fuerte esfuerzo local, colectivo directo y virtual de información y educación consciente, que coloque a todas y todos en cambios de comportamiento inmediato. DISTANCIAMIENTO SOCIAL, Y AISLAMIENTO ACOMPAÑADO DE INTENSAS MEDIDAS DE HIGIENE.
Vigilancia activa de comportamientos no deseados, e inadecuados. Informar y reportar a las autoridades
Familiarmente y “tribus de amigos” reconocen personas y miembros en condición de riesgo de salud y riesgo social (por ejemplo, violencia doméstica), y perfilan medidas y accionan al respecto. Higiene y reclusión (cero contactos)
Aprovechar y potenciar las redes sociales para informar, accionar y movilizar la población hacia tareas y comportamientos deseados y orientados por las autoridades.
Identificar claves nutricionales que pueden favorecer resistencia y recuperación, para incentivar su acceso y búsqueda
1. Etapa de PROMOCION, dado el desarrollo intenso del contagio, con alto riesgo de romper umbral de respuesta. Inicio de respuesta social, insuficiente. DISTANCIAMIENTO SOCIAL EL MANDATO. Esfuerzo centrado en crear y activar conciencia y combatir la negación y evasión.
Cambio abrupto de nuestros comportamientos y conducta, eliminación de actividades …” Quédese en casa”, el eje. Redoblar higiene limpieza de manos y reducción a conductas de relacionamiento social basadas en el contacto físico.
Cuido de las personas de tercera etapa y acciones de soporte a sus necesidades básicas de alimento y medicina. Se han organizado pequeños grupos y redes de apoyo de personas jóvenes que ayudan a las mayores en estas tareas para que se queden en casa.
Orientaciones y “paquetes nutricionales” que brinden soporte y mayor resistencia.
Innovación creativa de actividades de teletrabajo y de multiplicación de generación de bienes y servicios, por parte de pequeñas unidades económicas y sus redes y tejidos de cooperación. Reactivación de la Economía Social solidaria.
Colaboración y contribución desde la comunidades y economía social solidaria, procurando espacios complementarios, para la atención de personas “sospechosas” y/o contagiadas, en sus periodos de “cuarentena”, en estricta coordinación con las autoridades de salud y gobiernos locales. Se han dado uso de casa, sin alquilar, puestas al servicio del sistema de salud.
Diversas iniciativas de apoyo y respaldo culturales, al personal de salud y a las personas en cuarentena, “Cartas de Animo”, “cantos”, videos…aplausos colectivos, radioemisiones locales….
Solidaridad y apoyo con las familias del personal de primera línea, en sus barrios y residencias.
Iniciativas virtuales de entretenimiento…compartido y otras iniciativas personales familiares…
Etapa de CONTENCIÓN del desarrollo máximo del contagio y levantamiento de la máxima respuesta social por conciencia o coerción. PROFUNDIZAR EL DISTANCIAMIENTO SOCIAL y lograr “APLANAR LA CURVA.
Aunque esperamos que la etapa anterior sumada a las medidas
gubernamentales, hayan logrado los más altos resultados, dado el tiempo que
hemos tenido, para “APLANAR LA CURVA”, y evitemos valores y cifras no
deseables, puede ser la etapa de mayor , e impacto emocional y comunal, y de
afectación de todos nosotros, sería como sentí la gente de Limón , sus líderes
luchadores, el día siguiente del terremoto, golpeados ….ahora si las cifras
fueran, como no las queremos, será donde se demandará la mayor acción
colectiva, el abrazo social gigante que nos cohesione, como sociedades…Costa
Rica, Centroamérica y Latinoamérica..
Actividades de apoyo y respaldo, precautorio y controlado, a las personas, familias y grupos contagiados, desde las comunidades y barrios, apoyando y empujando la recuperación y el mejor desenlace.
Acciones solidarias y de apoyo a los sistemas de atención, por ejemplo, desde nuestras ASADAS contribuir con agua, según reglas claras, a aquellas instituciones y espacios que tengan carencia o insuficiencia para atender la emergencia.
Mediante voluntariado, inventariar e identificar, unidades económicas pequeñas familiares de subsistencia que estén siendo seriamente afectadas y contribuir, la canalización de apoyo, acompañamiento técnico, desde la ECONOMIA SOCIAL SOLIDARIA…para VACUNARNOS contra la destrucción del tejido económico comentario y local…, impulso de iniciativas creativas e imaginativas de la economía social solidaria. Esa valoración debe servir, en lo inmediato ante los auxilios sociales del estado, y estratégicamente en la etapa 5 de revitalización.
Seguimiento y ALTA CAJA DE RESONANCIA Y MULTIPLICADORA de las orientaciones e instrucciones de las autoridades de salud.
Fortalecimiento de acciones nutricionales favorecedoras.
Repuestas territoriales, sean cantonales o regionales que articulan cooperación, para resistir, sobrevivir y recuperar el tejido…y la buena gobernanza.
Mecanismos que “apapachen” a nuestros contagiados y familias, y por supuesto las familias de personas fallecidas. Ya están ocurriendo y circulando en Costa Rica, hermosas iniciativas de cantautores como #YoMeQuedoEnCasa FESTIVAL Centroamérica. Del 18 al 22 de marzo en Facebook live, o Instagram Live…además de poder tomar iniciativas de canto en los Barrios de los italianos y españoles. Es decir, impulsar todo un frente cultural, de fuerte contagio vital. Otro ejemplo fue el concierto de Fito Páez, desde la plataforma de FACEBOOK, el día 20 de marzo.
3. Etapa de TRATAMIENTO INTENSIVO. Salvar vidas, importancia de acciones de respaldo, asistencia y apoyo, así como de correcto abastecimiento de la primera línea, la persona de salud, higiene, limpieza, equipamiento.
Procurar aumentar, la
capacidad física instalada y Habilitar espacios comunitarios y privados en
forma solidaria.
Accionar de soporte emocional
y físico a las brigadas de trabajo.
Aumentar la capacidad humana
existente.
Especial atención al sector
juvenil que está en plena demanda de relaciones intensas.
Generar una atmosfera de tranquilidad
en la ciudadanía.
Asegurar abastecimiento
alimentario de la población.
Alta conciencia activa en los
comportamientos.
Resaltar todas las acciones
complementarias desde las otras líneas para el manejo emocional y psicológico
del momento, información y noticias, desde los núcleos familiares y todo el
sistema educativo, público y privado.
Comienzan a generarse con más
fuerza, frecuencia, intensidad de actividades culturales y artísticas, así como
de acompañamiento deportivo.
4. Etapa de descenso Y CAÍDA DE LA DINÁMICA DE CONTAGIO, conciencia y administración del daño. Mecanismos de respuesta y acompañamiento revitalizador en incubación y estimulación. Se mantiene DISTANCIAMIENTO SOCIAL.
En esta etapa, posiblemente, podemos re acercarnos en los sueños y nuevos desafíos, en especial poder colaborar desde la comunidad y organizaciones sociales con el Estado, en el recuento y valoración de daños, más allá de los daños en la vida de las personas. Sugerir herramientas y formas de agregación territorial.
Valorar identificar y auscultar donde quedan, núcleos generadores, y multiplicar el rescate y sistematización de buenas prácticas de respuesta, acompañamiento, incubación y re-incubación, y estimulación sistemática, para restablecer tejidos, y generar reinserción activa de la población, procurando cuidadosamente nuevas formas y prácticas de ACERCAMIENTO SOCIAL, CONVIVENCIAL Y COLABORATIVO.
Mecanismos de agradecimiento y reconocimiento a toda la PRIMERA LINEA DEL PERSONAL DE SALUD, y todo el otro personal de soporte involucrado en el esfuerzo nacional.
VALORACION COMUNITARIA de instrumentos y mecanismos para que NO se de una reactivación y crecimiento de la dinámica de contagio. Acciones inmediatas precautorias por sectores y territorios de riesgo.
Detectar cuellos dinamizadores del tejido económico, principalmente alrededor de la SEGURIDAD ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL., que repotencien y nos vacunen contra el desabastecimiento alimentario. Impulso de acciones con los programas de estado respectivos.
Nuevas orientaciones nutricionales favorecedoras.
5, Etapa de REHABILITACION: restablecimiento, reconstrucción y revitalización. Fuerte movilización colectiva solidaria.
El tejido de acciones reconocidas y sugeridas para potenciar nuestra energía social, comportamiento responsable e involucramiento activo, para sanar y restituir tejidos territoriales, según momento y posibilidades, alrededor de la recuperación:
Social
Física
Ambiental
Económica
En esta etapa, posiblemente la de mayor prolongación y más grandes
desafíos. En especial la importancia de CAPITALIZAR AL MAXIMO, el momento
vivido, y centrándose en aquellos CAMBIOS principales derivados, y necesarios a
futuro, para minimizar riesgos en otros eventos, entre ellos:
Cierre y capitalización de nuestro accionar en función de los objetivos, capitalizando en especial el tejido construido
Valoración de los resultados sanitarios y estimulo decidido a la investigación aplicada proactiva.
Inventario, reconocimiento y sistematización de las diversas acciones y procesos de acción colectiva en los territorios, que contribuyeron significativamente al logro de los objetivos.
Cambio radical de los modelos de convivencia, consciente. Cambios en la manera de estar y compartir de manera diferente y más consciente y responsable social y ambiental.
Cambio radical las diversas formas de relacionamiento.
Cambios en los patrones alimentarios en función de esquemas nutricionales que coadyuven en estilos de vida saludable y de fortalecimiento inmunológico.
Cambios en los modelos de gobernanza y de ejercer el poder, redefinición y reacomodo de las relaciones de poder, donde l bien común, el estado social, el reposicionamiento de la institucionalidad publica, la economía, y en especial los liderazgos ciudadanos y políticos
Revalidación de lo cotidiano y de los acercamientos sociales con sentido
Cambio profundo en la conciencia social, en el valor de ciencia y el conocimiento, la ambiental en cuanto los limites la restitución del equilibrio ambiental, la casa común y finalmente la conciencia social en cuanto a NOSOTROS, la participación y gestión ciudadana, alrededor del bien común.
[1] Agradecemos la colaboración activa de muchas personas y esperamos se multiplique enriquezca y mejore. En particular del compañero Héctor Ferlini-Salazar.
Los robles de sabana están en flor, en toda su belleza, los
mangos también están en flor y los árboles de mayo, igual que otros en el norte
y en el sur. Para nosotras ver los árboles en flor con sus distintos tonos de
rosa, amarillo, naranja, es un regalo de la naturaleza y es hermoso. Podríamos
disfrutarlos más si no estuviéramos en una situación tan difícil, tan peligrosa
y sobre todo tan incierta. Este documento surge de diversas comunicaciones que hemos
tenido entre las compañeras de la Red de mujeres Rurales desde sus regiones y
la Asociación Tinamaste.
Hemos estado comentando varios materiales sobre la epidemia,
el comportamiento del virus, y por supuesto son solo algunos, porque hay
muchísimos sobre el tema y no podemos ni siquiera tratar de leer lo que sale y
al ritmo que se están produciendo, sobre todo porque tenemos que seguir
trabajando. No cabe duda que la información que tenemos es muy escasa.
Vemos muchas manifestaciones de solidaridad ante el desastre
social y sobre todo de salud, y eso es maravilloso, y mucho se ha planteado que
la pandemia nos debe hacer pensar que tenemos que salvarnos juntos o no nos
salvaremos de esta crisis; ni de las que vienen.
Porque esta descomposición global, es resultado de un
planeta enfermo y una sociedad enferma, todo deteriorado, maltratado. Y porque
vendrán muchas más si no cambiamos.
Queremos plantear una vez más que esta situación no es
resultado solo del virus como tal, ni que se resolverá una vez controlado el
virus. Por eso queremos plantear y denunciar varios asuntos.
La crítica situación sanitaria nos pone enfrente de
manifestaciones diversas, y podemos decir que todas agravan la discriminación
que ya vivimos. Ya las relaciones sociales en esta sociedad nos afectan, pero
se está profundizando el aislamiento y nos saca de la calle, de esa calle que
nos ha costado tanto conquistar con muchos años de lucha y de ruptura del encierro
de las mujeres. Esta situación además pone a las personas en una dependencia aún
mayor de la comunicación electrónica, con el agravante de que no toda la
población tiene acceso, y nosotras en particular no tenemos acceso a las mismas
posibilidades de comunicación.
Algunas de las mujeres en el campo solo recibirán de
información lo que vea en la televisión, en los noticieros que siempre nos han
desinformado, sin acceso a internet, sin señal o sin el equipo necesario para
poder comunicarnos, mientras que otros sectores de la población podrán buscar
diversas fuentes de información, con las más variadas opciones tecnológicas. No
es cierto que tengamos las mismas posibilidades.
Eso también nos pone en mayor desventaja ante la situación
actual. Pero se nos presentan también otras muchas manifestaciones que
evidencian que no todas y todos lo estamos viviendo de la misma manera. Suena
fácil decir que no salgamos de casa. ¿será que no pueden pensar en cómo vivimos
la mayoría de la población que vivimos con lo que nos ganamos al día.
Muchas de las mujeres de campo (y de barrios urbanos
populares también) complementan sus ingresos con el trabajo doméstico en otras
casas de otras familias. Aquí se presentan pocas opciones para aislarse y no
entrar en contacto con otras personas, como pueden hacerlo familias de capas
medias profesionales y por supuesto sectores dominantes. Las mujeres trabajadoras
domésticas si no vamos a trabajar no tenemos ingresos para la alimentación de
las familias y si vamos, debemos tomar autobuses, entrar en contacto con otras
personas en diversos espacios, en fin, las posibilidades de contagio son mucho mayores.
Y ni qué decir de las que trabajamos en reciclajes, donde nos llegan las
basuras de otros lados. Hemos tenido que ser firmes en decir que no nos envíen
desechos de hospitales.
Muchas mujeres en las comunidades rurales nos movemos a los
centros de población a vender productos de los patios o parcelas, o productos
procesados. El sistema capitalista neoliberal nos ha querido desaparecer como
mujeres campesinas e indígenas, como familias y pueblos indígenas y campesinos,
pero aún no lo lograba totalmente. La economía local se ha resistido a
desaparecer y mucho de esto está en manos de las mujeres. Hoy denunciamos que
bajo la excusa de la protección sanitaria, la policía persigue a las mujeres que
requieren vender sus productos para poder llevar comida a sus familias. todas
nosotras estamos paradas, vendemos cúrcuma, huevos, cacao, hacemos cajetas de
leche y confites de cacao, vinagre casero y otras cosas, o le ayudamos a vender
a otras mujeres y eso ya no lo podemos hacer. Pero no está prohibida la venta
de alimentos en los supermercados, por supuesto. ¿Serán motivos sanitarios o
será otra manifestación de discriminación de clase? Mientras en los espacios de
las grandes discusiones se reconoce cada vez con más frecuencia que la
producción local es la que nos puede salvar. Europa amanece con el gran dilema,
cierra las fronteras y deja los miles de productos que alimentan a la población
sin entrar o se verán obligados a dejar entrar los miles de vehículos
terrestres, marítimos o aéreos con los alimentos. Pero el estado costarricense
todavía no se entera que debe fortalecerse la producción y el mercado de
productos nacionales y dejar de perseguir a las mujeres que con sus productos
somos parte de la cadena de los mercados locales. Las grandes empresas que han
venido acaparando la tierra, la producción y mercado, con el apoyo estatal,
están aprovechando la crisis para intensificar la persecución contra nuestras ya
reducidas economías para terminar de matarnos.
¿Será que con estos alimentos se provocará el contagio?
¿Será que se puede escoger entre no hacer las ventas o morirse de hambre? La
solidaridad se debe practicar con el consumo de productos locales, no con la
persecución.
Y también en las zonas rurales nos meten miedo sobre el
consumo de nuestros alimentos.
Tenemos gallinas, y con la alerta sanitaria nos dicen que
nos puede dar alguna enfermedad mortal, pero las cadenas comerciales si están
haciendo billetes. Meterle miedo a la gente da buenos resultados a los grandes
negocios y se trae abajo nuestra economía campesina y nuestras formas de
sobrevivir. Están utilizando el coronavirus para legitimar la persecución social.
Y mientras el miedo por el coronavirus crece en el grueso de
la población, las familias en zonas transfronterizas ven profundizarse las
discriminaciones por su condición de pueblos transfronterizos. Estas fronteras
establecidas sobre los pueblos que desde mucho antes se ubicaron en esas zonas.
Por ejemplo, muchas familias ngäbes obtienen su sustento del trabajo que
realizan a este lado de la frontera, pero duermen al otro lado de la frontera,
o a la inversa, muchas mujeres tienen su casa a este lado y cuidan familiares
al otro lado de la frontera. Hoy amanecieron con que no pueden pasar la
frontera, y no pueden asistir a sus trabajos, y con ello no tendrán el jornal y
con qué alimentar a sus familias. ¿Será el coronavirus es la amenaza mayor? ¿O
la imposibilidad de comer? Por otra parte, las mujeres de los territorios
indígenas, donde el Estado no ha procedido a dar ni un solo paso real para la
defensa de los territorios y la protección de las poblaciones violentadas por
los finqueros usurpadores, viven una amenaza inmediata a sus vidas, no por el
virus, sino por los finqueros y matones pagados por los finqueros. A un año del
asesinato de Sergio Rojas y a menos de un mes del asesinato de Yehry Rivera,
ambos dirigentes indígenas en defensa de los territorios, la impunidad campea,
los intereses de los finqueros racistas, usurpadores, ocupantes ilegales, se
han impuesto con la protección del Estado costarricense. ¿Y la seguridad de las
comunidades indígenas? ¿Y la aplicación de la ley y de las medidas cautelares
de protección a las comunidades indígenas dónde queda? En estos momentos los
finqueros se sienten seguros, confiados y están en total impunidad.
Eso les permite seguir quemando casas, cosechas, entrar en
espacios privados y robar objetos, amenazar de muerte y violación a las
mujeres. Se prevé que el encierro en las casas va a provocar más violencia en
las familias y como mujeres debemos acompañarnos para que eso no suceda, pero
¿quién nos va a proteger de la violencia de los finqueros en los territorios
indígenas? Todas estas manifestaciones
de la crisis de salud son resultado del mismo sistema en que vivimos. Por
décadas el Estado neoliberal nos ha impuesto el monocultivo y la producción industrial
como única forma de producción, diciendo que era progreso, que nos traía empleo
y mejores condiciones de vida y con ello destruyeron la biodiversidad, nos
llenaron de contaminación, con envenenaron el agua, nos quitaron la tierra, nos
dieron trabajos mal pagados y en malas condiciones y nos enfermaron. Pero nos
dijeron que eso era más limpio.
Hoy sabemos que el desequilibrio ambiental, la cría
industrial de animales confinados y la destrucción de la Naturaleza, permiten
la transmisión global de las enfermedades; la pérdida de la biodiversidad ha
anulado barreras planetarias para responder ante virus y bacterias.
Además, sabemos que la producción industrial de alimentos
nos ha quitado los alimentos saludables y diversos y todo ello se sostiene con
la concentración de la tierra y otros bienes como agua y semillas. Nos plantean
el aislamiento y las medidas de limpieza como las únicas vías para salir de la
crisis del coronavirus, pero no dicen que solo es posible si tengo agua limpia,
si tengo acceso a los productos de limpieza y sobre todo si podemos mantener
altas las defensas del cuerpo y eso solo es posible si tenemos una dieta
adecuada, diversa y suficiente.
Desde la Red hemos manifestado muchas veces la necesidad de
cambiar estas relaciones de concentración económica, de concentración de la
tierra. La diversidad de alimentos saludables y su producción solo puede estar
en manos de la producción campesina. Se siguen gastando grandes cantidades de
recursos públicos en prevención, contención y tratamiento, pero no se menciona
ni una sola medida para cambiar las causas de tanto desastre.
Las mujeres del campo en el mundo hemos demostrado que desde otra lógica podemos producir los alimentos para nuestras familias y comunidades y comercializar en el espacio local para alimentar al mundo, que podemos producir manteniendo equilibrio con la naturaleza, siendo parte de ella y no explotándola. Ante la crisis de salud, de alimentación y de ambiente, solo hay una salida, distribución de la tierra, no acaparamiento de semillas, producción sin agrotóxicos, diversidad en la producción. Solo promoviendo la producción campesina, facilitando los mercados y las cadenas de distribución para poder comercializar nuestros productos, con la participación de las mujeres en la toma de decisiones y control de los bienes en las comunidades podremos construir otras formas de producir, otra forma de ser y otra forma de estar en el planeta.
RED DE MUJERES RURALES DE COSTA RICA ASOCIACION TINAMASTE 20 de marzo de 2020