77º Aniversario del insensato y criminal bombardeo atómico de EE.UU. a Hiroshima y posteriormente a Nagasaky

Martín Rodríguez E.

Ante la amenaza de una nueva carrera armamentista en el mundo y la permanente confrontación imperialista de Estados Unidos contra el mundo entero, esta trágica historia de la humanidad nos recuerda el peligro de una guerra mundial atómica.
Japón ya se había rendido en la II Guerra Mundial, luego de que el Ejército Rojo de la Unión Soviética les derrotara. Era un país que ya no era una amenaza para nadie.
Aún así, EEUU, para probar las bombas, decidió exterminar a miles de ciudadanos comunes, desarmados; un genocidio, un crimen de lesa humanidad.
Después de seis meses de intenso bombardeo de otras 67 ciudades, EE UU utilizó el arma nuclear cínicamente llamada Little Boy que fue lanzada sobre Hiroshima el lunes 6 de agosto de 1945, seguida por la detonación de la bomba Fat Man el jueves 9 de agosto sobre Nagasaki.
Entre 105.000 y 120.000 ciudadanos murieron y 130.000 resultaron heridas. Hasta la fecha, estos bombardeos constituyen los únicos ataques nucleares de la historia, pero hoy, EEUU de nuevo amenaza a la humanidad, incentivando guerras, terrorismo y dictaduras en todo el mundo.