Cambiemos actitudes y el mundo cambiará
José Luis Pacheco Murillo
No se logra entender cómo, teniendo los medios para lograr la paz, el entendimiento y la convivencia no lo logramos.
Al igual que sucede con una pareja que decide unir sus vidas, cuando tiene claro el propósito de ese unir, podrá seguir adelante y enfrentar cualquier circunstancia. Es normal que haya diferencias porque son dos personas diferentes y que en primer lugar no son nada en términos de familiaridad, fueron educados de manera diferente y al decidir convivir esas diferencias no desaparecen. Deben aparecer valores como el diálogo, la aceptación, la tolerancia, el respeto y especialmente la decisión de amar cada día para que esa convivencia se mantenga y logren el objetivo de esa relación que es SER UNO.
Igual debería de suceder en las relaciones entre países. Si tuvieran claridad los líderes del mundo sobre el objetivo de estar juntos en esta tierra y de CONVIVIR en procura de objetivos claros como el servicio y la paz, de igual forma deberían de salir a relucir los valores que antes mencionamos y en especial el diálogo para buscar entendimientos y buscar las formas para cumplir con el propósito de la convivencia.
Para qué tantos organismos internacionales, para qué Naciones Unidas, para qué OEA, para qué La Eurocomunidad y las muchas más que existen si no lograr el más grande de los objetivos: CONVIVIR EN PAZ.
No puede ser posible que a estas alturas del siglo XXI tengamos que soportar tantas guerras y sumar tantas muertes.
Definitivamente no hemos aprendido nada de las enseñanzas que nos han dejado los grandes representantes del amor y de la presencia de Dios entre nosotros. Todos ellos propusieron el amor y La Paz como estilo de vida y es lo que a pesar de que efectivamente se da, no es en realidad lo que se refleja porque un cañón y un disparo hacen más ruido que una caricia y un abrazo.
Dios quiera que llegue el día en que entendamos que solo logrando la unidad podremos convivir de la forma en que todos deseamos: en paz, en armonía y con el amor del uno por el otro. Si se puede lograr. Cambiemos actitudes y nos daremos cuenta de que el mundo cambiará…para bien de todos.