Por: Juan Carlos Durán Castro. Dirigente Sindical Sector Salud – Costa Rica
Al final más allá de toda valoración el que se beneficia es posiblemente José María Figueres Olsen, que no es Santo de nuestra devoción, lo cual debe quedar claro.
Pero,si la ultraderecha en sus distintas tonalidades y sabores, la cual vende falacias de marketing publicitario con simulacros de patriotismo y populismo de derecha incluido, se divide, consideramos que cualquier ala más de centro izquierda o progresista o de lo que queda de » socialdemocracia» que casi no es nada, nos resulta relativamente de recibo, aun teniendo claros los riesgos asociados del alto grado de fetichización de sistema ( que incluye también a las distintas organizaciones sociales), en general y en particular de las distintas banderas electorales.
Una lectura correcta es necesaria y un grado justo de pragmatismo parece ser una ruta relevante.