La Caja bajo ataque

Bloque Unitario Sindical y Social Costarricense

Las recientes reacciones por lo ocurrido en el hospital de Nicoya, en la provincia de Guanacaste, ponen en evidencia que, efectivamente, la Caja Costarricense del Seguro Social se encuentra bajo un ataque directo.

Las intenciones son claras, destruir la CCSS y pasar a manos privadas los servicios otorgados por la institución.

Como era de esperarse, lo sucedido, fue politizado. En la conferencia de prensa semanal del presidente de la República, en la cual participó la presidenta ejecutiva de la CCSS, Martha Esquivel, se hicieron evidentes las verdaderas intenciones: desprestigiar al personal del hospital, especialmente al personal médico, así como poner a los asegurados y la población en general en contra de la CCSS.

Marta Esquivel, en lugar de mostrarse prudente y basar sus opiniones en lo que apuntaba el diagnóstico, puso de manifiesto sus deseos de persecución contra el personal del hospital mencionado. Al Igual que Rodrigo Chaves, la susodicha apeló al sentimentalismo barato y la falsa empatía, lo cual ha sido sobredimensionado y explotado por los medios de comunicación que sin duda apuestan por la privatización de servicios.

Hay que destacar el papel irresponsable de los medios de comunicación. En la práctica los medios han venido intoxicando la opinión pública en contra de la CCSS y de otras instituciones (el ICE, por ejemplo) por décadas, por lo que en el caso en cuestión el abordaje está enfocado en satanizar al personal médico hospitalario, pero con el objetivo mayor de desprestigiar la CCSS. La prensa no se ha referido al diagnóstico, esto es ignorado. Explotando una falsa empatía, el objetivo es atacar la CCSS y a su personal. Y como era de esperarse no faltaron las cacatúas políticas que salieron a opinar públicamente al respecto, sin conocimiento y ningún respaldo técnico-científico.

Queda en evidencia la hipocresía de la administración Chaves Robles. Al parecer en este caso no hay prensa canalla, al contrario, bienvenida la prensa cómplice que defiende la destrucción de la CCSS que en el fondo es parte de su agenda política-económica compartida. Ahí no hay contradicciones. Lamentablemente, tal cual lo manifestaron los profesionales del hospital de Nicoya, el diagnóstico dado por el personal médico en el caso en cuestión se cumplió.

Este lamentable caso, ha sido distorsionado políticamente de manera absolutamente irresponsable por parte de la administración Chaves. Robles y la presidente ejecutiva de la CCSS, así como por parte de los medios de comunicación. Esto pone de manifiesto que, efectivamente, los sectores que conforman el conglomerado de la salud privada y los intereses asociados no se detendrán hasta lograr su objetivo, destruir la CCSS.

Piensan equivocadamente que no habrá resistencia al frente. En la práctica, estos sectores quieren convertir la CCSS en una veterinaria. No aceptan la existencia de la CCSS creada en la administración del Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia en la década de los años cuarenta del siglo pasado.

Costa Rica está enfrentada a situaciones difíciles. Los sectores dominantes quieren apropiarse de todo lo público, destruir la institucionalidad. A nosotros como pueblo nos corresponde parar a este cártel neoliberal.

Comisión Nacional de Enlace Organización miembro del BUSSCO

San José, Costa Rica 13 enero 2024