Protesta social 23 de junio, 10 am

Freddy Vargas Aguilar

Nuestras aulas están siendo inundadas de frustración, desánimo, sufrimiento.

Políticas gubernamentales golpean becas, transporte estudiantil, infraestructura, financiamiento, con una tendencia a abandonar la educación del pueblo.

La marcha del 23 de junio es un acto valiente. Indudablemente que habrá temor, pero no es una marcha por los educadores. Será una acción de coraje por el bienestar de la niñez, de la juventud y sus familias.

Es una marcha que deberá iniciar su movimiento desde cada escuela, colegio, hogar, como una marea creciendo, imbatible, por la vida, por el derecho a la educación.

Tiempo de dignidad, tiempo de lucha, tiempo de unidad.