Skip to main content

Etiqueta: biodiversidad

Comunidades de la Zona Sur se movilizan contra relleno sanitario en Osa

En una lucha que ha unido a vecinos de diversas comunidades, organizaciones ambientales y especialistas en ecología, la instalación de un relleno sanitario en Piedras Blancas ha generado un rechazo masivo en la Zona Sur. La empresa Nova Tierra Energy S.A., promotora del proyecto, planea construir y operar un sistema de gestión de residuos que, según los opositores, podría comprometer la biodiversidad única del área, que alberga el 2.5% de las especies del planeta.

El proyecto, aprobado por SETENA, ha sido severamente cuestionado por inconsistencias legales, como la autorización para operar sobre cuerpos de agua de dominio público y la omisión de una audiencia pública para las comunidades afectadas. “Es un crimen ambiental que no permitiremos. Nos enfrentamos a un ecocidio en una de las zonas más ricas en biodiversidad de Costa Rica”, señaló un portavoz de los Gestores Ambientales del Sur (GAS).

Lo anterior, establece tres puntos importantes:

  1. Impactos legales y ambientales:
    El diputado Ariel Robles Barrantes presentó un recurso de nulidad contra la resolución de SETENA, argumentando que el proyecto contraviene leyes nacionales, como la Ley Forestal y la Ley de Aguas. Además, expertos han señalado que los vertidos planificados al río Salamá Viejo —afluente del Humedal Térraba-Sierpe— violan la normativa que protege estos ecosistemas.
  2. Oposición comunitaria y política:
    La indignación de las comunidades quedó evidente en una reciente sesión del Concejo Municipal de Osa, donde más de 400 firmas fueron presentadas en rechazo al proyecto. “La gente está cansada de que nuestras riquezas naturales sean sacrificadas en nombre del lucro privado”, dijo una líder comunal durante la reunión. A pesar del respaldo técnico otorgado por algunas autoridades, las comunidades insisten en que los riesgos son demasiado altos. “No tienen capacidad hidráulica para el agua necesaria, y el daño a los ecosistemas es irreversible”, advirtió otro residente.
  3. Un llamado a la acción
    Con la última palabra en manos de la Municipalidad de Osa, las próximas semanas serán cruciales para determinar el futuro del proyecto. Las comunidades han convocado nuevas manifestaciones y piden apoyo nacional e internacional para proteger lo que consideran “un patrimonio biológico invaluable”.

Por lo tanto, la situación en Salamá, Osa, refleja un choque entre el desarrollo económico privado y la conservación del medio ambiente, poniendo de manifiesto las deficiencias en los procesos de evaluación ambiental y la falta de participación ciudadana. Las comunidades locales, lideradas por organizaciones como los Gestores Ambientales del Sur, han demostrado una notable movilización para defender sus derechos y proteger un ecosistema que no solo pertenece a Costa Rica, sino al patrimonio natural global. Este caso subraya la necesidad de garantizar que los proyectos de desarrollo respeten las leyes ambientales, los principios de precaución y la transparencia, priorizando siempre el bienestar de las generaciones presentes y futuras frente a intereses económicos.

Imagen con fines ilustrativos.

COP 16: Biodiversidad en disputa

Pronunciamiento de organizaciones sociales de Costa Rica de cara a la COP 16 en Cali, Colombia. Oct 21 – nov 01 de 2024

La diversidad biológica, es crucial para el mantenimiento de la vida, los genes, los microorganismos, las especies, las poblaciones, los ecosistemas y la biósfera.

Lamentablemente, la biodiversidad global está en declive, aproximadamente un millón de especies están en riesgo de extinción, muchas en las próximas décadas, debido a un modelo de producción dominante que se basa en la explotación de la Naturaleza y de las personas, por medio de actividades extractivistas como el agronegocio, minería, monocultivos, uso excesivo de plaguicidas, mega represas, extracción petróleo, y otras que han venido causando una severa crisis climática, bajo un sistema económico globalizado que no respeta los límites planetarios.

La pérdida de biodiversidad y servicios ecosistémicos tiene consecuencias catastróficas porque un mundo sin diversidad es un lugar peligroso para todas las poblaciones, incluida la humana.

Estamos perdiendo biodiversidad ¿por qué? Las actividades económicas extractivistas son la principal causa: minería, monocultivo, Ya en 1992, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medioambiente y el Desarrollo (CNUMAD), también conocida como la «Cumbre de la Tierra”, celebrada en Río de Janeiro, adoptó el Convenio Internacional sobre la Diversidad Biológica (CDB).

El Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) se propuso tres objetivos principales: conservación de la diversidad biológica, uso sostenible de la biodiversidad y participación justa y equitativa de los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos.

Su objetivo general es promover medidas que conduzcan a un futuro sostenible. La Conferencia de las partes (COP), compuesta por todos los Estados «Partes», constituye el órgano supremo de la Convención, en el cual los países firmantes se comprometieron a promover economías sostenibles para vivir dentro de los límites ecológicos de nuestro planeta.

Lamentablemente, desde su origen en 1993 la destrucción de la biodiversidad no solo no se ha detenido, sino que en estas tres décadas el planeta ha dejado zonas desérticas, destrucción de territorios y de sus formas sostenibles de producción, destrucción de los bienes comunes, contaminación y una gran pobreza, denominadas zonas de sacrificio. Se ha acelerado la destrucción ambiental planetaria.

En junio de 1994 el Gobierno de Costa Rica ratifica el Convenio de Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica (CDB), a partir de ahí se ha construido una institucionalidad relativamente funcional en el tema, hay mayor conciencia de algunos sectores de la población y conocimiento sobre la importancia de las áreas de protección.

Sin embargo, la imagen verde que los gobiernos de Costa Rica han promocionado en las últimas décadas, con fines comerciales, tanto dentro del país como hacia el exterior con el mensaje de que todo está bien en materia ambiental, lo que construye es un discurso engañoso que invisibilizan las diversas y profundas problemáticas ambientales que sufren día a día muchas comunidades en el país y acrecienta el favorecimiento del modelo de producción destructivo, por ejemplo:

  • Contaminación de grandes extensiones de territorios por agroquímicos que han venido envenenando el campo costarricense. Hay fuentes de agua contaminadascon bromacil, clorotalonil, mancozeb, entre otros y contaminación de suelos y aire en las zonas rurales. Hay reportes de muerte masiva de abejas, muerte y desaparición de poblaciones de peces.
  • Pérdida de ríos y biodiversidad por proyectos hidroeléctricos, sumado al no acceso al agua para la producción y la vida campesina.
  • Políticas agrarias que favorecen un modelo agroexportador extractivista que se centra en los monocultivos; este a su vez ha causado profundos desequilibrios económicos, sociales y ecológicos como acaparamiento de tierras, deforestación, pérdida de soberanía alimentaria, contaminación y graves consecuencias en la salud de las poblaciones rurales.
  • Favorecimiento político de mega proyectos de desarrollo turístico con construcciones ilegales en zona marítimo terrestre, como en humedales de playa Hermosa, Puntarenas, humedales Caribe Sur y se quiere revivir el aeropuerto en Zona de Osa, amenazando el Humedal Térraba-Sierpe.
  • Distorsión y mutilación de Planes reguladores regionales, para favorecer al gran capital.
  • Deterioro de las Áreas Protegidas. Aunque se da un incremento en la superficie bajo protección que hizo que se pasara de 5.330 ha a 32.700 ha; ha traído consigo desvinculación de las comunidades con las áreas protegidas, con implicaciones políticas, económicas y sociales. Sumado a que se imposibilita el resguardo con la disminución de presupuesto que perjudica las labores de monitoreo y protección de la biodiversidad (el área a resguardar por persona funcionaria creció seis veces en un año).
  • Promoción desde el gobierno actual de la explotación minera, violentando los avances logrados por el sector social ambientalista en décadas pasadas.
  • Aumento e impunidad de agresiones y amenazas contra los Pueblos Indígenas costarricenses por defender su autonomía, tierra, territorio y derechos colectivos.
  • Políticas desde el Ejecutivo que cercena la participación social en espacios de toma de decisiones sobre aspectos ambientales y sobre la biodiversidad específicamente.
  • Corrupción dentro de la institucionalidad pública, por ejemplo se dan permisos de deforestación en áreas protegidas-Caso Gandoca Manzanillo.

Sumado a esto, por medio de una serie de medidas autoritarias se ha irrespetado la institucionalidad democrática y las leyes y normas que regulan la protección ambiental, mientras se ha perpetrado una constante violación de la independencia de poderes y de las instituciones autónomas, así como de las obligaciones constitucionales. Este gobierno no solo carece de políticas y acciones concretas de protección al ambiente, en general, y en particular en lo que respecta a la crisis climática, la situación del agua y el uso sistemático de agroquímicos tóxicos, sino que viola la normativa existente. El ministro de Ambiente y Energía sigue en la sombra, con una agenda desconocida, con una administración que vela por profundizar la destrucción ambiental y la desigualdad social.

2024 es una buena oportunidad para reflexionar y actuar por el clima y la biodiversidad, es urgente un “cambio transformador” y urgente para evitar el colapso. Es hora de dejar de hablar en términos de las distintas crisis: biodiversidad, clima, alimentación, desigualdad, y en su lugar hacerles frente como una crisis interconectada, a través de un cambio de sistema total.

Es el momento de dejar de promover falsas soluciones que le ponen un precio a la naturaleza, tal como la compensación de la biodiversidad y la cooperación con el sector privado, que arriesgan un nivel similar de interferencia de las grandes empresas tal como se ve en la cumbre climática de la CMNUCC y otros espacios de gobernanza multilateral.

El Gobierno de Costa Rica debe trabajar a favor de acuerdos sobre la biodiversidad que garanticen que vivamos dentro de los límites planetarios, enfrentando las causas estructurales, frenando las prácticas y formas de producción que promueven la pérdida de biodiversidad, y promoviendo la agroecología, manejo comunitario de bosques, uso de semillas de polinización abierta, criollas y otras soluciones con base en las comunidades.

Es vital la participación de las personas en instancias políticas desde la colectividad, los movimientos sociales, en la legitimación y producción de la política pública desde y para los pueblos, en la disputa de sentidos. La biodiversidad que poseemos actualmente en Costa Rica ha sido cuidada históricamente y principalmente por la movilización y resistencia de las comunidades locales, pueblos indígenas, mujeres y los movimientos sociales y ecologistas, pero está siendo destruida por los intereses del capital.

Desde las organizaciones sociales reconocemos que sin la biodiversidad de semillas, de plantas, animales, sin los bosques, sin ríos limpios y libres no se puede vivir. Por la defensa de una economía que ponga la vida en el centro.

Por lo tanto, hacemos un llamado al gobierno de Costa Rica para que en la COP16 se comprometa con acciones reales y vinculantes, que se basen en la justicia ambiental y que reconozcan y respeten los derechos de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales.

Además, es necesario mayor regulación a las empresas transnacionales, ya que son en nuestro país es una amenaza a la conservación de los ecosistemas y las especies.

MAELA COSTA RICA

RED DE COORDINACIÓN EN BIODIVERSIDAD

COECOCEIBA-AMIGOS DE LA TIERRA

RED DE MUJERES RURALES DE COSTA RICA

ASOCIACIÓN TINAMASTE

FEDERACIÓN PARA LA CONSERVACIÓN DEL AMBIENTE-FECON

RED DE ESTUDIANTES DE SOCIOLOGÍA DE LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE

FRENAPI (FRENTE NACIONAL DE PUEBLOS INDÍGENAS)

Comunicado de prensa Federación Ecologista. ¿Tiene claro el gobierno de Costa Rica su papel en la COP16?

-Ministro de Ambiente y Energía guarda silencio ante posición país en materia de biodiversidad

-Organizaciones preocupadas por falta de información por parte de las autoridades en materia de la COP16

Desde el pasado 26 de setiembre las organizaciones Coeco Ceiba Amigos de la Tierra y la Red de Coordinación en Biodiversidad enviaron una consulta al ministro de ambiente y energía Franz Tattenbach Capra sobre la “posición país” que lleva el gobierno en los temas más importantes, además, se consultó sobre la composición de la delegación oficial que representará al país en la Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (COP16) a celebrarse en Cali Colombia del 21de octubre al 01 de noviembre.

Según reporta el suplemento Ojo al Clima en la COP16 el debate se centrará en cuatro líneas de discusión: 1) Analizar cómo va la actualización de las estrategias y planes nacionales, 2) establecer los indicadores para medir el progreso, 3) los medios de implementación (incluido el financiamiento), y 4)  acordar el mecanismo para el reparto justo y equitativo de los beneficios derivados de la información digital de las secuencias genéticas (DSI, por su sigla en inglés).

La consulta hecha por las organizaciones ecologistas no ha sido contestada pese a que ya se han incumplido el plazo de 10 días hábiles establecidos por ley, por lo que se procederá a hacer un Recurso de Amparo ante la Sala Constitucional.

Preocupa que las autoridades costarricenses oculten información de interés en el marco de una conferencia multilateral de gran relevancia como la COP16. Para Mariana Porras de Coeco Ceiba Amigos de la Tierra, “la falta de respuesta ante una consulta legitima sobre la posición de Costa Rica en las negociaciones en materia de biodiversidad puede deberse a dos cosas: una gestión ineficiente, improvisada y poco coordinada por parte del ministro Franz Tattenbach, o un afán por ocultar información relevante para la población costarricense”.

A menos de 3 días de comenzar la COP16, las organizaciones y la población costarricense en general no tiene información sobre las posiciones que llevarán sus representantes ente este espacio multilateral en la que se espera definir cuestiones que son de gran interés para la conservación de ecosistemas y los derechos de las poblaciones indígenas y campesinas.

El ocultamiento de información ha sido la tónica de la administración de Tattenbach en el Minae, cabe recordar el escándalo ya conocido por el ocultamiento de información en el caso del “Parque del Agua” impulsado por la diputada Pilar Cisneros.

UCR. Docentes de Biología de la UCR dicen no al oro puro y sí al oro verde

El Parque Nacional Corcovado se extiende en una superficie de 42 560 hectáreas terrestres y 3 354 hectáreas marinas. Su punto más alto alcanza los 782 m. sobre el nivel del mar. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR

En contra del proyecto Planet Gold Costa Rica

El Gobierno de Costa Rica apoya el proyecto “Planet Gold Costa Rica”, que pretende autorizar la extracción minera de oro, incluso en parques nacionales protegidos, lo cual viola leyes ambientales del país.

En la Asamblea de Escuela, todo el personal docente de la Escuela de Bilogía de la Universidad de Costa Rica (UCR), aprobó la oposición de esta Unidad Académica contra cualquier intento de autorizar la extracción minera artesanal en el Parque Nacional Corcovado.

En el comunicado emanado de la Asamblea de Escuela se dice que “es imperativo que el proyecto Planet Gold Costa Rica no ingrese al Parque Nacional Corcovado, para así preservar su biodiversidad y garantizar la continuidad de un ecosistema tan amenazado y reducido como el Bosque Lluvioso del Pacífico con toda su biodiversidad. Es por el tesoro verde que nos enriquece a todos los costarricenses, que decimos no a la extracción minera en el Parque Nacional Corcovado”.

Este Parque protege la mayor extensión continua y de mejor calidad del Bosque Lluvioso del Pacífico, ecosistema en peligro que se ubica en una estrecha franja en el sur de Costa Rica y el oeste de Panamá.

La minería dentro de los parques nacionales está prohibida por ley, ya que es una amenaza a la conservación de los hábitats naturales y sus funciones ecológicas.

Con más razón debe evitarse en el Parque Nacional Corcovado, que alberga un ecosistema sensible y vulnerable, además de que constituye un orgullo para el país, pues la Península de Osa cobija más de un 3% de la biodiversidad del planeta.

Este Parque representa un tesoro verde, no solo para el Costa Rica, sino para el mundo, advierte la Escuela de Biología de la UCR que plantea la pregunta: ¿Por cuánto oro venderías el sitio más biodiverso del planeta?

Especies únicas de plantas y animales

Para demostrar la importancia del Parque Nacional de Corcovado, las personas biólogas de la UCR detallan en el comunicado las raras especies de plantas y animales que están protegidas ahí, muchas de las cuales son únicas de esa zona.

Tal es el caso del pájaro Tangara-Hormiguera Carinegra (Driophlox atrimaxillaris), o de la orquídea más pequeña de nuestro país (Platystele tica), así como la especie de los árboles más altos de toda América Central (Huberodendron allenii).

Como si fuera poco, el Parque Nacional Corcovado alberga las poblaciones de aves más numerosas del mundo de la Cotinga Turquesa (Cotinga ridgwayi), la Cotinga Piquiamarilla (Carpodectes antoniae), y el Colibrí de Manglar (Chrysuronia boucardi).

El equipo de Biología de la UCR llama la atención sobre el hecho de que “una hectárea de bosque de la Península de Osa tiene más especies diferentes de árboles que una del Amazonas brasileño. Esto incluye verdaderos gigantes como el emblemático Ajo negro (Anthodiscus chocoensis), el camíbar (Copaifera camibar) y los guapinoles negros recientemente descubiertos (Hymenaea osanigraseminae y Prioria peninsulae)”.

Adicionalmente señala que “impresiona a cualquiera que existan allí poblaciones saludables de danta (Tapirella bairdii), chancho de monte (Tayassu pecari) y el emblemático jaguar (Panthera onca), del cual las autoridades sólo parecen preocuparse metafóricamente”.

El Parque Nacional Corcovado fue declarado como “Área Importante para la Conservación de las Aves” a nivel mundial, por parte de BirdLife Internacional. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR

Reconocimiento internacional

El personal docente de Biología de la UCR recalca en el comunicado que, además de estas especies ya descritas, “continuamente siguen apareciendo especies nuevas para la ciencia en los bosques del Parque Nacional Corcovado. Con grandes esfuerzos científicos, entre 1990 y 2005 se describieron 57 especies nuevas de plantas en la Península, de las cuales 52 se consideran únicas en el mundo, es decir endémicas de la zona. Desconocemos qué más esconden estos bosques”.

Por estas características el Parque Nacional Corcovado y la Península de Osa han recibido varios reconocimientos y premios internacionales. Entre ellos, BirdLife Internacional y todos sus socios a nivel mundial nombraron a Corcovado como “Área Importante para la Conservación de las Aves” a nivel mundial. Por su parte, la prestigiosa National Geographic Society premió a Corcovado como el sitio biológicamente más intenso del planeta.

Eso representa un extraordinario reconocimiento para nuestro país, pero también una enorme responsabilidad de conservación que compartimos todos los y las costarricenses. Por todas esas sobradas razones es que la Asamblea de Escuela de esta Unidad Académica de la UCR se opone a cualquier explotación de los recursos del subsuelo mediante prácticas de extracción artesanal o semiindustrial.

El Parque Nacional Corcovado conserva la orquídea más pequeña de nuestro páis (Platystele tica), cuyo tamaño se ve en la imagen comparada con la punta de un lápiz. (Foto: Dr.Adam Philip Karremans, UCR)

Aunque no brilla, es oro

El equipo científico de Biología de la UCR explica que la minería de oro en el Parque Nacional Corcovado, “aún sin el uso de cianuro o mercurio, aumentaría la liberación de sedimentos en los ríos de la península, especialmente si se autoriza el uso de motobombas, y la construcción de túneles. De igual forma incrementaría la acumulación de desechos sólidos, ruido y luces artificiales dentro del parque, perturbando de manera directa los ciclos reproductivos de las especies y dañando sus hábitats”.

Además, señala que la minería va en contra del ecoturismo, el cual contribuye significativamente a la economía local y ha sido motor de movilidad social para muchas comunidades locales.

Por lo tanto, “no podemos poner en riesgo el oro verde por el oro que nos empobrece como país. Vale recordar que el oro es un recurso finito, por tanto, no es una solución sostenible a los problemas socioeconómicos de nuestra población rural. El manejo responsable de la exuberante riqueza natural ha sido y seguirá siendo fuente de empleo directa e indirecta en toda Costa Rica por generaciones.

El Estado debe promover alternativas de desarrollo para Osa que gestionen la verdadera riqueza del país de manera que se distribuya, de forma sostenible, con justicia social y ambiental”.

“Sólo Costa Rica tiene el privilegio y, especialmente, el compromiso de ser custodio y asegurar la preservación del Parque Nacional Corcovado con su biodiversidad única. La minería de oro, y de cualquier tipo, no tiene lugar dentro de esa reserva biológica. El oro verde es el único a extraer mediante un uso turístico responsable que deja millones de dólares al Estado y a las familias de Osa y Puerto Jiménez”, concluye el comunicado.

 

Manrique Vindas Segura
Periodista, Oficina de Comunicación Institucional, UCR

Movimientos ecologistas y sociales solicitan firmas de respaldo para carta a líderes ambientales costarricenses en el extranjero

Si está de acuerdo con esta carta se le invita a respaldarla con su firma. El enlace al formulario está al final.

1 de octubre de 2024

Carlos Manuel Rodriguez, Director Ejecutivo y Presidente del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), y miembros/as de la Mesa Directiva de GEF,

Grethel Aguilar, Directora General Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), y miembros/as de la Mesa Directiva de UICN,

Andrea Meza, Secretaria Ejecutiva Adjunta de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación,

Christiana Figueres, ex-Secretaría Ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático

Pregunta: ¿El liderazgo del sector privado en los espacios de formulación de políticas sobre clima, biodiversidad y agua está dejando al planeta vulnerable a escenarios extremos y retrasando las conversaciones urgentes que deben tener lugar sobre un cambio económico sistémico?

Estimado/a Director Ejecutivo Rodríguez, Directora General Aguilar, Secretaria Ejecutiva Adjunta Meza, y ex-Secretaría Ejecutiva Figueres,

Dado el destacado liderazgo de Costa Rica en la configuración de la política ambiental global, nosotros/as, los miembros del Frente Nacional de Lucha en Costa Rica, les escribimos a ustedes, nuestros conciudadanos, en la cúspide de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16), la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) y otros foros y eventos ambientales próximos, para pedirles respetuosamente que ustedes y sus colegas en posiciones de influencia en espacios de toma de decisiones ambientales:

  1. Relaten una historia más compleja y matizada sobre la dirección que ha tomado el país desde la década de 1980, mientras adopta y modela el liderazgo del sector privado para abordar la emergencia climática, muy probablemente a expensas del sector público;
  2. Relaten una historia más compleja y matizada sobre los verdaderos costos y beneficios del creciente liderazgo del sector privado en los espacios de formulación de políticas ambientales en todo el mundo;
  3. Promuevan un cambio de políticas y financiamiento que apoye nuevas historias: una nueva narrativa, que defiende en lugar de debilitar el papel esencial del sector público y la sociedad civil en la solución de la emergencia climática.

Aunque el sector privado debe, por supuesto, participar de manera central en el financiamiento y el desarrollo de soluciones climáticas, ¿puede honestamente tomar la iniciativa, en la medida en que lo hace, de transformar la economía global en el plazo que exige la emergencia climática?

Necesitamos un debate coherente sobre esto, a partir de la narración de historias sólidas.

En una charla TEDXPuraVida reciente, por ejemplo, presidente Rodríguez, que usted dio, arrojó luz sobre la influencia de Costa Rica en la elaboración del Acuerdo de París y el Plan de Biodiversidad.  También hizo alusión a nuestra historia relacionada con la protección del 65% de nuestra tierra a través del Programa de Pago por Servicios Ambientales.

En general, usted sostiene que Costa Rica es el único país “que opera en armonía con la naturaleza, en unidad con la naturaleza, de manera positiva con la naturaleza”.

Pero ¿qué tan cierta es esta afirmación?  ¿Y por qué es relevante?

Como integrantes del Frente Nacional de Lucha, unidos en la defensa de las instituciones públicas, que consideramos son fruto del entramando de las conquistas sociales responsables de nuestros éxitos en la protección de la naturaleza y de la creación de una fuerte red de seguridad social para nuestro pueblo, vemos una realidad diferente.

Una gran parte venimos del sur del país, dedicados a defender los ríos vulnerables frente a la amenaza de construcción de represas, reafirmamos nuestro compromiso a favor de proyectos que se alejan de los intereses de las grandes industrias de la región: ganadería, caña de azúcar y piña producida industrialmente.   Además de la problemática socioeconómica y ambiental suficientemente documentadas que vivimos aquí desde principios de la década de 1980, existen nuevas preocupaciones sobre cómo las asociaciones público-privadas en esta región (emblemáticas de cómo las corporaciones de todo el mundo están asumiendo un nuevo y poderoso liderazgo para enfrentar la emergencia climática) impiden que las comunidades tengan una voz auténtica en las discusiones sobre el futuro de la región.

Directora General Aguilar, en la zona sur del país le manifestamos una profunda preocupación sobre cómo una alianza entre la Agencia Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ) y Fresh Del Monte, Inc., enfocada en reforestar la cuenca alta donde se encuentra Del Monte, está haciendo cada vez más difícil hablar abiertamente sobre el impacto de la sedimentación de esta región en la destrucción del Humedal Térraba-Sierpe, un sitio Ramsar.   Uno de los objetivos de la alianza es reforestar las fincas dañadas para que siga habiendo agua para la piña, sin generar un debate público abierto y accesible sobre el hecho de que Del Monte utiliza el 98% del agua concesionada en esta área y es el mayor usuario de agua del país.  ¿Qué tan sostenible es este uso?  Es difícil decirlo, en parte porque la empresa tiene datos que considera privados (lo que frecuentemente afirman los funcionarios de la empresa en reuniones públicas), y así, niega el derecho a tener acceso como ciudadanía.

También se limita la discusión sobre la afectación socioeconómica que sufren las comunidades indígenas y locales que dependen de la pesca, ante la disminución de peces resultante de la sedimentación y la carga química. Así mismo, impide un debate profundo sobre cómo se viene abriendo una puerta para que los carteles del narcotráfico ingresen en esta área; o si, por lo tanto, la región debe abandonar rápidamente la piña, en lugar de garantizar su continuidad.

¿Cómo tener esta conversación más amplia, particularmente en espacios como la COP16 y la COP29 y como parte de acuerdos como el Plan de Biodiversidad y el Desafío del Agua Dulce?

Por supuesto, no es sólo en el sur donde se está volviendo más difícil para la ciudadanía cuestionar los proyectos individuales, así como la lógica mercantil extractivista –corporativa y neoliberal y el modelo de desarrollo predominante que se impone. Costa Rica se está convirtiendo en un mosaico de playas gentrificadas y tierras adyacentes; la piña ahora se planta en todo el país, no sólo en la zona sur; las áreas protegidas están siendo invadidas por actores poderosos; los grandes terratenientes y los hoteles de lujo son los principales beneficiarios del suministro de agua que continúa reduciéndose para las poblaciones aledañas. Estos son solo algunos de los ejemplos de cómo se está transformando Costa Rica.

Por múltiples razones, es un desafío para la ciudadanía tener el derecho de discutir públicamente cualquier proyecto de desarrollo impuesto desde los sectores dominantes a nivel nacional e internacional, y mucho menos cuestionar su impacto colectivo como reflejo de una decisión de continuar con la actual economía extractivista, en lugar de alejarse de ella.

Es preocupante, sobre todo en este momento de la historia de Costa Rica, las diversas formas y mecanismos que se fraguan orientadas a que personas de todo el espectro político sigan siendo ignoradas y silenciadas frente a personas, familias y corporaciones poderosas que influyen en el país.   Esta situación trae a la mente, Secretaria Ejecutiva Figueres, un comentario que usted hizo sobre el proceso de orientación del Acuerdo de París, que aparece en Zen y el Arte de Salvar el Planeta (páginas 212-13): “No se puede avanzar hacia soluciones sin comprender el problema. Sólo se lograrán soluciones efectivas si honramos y respetamos las diferencias de todos; si elegimos comprender las necesidades y los dolores de quienes están al otro lado de la mesa”.  Y su comentario, Secretaria Ejecutiva Adjunta Meza, sobre la necesidad de que el liderazgo se base en “la colaboración, la inclusión, la empatía y el pensamiento sistémico”.  Pero en Costa Rica cada vez es más difícil para la sociedad civil saber siquiera qué mesas son aquellas donde se toman las decisiones.

Por lo tanto, lejos de ser el único país que vive en armonía con la naturaleza, creemos que, desde la década de 1980, cuando Costa Rica inició su camino de privatización del sector público en general, empezamos a perder de manera acelerada la tierra, las aguas y el espíritu del país que amamos.

Vemos que una creciente privatización del sector ambiental está:

  • concentrando el poder en manos de relativamente pocos individuos e industrias;
  • disminuyendo la capacidad del sector público y de la sociedad civil para acceder a información crítica, participar en debates y establecer agendas;
  • vaciando los planes de conservación y las áreas protegidas, a medida que la industria, el turismo y los monocultivos se expanden con impunidad sin estudios de impacto ambiental y otros consignados en marcos jurídicos a nivel nacional e internacional;
  • ayudando a abrir la puerta a la especulación no regulada, anónima y peligrosa sobre el agua, la tierra y la biodiversidad;
  • ayudando a mantener la misma economía extractivista que está destruyendo el país y el planeta, al retrasar conversaciones urgentes con todos los actores de la sociedad sobre el cambio económico sistémico, que cada vez es menos asegurable; y
  • debilitando y vulnerando el apoyo y la confianza en el sector público en general, dada la fluidez del poder, la influencia y la visión entre los diversos sectores. La concentración de poder en manos de unos pocos, con la intención de generar ganancias, en un sector está impulsando la concentración de poder en otros sectores en un ciclo de retroalimentación preocupante y no examinado, erosionando nuestra democracia. Creemos que esta tendencia también está ocurriendo en muchos otros países.

Esta es la historia que como movimiento exploramos y relatamos sobre Costa Rica, en parte con la esperanza de sanar nuestras propias divisiones, y en parte para que aquellos de ustedes que presentan al país como modelo sigan su ejemplo.

Al abordar esta compleja historia, pedimos algo que es relativamente simple, dado que es difícil, si no imposible, para la sociedad civil reconocer e identificar qué instituciones y foros están promoviendo la privatización del medio ambiente, y en qué espacios.  Aunque los grupos de la sociedad civil están presentes en eventos como las próximas COP16 y COP29, sus voces, historias y planes alternativos suelen ser secundarios, como si operaran en un universo paralelo.

Le pedimos a ustedes y a sus colegas que cuestionen abiertamente en salas clave de toma de decisiones ambientales la narrativa predominante de que la emergencia climática es tan grave que solo las corporaciones pueden financiarla adecuadamente y resolverla a tiempo, y debatir abiertamente en estas salas plataformas económicas alternativas. En la actualidad existen múltiples grupos centrados en “falsas soluciones” climáticas, apuntando a estrategias específicas, como los mercados de carbono, REDD+ y las soluciones basadas en la naturaleza, entre otras.  Cada vez más grupos de la sociedad civil proponen profundas soluciones económicas sistémicas para transformar la actual economía extractivista: desafiando la captura corporativa de instituciones como las Naciones Unidas, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y los bancos de desarrollo regionales; y proponiendo justicia fiscal internacional, condonación de la deuda para el Sur Global, ingreso básico garantizado y otras soluciones que honestamente desafíen en lugar de fortalecer el statu quo.  Los espacios de toma de decisiones cada vez más financiados y dirigidos por corporaciones no podrán nombrar ni mucho menos desafiar el statu quo.

Por lo tanto, la sociedad civil necesita que aquellos de ustedes en posiciones de liderazgo rompan el silencio, promuevan un debate inclusivo sobre cambios económicos sistémicos.

Nos comunicaremos con usted en las próximas semanas para programar una reunión virtual.

Gracias de antemano por considerar los puntos de esta carta.

Firmantes:

Frente Nacional de Lucha (FNL)

Federación Costarricense para la Conservación del Ambiente (FECON)

Movimiento Ríos Vivos

Frente Nacional de Sectores Afectados por la Producción Piñera (FRENASAPP)

Por favor firmar la carta en el siguiente enlace:

https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSeKkUP959eifJq0XjOc6wwUirsN4W3hI75kqAa92NO4rrDxGA/viewform?usp=sharing

¡Muchas Gracias!

Festival Ambiental en La Gamba: Una iniciativa de conservación y comunidad

La Asociación de Desarrollo Integral y el Comité de Turismo de La Gamba extienden una cordial invitación a toda la comunidad para participar en el Festival Ambiental, que se celebrará el sábado 5 de octubre de 2024, en el Salón Comunal de La Gamba, ubicado en el cantón de Golfito, Zona Sur. El evento se llevará a cabo desde las 9:00 a.m. hasta las 4:00 p.m.

El festival tiene como objetivo promover la conservación de los recursos naturales y culturales dentro y fuera de las áreas de vida silvestre protegidas de la región. En el transcurso de la jornada se llevarán a cabo diversas actividades culturales, deportivas y ambientales, diseñadas para concienciar a la comunidad sobre la importancia de proteger el entorno natural y valorar la riqueza cultural local.

Dentro de la agenda del festival, se presentarán los diferentes esfuerzos que la comunidad ha implementado para la conservación de los recursos naturales. Estos esfuerzos incluyen acciones dentro y fuera de las áreas de conservación, lo cual subraya el compromiso de La Gamba con la protección de la biodiversidad local y la vida silvestre.

La invitación es abierta a toda la comunidad, y se espera contar con la valiosa asistencia de los representantes de diversas organizaciones, así como de miembros de la comunidad que deseen involucrarse en esta importante causa. A través de este evento, los organizadores buscan unir esfuerzos y fortalecer el compromiso local con la sostenibilidad.

 

Información compartida con SURCOS por Renier Canales Medina.

Movimiento de Santa Ana lucha por Parque Natural Urbano Lorne Ross para cuidar biodiversidad y salud comunitaria

En el corazón de Santa Ana, existe un tesoro natural que muchos desconocen, pero que tiene un valor incalculable para la biodiversidad y el bienestar de la comunidad.

El Parque Natural Urbano Lorne Ross no solo destaca por su impresionante belleza, sino también por su relevancia ecológica al albergar humedales y ser un corredor biológico vital.

Este espacio donado a los santaneños, no puede ser fragmentado ni olvidado, ya que beneficia a toda la comunidad.

Le invitamos a descubrir más sobre este lugar único y cómo puede apoyar su preservación, le compartimos el video. ¡No se lo pierda!

Ahorro verde, ¿cómo puede contribuir a nuestro buen vivir?

Fiorella Salas Pinel.

MSc. Fiorella Salas Pinel
Académica SEPRODES, Escuela de Economía UNA-Costa Rica

Día con día, nuestra existencia transcurre rodeada de servicios ecosistémicos que hacen posible la vida en nuestro planeta. Desde el aire que respiramos, el agua que tomamos y los alimentos que consumimos, entre muchos otros: todo depende de la cantidad y calidad de la provisión que obtenemos del sistema natural, donde el sol como fuente primaria de energía hace posible la fotosíntesis y de esta forma se mantiene la continuidad en las cadenas tróficas que sostiene la biodiversidad tal como la conocemos. De igual forma, nuestras actividades generan residuos que son dispuestos en dichos ecosistemas y que en ausencia del adecuado tratamiento representan riesgos para su funcionamiento.

A pesar de este papel fundamental, en ocasiones “lo ambiental” se asocia únicamente con aspectos concretos como algunas celebraciones cada año. Sin embargo, la conciencia ambiental es necesaria pero no suficiente, ya que la sociedad humana es inviable en ausencia de la naturaleza y nuestra supervivencia como especie depende de mejores hábitos. Tomar acción requiere conocer aspectos de la vida cotidiana con los cuales podemos ahorrar dinero y al mismo tiempo contribuir con la sostenibilidad ambiental. Es decir, podemos fortalecer tanto nuestras finanzas personales como el ambiente. Esto mediante una toma de decisiones más consciente de nuestra relación con temas como: el agua, la energía, los residuos, el desperdicio de alimentos, entre otros.

El ahorro verde consiste en aplicar acciones que promuevan un estilo de vida sostenible de acuerdo con las experiencias cotidianas de cada persona. Como todo hábito requiere constancia y disciplina, que podemos implementar mediante los siguientes pasos.

Primero, conocer los principales recursos naturales y servicios ecosistémicos, que nos rodean y hacen posible nuestra vida. El agua, y la energía coexisten con los residuos: sólidos, líquidos, gaseosos, que generamos en nuestros hogares, centros de estudio y trabajo, entre otros espacios.

Segundo, identificar que recibimos servicios asociados con “la naturaleza”. Por ejemplo, pagamos recibos por el agua potable, la electricidad y el alcantarillado sanitario o tratamiento de aguas residuales. Todos directamente vinculados con los ecosistemas que hacen posible las actividades productivas y humanas. Entonces, ¿conocemos a nuestro proveedor de servicios? ¿Sabemos si ejecuta acciones orientadas a la sostenibilidad ambiental de sus operaciones? ¿Qué tanto nos involucramos en estas medidas? Por ejemplo, ¿conocemos el uso de electricidad por horarios establecidos y con tarifa diferenciada?

Tercero, calcular los costos directos de los servicios que pagamos. A este respecto, ¿hemos revisado los recibos para verificar los rubros consumidos? Medidas como el uso de luminarias LED, apagar luces y desconectar dispositivos cuando estén en desuso (evitando el consumo fantasma) nos permiten reducir tanto el monto de las facturas como la presión sobre las fuentes energéticas, especialmente las hidroeléctricas durante la época seca. Adicionalmente, ¿estamos haciendo un uso racional del agua durante nuestras actividades diarias en cada espacio donde interactuamos, por ejemplo, mediante duchas de menor duración, empleando sanitarios con descarga diferenciada, grifería inteligente o cerrando la llave cuando no necesitamos del agua, entre otros?

Cuarto, identificar ahorros asociados a un estilo de vida sostenible de acuerdo con nuestras experiencias cotidianas. Estrategias ligadas a la reducción del desperdicio y las compras sostenibles surgen como oportunidades relevantes. Planificar los menús permite reducir el desperdicio de alimentos, que a su vez podría potenciarse si rechazamos el exceso de embalajes y envases no reciclables. Por su parte, tomarse el tiempo para reflexionar sobre la necesidad real de consumir podría reducir el consumismo asociado a bienes y servicios innecesarios y que eventualmente incrementarían la generación de residuos.

Las acciones orientadas hacia un estilo de vida sostenible son posibles. En esta dirección, el taller titulado “Ahorro Verde” ha sido impartido en dos ediciones de Costa Rica Aprende con la U Pública. De esta forma, el Programa Sectores Productivos y Desarrollo (SEPRODES) de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional (ESEUNA) ha contribuido con la creación de capacidades de personas ligadas a diversas actividades productivas, como el comercio, a crear estrategias orientadas al mejoramiento de su calidad de y vida y la reducción de su huella ambiental. Beneficios asociados con ahorros en el pago de servicios públicos, alimentación más saludable y decisiones de compra más conscientes. Nos encontramos frente a un importante reto ambiental, donde cada una de nuestras acciones cuenta y mucho más al enfrentarnos a fenómenos planetarios como el cambio climático, que reporta aún más presión sobre los ecosistemas naturales: sostén fundamental de la vida en nuestro planeta.

  1. Investigadora del Programa Sectores Productivos, Competitividad y Desarrollo, Escuela de Economía, Universidad Nacional, Costa Rica. Es Magister Scientae del Programa de Maestría en Política Económica del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) de la Universidad Nacional. Actualmente se desempeña como coordinadora de la Maestría en Economía del Desarrollo. fiorella.salas.pinel@una.cr https://orcid.org/0000-0001-5036-9779

Gandoca no son solo monitos

Roxana Salazar Cambronero
Abogada

Rsc72169@gmail.com

En 1985 el Estado costarricense tomó la decisión de crear el Refugio Nacional de Vida Silvestre Gandoca-Manzanillo. Los objetivos de su creación se basaron en garantizar la protección de la riqueza de biodiversidad de la zona.

El Refugio abarca un área territorial que incluye manglares, pantanos, bosque y arrecifes de valor único, en la zona se encuentra la única asociación de yolillo y orey que existe en el país. Otra consideración fue que la zona cuenta con poblaciones de especies en vías de extinción como el manatí, el cocodrilo y el caimán, la danta y diversas especies de monos y felinos. Sin olvidar que en la franja litoral y zona de arrecifes existe un banco natural de ostión de mangle, y criadero de poblaciones como langosta, sábalo. La zona además cuenta playas con potencial turístico sostenible. Pareciera que es algo más que monitos.

En 1992 se publica la novela “La Loca de Gandoca”. Se convirtió en un libro clásico de consulta obligada, trascendió el ámbito nacional. El libro evidenció cómo fuerzas económicas se movían para cambiar el uso del refugio. Se aliaron diferentes personas, con sus propios intereses para cumplir con sus metas económicas.

Apareció nuestra querida Anacristina Rossi e inició una lucha como David para evidenciar lo que estaba sucediendo. Parte de los hechos se han plasmado en la novela.

¿Qué ha sucedido durante este tiempo? Pasamos de un siglo a otro. Se incrementaron los efectos del cambio climático, los residuos no se reducen, tenemos micro plásticos en todo lado, fuimos testigos de una pandemia mundial. ¿Y Costa Rica? ¿Se garantizó la protección del refugio por el que luchaba Anacristina Rossi?

Lastimosamente desde hace varios años venimos recibiendo información de reclamos ciudadanos sobre las afectaciones sobre el sitio. Poco a poco conocemos que las condiciones se han deteriorado, con la indiferencia de los entes a cargo de su protección. Se facilitan actividades que vulneran la riqueza natural del Refugio.

Contrario a lo que se esperaba se han venido confabulando fuerzas del sector público con el sector privado, para no seguir protegiendo “monitos”, facilitando espacios para los negocios, que dicen van a generar empleo y riqueza. Suena como el “BMW” que nos traería el CAFTA. Seguimos esperando, ojalá se haga realidad, ahora tiene que ser uno eléctrico.

Lo que estamos viendo es como una repetición de los hechos de la novela, se están plasmado en situaciones, posiciones y pareciera que incluso los mismos actores, con muy similares intereses económicos. Macondo se repite.

El país representaba un ejemplo de que se podían tomar decisiones para lograr un balance entre la protección ambiental y ser humano. Incluso este mensaje “verde” ha permitido que el país sea un referente obligado para la visitación de turistas de diferentes partes del mundo. Se convirtió en una actividad lucrativa.

La situación pareciera que no es tan maravillosa como se vende. Las diferentes políticas y compromisos país están en sitios web disponibles para consulta. ¿En la práctica como lo vemos?

Frente a estas tristes noticias se nos habla de reverdecimiento de las ciudades, igual que es función del Estado velar por la conservación del ambiente, para mejorar el bienestar y desarrollo social, económico, político y ecológico de la población costarricense.

Las afectaciones al ambiente no son solo en Gandoca Manzanillo, se han venido manteniendo en nuestro país y a nivel mundial. La calidad de vida de los habitantes, nuestra supervivencia depende precisamente de poder proteger a los monitos, de garantizar valiosos recursos como el agua, pareciera que estamos en punto crítico en que debe resolverse para atender nuestro derecho fundamental a un ambiente sano.

Se ha carecido de una constante motivación para que cada uno de nosotros cumpla con el derecho a tener un ambiente sano, y cumplir con obligaciones de hacer realidad ese derecho con compromisos a nivel individual.

Colectivo de Defensa del Medio Ambiente y su Conservación en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente

PRONUNCIAMIENTO PÚBLICO

Ante hechos recientes que han afectado las condiciones ambientales de Costa Rica; personas, organizaciones e instituciones dedicadas a contribuir con los esfuerzos de conservación de la biodiversidad y los ecosistemas, y, en lo que consideramos inconsistencias y debilidades en las políticas de Estado, observado desde nuestra perspectiva técnica, científica y profesional, deseamos manifestar respetuosa y contundentemente a la sociedad costarricense lo siguiente:

  1. La evidente relegación del tema ambiental en la agenda del Estado, haciéndose notorio en la omisión en el informe del Presidente de la República el pasado 02 de mayo en la Asamblea Legislativa.
  2. La pasividad de la Comisión Permanente Especial de Ambiente de la Asamblea Legislativa para pronunciarse sobre los impactos ambientales negativos en diversos puntos del territorio nacional siendo omisos sobre las ambigüedades de la administración en los asuntos medioambientales y de conservación de la biodiversidad y los ecosistemas.
  3. El intento por debilitar las instituciones técnicas dedicadas a la gestión de la biodiversidad y los ecosistemas, disminuyendo sus competencias y desviando su manejo hacia una concentración de poder en figuras políticas, no solo afectando su funcionalidad, sino también amenazando logros históricos de la participación ciudadana en la conservación de la naturaleza, ejemplo que Costa Rica ha dado en los modelos de gobernanza que los recursos naturales requieren.
  4. La disminución a niveles críticos de las capacidades presupuestarias tanto con los presupuestos ordinarios y extraordinarios, así como la injustificada retención y dilatación en liberar recursos financieros dados al país por parte de organismos internacionales, afectando programas de conservación de la biodiversidad y los ecosistemas en las áreas silvestres protegidas y comunidades adyacentes.
  5. El empuje constante y sistematizado de impulsar proyectos nocivos para la integridad ambiental, evidenciando intereses incompatibles con el mandato constitucional de un ambiente sano y ecológicamente equilibrado. Dichos proyectos dirigen hacia la pesca de arrastre, la exploración y explotación de hidrocarburos, la minería a cielo abierto y la construcción de marinas y atracaderos en las costas nacionales.
  6. La desatención de las áreas silvestres protegidas, que constituyen uno de los pilares del desarrollo y necesitan de manera urgente volver a estar en el centro de las prioridades gubernamentales. La biodiversidad y los ecosistemas que se protegen deben ser responsablemente utilizados para garantizar la prosperidad económica y ecológica de Costa Rica.
  7. La omisión y rechazo repetidos y deliberados de los criterios técnicos y científicos de investigadores e instituciones renombradas que ayudan a sustentar las decisiones sobre la gestión de las áreas protegidas, ignorando su valía y permitiendo utilizar herramientas que pueden verse políticamente manipuladas por intereses lejanos a la conservación de la biodiversidad en estos espacios.
  8. La indiferencia ante la afectación progresiva en las capacidades que los servicios ecosistémicos proveen, afectando múltiples sectores de la economía nacional, esta actitud es claramente inconsistente con el mensaje emitido por la administración de buscar desarrollo humano mientras intencionalmente se desconoce el valor de su existencia, ignorando el aporte que brindan en las oportunidades de mejorar las condiciones de vida de la población.

POR TANTO:

  1. Solicitamos a las autoridades del Poder Ejecutivo retomar la agenda ambiental como una prioridad de Estado, priorizar el tema de la gestión responsable y coherente de las áreas silvestres protegidas y modificar el enfoque dado por el Presidente de la República y el Ministro de Ambiente y Energía minimizando abiertamente el papel de la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas en la función que cumplen en el desarrollo nacional como capital natural y proveedores de múltiples beneficios ambientales y económicos.
  2. Instamos a la Comisión Permanente Especial de Ambiente de la Asamblea Legislativa para que se mantenga vigilante y realicen sus labores de control político y apoyo con una perspectiva más crítica, constructiva y se manifiesten pública y abiertamente de lo que denunciamos en este manifiesto.
  3. Proponemos se retire de la corriente legislativa de manera inmediata el proyecto de ley contenido en el expediente 23213 “Proyecto de Fortalecimiento de las Competencias del Ministerio de Ambiente y Energía” con tal de ser revisado, discutido y analizado por distintos actores vinculados a la conservación de tal forma que encuentre el equilibrio necesario.
  4. Demandamos aumentar la generación de recursos financieros por medio de asignaciones presupuestarias razonables y proporcionales a las necesidades del Sistema Nacional de Áreas de Conservación que garanticen el cumplimiento de sus objetivos y funciones. Además liberar de inmediato los recursos provenientes del proyecto REDD+ ante su inexplicable e inaceptable retención que afecta considerablemente programas de conservación.
  5. Urgimos la implementación de la reestructuración inmediata del Sistema Nacional de Áreas de Conservación para optimizar sus competencias, funcionamiento y alcance técnico, operativo y jurídico. Para eso proponemos la creación de una comisión de expertos independientes de reconocida trayectoria académica y de experiencia y que con una remuneración simbólica presenten en un término de tiempo establecido las recomendaciones para ejecutar tan urgente acción.
  6. Llamamos a la sociedad costarricense a informarse y ser parte de colectivos y organizaciones dedicadas a la conservación y gestión de recursos naturales a escala local o nacional y por medio de acciones específicas apoyar los diferentes procesos para mejorar la preservación de la biodiversidad y los ecosistemas de la nación así como denunciar anomalías, delitos o atropellos contra el patrimonio natural.
  7. Confiamos en el Estado de Derecho que impera en Costa Rica, sabiendo que las instancias judiciales responderán objetivamente las demandas de la sociedad en el cumplimiento del marco jurídico que sostiene y defiende la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas, siendo también garantes de las obligaciones derivadas por los convenios internacionales de los cuales el país forma parte.

San José, Costa Rica. 05 de junio del 2024

  1. Fundación Costarricense para la Restauración Ecológica, FUCORE
  2. Preserve Planet Costa Rica
  3. Álvaro Sagot, Catedrático Facultad de Derecho. Universidad de Costa Rica
  4. Asociación de Guardaparques Pensionados, ASOGUAPE
  5. Organización Mundo Verde
  6. Organización Aba Animal
  7. Asociación para la Protección de la Cuenca del Río Sarapiquí
  8. Fundación Corcovado
  9. Tirimbina Rain Forest Center
  10. Asociación Costarricense de Guías de Turismo
  11. Organización Guarumo Restauración Ecológica
  12. Organización Primates de Occidente
  13. Centro de Investigación de Recursos Naturales y Sociales
  14. Asociación Somos Congos
  15. Fundación Bosque Nuboso de Occidente
  16. Cámara Nacional de Ecoturismo, CANAECO
  17. Justice for Nature. Asociación Bosque para los Niños
  18. Proyecto Huella Verde-UNED. Universidad Estatal a Distancia
  19. Santa Teresa Hoy Magazine
  20. Covirena Cabo Blanco Ario
  21. Asociación Ornitológica de Costa Rica
  22. Nama Conservation
  23. Covirenas Caribe Sur.
  24. Red Nacional de Reservas Privadas
  25. Fundación Rapaces de Costa Rica
  26. Más de 100 profesionales, científicos y líderes comunales

Firma responsable
Christian Mata Bonilla
Cédula 3-0315-0139
Correo: chrismat@outlook.com

Imagen ilustrativa, UCR