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Un desafío que no se puede postergar más: La indispensable unidad de los movimientos sociales, ambientales y sindicales

Italo Fera Fallas

1. Protagonismo social de siempre:

Cualquier lectura que hagamos de nuestro país y de la realidad continental y mundial nos evidencia la imperiosa necesidad de llevar a cabo la unidad de todos los representantes y miembros de las organizaciones sociales, obreras, campesinas, ambientalistas, comunales y sindicales, sin distingos ni exclusiones de ningún tipo.

Llegó la hora, hoy más que nunca, para que lo mejor de nuestros líderes y representantes del pueblo honesto y trabajador, herederos de los valores de la auténtica democracia socio económica y política, continuadores voluntarios en nuestros campos y ciudades, comprometido en la lucha por la inclaudicable distribución de la acumulada riqueza que se genera en el país y es producida por todos los que aportan su fuerza de trabajo física y mental. Al final esa riqueza nacional más concentrada en unos pocos.

Llegó la unidad de los que están siempre en los campos y zonas rurales, que aún sobreviven con dificultad produciendo lo mejor de nuestra alimentación saludable y defendiendo nuestra independencia y soberanía alimentaria.

Juntarnos todas las personas conscientes y representantes que se identifican y se mantienen identificados con las necesidades de los cientos de miles de trabajadores de las ciudades, los representantes que contra todas las exclusiones se mantienen promoviendo y acompañando a los miles de emprendedores informales, MYPIMES, pequeñas y medianas empresas nacionales.

Junto con los dirigentes por la lucha comunal y los servicios públicos locales/regionales, ese extraordinario voluntariado comunal que ha hecho grande al país, los líderes de comités pro caminos, por el mejoramiento vecinal, las asociaciones de acueductos urbanos y rurales (ASADAS) y de desarrollo comunal local y regional.

También, sin duda, debemos asumir conscientemente nuestro compromiso de unidad con los lideres y representantes de miles de personas que día a día se ocupan por la defensa del ambiente y nuestros ecosistemas, contra la destrucción de la casa de todos: llámese país y el planeta.

Ocupados día a día en su tarea contra la contaminación desbastadora de residuos sólidos, líquidos y gaseosos, que se generar por toneladas en una sociedad conducida a la productividad comercial sin control y al consumismo irracional, para producir toneladas de residuos y desechos cotidianamente.

El compre y bote, ha sido la consigna inducida por décadas, para que encontremos normal producir residuos de toda especie y destinarlos, en el mejor de los casos al basurero.

Buscar la unión con representantes ambientalistas, la mayoría voluntarios, que defienden la regulación y el ordenamiento territorial, la recuperación y protección de nuestras riquezas naturales: sea agua, fauna, flora, los bosques y la naturaleza como un todo.

2. La experiencia de la unión:

El sentido común y la maestra de las enseñanzas, la experiencia, nos dicta que debemos unirnos en agendas de interés común, sin mezquindades, alejados de los espacios de control y del nocivo narcisismo, destacando los muchos aspectos y temas de interés y beneficio común. Reconociendo y aceptando esta extraordinaria y poderosa diversidad, que tiene como base el bienestar común de las amplias mayorías de nuestro pueblo.

El camino está marcado por los valores de fraternidad y del buen vivir, orgullosos de nuestras raíces e identidades provenientes de la cultura y de las mejores tradiciones populares, que nos heredaron padres, abuelos y nuestros ascendientes y pueblos originarios.

Sin inocencias y con la “malicia indígena”, como decía el recordado director del programa radial don Pardemio Medina, donde cada quien “aguante su vela” de lo realizado y de sus omisiones, debemos construir la Mesa de diálogo inclusiva con total amplitud. Donde todos somos necesarios y ninguno indispensable. Vamos a avanzar en un diálogo respetuoso y conscientes de que todos somos valiosos y estamos en la misma acera.

Debemos avanzar también en pláticas despersonalizadas, o sea, vernos como representantes que nos debemos a nuestras bases sociales. La regla es liberarnos del dañino egocentrismo enfermizo y del narcisismo, suprimir lo de las cuotas de poder, definir la línea de acción conjunta con nuestros propósitos comunes de corto, mediano y largo plazo, construir participativamente nuestras rutas de acción/evaluación y acción, con métodos renovados e imnovadores que nos permitan llegar a avances graduales.

3. La coyuntura:

Claros y convencidos de que la clase gobernante nacional que domina la gestión del gobierno nacional actual y una mayoría de los representantes de turno en la Asamblea Legislativa, incluidos los gobiernos locales, se convierten en los socios menores y serviles del gran capital trasnacional e internacional dominante. Como sabemos el clientelismo, esa práctica denigrante y muy utilizada por los administradores de los recursos públicos, los cuales son de todos, práctica que se lleva a cabo desde el siglo pasado, en esta administración es extensiva y de “planilla” creciente.

Domina la corrupción y siguen existiendo los corruptibles y con un precio de venta. Lamentablemente esta práctica se ha convertido en un antivalor muy usual en este libre mercado y con poco control.

Hoy esta aldea global multipolar y los armadores de la gestión política nacional y mundial, los controladores de la economía y del show político mediático y carnavalesco de ayer y hoy, los continuadores en los sucesivos gobiernos y personajes que ocupan los altos puestos de dirección cada cuatro años, siguen produciendo la reconocida inequidad social en el país.

Las estadísticas y censos poblacionales del INEC y el índice de gini lo rebelan desde hace décadas, unos pocos están cada vez con más riqueza acumulada y la inmensa mayoría del pueblo desmejora y termina empobrecido día con día.

Las jefaturas burócratas de turno en esta gestión de gobierno repiten siguen el pentagrama de la cantaleta del que actúa como monarca y con su consorte Cisneros en el reinado donde ocupa una curul legislativa.

Este Estado de excepción, que se ocupa de concentrar el poder absoluto y la gestión autocrática, desfinanciar y debilitar los pilares históricos de lo que nos queda de democracia social: la educación y la salud pública, los programas de vivienda son de mercado libre y al mejor postor, al completo olvido las ayudas a los miles de pobladores de sectores excluidos de este preciado bien. A desacreditar y continuar el no pago de las obligaciones con la CCSS y sus trabajadores, afectando muy seriamente la estabilidad y prestación de los servicios para la seguridad social y la salud del pueblo.

Rodrigo Chaves irrespeta con soberbia y prepotencia al poder Judicial, a las Universidades públicas en sus rectores, funcionarios y estudiantes, es el gobierno más peligroso y destructor de nuestro Estado social de derecho que conozco desde la década de los 60s.

Con este diagnóstico, las consecuencias sociales que se revelan cotidianamente son alarmantes: una sociedad costarricense dominada por la inseguridad, producto del aumento de la criminalidad organizada, sea por carteles, sea por el crimen común cada vez más creciente. Situación única en nuestra historia nacional.

Nuestras instituciones en el marco de la seguridad social y salud públicas, con la benemérita Caja Costarricense del Seguro Social sufriendo arremetidas por los propios gobernantes y responsable superiores de la dirección institucional para desmejorarla y no cumplir sus obligaciones financieras, con intereses evidentes de privatizarla y sumarla al mercado de la salud privada, desmejorando los justos incentivos salariales de .trabajadores que hace unos pocos años fueron los “héroes” en la lucha contra la pandemia del COVID y hoy se busca desmejorar sus justos incentivos salariales.

Con todo respeto, afecto y empatía, pero enfáticamente, dirijo estas palabras a los miles de compañeros y compañeras líderes y dirigentes sociales para que actuemos de inmediato en esta tarea urgente.

Me ofrezco en lo que pueda colaborar para hacer realidad este anhelo de unidad en la acción de lo mejor de nuestra dirigencia.

San José, 20 de setiembre 2023

ecologismo, Ítalo Fera Fallas, lucha social, movimiento sindical, movimientos ambientalistas, movimientos sociales