Las municipalidades deben asumir un rol más protagónico en el campo de la educación pública

José Luis Pacheco Murillo

Si en algo se diferenció Costa Rica en el siglo pasado fue en el tema de la educación. El dedicar tiempo y presupuesto para la educación fue vital para que el desarrollo económico y social se diera de la forma en que se dio. La educación pública, gratuita y obligatoria significó la posibilidad del desarrollo individual y colectivo.

Desgraciadamente a partir de los años 80s el interés de los dirigentes políticos por la educación decayó y eso ha significado un retroceso que de igual manera es individual y colectivo.

Eso ha significado también que las consecuencias de ese abandono educativo se vean reflejadas hoy en lo que es delincuencia, indigencia, drogadicción, sicariato, hogares destruidos, violencia a todo nivel y en todos los rincones. Una verdadera crisis desde todo punto de vista.

Creo importante que las municipalidades asuman un rol más protagónico en el campo de la educación pública, en el apoyo a las instituciones educativas y a los estudiantes, niños, jóvenes y adultos a través de becas. Es urgente que la educación tome su protagonismo para el desarrollo de los cantones y del país.

Es necesario que retomemos responsabilidad en los hogares en cuanto a darle estímulo a los niños y jóvenes para que la educación sea la prioridad y que a ella se sume la formación en valores éticos y morales.

Si es posible volver a sembrar esa semilla de la educación y la formación para que en el país tengamos asegurado un mejor futuro. También apoyar a los educadores para que puedan ejercer su vocación y profesión sin las presiones de leyes que les amenazan un día si y otro también con su destitución tan solo por querer disciplinar.

Dios quiera que entendamos que sin una educación y formación adecuadas nuestro futuro está comprometido y de igual forma el del país. Hagamos lo posible por recuperar lo perdido en el campo de la educación, será beneficioso para todos.