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Etiqueta: Venezuela

Respuestas a Preguntas que no se Creen sobre Venezuela, ¿Por qué? (I)

Lic. José A. Amesty R.

17-4-2021

Nosotros/as nos fastidiamos hasta el cansancio, tratando que la gente crea y tome conciencia sobre la verdad de Venezuela, y los medios opositores no, además que dicen una mentira y la creen, que increíble.

Sin embargo, no debemos ni cansarnos ni fastidiarnos, hay que seguir con la batalla de las ideas y no desistir, sino como sabemos hacerlo seguir resistiendo. Veamos las preguntas y re – respondamos nuevamente hasta el cansancio:

¿Hay Democracia en Venezuela? ¿Las Elecciones son Arregladas? ¿Hay Dictadura en Venezuela? ¿Nicolás Maduro es un Dictador? ¿Hay Crisis Económica en Venezuela? ¿Hay Migración y Exiliados Políticos? ¿Hay Denuncias de otros Países contra Venezuela? ¿Hay Populismo, Fascismo, Mesianismo en Venezuela? ¿Hay Estado de Derecho en Venezuela? ¿Hay Libertad de Prensa en Venezuela? ¿Hay Respeto a los Derechos Humanos? ¿Se han Cercenado las Libertades e Irrespetado las Instituciones del Estado venezolano? ¿Por qué Rusia y China intervienen a favor de Venezuela? Y tantas otras… Veamos…

*¿Hay Democracia en Venezuela?

Para los que la democracia es sinónimo de Elecciones, les informamos que en Venezuela, se han realizado, al menos, 23 elecciones desde 1998, año en que Hugo Chávez fue electo Presidente e inició un proceso de democratización de los poderes del Estado con altos niveles de participación del pueblo en las decisiones que hacen a su vida política, económica, cultural y organizativa. A esto se le llama Democracia Participativa y Protagónica.

Además en Venezuela el voto no es obligatorio, y aun así el porcentaje de participación de las últimas dos décadas está por arriba del 70 por ciento, mayor que lo que sucede en los Estados Unidos, España, Colombia, Perú o Chile. Desde hace, al menos 11 años, Venezuela emplea el voto electrónico o automatizado, que permite agilizar el proceso de sufragio y blindar los resultados.

Además, adelantamos desde ya, que el Presidente Nicolás Maduro, ha sido reiterado como tal, por medio de los votos del pueblo, en elecciones libres, soberanas y democráticas, y avalado por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

Aprovechamos para resaltar algunos aspectos positivos de la Revolución Bolivariana con su Democracia Participativa y Protagónica de todo el pueblo, y no con populismo ni fascismo, ha tenido logros extraordinarios para esa misma población: erradicación del analfabetismo, inclusión en todas las etapas del sistema educativo, estamos en el 5° lugar del mundo en matrícula universitaria, sistema de salud universal y gratuito, reducción de la pobreza en más del 50%, reducción de la mortalidad infantil y de la desnutrición infantil, entre muchos otros.

Hay que precisar en torno a los aspectos básicos de alimentación, medicinas, ataque a la moneda nacional, transporte-gasolina, y muchos otros, que se han visto disminuidos, por el bloqueo feroz de USA y sus aliados internos y externos. Esto ha servido como propaganda de la oposición, para vender la idea que el Gobierno Revolucionario no atiende estos aspectos de la vida diaria de los venezolanos. Es ya conocido, que la Revolución Bolivariana, tiene en cuenta a la población y de alguna manera, una de las medidas son: las cajas CLAP, (cajas con alimentos básicos) los bonos en dinero en efectivo, y el apoyo a la salud y educación al ser totalmente gratuitas.

Hemos logrado buena parte de las metas del Milenio, como la cobertura de agua potable y saneamiento, la reducción de la pobreza, el acceso a una alimentación balanceada, la inclusión en la educación y en el trabajo sin discriminación por género, entre otras.

En conclusión, el triunfo de la Revolución Bolivariana, con su Democracia Participativa y Protagónica, es el triunfo de las mayorías, de los excluidos y las excluidas, de los invisibilizados y las invisibilizadas, de los obreros, de las obreras, los campesinos y las campesinas, sobre la alianza de los partidos de la burguesía y las oligarquías existentes sumisas, durante décadas, al imperialismo. Y contra esto, no hay Populismo ni Fascismo que valga!

*¿Las Elecciones en Venezuela son Arregladas?

El Poder Público Nacional venezolano, se divide en Legislativo, Ejecutivo, Judicial, Ciudadano y Electoral, es decir que, a diferencia de Argentina (solo hay tres poderes) en donde los procesos electorales son organizados por el Ministerio del Interior (poder que depende del Presidente), en Venezuela existe un poder diferenciado del ejecutivo que asume los procesos electivos. El sistema electoral venezolano ha sido reconocido por observadores internacionales, como la Unión de Naciones Suramericanas y el Centro Carter (del ex presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter), en distintos procesos comiciales como uno de los más confiables y modernos del mundo.

Deseamos recordar y poner como ejemplo, las supuestas “irregularidades” de las elecciones del 20 de mayo 2018, aduciendo que solo dos partidos participaron y toda una suerte de señalamientos de fraude.

Deseamos señalar que estas elecciones tienen una historia larga, con muchos acontecimientos y circunstancias coyunturales. Invito a buscar en Internet, todo lo referente a estas elecciones, donde hay abundante información. No obstante, tratare de ser lo más preciso posible.

¿Quiénes participaron en estas elecciones?

El grupo de los partidos políticos que participaron formalmente en las elecciones del 20MAY2018, fueron: Avanzada Progresista (AP), Copei, Movimiento al Socialismo (MAS) que apoyaron al candidato Henri Falcón.

A su vez, los partidos políticos, Esperanza por el Cambio de Javier Bertucci, y UPP89 de Reinaldo Quijada. Y por supuesto el partido político PSUV cuyo candidato fue Nicolás Maduro Moros.

¿Quiénes no participaron en estas elecciones?

El grupo de la llamada MUD, Mesa de la Unidad Democrática, cuyo bastión importante lo agrupan organizaciones como Acción Democrática (AD), Primero Justicia (PJ), Voluntad Popular Activistas (VPA), Un Nuevo Tiempo (UNT), Alianza Bravo Pueblo (ABP), Vente Venezuela (VV), Proyecto Venezuela (PRVZLA), Convergencia, Causa R, Bandera Roja (BR), entre otras.

Quienes, como en otra ocasión, apostaron a la no participación electoral, a fin de generar las condiciones para reactivar una agenda violenta, como desenlace a la actual coyuntura política en el país.

Dicha agenda violenta pudiera constituirse en una desobediencia civil, un Golpe Militar tradicional, Guerra Civil, una intervención militar internacional o la combinación de todos los escenarios anteriores.

*¿Hay Dictadura en Venezuela? ¿Nicolás Maduro es un Dictador?

No es cierto que el gobierno del presidente constitucional Nicolás Maduro, sea una dictadura. Precisemos que un dictador no respeta o irrespeta su propia Constitución, este no es el caso de Nicolás Maduro, quien en todos sus actos, siempre actúa velando por la constitucionalidad de sus políticas. En 18 y más años, de gobierno revolucionario, nunca SE HA ROTO EL HILO CONSTITUCIONAL. Las protestas de la oposición, han sido contenidas, utilizando solo agua y gases, nunca reprimidas, como se hace en otros países.

Hay toda una campaña mediática de la oposición venezolana, hacia el exterior e interior de Venezuela, enfatizando que en el país hay un dictador, una dictadura ejercida por el Presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros, Y MAS AUN, A PARTIR QUE EL MANDATARIO VENEZOLANO HAYA ACTIVADO EL PODER ORIGINARIO DEL PUEBLO, AL PROPONER UNA Asamblea Nacional Constituyente, deseamos precisar algunas ideas en torno a las Dictaduras, sin hacer juicios de valor, solo precisarlas, para que se vean sus postulados principales.

La dictadura es un sistema de gobierno o régimen gubernamental donde todos los poderes del Estado se concentran en un individuo, un grupo o un partido. El dictador no permite la oposición a sus acciones y a sus ideas, tiene poder y autoridad absolutos. Se trata de un régimen no democrático, antidemocrático y autocrático, donde no existe la participación del pueblo.

Existen varios tipos de Dictaduras, a saber:

Dictadura Fascista: El concepto de régimen fascista puede aplicarse a algunos regímenes políticos dictatoriales, ya fueran totalitarios o autoritarios de la Europa de entreguerras y a prácticamente todos los que se impusieron por las potencias, durante su ocupación del continente durante la Segunda Guerra Mundial.

De un modo destacado, y en primer lugar, a la Italia de Benito Mussolini (1922) que inaugura el modelo y acuña el término; seguida por la Alemania de Adolf Hitler (1933) que lo lleva a sus últimas consecuencias; y la España de Francisco Franco que se prolonga mucho más tiempo y evoluciona fuera del periodo (desde 1939 hasta 1975). Las diferencias de planteamientos ideológicos y trayectorias históricas entre cada uno de estos regímenes son notables.

Dictaduras Autoritarias: El término autoritarismo, no tiene una ideología tan elaborada, el ensalzamiento del líder se hace de forma meramente propagandística. No busca el apoyo de las masas, sólo someterlas. Su meta última no es realizar grandes cambios en la sociedad sino únicamente imponer su poder sobre la misma. El autoritarismo busca acallar a los disidentes y evitar sus expresiones en público.

En Las Dictaduras Totalitarias, la concentración de poder está en una sola persona o grupo muy reducido, usualmente un partido político o movimiento, que puede incluso conducir al culto a la personalidad del líder. Se justifica la actuación política mediante una doctrina global que se manifiesta en todas las esferas de la actuación humana: economía, cultura, familia, religión. Se emplea sistemáticamente el terror, por medio de policías y ejércitos para eliminar a la disidencia u oposición. Se utilizan los campos de concentración para aislar a la oposición y enemigos del régimen. Busca no solo acallar sino también extirpar las formas de pensamiento opuestas, mediante el adoctrinamiento y la remodelación de las mentalidades.

Se han desarrollado también una especie de Dictaduras llamadas Modernas, en las cuales, los dictadores también pueden llegar al poder siendo elegidos en votaciones populares, designados por un partido único o jerarquía dominante de cualquier signo, o heredar el poder tras el fallecimiento del pariente que lo ostentaba. Guarda conexión con los totalitarismos a través de la implantación de un sistema de legitimación del poder público mediante un sistema político de fuerza y jerarquía; y mediante la ideología del movimiento o partido.

A su vez, La Dictadura Constitucional es la forma de gobierno en la que, aunque aparentemente se respeta la Constitución, en realidad el poder se concentra de manera absoluta en las manos de un dictador (y en ocasiones, en las manos de sus cómplices), controlando éste, directa o indirectamente, los Poderes. El mecanismo mediante el cual se mantiene el aparente respeto a la Constitución se denomina fraude constitucional: un ejemplo es el fraude electoral.

Todos estos tipos de dictaduras tienen un componente militar que las caracteriza. Que en algunos casos se implementan a través de los llamados Golpe de Estado, y que es una forma de gobierno donde el poder está completamente controlado por los militares.

Veamos algunas características de las Dictaduras:

Poder sin límites. En las dictaduras no existen control ni límites a las determinaciones que tome el dictador. De este modo a lo largo de la historia estos dictadores autoritarios han cruzado barreras morales y jurídicas sin presentar siquiera argumentos lógicos que sustenten sus acciones. De este modo se han cometido asesinatos masivos, privación de la libertad, encarcelamientos injustificados, otras.

No hay Leyes Constitucionales. Dado que no existe la división de poderes en las dictaduras, las leyes que se sancionan son directamente propuestas por la figura monárquica de quien está al mando. Los ciudadanos no poseen leyes que los amparen ya que, en el mejor de los casos, la constitución es adaptada a las necesidades del dictador y del grupo al que pertenece y representa.

Intromisión en la vida privada de las personas. Generalmente, en las dictaduras, las fuerzas armadas tienen la capacidad de privar de su libertad a cualquier ciudadano si así lo consideran necesario. También pueden solicitar datos, objetos personales e incluso irrumpir en propiedades privadas.

Desvanecimiento de la figura del Presidente. Dado que este término describe a la figura máxima dentro de un gobierno democrático (opuesto a los gobiernos de facto) existe un desvanecimiento de la figura del Presidente como tal. Aunque también en ciertas dictaduras el dictador al mando se ha dado en llamar Presidente, sólo conserva su nombre dada la ausencia del aparato democrático que lo sustenta detrás.

Control de los medios de comunicación masivos. Todas las dictaduras supervisan el contenido de los medios de comunicación así como también a sus periodistas y trabajadores. De esta forma tienen bajo su control y dominio los medios y persuaden a la población. Generalmente se utilizan estos medios interviniéndolos e inculcándole a la población características positivas del líder dictador al mando. Esto, a menudo, coloca al dictador en una figura de padre protector y benefactor del pueblo.

Violación de los Derechos Humanos. Durante los gobiernos de facto, existe una ausencia total de los derechos del pueblo y los derechos humanos no son una excepción. Durante este tipo de gobiernos se pueden llegar a hacer uso de guerras o batallas (internas o externas) para justificar actos de violación de los derechos humanos ya sea hacia su pueblo o hacia otros países.

Control a través del miedo. Todas las dictaduras han dominado y controlado a sus ciudadanos a través del miedo. Ellos generan y fomentan en el pueblo el terror a ser perseguidos, torturados y asesinados sino se acatan las órdenes estrictas de la dictadura.

La Iglesia como medio de dominación. Comúnmente las dictaduras necesitaron tener el aval espiritual. De esta forma se les otorgó un poder desmedido a la iglesia (mayoritariamente este poder se le dio al a iglesia católica) quienes eran los encargados de «encauzar» las almas de aquellos que se habían desviado del camino espiritual. De este modo, las dictaduras podían justificar moralmente su repudio hacia los homosexuales, negros o personas que no compartían esta religión.

Errores comunes de las dictaduras. Dado que infunden miedo no solo en el pueblo si no en todos los que rodean al dictador, los ayudantes de éste evitan expresar críticas u opiniones diferentes a las que propone dicho dictador. Por esta razón se genera un ambiente donde los errores son frecuentes y, en ciertos casos, pueden llegar a terminar con el régimen.

Diferencia entre Democracia y Dictadura: Son de hecho dos extremos opuestos, y también de las formas de gobierno más comunes hoy en día. La democracia es, según traducción literal de su voluntad, el gobierno del pueblo por el pueblo. Es decir, que son los ciudadanos quienes deciden las leyes, quiénes son los representantes para gobernar.

Estas decisiones en democracia pueden realizarse de forma directa mediante elecciones de diverso tipo (nacionales, autonómicas, u otras) o bien de forma indirecta, cediendo el poder a representantes con el fin de agilizar la aprobación de leyes, por ejemplo.

La democracia es el sistema de gobierno más extendido, sobre todo en la sociedad occidental, a pesar de que ha sido duramente criticada por ciertas debilidades, así como en ocasiones por esconder en la práctica una dictadura no reconocida.

Democracia: El gobierno es de todos. Existen elecciones, libres y periódicas. El mandato de los líderes es por consenso de los gobernados. Los líderes políticos son responsables de las acciones del pueblo. El poder se halla concentrado en la Constitución. La parte oponente, la oposición, tiene acceso a los medios de comunicación. Se permite la crítica. Se protege las libertades civiles. Se respeta el derecho de las minorías. Se considera como oponentes a quien están en contra del grupo político que se encuentra en el poder.

Dictadura: El gobierno es de uno solo. No existe la libre elección. El dictador manda sin el consenso de los gobernados. Los líderes responsabilizan al pueblo por sus acciones. No hay constitución vigente. Los medios de comunicación son controlados. Se prohíbe la crítica. Se prohíbe las libertades civiles. Se ignora por completo el derecho de las minorías. Se considera como enemigos a quienes están en contra del que se encuentra en el poder.

Continuará…

La Oposición en Venezuela utiliza la Vacuna de AstraZeneca como Arma Política

Lic. José A. Amesty R.

En estos momentos, la vacuna llamada AstraZeneca ha sido suspendida por varios países de Europa principalmente, así como otros países del mundo, después de reportes de posibles efectos secundarios graves y por las complicaciones que se han presentado a quienes han sido vacunados.

La principal preocupación de estos países se basa en los informes de que algunas personas vacunadas con el antídoto, creado por la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford, desarrollaron coágulos sanguíneos, sangrado, nivel bajo de las plaquetas.

La suspensión es hasta que la Agencia Europea de Medicamentos, investigue sobre los efectos secundarios sospechosos. No obstante, recientemente la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) informó de una posible relación entre la vacuna de COVID-19 de AstraZeneca, y unos pocos casos de coagulación de la sangre registrados en adultos que habían recibido la inyección.

Lo cierto es que la Agencia Europea de Medicamentos EMA, aunque afirma que más son los beneficios de la vacuna, y que seguirán investigando, quedan las sospechas e incertidumbres, y varios países están siendo cautelosos y esperan los últimos resultados.

Al margen de los resultados finales en esta diatriba, deseamos señalar cómo la oposición en Venezuela, en contra del gobierno legítimo de Nicolás Maduro y la Revolución Bolivariana, están utilizando esta situación como arma política, veamos…

Primero, ya sabemos que Juan Guaidó con el dinero robado a Venezuela, supuestamente financió la compra de la vacuna AstraZeneca. ¿Con qué intención?

Segundo, la oposición venezolana ha desatado una campaña psicológica y por redes sociales, a favor de la vacuna de AstraZeneca, para que a cualquier lugar la vacuna sea utilizada en Venezuela. ¿Con que intención?

Tercero, la campaña es: “dejen entrar las vacunas”, “el régimen no quiere que te vacunes”, “la elite chavista ya se vacunó”. Esta es la prueba contundente de las malas intenciones de la oposición venezolana, al desear la vacuna de AstraZeneca.

Cuarto, la farmacéutica inglesa-sueca que produce la vacuna llamada AstraZeneca, mantiene un prontuario de irregularidades y fraudes en las últimas dos décadas, cuyo proceder es muy oscuro.

Quinto, se agrega que el mecanismo Covax, el cual busca garantizar vacunas de manera equitativa para todos los países, principalmente los que tienen dificultades financieras, ha sido criticado, ya que solo tiene relaciones con las farmacéuticas occidentales, atraídas por el mercado que asegura la pandemia en términos de salud e investigación científica.

Sexto, además ya desde noviembre del 2020, según estudios de la Universidad Británica de Oxford y la Farmacéutica AstraZeneca, la vacuna desarrollada previene el Covid-19 en un 70,4% de los casos, indicaron resultados preliminares difundidos.

Estos datos contrastan con la efectividad del 95% mostrada por las vacunas producidas por las compañías Pfizer y Moderna. Asimismo, la Sputnik V, arroja una efectividad del 92%.

Con los anteriores puntos y las interrogantes planteadas, es evidente que estamos ante la más cruel y bárbara utilización de la pandemia y el uso de la vacuna de AstraZeneca, para que a toda costa, la oposición tome nuevamente el poder en Venezuela.

No les importa si la vacuna tiene efectos negativos o cause males de muerte. No les importa las múltiples denuncias contra la vacuna. No les importa hacer negocios con farmacéuticas mercantilistas e inhumanas, que solo les interesa la ganancia de dinero como sea.

Lo que les importa a la oposición venezolana, es erradicar la Revolución Bolivariana, llevándose a rastras a cualquier cantidad de venezolanos y venezolanas. Realmente es una actitud miserable y ruin, que será escrita en la historia de Venezuela, como la más despiadada, inhumana e inverosímil.

Aquí la salud es concebida como mercancía, y se encubre la empresa como parte del gran capital farmacéutico global, llamado la Big Pharma.

Por supuesto, Guaidó plantea de forma hipócrita y cínica que es el gobierno bolivariano quien está politizando el tema señalando “primero es la salud del pueblo”, la adquisición de la vacuna es “un paso importante para en los próximos meses hacerle frente al Covid-19. Una vacuna a través del mecanismo Covax, confiable, que podrá atender a seis millones de venezolanos y así brindar una solución a los más vulnerables en medio de esta pandemia”.

Entonces, la intención de presionar para la compra y el uso de las dosis de AstraZeneca, por parte del antichavismo, es de daño humanitario a los venezolanos, al parecer una nueva táctica de Guaidó, para sus fines políticos, en concordancia con el mecanismo Covax instrumento de confusión y agresión a Venezuela.

Para las pantallas internacionales, se entiende que el gobierno de Maduro no aprueba el uso del producto de AstraZeneca por indolencia y “control social” desde una posición dictatorial, cuando la decisión obedece a razones empíricamente científicas, y no se le puede imponer al país por la vía de la presión mediática, una vacuna que está siendo cuestionada por muchos otros Estados en el mundo.

Otros datos sobre AstraZeneca:

  1. Al inicio de la pandemia, ésta se benefició de un laboratorio financiado por el gobierno británico, en la universidad pública de Oxford, para generar una vacuna de acceso libre sin patente y con precios bajos garantizados.
  2. La economista india Jayati Ghosh, cuenta cómo se desarrolló la vacuna de AstraZeneca: La vacuna fue desarrollada en su totalidad por un laboratorio financiado con fondos públicos de la Universidad de Oxford. El modelo de distribución original era para una plataforma de licencia abierta, diseñada para que la vacuna estuviera disponible gratuitamente para cualquier fabricante. Sin embargo, la Fundación Gates, que tenía influencia porque había donado 750 millones de dólares a Oxford para el desarrollo de vacunas, persuadió a la universidad de cambiar de rumbo por completo y firmar “un acuerdo exclusivo de vacunación con AstraZeneca que le otorgaba al gigante farmacéutico los derechos exclusivos y ninguna garantía de precios bajos».

Oxford y AstraZeneca prometieron no obtener ganancias con la venta de la vacuna, pero los detalles se dejaron difusos. Si bien Oxford no recibirá regalías durante la pandemia, posteriormente podría beneficiarse de patentes, incluidas las de Vaccitech, una empresa derivada con fines de lucro.

Mientras tanto, AstraZeneca está cobrando precios diferenciales por sus vacunas enviadas a diferentes países, y algunos países más pobres pagan tarifas más altas. La Unión Europea paga $3,50 por dosis, mientras que Bangladesh paga $4 y Sudáfrica hasta $5,25.

¿Todo lo relatado por Ghosh no suena más bien a estafa?

  1. Y sin embargo es curioso que el fraude haya sido una constante de AstraZeneca, no solo durante estos meses pandémicos, en los que esta empresa se ha visto inmersa en escándalos de corrupta transparencia en los contratos firmados con la Comisión Europea y sobre el retraso y la cantidad de las dosis acordadas con cada país, también en otros periodos de la historia la farmacéutica anglosuiza ha estado en cortes estadounidenses y europeas procesada por delitos más o menos relacionados con lo reseñado.
  2. Una breve búsqueda en la web da cuenta de que en 2003, 2010, 2014, 2018 y 2020 la empresa AstraZeneca, ha tenido que pagar cientos de millones de dólares por casos de fraude, en las que sucesivamente sus representantes han tenido que aceptar la culpabilidad de las causas o han sido hallados culpables en juicio procesal.
  3. Así que no sería la primera vez en que el currículo de esta empresa, se ha visto manchado ante la opinión pública, la impunidad sobre estas farmacéuticas impera como un dogma religioso y seguirán mermando los intereses de la población pobre global, con el ojo puesto sobre el drama lucrativo que inyecta un mercado tan grande como la tragedia pandémica que vivimos.

En Homenaje a Carlos Lanz: Método INVEDECOR

Lic. José A. Amesty R.

En homenaje y reconocimiento al camarada y profesor Carlos Lanz Rodríguez, artífice de la Formación Sociopolítica, conjuntamente con un equipo interdisciplinario, quienes nos dimos a la tarea de Facilitar los Talleres de Formación Sociopolítica, por todo el territorio venezolano, compuesta por varios Ejes Temáticos, y continuamos este recorrido por ellos con el Método Invedecor en Venezuela.

Presentación del Eje Temático

En el desarrollo de los Talleres de Formación Sociopolítica, es fundamental el aspecto metodológico porque dentro de los principios de este plan se hace énfasis en la coherencia, la pertinencia y la integralidad tanto de los contenidos como de las técnicas y recursos que utilizamos para desarrollarlos. Igualmente el propósito de dicho plan está dirigido hacia el logro de la construcción de una nueva ciudadanía bajo el enfoque de desarrollo endógeno que en el mismo se postula. Esto implica ir desmontando la cultura imperante mientras vamos avanzando en la construcción colectiva de los valores que regirán el nuevo modelo de sociedad, lo cual exige claridad en lo que queremos, y por qué lo queremos alcanzar, que no es otra cosa que acumular fuerzas para construir el poder popular de la democracia participativa y protagónica que plantea nuestra constitución para ser autónomos y soberanos como país y como sociedad.

Tal y como nos dice nuestro presidente “Si queremos acabar con la pobreza démosle poder al pueblo”, entendemos ese poder como el poder del conocimiento, la soberanía cognitiva, y eso solo es posible en la medida que asumamos de manera racional y consciente los procesos de formación sociopolítica. En ese sentido debemos buscar mecanismos que faciliten estos aprendizajes con métodos congruentes y pertinentes que faciliten la comprensión de lo que implica un proceso revolucionario, pero que a su vez empujen hacia la unidad de los aliados, hacia la construcción de organizaciones sustentables y que desarrollen sus propios mecanismos autogestionarios y cogestionarios. Desde este punto de vista proponemos a Invedecor como un método en construcción que surge de reflexiones críticas al desarrollo de procesos Investigativos, Educativos, Comunicativos y organizativos.

Contenidos

A continuación presentamos los aspectos que caracterizan a Invedecor como una propuesta metodológica que apunta hacia la emancipación de los pueblos, pues permite alcanzar la soberanía cognitiva (pensar con cabeza propia), no para convertirnos en expertos, sino para poner esos conocimientos al servicio de las transformaciones sociales desarrollándose lo siguiente: Concepción Filosófica con base en los denominados Intereses, el Método con sus cuatro Procesos, tratándose cada uno de ellos, la Pertinencia de la Estrategia de Articulación y sus Antecedentes Históricos.

Concepción Filosófica

Todo método tiene una concepción filosófica entendiendo como MÉTODO, el cómo hacerlo, y como FILOSOFÍA la forma de ver al mundo. Consideramos que la direccionalidad del método obedece al enfoque, por eso al hablar de Invedecor como un método, necesitamos explicar qué enfoque lo sustenta para que podamos aclararnos el por qué decimos que Invedecor es un método para acumular fuerza consciente que empuje hacia la transformación social. Jürgen Habermas, un autor de la Escuela de Frankfurt enmarcado en la Teoría Crítica, nos ubica tres maneras de concebir el mundo, de construir una racionalidad, la cual impregna el pensamiento y la acción de los sujetos, él los denomina Interés, y los caracteriza de la siguiente manera:

  1. a) Interés Técnico Está relacionado con la Ciencia Empírico-Analítica. El tipo de saber generado por esta ciencia, se basa en la experiencia y en la observación, propiciada por la experimentación. Sus teorías permiten la deducción de hipótesis. Esta ciencia tiene capacidad predictiva, la cual permite anticipar el cómo será el ambiente futuro, controlar y manipular el objeto de estudio y sus resultados sobre las bases del saber. Se hace énfasis excesivo en lo técnico, en el control, en lo tangible y en lo cuantitativo, sus formas de acción son instrumentales, el saber se usa como poder para controlar y manipular. No se reconoce contextos ni sujetos, sino hechos concretos, la realidad es objetiva y se aborda fraccionadamente, encontrándose al margen de los valores. Tiene su razón de ser en las relaciones de poder que persiguen formas de dominio y control, representado tal interés en el paradigma empírico-analítico o positivista.
  2. b) Interés Práctico Se orienta a la comprensión del medio, de modo que el sujeto pueda interactuar con él, no compite con el ambiente para sobrevivir, se trata del interés de llevar a cabo la acción correcta. La ciencia es interpretativa o también conocida como Histórico-hermenéutica. El saber que orienta esta acción reconoce al sujeto como objeto de estudio y generador de conocimiento, la realidad es subjetiva y múltiple, es naturalista. El interés práctico desarrolla un interés fundamental por comprender al mundo en su interacción, pero no lo transforma, está dirigido a la interpretación y comprensión del sentido de la acción por parte de los actores sociales, solo estudia, analiza y hasta sugiere algunos correctivos con respecto al fenómeno.
  3. c) Interés Emancipador Se relaciona con la Ciencia Crítica y Habermas lo considera el interés de la emancipación (independencia de todo lo que está fuera del individuo), es un estado de autonomía, pero no de libertinaje, es decir autonomía y responsabilidad. La emancipación solo es posible en el acto de la autorreflexión, cuando el “yo” se vuelve sobre sí mismo. A causa de la interacción de la sociedad humana, la libertad individual nunca puede separarse de la libertad de los demás, de ahí que la emancipación esté ligada a la idea de justicia e igualdad. El interés emancipador puede definirse como un interés que se compromete en una acción autónoma que surge de intuiciones auténticas, críticas, de la construcción social y de la sociedad humana, que persigue como finalidad alcanzar la autonomía y la libertad de los sujetos sociales. Este enfoque presupone una relación recíproca entre autorreflexión y acción, concibiendo a las personas como los autores de la construcción de los cambios sociales, se parte de los diferentes contextos y del diálogo de saberes. Apunta hacia la transformación de la realidad afectando las relaciones de poder y de producción. Es constructivo y dialéctico. El interés técnico no facilita la autonomía ni la responsabilidad porque se preocupa por el control, el interés práctico tampoco, ya que solo se aproxima a su comprensión y aunque desarrolla consenso este tiende a convertirse en dogma en vez de proponer la autonomía. Debe tratarse de un interés por liberar a las personas de la restricción ejercida por lo técnico y del posible fraude de la práctica. Es el interés por la emancipación quien genera teorías críticas acerca de las personas y de la sociedad que actúan por inhibir la libertad.

Como podemos observar en estas tres maneras de ver al mundo hay características que fácilmente podemos ubicar en la sociedad actual, donde impera la injusticia y la desigualdad, donde se hace énfasis en lo técnico y el saber se usa para manipular y oprimir, nos referimos al Interés Técnico. Así mismo es común en nuestra sociedad encontrarnos con muchas instituciones y organizaciones que se han dedicado a estudiar y a analizar los diferentes fenómenos sociales, como por ejemplo la pobreza, la delincuencia, la prostitución, pero no lo han transformado, estamos en presencia de un interés práctico. Sería necesario el interés emancipador, el cual reivindica al sujeto en su accionar, reconoce las contradicciones que existen en la sociedad y plantea que la emancipación es la única vía para la transformación social. En este enfoque ubicamos nuestra propuesta metodológica.

El Método Invedecor

Es un método en construcción dirigido a la creación de:

  1. a) Un nuevo modo de producción de conocimientos que impugna (va en contra) el monopolio y la jerarquía.
  2. b) Una concepción del aprendizaje como interacción social constructiva.
  3. c) Una nueva racionalidad comunicativa, centrada en el debate y en la relación dialógica.
  4. d) Una estrategia de intervención y organización no burocrática, con procedimientos de la democracia directa y protagónica.

Desde hace mucho tiempo hemos venido detectando las limitaciones que se encuentran a la hora de hacer transformaciones en el campo social. En correspondencia con la inversión del tiempo, recursos y esfuerzos, la acumulación de fuerzas es mínima solo por la vía burocrática, donde se ofrecen bienes materiales, y la gente se acomoda, pero no es una fuerza cualificada. En ese sentido, no podemos hablar de la creación de una voluntad colectiva o unidad de acción consciente y racional que transforme desde la raíz esta sociedad, sino que se limita a algunas modalidades de participación, (movilizaciones de calle) sin traducirse en saldos organizativos para la construcción del poder popular, ya que, existe un conocimiento relativamente superficial o en algunos casos se tiene un diagnóstico de la realidad, pero no se da el salto hacia la profundización, debido a las debilidades formativas tanto teóricas como metodológicas que presentamos. Para poder cumplir con las exigencias de acción transformadora, debemos ir más allá de los objetivos cognoscitivos (relacionados con conocer) y se hace obligante establecer puntos, bisagras, nexos internos entre:

–           Conocer y educar – Conocer-educar y comunicar – Conocer-educar-comunicar y organizar

Si lo que se quiere es hacer un diagnóstico para tener conocimiento sobre determinados sujetos y contextos, la articulación no es necesaria, por lo menos de la manera como lo estamos planteando, pero si queremos, cambiar la situación a partir de su conocimiento (conocer transformando), con los sujetos y desde su cotidianidad (comprensión del contexto etnográfico), requerimos acompañar el proceso investigativo con otras acciones, las cuales en las metodologías de investigación tradicionales no se toman en cuenta: como la Educativa, la Comunicativa y la Organizativa. Este planteamiento no es un capricho ni una ocurrencia individual, la articulación de estas cuatro acciones: INVESTIGAR, EDUCAR, COMUNICAR, ORGANIZAR, las cuales vemos como proceso en construcción permanente, tiene su origen en la crítica a la División Social del Trabajo, expresada en nuestra cotidianidad como un divorcio entre teoría y práctica, una contradicción entre dirigente y dirigido, maestro(a)-alumno(a), sociedad opresora-sociedad oprimida, a lo que le agregamos la distancia entre emisor y receptor. En este orden de ideas, podemos decir que la estrategia metodológica que se emplee en la construcción del Poder Popular debe apuntar hacia la formación integral del sujeto. Por lo tanto, tiene que tocar elementos cognoscitivos (referido a los conocimientos previos de los sujetos y los nuevos conocimientos que se incorporan), pedagógicos (sería la formación, educación con base en lo investigado), comunicativos (es la acción de socializar los nuevos conocimientos e informaciones) y organizativos (referidos a la acumulación de fuerzas en colectivo). Para ello proponemos algunas preguntas directrices que Carlos Lanz en su texto El Poder en la Escuela, enuncia:

– ¿Cómo el conocer ayuda a la concientización en la óptica del aprendizaje significativo?

– ¿Cuál es la racionalidad comunicativa que permite la interacción de los sujetos en la transformación de su cotidianidad?

– ¿Cuál forma de intervención y organización responde a las necesidades sentidas y facilita una participación integral?.

Si no encontramos respuestas satisfactorias a estas interrogantes, eso nos indica que hubo un déficit que pudiera estar relacionado con:

–           El conocimiento no se hizo conciencia colectiva.

–           No se aplicó una comunicación adecuada.

–           No se dio el salto hacia la organización ni se acumuló fuerzas.

–           Las resistencias al cambio que surgen por los intereses afectados, son mayores que las fuerzas que empujan hacia la transformación.

Esto nos indica que, la construcción de este paradigma requiere desarrollar no cualquier proceso de Investigación-Educación-Comunicación-Organización. A continuación explicaremos algunos elementos que caracterizan cada uno de estos procesos.

Procesos Contenidos en el Método Invedecor

Invedecor como paradigma emergente y método en construcción surge de las abreviaturas de:

INV estigación ED ucación CO municación OR ganización

Ahora bien, ¿De cuál Investigación? ¿De cuál Educación

¿De cuál comunicación? ¿De cuál organización estamos Hablando?

Por supuesto que no pueden ser las mismas que han imperado en nuestra cultura de dominación, en donde:

Lo investigativo se limita a ser solo un requisito para alcanzar un título y su destino son los andamios de las bibliotecas. Son refritos teóricos que no nacen de una reflexión de la práctica y solo la elabora una élite, por lo riguroso del método. La educación se caracteriza por la atomización (parcelamiento o desarticulación del conocimiento) de los contenidos, en ella existe un “experto” que va a “Enseñar a los que No Saben”, aquí se evidencian las contradicciones entre docente y alumno. Esta educación no parte de las necesidades de los sujetos, sino que es prescriptiva, los contenidos están en textos y se ve al sujeto como un recipiente vacío que está en la oscuridad y viene el «Mesías a alumbrarle el camino». Lo comunicativo está caracterizado por las diferentes distorsiones y manipulaciones, no existe transparencia en el habla, no se reivindica el diálogo de saberes ni el debate, los medios han hecho uso de ella manipulándola a su antojo y poniéndola al servicio de la dominación. Se ha perdido el valor de la palabra, no hay congruencia entre el pensar, el decir y el hacer. Lo organizacional está regido por un esquema donde se imponen, las estructuras verticales y prácticas burocráticas, no se socializan las decisiones, impera el interés individual, la competencia, la rivalidad, el clientelismo, la adulancia, la corrupción y el arribismo.

Desde esta perspectiva, son reproductoras de la cultura que queremos desmontar, en ellas no hay procesos de formación, ni comunicación permanente por lo tanto no llegan a consolidarse. Ahora bien, un proceso de cambio no puede desarrollarse con este enfoque, ni con estos procesos tal y como se conciben en la actualidad. En este orden de ideas proponemos una estrategia de articulación sustentada por un enfoque que apunte hacia la transformación de la sociedad. De allí la propuesta de Invedecor como método en construcción para la transformación social, enmarcado en una teoría crítica emancipadora cuya búsqueda es la superación de la División Social del Trabajo, como génesis del capitalismo que impera en nuestra sociedad. Desde esta perspectiva, ¿Cómo vemos los procesos de Investigación, Educación, Comunicación y Organización en Invedecor? Siendo congruentes con el enfoque y haciendo referencia a que la realidad se nos presenta como un todo integral, estos cuatro procesos se encuentran estrechamente ligados. Sin embargo a continuación los mostramos por separado, solo para su análisis, pero en la práctica se articulan permanentemente.

Investigación

La investigación que postulamos en el método Invedecor se refiere a la INVESTIGACIÓN-ACCIÓN PARTICIPATIVA que tiene su génesis en:

  • El Diálogo de Saberes (cada sujeto tiene parte de la verdad por lo tanto su opinión es un aporte).
  • Se parte de la indagación de la realidad concreta sin idealizarla, eso nos permite caracterizar sujetos y contextos.
  • La construcción colectiva del conocimiento (es intersubjetiva, entre sujetos, cada quien aporta).
  • La Horizontalidad, todos somos iguales (nadie es más que nadie, no hay expertos nos acompañamos los unos a los otros).
  • Parte de la necesidad de los sujetos (estas necesidades colectivas pueden ser económicas, políticas, socioculturales, etc.).
  • Vincula la teoría con la práctica (la práctica tiene que ser coherente con el discurso, vincula el hacer y el decir “aprender haciendo”).
  • La teoría surge de procesos investigativos y de la interacción subjetiva (de los sujetos), quienes reflexionan sobre su misma práctica (la indagación permanente de sujetos, teorías, contextos, es parte de la investigación).
  • Establece relación entre el descubrimiento (nuevo conocimiento) y la realidad y los saberes previos (debe haber anclaje entre los saberes previos y el nuevo saber).
  • Concatena o enlaza: acción, reflexión, acción, permanentemente (es decir, se reflexiona sobre la práctica para mejorarla y aplicar los nuevos conocimientos en ella).

La investigación en este enfoque nos debe conducir a tres categorías que proponemos a continuación como elementos para su comprensión:

Explicar En la Investigación-acción se refiere a tratar de entender más y mejor a los sujetos del colectivo y su acción.

Aplicar Es decir, investigar para utilizar estos datos o informaciones a fin de mejorar la acción.

Implicar Usar la Investigación-Acción como medio de movilización social. Desde esta perspectiva la investigación deja de ser una “Caja Negra” o algo inalcanzable, al que solo una élite tiene acceso, y pasa a ser un proceso, que todos los que queremos transformar la sociedad debemos comenzar a desarrollar, pero hay que advertir que la investigación por sí sola nos da un nivel de conocimiento de la realidad y podemos correr el riesgo de quedarnos solo en un diagnóstico. Si queremos investigar para cambiar, tenemos que reconocernos como autores y actores del proceso, sin perder la direccionalidad estratégica para avanzar hacia la educación como medio de creación de conciencia racional.

Educación

En el Método Invedecor no hablamos de cualquier educación, aquí reivindicamos la educación popular donde se reconoce al pueblo como Educador e Historiador de nuevo tipo. Es una Educación Vinculada a la Vida, a la Recreación, al Juego, a la Naturaleza y al Amor que nos conduce hacia la Emancipación de los Pueblos.

  • Se parte del conocimiento previo de los sujetos (reivindicamos que el pueblo tiene un saber valioso).
  • Se establecen anclajes, bisagras, nexos entre el saber previo y el nuevo saber, se asocian nuevos saberes con los que el pueblo tiene (Aprendizaje Significativo por Descubrimiento).
  • Se reivindica el aprendizaje significativo por descubrimiento (hay que desarrollar estrategias que permitan que los sujetos descubran nuevos saberes, como lecturas dirigidas, indagación, expediciones pedagógicas, etc.).
  • Se promueve la Autoformación (entendida como la responsabilidad, voluntad, convicción y necesidad que cada sujeto tiene por aprender).
  • Se desarrolla la Conformación (en donde los sujetos aprendemos con lo que sabe cada quien) nos confrontamos entre sí desde el punto de vista del Debate.
  • Está presente la Heteroformación, nuestros conocimientos pueden y deben ser confrontados con otras teorías que se encuentran en textos o en otras personas que no forman parte de nuestro colectivo (algún especialista en la materia).
  • Se parte de la necesidad de los sujetos, las cuales pueden ser: Económicas, Políticas, Socioculturales, Salud, Educación, Recreación, Deporte (es decir la necesidad existe en nuestra cotidianidad y se decide en colectivo).
  • La Formación es proceso permanente y continuo, individual y colectivo (con un taller no se resuelve el cambio de pensamiento implica investigación permanente, lecturas, interacción colectiva, confrontación de experiencias y siempre hay la necesidad de profundizar nuestros conocimientos).
  • Se desarrollan tanto los acompañamientos Pedagógicos como los Andragógicos (en este enfoque no existen expertos solo nos acompañamos de manera solidaria para construir juntos procesos cognitivos).
  • Las técnicas deben ser participativas, como lecturas y discusiones grupales, expediciones pedagógicas (vivir la experiencia en el contexto donde se concrete tal planteamiento).

En el campo Invedecoriano es necesario ir articulando los procesos investigativos con los educativos refiriéndonos a la premisa “Conocer y Educar”, es decir, socializar lo que conocemos de esa manera, vamos atacando la Monopolización y la Jerarquía del Saber. En un colectivo invedecoriano, no se permite que ningún sujeto se reserve información, debe colectivizar su saber, sus materiales deben colocarse al alcance de todos y todas, y no solo eso, sino que debe ayudarse al otro o a la otra, acompañándonos en una relación de iguales. Ahora bien, si investigamos y educamos solamente, corremos el riesgo de convertirnos en un grupo élite, cerrado y sectario, ya que nuestros saberes no se socializan a un radio de acción más amplio y nuestras experiencias no trascienden a otros colectivos. Por lo tanto, no ganamos aliados y en la construcción del poder popular es clave la acumulación de fuerza, por lo que es necesario desarrollar estrategias que socialicen nuestras experiencias. De allí la necesidad de articular Investigación y Educación con Comunicación.

Comunicación

En Invedecor la Comunicación al igual que los otros tres procesos juega un papel fundamental. Entendemos por comunicar al diálogo o intercambio entre sujetos, hallarse en correspondencia, en reciprocidad con los otros y las otras cuyos valores se encuentran enmarcados en la democracia, la horizontalidad y la tolerancia. Podemos decir, que “El diálogo es una relación A con B de una matriz crítica y genera criticidad. Cuando los dos polos del diálogo se ligan entre sí, con amor, con esperanza, con fe, el uno en el otro, se hacen críticos en la búsqueda común de algo. Solo ahí hay comunicación, solo el diálogo comunica”. (Tomado de Mario Kaplun). Así mismo, reivindicamos el planteamiento de Habermas de construir una nueva racionalidad comunicativa, donde se desarrolle un diálogo transparente, libre de coerción, donde impere el libre juego de las ideas.

  • En el desarrollo del Método Invedecor, la comunicación es un medio para socializar el conocimiento, informaciones y experiencias.
  • Dentro de los colectivos Invedecorianos no se deben solapar planteamientos que nos llenen de resentimientos o resistencias.
  • Debemos colocarnos en el lugar del otro, desde su racionalidad.
  • Los planteamientos a medias, incompletos, el doble sentido y el corrillo (chismes, comentarios de pasillo, etc.), son parte de las maledicencias y distorsiones de la comunicación, por lo tanto hay que superarlas.
  • Los medios de comunicación, llámense prensa, radio o televisión, deben ser desecuestrados de las manos de los sectores dominantes y socializarlos en el pueblo (en ese sentido proponemos la construcción de radios y televisoras comunitarias, periódicos, murales, radio-foros, video-foros y todas aquellas iniciativas que surgen de los poderes creadores del pueblo y que sirven para informar, educar y recrear).
  • Los medios de comunicación en manos del pueblo formado políticamente garantiza la direccionalidad estratégica de desmontar la cultura dominante.
  • En la comunicación debe reconocerse que cada contexto tiene costumbres, idiosincrasias y dialectos que lo caracterizan, que en el habla se ponen de manifiesto y no deben convertirse en bloqueo comunicacional, por eso reivindicamos el consenso semántico, es decir, el acuerdo de opiniones y definiciones que sobre algo construya y asuma el colectivo.
  • El estado ideal del habla no permite imposiciones, ni de criterios ni de ritmos de aprendizaje, cada sujeto posee su propio ritmo de aprendizaje.
  • La comunicación es un mecanismo para acumular fuerzas, ya que a través de los medios y el diálogo podemos encontrar aliados.

Para que ocurra un verdadero proceso formativo, debe existir un verdadero proceso comunicacional, él nos permite que los sujetos en su interacción, vayan expresando si realmente se está comprendiendo tanto el propósito como los contenidos que se están desarrollando. En esa perspectiva debe existir una especie de honestidad comunicacional, para expresar lo que realmente sentimos o comprendemos, esto con la intencionalidad de que el colectivo interactúe para que fluya el proceso formativo. Ahora bien, en la construcción del Poder Popular, no solo debemos limitarnos al proceso de comunicación en los colectivos, es decir, el diálogo inter subjetivo, sino que debemos apropiarnos de los medios masivos, en ese orden de ideas, proponemos la concreción de los Medios Masivos y Comunitarios, ya que a través de ellos podemos desarrollar procesos formativos de mayor alcance, comunicar nuestras experiencias, denunciar y desmontar las manipulaciones perversas que hace la dominación. Es allí, donde el Panfleto, los Periódicos, los Murales, las Pintas, el Radio-foro o la Radio-parlante entre otros que surgen de la creatividad del pueblo, se convierten en un arma poderosa CONTRAHEGEMÓNICA; por esa vía se socializan intencionalmente los argumentos para desmontar el elemento ideológico. Siguiendo la línea que venimos desarrollando y tratando de plasmar las consecuencias que trae el concretar los procesos de manera aislada en la construcción del poder popular, nos encontramos que si no desarrollamos una Investigación, Educación y Comunicación que nos permita dar el salto hacia la Organización, seguiremos entonces con una sociedad, dispersa, fraccionada, atomizada e individualista y no acumularemos la fuerza necesaria para empujar el cambio.

Organización

En Invedecor la entendemos como compromiso entre iguales, de impulsar propósitos comunes y como concreción del proceso Investigativo – Educativo – Comunicativo de manera articulada. En ese sentido la organización que postulamos está dirigida a:

  • Superar las razones de la dominación: la burocracia, el autoritarismo, la frustración del protagonismo individual, entre otros, construir una organización horizontal, democrática, participativa, protagónica y solidaria.
  • Debe ser un espacio abierto, flexible y en permanente construcción (no es un espacio sectario y exclusivo, porque si no reproduce las razones de la dominación).
  • Debe tenerse claro que el problema organizativo descansa en la concepción ideológica con que se asume (por lo que debe haber claridad en el enfoque que sustenta nuestra propuesta).
  • Las contradicciones existentes entre lo que es y lo que queremos que sea la organización, no se superan por buena voluntad o porque las decretemos, siempre estarán presentes las tensiones.
  • Las tensiones tienden a aumentar si en la organización no existen canales para que sus integrantes puedan apropiarse de sus derechos de participación, libre debate y disidencia (diferencia), garantizando su cualificación integral, práctica y teórica.
  • El debate y la formación permanente es la que nos permite superar progresivamente las barreras de la división social del trabajo, el cual se traduce en los males burocráticos y hasta opresivos que tienden a reproducirse en todos los espacios organizativos.
  • El espacio organizativo debe ser un centro, un colectivo autónomo que se articula con otros para coordinar y planificar la acción revolucionaria. En ese sentido proponemos las redes de colectivos, es decir la articulación con otras organizaciones, que pudieran tener diferencias en sus normas y reglas pero no en sus objetivos programáticos.

La organización es un espacio que cualifica integralmente a quienes la componen garantizándole las herramientas para el desarrollo de sus capacidades críticas de pensamiento y autónomas de acción.

  • Entendemos la organización como una resultante del proceso de acumulación de fuerzas. Donde el proceso Investigativo – Educativo – Comunicacional nos vincula para construir objetivos comunes.
  • La organización no es cerrada ni rígida, tiende a redefinirse y reestructurarse permanentemente. Es posible que algunos de sus integrantes se alejen por alguna circunstancia y se incorporen a otras organizaciones, lo importante es la formación que ha desarrollado es sujeto en nuestra organización, ya que puede incidir en la otra donde se incorpora.
  • No debemos idealizar la organización y exigir más de lo que pueden y deben dar, todo depende de los niveles de compromiso de sus integrantes.
  • Para que los ideales de una organización no se desvíen, es necesario conservar en su seno una verdadera y transparente cultura del debate y que estas discusiones sean registradas y sistematizadas de manera que construyamos teoría con nuestra organización.
  • La práctica permanente en la toma de decisiones con todos los integrantes de la organización, permite construir un clima que apunta hacia la participación protagónica de todo el colectivo.
  • Su permanente reacomodo no podrá ejercerse de acuerdo a las arbitrariedades de nadie, sino con base en la necesidad que nace del consenso, que genera el debate colectivo, tan continuo y abierto como su propia integración.
  • Dentro de la organización puede haber diferencias entre sus miembros, esas diferencias pueden ser metodológicas, de estilos, conceptuales, pero nunca de concepción.
  • Todos los miembros de una organización deben tener coincidencia y comprensión del enfoque crítico emancipador.
  • Todos los integrantes de la organización deben tener claro por qué se lucha, esa claridad, es lo que determina su permanencia y crecimiento en dicha organización, lo cual hace que motivacionalmente exista una necesidad intrínseca de seguir en ese colectivo.
  • Las organizaciones no se decretan, se van construyendo en la medida que comenzamos a comprender que desmontar la cultura de la dominación, requiere de la participación de todos y todas.
  • La organización es un proceso de construcción permanente que se deriva del desarrollo de otros procesos: Investigativo – Educativo – Comunicacional.

A lo largo de la descripción de cada uno de los procesos que componen Invedecor, hemos venido demostrando la articulación como medio para lograr una organización con soberanía cognitiva, que aprende permanentemente de sus propias acciones y reflexiones en torno a la lucha contra hegemónica. Desde allí podemos decir tal como lo enuncian en el Cuaderno para el Debate N.º 6 del Proyecto Nuestra América (PNA): “La organización no es una locomotora que arrastra vagones sin empuje propio, sino un organismo vivo donde interactúan diversos sistemas ligados al empuje de la Lucha Popular”; Sin embargo, como nos interesa que el método se comprenda para su aplicación, a continuación caracterizaremos de manera específica la pertinencia de la estrategia de articulación.

Pertinencia de la Estrategia de Articulación

La realidad es integral, se nos presenta como un todo bien diverso, por lo tanto, el método (“Cómo Hacerlo”) que debe desarrollarse para alcanzar los propósitos de cambio que nos hemos planteado, debe ser pertinente a dichos propósitos. ¿Por qué creemos que Invedecor es un método pertinente con la necesidad de construir un nuevo modelo de sociedad? Creemos que este método es pertinente porque:

  1. a) “Construye consenso intersubjetivo entre los actores y autores del hecho social” (sujetos, comunidades, organizaciones sociales).
  2. b) Facilita la integración y la unidad de acción (elaboración, discusión y ejecución de proyectos).
  3. c) Parte de las necesidades cotidianas, respeta las especificidades y el contexto etnográfico.
  4. d) Articula la función Investigativa con la Formativa y la Comunicativa.
  5. e) Potencia la sistematización de las experiencias, como forma de producir nuevas teorías a partir de las reflexiones de nuestras prácticas cotidianas.
  6. f) Combina la teoría y la práctica desde un interés emancipatorio.
  7. g) Es un paradigma emergente y un método en construcción, no es rígido ni cerrado, pero con claridad hacia la afectación de las relaciones de producción o superación de la División Social del Trabajo.

En nuestra revolución inédita (primera vez que se desarrolla, no hay otra igual) se necesita desarrollar métodos que sean humanistas y transformadores, que reivindiquen el protagonismo del pueblo de manera soberana y propicien la formación ideológica desde otro enfoque contrario a la dominación. Solo así, podemos garantizar la sustentabilidad de nuestra revolución dando el salto cultural que exige la profundización del proceso. Desde ese marco, sugerimos una propuesta que surge de experiencias concretas de algunos(as) hermanos(as) y compañeros(as) que durante la década de los 80 se sentaron a reflexionar y a sistematizar el por qué con los métodos que utilizaban no lograban la acumulación de fuerza para la afectación de las relaciones de producción. ¿Quieren saber por qué?, pues los invitamos a leer los antecedentes del método Invedecor.

Antecedentes Históricos del Método Invedecor

Existen organizaciones en diferentes países hermanos, que tienen décadas haciendo trabajo con Investigación Acción Participativa y Educación Popular utilizando un enfoque emancipador, por ejemplo en Colombia y Ecuador. En 1990 Carlos Lanz tuvo la oportunidad de compartir con estas en Medellín, Colombia, en el Instituto de Capacitación Popular y con los compañeros de Dimensión Educativa, Cestra, INS, Fundiceps, organizaciones que hacen vida en Bogotá y que también andaban en la misma búsqueda.

En estas interacciones se fueron ubicando los déficits de la práctica investigativa. Las dudas, interrogantes y nudos problemáticos encontrados planteados por estos y estas, hicieron pensar tanto a Carlos Lanz como al resto de los colectivos, sobre la necesidad de trabajar juntos en la construcción del Pensamiento Crítico Latinoamericano. Dentro de los planteamientos que hacían autocríticamente, analizaban el por qué el desarrollo aislado de los procesos Investigar, Educar y Comunicar no permitió dar el salto hacia la transformación social. Algunos de ellos desarrollaban Investigación Acción Participativa, pero se quedaban solo en el diagnóstico de la realidad; otros desarrollaban Educación Popular, pero fallaban en la estrategia comunicativa.

En muchos casos llegaron a informar que cuestionaban las formas de Investigar, los métodos, la no vinculación teoría-práctica, la investigación que se realizaba sin desmontar ideologías dominantes y opresoras. Otros ponían el acento en la falta de continuidad del sistema educativo, la relación verticalista de este, la concepción. En fin cada organización expresaba cómo había hecho su trabajo y cómo no lograban dar el salto. Estas reflexiones fueron recogidas por Carlos Lanz, quien también preocupado por construir un método que permitiera transformar la sociedad y viéndose en el mismo espejo de los(as) compañeros(as) de Colombia y Ecuador, se encuentra con un grupo evangélico que desarrolla educación popular, quienes hacen vida en el estado Lara, llamado Centro de Educación Popular Exeario Sosa Luján (CEPEXSOL) o Grupo Cristiano CALEB como también se les conoce, con ellos analiza las reflexiones antes descritas y los contenidos de algunos autores de la Investigación Acción y nos dice: “Observamos cómo algunos autores que trabajan con Investigación Acción como Thrion, Goyette y Michelle Lessard, plantean algunos problemas de bisagras entre la Investigación y la Acción y enfatizan las funciones de Comunicación:

  • Participación protagónica
  • Concientización
  • Presión sobre los que tienen capacidad de decidir
  • Formación y Autogestión
  • Compromiso y Acción eficaz.

Si bien el nexo entre conocer, educar, comunicar y organizar no está establecido en términos de articulación queda reseñada la postura de quienes en Investigación-acción están preocupados por el cambio social y establecen algunas mediaciones que lo hacen posible caracterizando tales puentes como funciones de la Investigación-acción”. Son estas reflexiones y precisiones teórico-prácticas que hacen a Carlos Lanz junto al Grupo CALEB hablar de la estrategia de articulación como alternativa metodológica para construir nuevos caminos en la acumulación de fuerzas en función de la transformación y ello se materializa en la Organización Social, donde se abordan problemas que van desde la realidad médico-asistencial hasta el ámbito de la resistencia cultural. En aquel entonces Carlos Lanz presenta la estrategia de articulación como totalidad concreta estableciendo puentes o bisagras entre la Investigación-acción, el aprendizaje significativo, la nueva racionalidad comunicativa y la propuesta de nuevas formas de intervención y organización, es decir, Investigación, Educación, Comunicación y Organización y nos dice que al agregar las dos o tres primeras letras de cada proceso surge la palabra Invedecor es una composición de las abreviaturas de los cuatro procesos.

INV estigación

ED ucación                                      Invedecor

CO municación

OR ganización

Pero más que su composición gramatical, surge la propuesta metodológica que hoy postulamos, por ser un instrumento político para el alcance de la sustentabilidad en la organización, que empuje hacia la emancipación social. Desde el año 1990 le dimos la bienvenida a Invedecor como un nivel metodológico más elevado y congruente que se convierte en un arma poderosa para todos y todas las que andamos en esta búsqueda de métodos transformadores.

En conclusión, podemos decir que desmontar la cultura de la dominación implica abrir nuevos procesos de formación en todos los espacios colectivos, con métodos coherentes con el enfoque emancipador. Se hace necesario comprender que la construcción del Poder Popular, como base para el modelo de la nueva sociedad, nos llama a problematizar nuestra práctica, desde la comprensión y racionalidad consciente, entender que nuestras acciones están regidas por un orden ideológico establecido.

 

Imagen tomada de: https://www.alainet.org/

Enviado por el autor.

José Vicente Rangel In Memoriam

Vladimir de la Cruz

Conocí a José Vicente Rangel Vale allá por la década 1975 – 1985, por mi padre Ignacio de la Cruz, cuando por motivos políticos y familiares, viajé a Venezuela por unos días. Mi padre y su segunda familia vivían en Venezuela, en Maracaibo.

En esos días era yo militante activo socialista. En aquellos días del triunfo sandinista fui a dar una Conferencia en la Universidad del Zulia invitado por Gastón Parra Luzardo, cuando se desempeñaba como Vicerrector Académico, quien era gran amigo de mi padre. A Gastón lo encontré, de nuevo, en el 2008 cuando llegué de Embajador de Costa Rica a Venezuela, quien estaba al frente del Banco Central, falleciendo al poco tiempo de mi llegada, con una brillante carrera académica y política antes y durante el período de Hugo Chávez.

Mi padre era militante del Movimiento al Socialismo, que se desarrolló como una fuerza política electoral importante desde inicios de la década del 70, con exmilitantes comunistas, exguerrilleros de los años 60s y miembros de otros grupos políticos de izquierda, del Movimiento de Izquierda Revolucionaria con el que se fusionó en 1983.

Desde esos días iniciales de la década del 70 José Vicente Rangel empezó figurar como el candidato presidencial, en 1973, del Movimiento al Socialismo. En 1978 volvió a ser el candidato presidencial, y en 1983 de nuevo fue candidato a la presidencia por el Movimiento Electoral del Pueblo, que en esa elección enfrentó Teodoro Petkoff, que era el candidato presidencial del Movimiento al Socialismo. Sus pasos partidarios los había tenido entre 1965 y 1968 en el Partido Revolucionario de Integración Nacionalista.

En esos años de los 60s y 70s en Venezuela se desarrolló una izquierda crítica del socialismo histórico, bajo la perspectiva de la vía venezolana del socialismo, en la cual José Vicente Rangel ocupó un lugar destacado, sobre todo después de las fuertes derrotas a las experiencias guerrilleras que se dieron en Venezuela.

Mi relación con esa literatura, y con José Vicente Rangel, mi padre me la mantenía enviándome los libros de la discusión política de la izquierda venezolana, que era muy fecunda.

Mi padre tenía una intensa relación con José Vicente Rangel, por afinidad política y profesional, como periodista. Por su profesión también conocí a otros dos extraordinarios periodistas venezolanos, militantes políticos ellos, Aristides Bastidas y Héctor Mujica, con quien mantuve intermitentes buenas relaciones.

En las elecciones de 1998 el Movimiento al Socialismo se alió al Movimiento V República, respaldando a Hugo Chávez, lo que no fue apoyado por Teodoro Petkoff, otro de los importantes dirigentes y personalidades de la izquierda venezolana, a quien también conocí. Teodoro Petkoff, por su parte, criticó fuertemente a José Vicente Rangel por su permanencia en el chavismo.

José Vicente Rangel en su vida política desde la década del 50 había participado activamente en la lucha política de Venezuela, donde sufrió persecución y exilio, durante la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, y luego de enfrentamientos importantes con los gobiernos de la llamada IV República.

Luego siguió activo, políticamente, en el período de la V República, desde el inicio, con Hugo Chávez, hasta su fallecimiento, bajo el gobierno de Nicolás Maduro, por un paro cardiaco, en la mañana del pasado viernes 18 de diciembre.

Durante la dictadura del Pérez Jiménez militó en la Unión Republicana Democrática, que lideraba Jovito Villalba. Su vida política se activó desde el golpe de Estado contra Rómulo Gallegos, en 1948, cuando tenía 16 años. Fue encarcelado en esa época.

En ese período como exiliado vivió en Chile donde se casó con Ana Avalos, artista plástica, con quien tuvo una hija y un hijo, de igual nombre, que es hoy Alcalde del Municipio de Sucre, en el Estado de Miranda. También vivió en España, como parte de su exilio, donde se graduó de Abogado, estudio que había iniciado en Venezuela y siguió en Chile.

En su vida fue abogado, político, escritor y periodista. Político siempre de izquierda. Periodista de distintos medios de comunicación, prensa, radio y televisión. Fue columnista, en la década de 1990, del periódico “El Universal”, del Periódico “Panorama”, donde laboró mi padre, en Maracaibo, y del medio “2001” . También colaboró como columnista en “El Informador”, “La tarde”, “El Regional”, en la Revista política “Bohemia”. Fue locutor para la cadena Unión Radio. También fue Director de los diarios “La Razón”, “El Clarín”, y el semanario “Qué Pasa en Venezuela”.

A la caída de la dictadura, en 1958, ya de regreso a Venezuela e incorporado a la lucha política, fue electo diputado donde se distinguió por más de 25 años, convirtiéndose en gran defensor de los Derechos Humanos, lo que le permitió publicar su libro “Expediente Negro” que es una denuncia de las violaciones de los Derechos Humanos que sucedieron en el período 1960-1970, especialmente contra activistas de izquierda y campesinos.

Como diputado hizo su brillante carrera política que le distinguió como dirigente y referente inevitable de la izquierda venezolana, y continental.

Fue electo diputado en cinco ocasiones en representación de los partidos de izquierda Unión Republicana Democrática (URD), Partido Comunista de Venezuela (PCV), Movimiento Electoral del Pueblo (MEP) y Movimiento al Socialismo (MAS).

Como diputado defendió la separación de los tres poderes, el Estado de Derecho, el respeto a las minorías políticas, la defensa de los derechos humanos y las libertades públicas y ciudadanas, especialmente durante los gobiernos de Rómulo Betancourt y Raúl Leoni. Como periodista fue gran acusador de situaciones, como de personas. También se distinguió con sus investigaciones sobre compras de material militar, por las denuncia que hizo de corrupción en el Ejército y el sector militar, por el Programa Turpial de la Armada, por la repotenciación de los blindados AMX-30 del Ejército, por las denuncias contra el Presidente Carlos Andrés Pérez por malversación de fondos públicos, lo que contribuyó a su destitución por el Congreso, en 1992, año que entrevistó, el 30 de agosto, al Comandante Hugo Chávez Frías, que estaba detenido, junto con Francisco Arias Cárdenas, entre otros, en la Cárcel de Yare, por el intento de golpe de Estado que realizó.

Cuando amnistían a Hugo Chávez, en 1994, es José Vicente Rangel quien orienta a Chávez en la lucha electoral, metiéndolo a la política a partir de ese año. Desde ese momento hasta la muerte de Chávez en el 2013, fue uno de sus grandes asesores y consejeros, de los pocos a los cuales Chávez les ponía atención seriamente.

Desde entonces trabó una intensa amistad con Hugo Chávez, a quien le realizó 18 entrevistas, y otros escritos, hasta el 2012, que se recogieron en el libro “De Yare a Miraflores, el mismo subversivo”. Entusiasmado con Chávez le acompañó en distintos momentos desde el ejercicio del Gobierno. Junto con Luis Miquelena fue una de las personas que más influía para moderar las acciones emotivas iniciales de Hugo Chávez. José Vicente ayudó a impulsar la candidatura presidencial de Hugo Chávez en 1998.

En ese primer gobierno de Chávez fue nombrado ministro de Relaciones Exteriores, desde 1998 hasta el 2001.

José Vicente Rangel fue el que convenció a Chávez para aceptar las derrotas electorales que sufrió ante la oposición venezolana y de aceptar sus resultados.

Durante el ejercicio del Ministerio de Relaciones Exteriores, por José Vicente Rangel, por encargo del entonces Presidente de la República, Miguel Ángel Rodríguez, y del Expresidente Rafael Ángel Calderón Fournier, viajé a Caracas, presidiendo una delegación, en compañía de los diputados José Manuel Núñez, de Fuerza Democrática, y Jorge Eduardo Sánchez, de la Unidad Social Cristiana, para contribuir a gestionar el apoyo del Gobierno venezolano para la Candidatura a la Secretaría General de la OEA para Rafael Ángel Calderón.

Mi relación con José Vicente, por mi padre, y mi familia en Venezuela, permitió el acceso directo y rápido a su despacho. No se logró el apoyo de Venezuela a esa candidatura, pero fue refrescante mi reencuentro con el Canciller José Vicente Rangel, quien nos dio un gran trato y espacio en esos días en Venezuela, y nos produjo una rica experiencia política.

A principios de febrero del 2001 Hugo Chávez nombró a José Vicente Rangel al frente del Ministerio de Defensa. Las leyes y la propia Constitución Política de Venezuela no establecen que la jefatura del ejército la deba ejercer un militar, pero en toda su historia institucional, junto con Rangel, en más de 100 años, solo otros dos civiles ocuparon la jefatura del ejército, y, curiosamente, bajo otro gobierno militar como fue el del general Juan Vicente Gómez. Y, fue José Vicente Rangel el primer civil en esos últimos 70 años hasta su nombramiento.

En Venezuela, donde la historia se conoce por años de democracia y años de dictadura, el acontecimiento del nombramiento de Rangel provocó grandes debates y temores.

Tradicionalmente este puesto había estado solo en manos de militares. Curiosamente, bajo el gobierno de otro militar, el General Juan Vicente Gómez, a principios del Siglo XX, el puesto de Ministro de Guerra y Marina, como se conoce actualmente el de Defensa, estuvo a cargo, dos veces, de un civil, el abogado Carlos Jiménez Rebolledo, bajo cuyo ministerio se redactó el Código Militar de 1923, aunque había sido Capitán bajo el gobierno de Cipriano Castro. También lo desempeñó el abogado Victorino Márquez Bustillos, hombre de extrema confianza del dictador, a quien también le habían dado grado militar como se acostumbraba en los gobiernos dictatoriales. Aun así, se les considera civiles.

En la Cancillería José Vicente Rangel procuró atender como prioritario lo que tradicionalmente era un problema: la Guyana, Colombia y los propios Estados Unidos, donde dejaba clara y consolidada la posición de Venezuela; impulsó la integración de Venezuela con los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y con los países andinos, convirtiendo a Venezuela en líder de esa región; implementó el Programa Galileo con el cual reformuló las políticas de las embajadas de ese país asignándoles el papel de promover a Venezuela como un país de potencial inversión y removió más de 250 funcionarios diplomáticos que en la práctica no tenían ningún papel. Le imprimió a la Cancillería venezolana, en dos años, una nueva visión internacional del país, defendiendo la soberanía, lo nacional y el territorio. Se negó a facilitar el territorio de Venezuela para la vietnamización de Colombia, dentro del Plan Colombia.

Como Canciller dirigió el primer viaje internacional de Hugo Chávez a los países miembros de la OPEP, e impulsó la creación de la Cumbre de Caracas para concretar acuerdos entre los países miembros sobre la necesaria disminución de la producción de petróleo y así aumentar su precio en los mercados internacionales.

Al frente del Ministerio de Defensa se esperaba de él mayor seguridad en las fronteras y con los conflictos de los ganaderos en esa zona; fortalecer la seguridad ciudadana; modernizar las fuerzas armadas y provocar la confianza de los militares en la jefatura de un civil, lo cual redundaría en el proceso democrático interno de Venezuela, en su imagen internacional, en acoplarse a la tendencia latinoamericana de poner al frente de los ejércitos a civiles.

Bajo el Presidente Chávez los militares ocuparon puestos importantes de la institucionalidad civil; y se les ha planteó como objetivo su integración con el pueblo y la sociedad civil, asignándoles importantes tareas de acción cívica.

Los militares no veían con buenos ojos a Rangel. Había sido su crítico histórico, además que su militancia política izquierdista les recordaba la guerrilla de los sesentas.

Así vi su nombramiento y lo publiqué (“Un paso histórico”, en el periódico El Heraldo, jueves 22 de febrero del 2001 p.10), donde dije: “Independientemente, de lo que se opine sobre los cambios en general en la Venezuela de hoy, hace pocos días el Presidente Hugo Chávez dio un paso trascendental en la historia política venezolana, y en la latinoamericana, allí donde los elementos militares siguen desempeñando un gran papel.

A principios del mes de febrero nombró a su Canciller, el intelectual prestigioso, dirigente político, hombre de la cultura, escritor, periodista, abogado, José Vicente Rangel, una de las personalidades políticas más atractivas de Venezuela, como su Ministro de Defensa.

Es una acción que no solo destaca a Rangel sino el valor del propio Presidente Chávez de nombrar un civil al frente de la institución castrense. El presidente venezolano venía enviando señales sobre el papel de las fuerzas armadas. Ya había señalado que no debía haber un divorcio entre ellas y la sociedad civil; entre los soldados y el pueblo. Había puesto en varias oportunidades al ejército a realizar obras de carácter civil e incluso frente a ciertas acciones populares había impedido su papel represivo, buscando esa identidad.

El peligro de militarizar la administración política de Venezuela parece superado. Hoy con el nombramiento de Rangel en Defensa pareciera acentuarse la tendencia de civilizar a los militares, de someterlos al poder civil, como se hizo en Costa Rica en 1869. Es sin ninguna duda un cambio revolucionario que debemos festejar.”

Con el nombramiento de Rangel hubo cambios en la estructura de mandos del Ejército y hasta en la estrategia de la posición de Venezuela frente al llamado Plan Colombia, que pretendía vietnamizar ese país. Rangel ya venía criticando este plan y había impedido la participación de Venezuela en él y el uso del territorio venezolano como un elemento logístico del plan.

El que Rangel fuera periodista se había visto también como un elemento de apertura hacia la sociedad, pero especialmente hacia los medios de comunicación social, por parte de la institución militar, señalando que el encuentro de los militares con la sociedad venezolana sería más democrático, transparente, abierto, y también más crítico y menos sometido a la obediencia ciega verticalista de los mandos militares.

Lamentablemente, hoy, vemos un peso enorme, para mí negativo, de los militares en la estructura político institucional de Venezuela, en todos sus efectos.

El nombramiento de José Vicente Rangel se acompañó del nombramiento de otro intelectual de izquierda, Luis Miquilena en el Ministerio del Interior. Así, en aquel momento, el Ejército de Venezuela, y el Ministerio del Interior, estaban al mando de civiles. Ambos con vidas comprometidas en la lucha por la democracia y el diálogo nacional. José Vicente Rangel era un hombre de diálogo y consenso.

Después del Ministerio de Defensa el 28 de abril del 2002 fue nombrado vicepresidente de la República, reemplazando a Diosdado Cabello, donde se mantendría hasta el 8 de enero de 2007, como parte del primer y segundo mandato presidencial de Hugo Chávez, quien desempeñó el cargo por más tiempo que otros vicepresidentes del chavismo madurismo. Como reconocimiento a su Vicepresidencia le dieron una réplica de la Espada de Libertador Simón Bolívar el 8 de enero del 2007, que es de las más altas distinciones que da el Gobierno venezolano.

Entre otros puestos que desempeñó políticamente fueron el de miembro de la Asamblea Nacional Constituyente que redactó la Constitución de 1999.

De aquí pasó de nuevo a su labor periodística al frente del programa de televisión «José Vicente Hoy», en la televisora privada Televen, programa que se realizaba los domingos de 10 a 11 a.m., cuyo primer invitado fue Hugo Chávez, el Presidente. En este Programa, era de obligada atención de todos los que se interesaban por la política y la realidad venezolana, con gran audiencia, donde trataba temas de interés político con fuertes juicios de valor, denuncias y críticas en contra de los actores de la oposición, defendiendo la Revolución Bolivariana. El Programa se llegó a convertir en una fuente de información y de cita obligada.

Como periodista José Vicente Rangel en dos ocasiones recibió el Premio Nacional de Periodismo de Venezuela.

Cuando llegué como Embajador de Costa Rica a Venezuela, el 3 de julio del 2008, llevaba como misión urgente tratar de que el Gobierno de Venezuela invitara al Gobierno de Costa Rica a la reunión de Petrocaribe que se realizaría una semana después en Maracaibo.

Sin haber presentado oficialmente las credenciales, ante el gobierno bolivariano, rompiendo todos los protocolos, el 4 de julio contacté en persona, al Vicecanciller, al General Francisco Arias Cárdenas, para explicarle la solicitud de participación en la reunión de Petrocaribe, haciéndole llegar el 5 de julio, en los actos de celebración de la Independencia de Venezuela, la solicitud, que fue resuelta favorablemente el lunes 7 de julio. Desde entonces mantuve una buena relación con el Vicecanciller. El Canciller era Nicolás Maduro.

La gran sorpresa es que el día 8 de julio recibo invitación personal de José Vicente Rangel. Para que le acompañe, en el Hotel Tamanaco, el siguiente viernes, a la celebración del su 79 cumpleaños.

Me hice acompañar a la recepción por el funcionario, que acaba de conocer, de la Embajada de Costa Rica, Guillermo Cholele, gran colaborador, gran conocedor de la realidad política y empresarial venezolana, que fue de gran ayuda y de confianza para mi gestión de Embajador. Allí fuimos.

La segunda sorpresa de esa fiesta fue la enorme cantidad, por lo menos más de 200 personas calculé, de gente que se había reunido a la celebración del cumpleaños, personas de todos los sectores políticos, empresariales, culturales, de los medios de comunicación. Era una muestra del respeto que se le tenía a José Vicente Rangel.

Su personalidad será evaluada en el tiempo con mayor rigurosidad, como sucede con los grandes personajes. De mi parte, yo había empezado a conocerle por mi padre, por sus libros y por el trato personal que establecimos, poco pero de calidad, de gran respeto, como el hombre del consenso. Le admiré, le aprecié y le seguiré valorando.

Venezuela ha perdido un gran periodista, un gran comunicador, una gran persona. La política de Venezuela, y del continente, ha perdido a uno de sus principales y emblemáticos dirigentes, la izquierda venezolana y latinoamericana a uno de sus principales exponentes.

Desde el 11 de diciembre se rumoró su muerte, que fue hasta el 18. Días de pesadumbre para la sociedad venezolana el seguir día a día las noticias de su quebranto de salud, que ya era evidente porque había dejado de hacer su programa televisivo dominical desde hacía varias semanas atrás

José Vicente nos dejó otros libros, “Tiempo de Verdades”, Caracas: Ediciones Centauro, 1973: compilación de sus artículos de prensa, en colaboración “Militares y política (una polémica inconclusa)”, Caracas, Ediciones Centauro, 1976, “Seguridad, defensa, democracia: Un tema para civiles y militares” , Caracas: Ediciones Centauro, 1980, “Tiempo de Verdades, Socialismo y Democracia”, “La Administración de Justicia en Venezuela”, “Abril sin censura”, relacionado con el intento y fracasado golpe de estado del 2002.

José Vicente será recordado como el gran luchador que fue, por su constancia y compromiso militante, como un sembrador de sueños y esperanzas, por su fortaleza laboral hasta casi sus últimos días, por su obra periodística, por su capacidad analítica, de investigador, por la agudeza de sus opiniones, por su capacidad e incisiva crítica, por su aguda y efectiva palabra, por su autenticidad, por su Docencia política y profesional, será considerado y tratado como Maestro, como líder, como guía. Para algunos un Guerrero de la Patria Venezolana, un ícono de la Revolución Bolivariana, un referente inevitable de la Historia Reciente de Venezuela. Fue, sin lugar a dudas, un personaje de una enorme, rica y fecunda trayectoria política, que vivió intensamente su vida. También como un gran mediador o negociador político. De muy buen trato personal, al menos así lo traté.

A medida que José Vicente Rangel se identificó con el chavismo, y continuó asesorando a Nicolás Maduro, la oposición antichavista y antimadurista lo estigmatizó. Es parte de su historia personal.

¡Basta ya! de la farsa de Juan Guaidó en Venezuela

Lic. José A. Amesty R.

Recordemos que Juan Gerardo Antonio Guaidó Márquez, el 23 de enero del año 2019, se autoproclamó, en una plaza pública, Presidente encargado de la República Bolivariana de Venezuela, desconociendo al Presidente electo constitucionalmente Nicolás Maduro Moros.

Posteriormente, e inicialmente fue reconocido por alrededor de 50 países, entre los cuales se encuentran: Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, Guatemala, Perú, Paraguay; el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el Parlamento Europeo y el Grupo de Lima.

Mencionando, además, que gracias a Donald Trump, a su apoyo, al “arriarlo”, pone de moda el término “autoproclamado”. La verdad ineludible, es que Guaidó fue y está avalado, financiado, apoyado por Donald Trump y los Estados Unidos de Norteamérica, como Imperio actual.

No obstante, y sin duda alguna, en el contexto de la Revolución Bolivariana, Juan Guaidó, es el usurpador no reconocido por la mayoría del pueblo venezolano. No fue ni siquiera candidato en mayo del 2018, cuando se celebraron las elecciones legítimas y legales en Venezuela, para escoger al Presidente, nadie lo eligió; fue un tipo que escogieron para interpretar el rol de líder “popular”.

Guaidó era prácticamente un desconocido en la escena política de Venezuela, cuando en una plaza pública y sin cumplir ninguno de los preceptos constitucionales, se auto juramentó como presidente encargado.

En términos más políticos, está al servicio de una operación intervencionista de recolonización desde el extranjero. Viola la Constitución venezolana, negociando la entrega de las riquezas a las transnacionales, a los privados; eliminando el control del Estado sobre el petróleo y el gas, aparte de subordinar las negociaciones a los Tribunales Internacionales, entre otras medidas.

En general, Guaidó no fue, en ningún momento, ni es presidente de Venezuela, está actuando al margen de las leyes constitucionales venezolanas, por lo tanto, puede ser enjuiciado por tal actitud.

Igualmente, para recordar que, entre las atribuciones, más importantes, del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela están: Cumplir y hacer cumplir la legislación de Venezuela. Nombrar y destituir al Vicepresidente Ejecutivo, así como nombrar y destituir a los ministros. Dirigir las relaciones exteriores de la República, celebrar y ratificar los tratados, convenios o acuerdos internacionales. Dirigir la Fuerza Armada Nacional en su carácter de Comandante en Jefe, ejercer la suprema autoridad jerárquica de ella y fijar su contingente. Declarar los estados de excepción y decretar la restricción de garantías en los casos previstos en la Constitución. Administrar la Hacienda Pública Nacional. Nombrar y destituir aquellos funcionarios cuya designación le atribuye la legislación. Convocar y presidir el Consejo de Defensa de la Nación. Autorizar y ejecutar las extradiciones, liberación de presos, entre otras.

Nos preguntamos, Juan Guaidó, en su supuesto mandato, ¿ha ejercido o ejecutado alguna de estas atribuciones? Por supuesto que no.

Groseramente, si ha influenciado a varios de los países que lo apoyan, para desconocer, por ejemplo, a las autoridades diplomáticas en esos países, desconociendo y usurpando las tareas de las embajadas y consulados, así como los embajadores y cónsules.

Conocemos de los problemas, angustias, dificultades y tristezas, de muchos venezolanos/as, que estando fuera de su país, no pueden renovar o adquirir pasaporte nuevo, u otro documento, ante la inexistencia de autoridades legales, ya que el país por ejemplo (Costa Rica), no reconoce a las autoridades venezolanas, sino a las del usurpador Juan Guaidó.

En este sentido, es significativo, lo que señala el funcionario y miembro del partido de gobierno en Costa Rica, Partido Acción Ciudadana PAC, Federico Picado, “Creo que el Presidente Alvarado y el Canciller Solano, deben prepararse para repensar y replantear las relaciones con las autoridades legítimas de Venezuela. Con la derrota de Trump, desaparece Guaidó, y en consecuencia llega a su fin una política que fracasó, que no condujo a nada, que nuestro gobierno apadrinó, y que el único que pagó las consecuencias fue el venezolano de todos niveles y colores, pues las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Trump y Pompeo, y sus consecuencias internas humanas y materiales, no hicieron distinción alguna entre chavistas, opositores e independientes. El Presidente y el Canciller, no pueden seguir ignorando una realidad objetiva por razones ideológicas, a la espera de la mano piadosa del norte. Han desconocido la dinámica propia de un país, que ha soportado todas las agresiones posibles exceptuando la agresión e intervención militar directa del imperio. Creo que llegó la hora de tender la mano sin imponer condiciones y que gane espacios la política y la sensatez con relación al abordaje de la situación de Venezuela”.

Y es cierto, ante las elecciones parlamentarias en Venezuela, el 6 de diciembre, Guaidó ya no es ni diputado, ni mucho menos Presidente. Aún, pese al saboteo y la abstención, la Asamblea Nacional venezolana, está ahora en manos de una mayoría chavista, y los países que apoyaron la aventura de Guaidó, deben recapacitar, considerar y reconocer ahora, a los actuales diputados y diputadas, incluido a Nicolás Maduro Moros, como genuino y legítimo presidente electo constitucionalmente.

Es más bien, un inepto con acusaciones recientes de ser corrupto y ladrón de fondos, para su aventura política de “autoproclamado”. Se ha revelado, por la prensa, incluida la prensa opositora al gobierno bolivariano, ‎el súbito enriquecimiento de los familiares de Juan Guaidó, comprobado desde que el “presidente ‎interino” y sus colaboradores tienen acceso a los activos del Estado venezolano “confiscados” ‎por Estados Unidos. La prensa opositora también ha divulgado historias de supuesta complicidad, ‎entre altos funcionarios del gobierno y algunos diputados opositores.

Es abiertamente conocido, como una ficha a utilizar por USA, aunque ya va a ser desechado, según algunos partidarios de la oposición venezolana. Bufón del Imperio e incompetente.

Pasadas las elecciones parlamentarias, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha dicho, que su cargo ha quedado ratificado y «recontraratificado», por el amor, el voto y la pasión del pueblo bolivariano, luego del rotundo triunfo del chavismo en las elecciones legislativas, en las que no participó la oposición que representa el líder opositor Juan Guaidó.

Juan, por su parte, reiteró sus denuncias de fraude en las elecciones, alegando que no participó, porque los comicios no cuentan con las garantías suficientes para que sea un proceso transparente.

Como dice un dicho popular, son “pataleos de ahogado”, se aferra a un sillón presidencial ficticio, argumentando que el Gobierno de Nicolás Maduro es ilegítimo, pese a ser reconocido por más de 135 naciones, frente a 50 países que le brindaron a Guaidó su respaldo inicial.

Como ya intuimos, a partir del 5 de enero 2021, los gobiernos que lo apoyaron en enero de 2019, y no renovaron su confianza, al menos de manera pública, tendrán que dar un paso al frente y manifestarse al respecto, dichos apoyos o rechazos son vinculantes y de valor práctico.

Deseamos ya casi finalizando, destacar un elemento que alude al pernicioso y recurrente ataque sobre la acusación de la “dictadura de Maduro”. Cómo es posible, que luego de unas elecciones parlamentarias legales, constitucionales, con veedores internacionales, se permita que un impostor (Juan Guaidó), primero, llame “tirano”, “impostor”, “usurpador”, al Presidente que de verdad está ejerciendo (Nicolás Maduro); segundo, que éste último, permita, que el autoproclamado, pueda aparecer y circular en el país, ante la opinión pública; tercero, organizar una consulta popular, con unos supuestos 7.000 centros de recepción de votos, y finalmente, salir campante sin ser molestado por los agentes de seguridad del Estado o la policía política del “dictador” de turno.

¡Imagínense qué le habría ocurrido a quienes, durante algunas de las dictaduras acaecidas en América Latina, hubiesen instalado no 7.000 sino, 7 centros de recepción de votos para expresar su repudio al régimen! Habrían sido arrestados al instante, probablemente torturados hasta morir y desaparecidos sin dejar rastros.

Finalmente, el año 2020 ha sido para Juan Guaidó, el año de su máximo truco ilusionista y el de su caída que ya parece indetenible. La caída de la ilusión está sucediendo en estos momentos.

Parece inevitable que el invento Guaidó termine por apagarse. Su historia política, desde su reconocimiento en enero del 2019, por parte de Trump, es una sucesión de errores e incapacidades.

Su progresivo declive venía sucediendo sin demasiado impacto. Su incapacidad para proponer algo nuevo (o incluso repetir algo viejo) quedaba tapada por las casi semanales sanciones anunciadas por Estados Unidos, en el marco de un bloqueo férreo, persiguiendo barcos y navieras para que no comercie petróleo con Venezuela.

¿Hasta cuándo seguirá el respaldo a Guaidó? Lo que es seguro es que Guaidó no hizo lo que debía hacer, y deben existir otros planes en vista de sus fracasos. Como señalan los dichos populares: “a Guaidó, solo le queda una presidencia virtual en el país de Narnia”.

Guyana / Venezuela: Corte Internacional de Justicia (CIJ) se declara competente

Nicolas Boeglin (*)

El pasado 18 de diciembre del 2020, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dio a conocer su fallo en el que se declara competente para conocer de la demanda interpuesta por Guyana contra Venezuela en el 2018: véase texto en francés y en inglés de su decisión.

Como previsible, Venezuela emitió un comunicado oficial de su diplomacia en la misma fecha, en el que rechaza categóricamente la conclusión a la que llegó la CIJ (véase texto completo del comunicado oficial).

Dos cuestiones zanjadas, pero una sola de manera unánime

Nótese que luego de un largo análisis realizado por la CIJ, son dos únicos puntos resolutorios sobre la competencia de la CIJ que contempla esta sentencia en su párrafo final.

De las dos cuestiones a resolver, la única conclusión que fue adoptada por unanimidad por parte de los quince jueces titulares (véase lista oficial) así como por la jueza ad hoc designada por Guyana, Hilary Charlesworth (Australia), es la siguiente: la CIJ es únicamente competente para conocer de hechos anteriores a 1966 (párrafo 138) y no a hechos posteriores como lo sostenía aventuradamente Guyana.

Como bien se sabe, esta antigua controversia territorial entre Guyana y Venezuela no había dado lugar a mayores tensiones entre ambos Estados antes del 2015, año en el que la empresa Exxon Mobile anunció el descubrimiento de importantes yacimientos de hidrocarburos frente a las costas de Guyana (véanse esta nota de la BBC del 10/06/2015 así como esta nota y mapa del Spectrumgeo del 2016). El entusiasmo de Exxon Mobile fue tal que se anunció que sufragaría los gastos de defensa de Guyana ante la CIJ contra Venezuela, calculados en unos 15 millones de US$ (véase nota de prensa del Guyana Times): es posiblemente la primera vez en la historia que un Estado reconoce oficialmente recibir montos de una empresa privada para sufragar sus gastos en La Haya.

Cabe indicar que la totalidad de los gastos que supone una demanda en La Haya para un Estado constituye un ámbito en el que imperan la discreción y el recelo, y en el que la prensa se ha mostrado muy poco curiosa, incluyendo la costarricense (Nota 1).

Un intenso debate inter pares

Más allá del entusiasmo inicial de Exxon Mobile y de Guyana (que debería decaer significativamente a raíz de esta decisión de la CIJ), cabe precisar que esta sentencia no fue exenta de debate entre los mismos jueces sobre el otro punto resolutorio: el de saber si hay (o no) manera de sostener la existencia de un consentimiento previo de Venezuela (sin el cual, la CIJ debió de declararse incompetente).

Como bien se sabe, en marzo del 2018, Guyana presentó una demanda unilateral con base en una carta del Secretario General de Naciones Unidas de enero del 2018 dirigida a ambos Estados. Esta carta se fundamenta en un acuerdo de 1966 entre Venezuela y Reino Unido que designa al máximo representante de Naciones Unidas como la entidad encargada de ayudar a ambos Estados a resolver la disputa entre Guyana y Venezuela.

El juez Ronny Abraham (Francia) externó su profunda inconformidad en un voto disidente (véase texto), así como el juez Mohammed Bennouna (Marruecos), en otro voto disidente (véase texto): ambos jueces indicaron que no se pueden hacer derivar del acuerdo de 1966 entre Venezuela y Reino Unido las consecuencias jurídicas a las que llegó la mayoría de la CIJ. El juez marroquí concluyó su opinión disidente señalando que:

«A mon avis, ce n’est que par une interprétation rigoureuse du consentement des Parties à sa compétence que la Cour renforcera sa propre crédibilité ainsi que la confiance dont elle bénéficie de la part des Etats parties au Statut«.

En un texto que lleva el nombre de «declaración» (y no de «opinión disidente«, por alguna razón que sería de interés conocer), el juez Giorgio Gaja (Italia) también consideró que no existen bases jurídicas para establecer el consentimiento de ambos Estados (véase texto de su declaración) y concluyó su denominada «declaración» señalando que:

«In conclusion, the Parties are, in my opinion, under an obligation to resort to judicial settlement and therefore to confer jurisdiction on the Court. Pending consent to that effect, the Court does not yet have jurisdiction on the dispute».

En otra opinión disidente llamada como tal, el juez Kirill Gevorgian (Rusia) llegó una conclusión muy similar a los anteriores jueces citados, al indicar (véase texto completo) que:

«Rather than basing itself upon an unequivocal, indisputable indication of Venezuela’s consent, as its jurisprudence requires, the Court goes looking for reasons to exercise jurisdiction, relying in particular on the presumed intentions of the Parties and upon a series of statements that are, at best, of ambiguous meaning. The Court ignores language in the text of the Geneva Agreement that squarely contradicts its position and is unable to point to any express statement evidencing either consent to this Court’s jurisdiction or an acknowledgment that the Secretary-General’s choice of the means of settlement is legally binding. In my view, this approach is wrong and undermines the fundamental principle of consent by the parties to the jurisdiction of the Court«.

Siendo el principio del consentimiento previo de los Estados la piedra angular sobre la que ha reposado desde siempre la justicia internacional, estos cuatro jueces advierten, cada uno a su manera, del riesgo que conlleva para la credibilidad de la CIJ el razonamiento seguido por la mayoría de sus colegas en este fallo.

La no comparecencia ante la CIJ y sus riesgos

Como se recordará, Venezuela optó desde un inicio (junio del 2018) por no comparecer en el procedimiento, al oponerse frontalmente al accionar unilateral de Guyana y cuestionar la competencia de la CIJ para conocer de esta demanda El texto integral de la demanda de Guyana (cuya lectura completa se recomienda) fue respondido por Venezuela 24 horas después con este comunicado oficial (véase texto del comunicado del 30/3/2018), cuya lectura también se recomienda.

Históricamente, Venezuela se ha mantenido siempre muy distante de la justicia internacional, persistiendo por ejemplo en no ratificar el Pacto de Bogotá de 1948 (véase estado de firmas y ratificaciones) y en no reconocer la competencia de la CIJ mediante la declaración prevista en el Artículo 36, párrafo 2 del Estatuto de la CIJ (véase texto). Esta actitud, que se ha mantenido a través del tiempo, se explica en gran parte por la sensación de haber sido objeto de una maniobra acordada entre los árbitros ingleses, norteamericanos y ruso para favorecer al Reino Unido en un laudo arbitral de 1899 sobre precisamente la frontera entre Venezuela y Reino Unido (Nota 2). Lo llamativo de recalcar en el marco de estas breves reflexiones, es que Guyana tampoco es parte al Pacto de Bogotá de 1948 y que tampoco ha reconocido nunca la competencia de la CIJ mediante la precitada declaración prevista para ese efecto (véase listado oficial de declaraciones hechas).

En una anterior nota sobre la posición venezolana titulada «El reciente comunicado en el que Venezuela reitera formalmente a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que no comparecerá ante ella: algunos apuntes» (véase nota), habíamos indicado el riesgo que corría Venezuela al privarse ella misma de poder arrebatir los argumentos de Guyana.

Ello sin considerar además el hecho que la no comparecencia por parte de un Estado en La Haya puede ser percibido por algunos jueces de la CIJ como un acto de rebeldía, que puede disimular la poca solidez de los argumentos del Estado ausente. ¿Podría ello explicar el hecho que de quince magistrados, solo cuatro consideraran equivocado el sostener que Venezuela sí ha dado su consentimiento para que la CIJ pueda conocer de una demanda como la planteada por Guyana? Es una interrogante que nos podemos hacer, al ser todos reconocidos juristas, que conocen muy bien los alcances así como las limitaciones de la justicia internacional para funcionar en ausencia de un consentimiento previo del Estado demandado.

Mapa de lo que en Venezuela se denomina la «Guayana Esequiba», extraído de nota de prensa de la BBC titulada «El Esequibo, el territorio que disputan Venezuela y Guyana desde hace más de 50 años», edición del 30/03/2018

En el hemisferio americano, el último caso en el que se pudo observar la no comparecencia a un procedimiento contencioso ante la CIJ en La Haya remonta a la decisión tomada por Estados Unidos en 1985, luego de declararse competente la CIJ en su decisión del 24 de noviembre de 1984 (véase texto completo) para examinar la demanda interpuesta por Nicaragua en abril de 1984. En el mes de setiembre de 1985, la CIJ dio por concluidas las audiencias orales a las que solamente participaron los asesores de Nicaragua (véase comunicado de prensa de la CIJ), procediendo a elaborar lo que se convertiría en un histórico fallo cuya lectura tuvo lugar el 27 de junio de 1986. La situación de Venezuela es no obstante distinta, en la medida en que Estados Unidos sí participó en la fase preliminar sobre competencia de la CIJ, y optó por no comparecer cuando la CIJ se declaró competente.

Para completar el panorama en lo correspondiente a Estados del hemisferio americano, cabe mencionar una actitud un tanto original de Colombia en abril de 2016, al optar por no asistir a una reunión en La Haya convenida con el Presidente de la CIJ, en el marco de las dos demandas pendientes de resolución contra Colombia presentadas por Nicaragua en el 2013 (Nota 3).

La figura de las excepciones preliminares en breve

Ahora bien, si un Estado demandado por otro no está de acuerdo en que una controversia sea llevada ante la justicia internacional, puede hacerlo ver ante la misma CIJ: en efecto, el procedimiento contencioso de la CIJ prevé una primera etapa procesal (denominada «excepciones preliminares«) en la que precisamente, el Estado demandado puede cuestionar ante los jueces de la CIJ la base de competencia usada por el contrincante. Con una primera fase escrita de dos rondas de alegatos, seguida luego de una fase oral de usualmente también dos rondas de alegatos. Culminada la etapa oral, la CIJ delibera y decide si es o no competente: esta primera etapa procesal toma varios años cuando ambos Estados comparecen (tres a cuatro), pero mucho menos si uno se abstiene de hacerlo. En el presente caso, las audiencias orales se realizaron el 30 de junio del 2020 (véase verbatim de estas audiencias) con la única participación de los asesores legales de Guyana.

En América Latina, en años recientes, podemos citar dos casos en los que, luego de resolver la cuestión sobre su competencia, la CIJ decidió sobre el fondo en contra – primer caso – y a favor – segundo caso – del Estado que presentó excepciones preliminares: se trata del fallo a favor de Nicaragua contra Colombia de noviembre del 2012 (véase detalle del caso) y del fallo a favor de Chile ante la demanda de Bolivia de octubre del 2018 (véase detalle del caso). Tanto Colombia como Chile, ambos Estados demandados por Nicaragua y Bolivia respectivamente, cuestionaron en un primer momento la competencia de la CIJ, sin mayor éxito en ninguno de los dos casos.

Colombia reiteró el fracaso de sus gestiones ante la CIJ al escuchar la lectura de dos fallos dados a conocer el mismo día, en la que el juez internacional se declara competente para conocer de dos nuevas demandas interpuestas en su contra por la misma Nicaragua en el 2013 (véase texto integral del fallo del 17 de marzo del 2016 ) y otra también en el 2013 (véase texto integral del fallo del 17 de marzo del 2016).

A modo de conclusión

Al anunciar oficialmente que no comparecería Venezuela, la CIJ decidió que su primera decisión sobre este caso versaría únicamente sobre aspectos de competencia (Nota 4), la cual fue dada a conocer este 18 de diciembre del 2020: los jueces de la CIJ reconocen que sí son competentes, pero únicamente para conocer de hechos anteriores a 1966.

Es probable que esta decisión sea objeto de fuertes críticas en la doctrina del derecho internacional público, al relativizar de manera bastante osada lo que constituye un principio angular del sistema de justicia internacional: ello, a partir de una interpretación muy propia hecha del alcance de un tratado de 1966 y de una carta emanada del Secretario General de Naciones Unidas de enero del 2018.

En las próximos semanas, la CIJ procederá a convocar nuevamente a ambos Estados, para precisar esta vez el cronograma a seguir en la segunda etapa sobre el fondo que durará varios años antes de la lectura del fallo (cuatro a cinco cuando ambos Estados comparecen, mucho menos si uno no lo hace).

Venezuela podría por supuesto mantener su posición de no comparecer ante la CIJ: en este caso, la CIJ tomaría una decisión sobre el fondo – sobre hechos anteriores a 1966 – sin que Venezuela tenga la posibilidad de responder a los alegatos de Guyana. Desde el punto de vista táctico, es en la fase oral del procedimiento contencioso en la que la ausencia del no compareciente surte mayores efectos, ya que en la fase previa (escrita), el Estado que no comparece tiene manera de hacer llegar a los jueces de la CIJ su posición sobre algunos de los argumentos escritos presentados en su contra.

Posterior al cierre de las audiencias orales, la CIJ inicia su período de deliberaciones internas («délibéré«) que duran varios meses hasta la lectura final del fallo a ambos contendores. Peruanos y chilenos debieron esperar más de 13 largos meses en el caso del fallo dado a conocer en el mes de enero del 2014 en materia de delimitación marítima (véase texto completo). La fase del «délibéré» es la fase en la cual pueden surtir mayores efectos las presencias de los jueces ad hoc designados por ambos Estados (y solo el de uno de los dos, en caso de no comparecencia).


–Notas–

Nota 1: Sobre algunos (pocos) datos arrojados por Estados de América Latina que han litigado en La Haya, y que viene a confirmar el dato de 15 millones de US$ dado a conocer por Guyana, remitimos a nuestros estimables lectores a la sección “El costo de una demanda en La Haya para un Estado: breve recapitulativo sobre una zona gris-oscura” de este artículo nuestro publicado en CIAR Global: BOEGLIN N., «Audiencias orales entre Costa Rica y Nicaragua ante la CIJ«, portal de CIARGlobal, edición del 25/07/2017, y disponible aquí.

Nota 2: Este litigio territorial entre Guyana y Venezuela sobre la región de Esequibo es la más antigua controversia que se mantiene irresuelta en el hemisferio americano. Un laudo arbitral de octubre de 1899 (véase texto completo), escasamente fundamentado, y considerado como muy favorable al Reino Unido, fue objeto de investigaciones que llevaron a Venezuela a considerarlo como nulo en los años 60. En este valioso artículo del Dr. Allan Brewer-Carías publicado en 2009 por el prestigioso Max Planck Institute de Heidelberg en Derecho Internacional Público y Derecho Comparado, se lee que:

The boundary established in the 1899 arbitration tribunal was considered to be settled for the next half-century, until a memorandum written by Severo Mallet-Provost (11 August 1944), a lawyer who had acted as a junior counsel for Venezuela at the Paris tribunal, was published posthumously in the 1949 issue of the American Journal of International Law (O Schoenrich ‘The Venezuela-British Guiana Boundary Dispute’ (1949) 43 AJIL 523, 528–30). The memorandum adduced that the arbitral tribunal’s president had coerced several members into assenting to the final decision, the result of a political deal between Britain and Russia. Reportedly, this memorandum had been dictated five years earlier by Mallet-Provost to Judge Otto Schoenrich, his partner in the US law firm of Curtis, Mallet-Prevost, Colte and Mosle, with instructions that it was not to be published until after his death, and even then, only at Judge Schoenrich’s discretion. Mallet-Prevost died on 10 December 1948, and his memorandum appeared in print some six months later” (punto 17).

En 1966 el Reino Unido y Venezuela suscribieron un tratado en aras de encontrar una solución negociada (véase texto del tratado en inglés y español).

Nota 3: Nos permitimos escribir en una nota al respecto que: “estamos anuentes a incluir un acápite en el caso de Colombia, en particular si se logra avanzar la idea de alguna ventaja del Estado que no asiste. Salvo error de nuestra parte, no se ha oído de una sobrecarga de trabajo de la legación diplomática en La Haya o de un problema de salud generalizado a todo el personal de la misión colombiana durante la tercera semana de abril del 2016 que impidiera enviar a un representante a una cita con el Presidente del máximo órgano jurisdiccional de Naciones Unidas”. Nótese que la misma nota fue también publicada en el sitio jurídico especializado colombiano de Debate Global (disponible aquí) en la que nos permitimos también indicar que: “Ante la duda sobre lo que pudo impedir que un diplomático colombiano se hiciera presente, nos permitimos solicitar a nuestros estimables lectores colombianos (y en particular a los integrantes de círculos como la Academia Colombiana de Derecho Internacional (ACCOLDI) o que forman parte de su aparato diplomático) remitirnos el texto de esta carta, con el fin de conocer las razones oficiales presentadas por Colombia a la CIJ para desistir del envío de su representante a una cita de esta naturaleza (se puede enviar al correo electrónico: cursodicr(a)gmail.com y se garantizará absoluta confidencialidad si así fuese requerida)“.

Nota 4 : Véase sobre esta primera ordenanza de la CIJ tomada en el mes de julio del 2018 nuestra breve nota: BOEGLIN N., «Guyana-Venezuela: la Corte Internacional de Justicia (CIJ) anuncia que fija plazos«, publicada en CiarGlobal, edición del 5/07/2018, y disponible aquí .

 

(*) Esta nota fue elaborada por Nicolas Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR)

Corte Penal Internacional: de cara a la elección de jueces titulares

Nicolas Boeglin

En esta segunda quincena del mes de diciembre, se realiza la Asamblea de Estados Partes de la Corte Penal Internacional (CPI) en La Haya: véase comunicado oficial de la CPI al respecto.

En la actualidad, son en total 123 los Estados Partes al Estatuto de Roma, tal y como se puede apreciar del estado oficial de firmas y ratificaciones (véase enlace oficial): en América Latina, faltan únicamente al llamado Cuba y Nicaragua, que tan siquiera han firmado este valioso instrumento internacional adoptado en 1998, que busca sancionar penalmente a personas responsables de actos considerados como los más graves por la comunidad internacional (crimen de genocidio, crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y el crimen de agresión).

En este año 2020, la CPI debió enfrentar la creciente hostilidad de Estados Unidos y de Israel, una situación raramente observada (Nota 1), la cual tiene como tela de fondo la investigación preliminar llevada por la Fiscal de la CPI sobre las exacciones israelíes en territorio palestino (Nota 2). En su último discurso como titular de la Fiscalía de la CPI ante la Asamblea de Estados Partes (véase texto completo), su autora señaló que:

«All here present have recognised the unacceptable nature of the measures taken by the United States (“US”) administration. I’m grateful to the ASP President and to all those who have spoken out on the matter, through joint statements, individual expressions of support, or otherwise supported the Court and me personally.

The measures do not only constitute an attack on the Court and the Rome Statute system but a direct political affront to States Parties and a dangerous precedent for a rules-based international system.

It is my sincere hope that the US reverses its aggressive policy of antagonism towards the Court. No one wins from such tactics. Until such time, it is crucial that States Parties remain vigilant and keep close tabs on the matter, especially as further escalation remains on the table«.

Con relación a América Latina, resulta oportuno indicar que la Fiscalía de la CPI tiene abiertas cuatro investigaciones preliminares: una en Bolivia, una en Colombia y dos en Venezuela (véase enlace oficial), mientras que la CPI registra actualmente veinte casos, todos contra dirigentes del continente africano (véase enlace oficial). Con relación a Costa Rica, es de notar que pese a lo oído en Costa Rica, no figura su nombre en la lista de los Estados citados por la CPI que le solicitaron colectivamente abrir una investigación en Venezuela a finales del año 2018 (véase enlace oficial).

Las elecciones del 2020 en breve

En una sesión siguiente a realizarse en Nueva York en este mismo mes de diciembre del 2020, se procederá a la escogencia de seis nuevos integrantes de la máxima instancia en materia de justicia penal internacional (véase comunicado oficial en español de la CPI que precisar perfil de candidatos propuestos y sistema de votación escogido), así como al nuevo titular de la Fiscalía de la CPI (véase enlace sobre proceso seguido).

Con relación a la elección de los futuros jueces, sobre la que versarán las siguientes líneas, los Estados Partes son llamados a postular a sus nacionales en dos listas (A y B) de candidatos, según su perfil profesional (véase arículo 36, párrafo 3) del Estatuto de Roma: la lista A se reserva para profesionales del derecho penal, que cuentan con «reconocida competencia en derecho y procedimiento penales y la necesaria experiencia en causas penales en calidad de magistrado, fiscal, abogado u otra función similar«; mientras que la lista B contempla a personas con «reconocida competencia en materias pertinentes de derecho internacional, tales como el derecho internacional humanitario y las normas de derechos humanos, así como gran experiencia en funciones jurídicas profesionales que tengan relación con la labor judicial de la Corte«.

En la actualidad, de 18 jueces, la CPI cuenta con tres provenientes de América Latina y el Caribe (dos mujeres y un hombre). Como en muchas otras instancias internacionales, la igualdad de género sigue siendo un desafío en el seno de la justicia penal internacional, si consideramos que en su composición actual de 18 integrantes, la CPI cuenta con seis mujeres (véase listado oficial).

Cabe señalar que de un total de 18 postulantes para las seis vacantes, los Estados de América Latina y el Caribe han presentado en total a siete candidatos. La distribución geográfica no debería permitir más que un puesto para este bloque regional. La poca coordinación de la región que evidencian estos números implica para cada aparato diplomático la realización de diversas gestiones diplomáticas y solicitudes de apoyos, en aras de intentar alcanzar la victoria de su postulado o postulada: se trata de la candidata de Brasil (lista A), del candidato de Colombia (lista B) del candidato de Costa Rica (lista B), del candidato de Ecuador (lista B), de la candidata de México (B), de la candidata de Trinidad y Tobago (A) y de la candidata del Uruguay (B). En algunos casos, se trata de reconocidas figuras y profesionales en su campo, en otros no tanto; en unos adicionales, las atractivas condiciones que ofrece la CPI (véase enlace oficial) y el hecho de beneficiar de un mandato de nueve años pueden, en parte, explicar su interés por integrarla.

Nótese que no siempre este bloque regional ha actuado de esta manera: en el 2014, la coordinación regional permitió que el único candidato de América Latina y el Caribe fuera el candidato de Brasil. Este último inició con 34 votos a favor en la primera ronda y terminó retirándose de la contienda después de la ronda número 11 con 14 votos (véase nota oficial sobre elecciones del 2014 con resultados de las 22 rondas registradas).

Con relación al candidato propuesto por Costa Rica (véase hoja de vida), su innegable experiencia como diplomático es un elemento a tomar en consideración. No obstante, considerando la gran cantidad de profesionales y de especialistas en derecho penal y en derechos humanos con los que se cuenta en Costa Rica, así como jueces penalistas con amplia experiencia, no se tiene claro si su postulación resultó de una terna o de algun concurso involucrando el criterio de gremios profesionales, especialistas, escuelas de derecho y de la judicatura penal. En esta nota de prensa, se señala que las máximas autoridades diplomáticas de Costa Rica consideraron oportuno – febrero del 2020 – conocer a los demás contendores antes de hacer público el anuncio de la candidatura oficial (véase nota de CRHoy del 16/02/2020).

América Latina, mujeres y justicia internacional

Es de notar desde ya que a diferencia de Colombia, Costa Rica y Ecuador, los departamentos de candidaturas de Brasil, México y Uruguay optaron para esta contienda del 2020 por postular a una mujer: un detalle de interés que muy probablemente explique, si nuestra intuición es la correcta, la ventaja de la que estos aparatos diplomáticos sabrán sacar provecho a la hora de intentar convencer a las demás 122 delegaciones. En el 2017, para seis vacantes, los Estados Partes escogieron a cinco mujeres entre las 12 postulaciones (véase resultado oficial de votaciones).

En la primera elección de jueces de la CPI realizada en el 2003, el candidato de Bolivia, René Blattmann fue escogido por un mandato de seis años (véase hoja de vida), con 57 votos obtenidos (véase nota de prensa); al tiempo que la jurista costarricense Elizabeth Odio Benito reunió a 60 votos de 85 posibles en la primera ronda, con un mandato que culminó en el 2012 (véase nota de prensa de 5/02/2003). Nótese que la misma jurista costarricense fue electa jueza de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el mes de junio del 2015 (Nota 3).

En el caso de otros integrantes de América Latina que llegaron a ser electos jueces en el seno de la CPI desde el 2003, se pueden contabilizar:

– la jueza propuesta por Argentina, Silvia Fernádez de Gurmendi, quién fungió como jueza de la CPI en el período (2010-2018), habiendo ocupado con anterioridad funciones dentro de la CPI (véase hoja de vida);

– la jueza propuesta por República Dominicana Olga Venecia del C. Herrera Carbuccia (2012-2021) (véase hoja de vida);

– la jueza propuesta por Perú Luz del Carmen Ibáñez Carranza (2018-2027) (véase hoja de vida).

A modo de conclusión

Es de notar que la nacionalidad de un juez en la CPI obliga al Estado del que es oriundo a cierta reserva, en aras de permitir cierta rotación a nivel de la región o subregión. Ello puede explicar por ejemplo que Argentina no postulara ninguna candidatura para estas elecciones del 2020 y que Brasil y Uruguay sí lo hicieran. También puede explicar que el candidato postulado por Costa Rica en diciembre del 2011 no tuviera mayores posibilidades, teniendo la CPI hasta el 2012 a una jueza de nacionalidad costarricense (véase rondas 9 a 11 y los votos registrados en diciembre del 2011).

Cabe también precisar que algunos candidatos propuestos poseen un perfil de personas poco familiarizadas con la justicia penal internacional: por ejemplo, podemos citar el extraño caso del candidato de Colombia y su negativa evaluación por parte de un comité internacional adscrito a la CPI (véase informe, página 19). Tratándose de un latitud del continente que posee a reconocidos especialistas en materia penal y en materia de derechos humanos, el espectáculo brindado por Colombia merece mención: pese a la recomendación negativa, el candidato colombiano sigue en la contienda y será interesante apreciar el número de votos obtenidos por la diplomacia colombiana.

En la práctica, se observa también que muchas de las personas que llegaron a la CPI ejercieron anteriormente como jueces penales en su Estado de origen, o bien adquirieron experiencia internacional en materia penal en funciones dentro de la CPI antes de integrarla como jueces titulares.

Con relación a Costa Rica, formalmente se trata de la segunda postulación oficial que realiza de un candidato para la CPI, si consideramos que la primera se dió en diciembre del 2011 sin lograrse concretar. En efecto, en el 2003, fue Panamá (y no Costa Rica) el Estado que postuló a Elizabeth Odio Benito, quien fungió como jueza de la CPI hasta el 2012.

–Notas–

Nota 1: Véase al respecto nuestra breve nota BOEGLIN N., «Sanciones de EEUU contra la Corte Penal Internacional (CPI): breves apuntes sobre sus verdaderas motivaciones«, Portal de la Universidad de Costa Rica (UCR), Sección Voz Experta, edición del 24/09/2020, disponible aquí.

Nota 2: Véase al respecto nuestra breve nota de junio del 2020, BOEGLIN N., «A propósito de las sanciones anunciadas por Estados Unidos contra el personal de la Corte Penal Internacional (CPI)»), Derecho Internacional, edición del 13/06/2020, disponible aquí.

Nota 3: Véase al respecto nuestra breve nota, BOEGLIN N., «Elecciones en el marco de la Asamblea General de la OEA: un breve análisis«, DerechoaldDia, edición del 17/06/2015, disponible aquí.

 

Imagen: Elizabeth Odio Benito, jurista costarricense electa integrante de la CPI (2003-2012), acompañada por Bruno Stagno Ugarte, Presidente de la Asamblea de Estados Partes a la Corte Penal Internacional (2005-2008) y ex Canciller de Costa Rica (2006-2010). Foto extraída de nota de prensa, Prensa Libre, edición del 14/08/2009

Esta nota fue elaborada por Nicolas Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR).

Nueva batalla electoral y constitucional, parlamentarias en Venezuela

Lic. José A. Amesty R.

Foto tomada de Juventud Rebelde

El próximo 6 de diciembre 2020, se celebrarán las elecciones legislativas, para el periodo 2020 al 2025 en Venezuela, elección popular número 26. La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, introdujo la figura del Poder Electoral, y le dio rango Constitucional, considerando al Consejo Nacional Electoral CNE, como su ente rector.

Veamos algunos elementos, (humildes meditaciones) que tendrán repercusión en el resultado final de esta contienda electoral, que desde hace varios años, tiene algunos elementos, que son reincidentes, y otros que son nuevos o con otros énfasis.

  1. El chavismo, más que un concepto teórico, es una teoría de acción colectiva, popular, llevada a la práctica. Sin el chavismo político y sociológico, en palabras de Reinaldo Iturriza, no sería posible entender no ya la revolución bolivariana, si no la resistencia heroica a los ataques políticos, económicos y mediáticos contra un proceso, ataques que comenzaron desde la victoria de Chávez, se recrudecieron con su muerte en 2013 y se intensificaron aún más, bajo la presidencia de Nicolás Maduro Moros.

Pero resulta, que el chavismo, como sabemos, va un tanto dividido, a la contienda electoral producto de las querellas internas y externas, no tanto políticas, sino económicas.

  1. Estamos seguros, que estas elecciones se celebrarán, como siempre, en un ambiente de calma, tranquilidad y con la garantía de un sistema electoral, avalado en algún momento por la Unión Europea, y el expresidente Jimmy Carter, quien lo considera el más seguro del mundo, confiable ante cualquier auditoría.

Lo diferente a unas elecciones presidenciales, es que en éstas, el abanico de candidatos es muy alto, y no hay posibilidad para arrasar, debido a las múltiples ofertas, agregándole además, por un lado, la división en la oposición, y por otro, otras voces dentro del partido PSUV.

  1. Sin duda alguna, aunque la incidencia de las condiciones económicas, independiente de su origen, no han debilitado el liderazgo del presidente Nicolás Maduro, sí afectará el resultado de las elecciones parlamentarias.

Aunque, cuando sufragamos por los candidatos de Nicolás Maduro, no estamos votando por la indolencia ni por la ineficacia. Ni por mafias ni por quienes han tenido la política por negocio. Tampoco por las desviaciones de quienes hipócritamente, se llaman chavistas para legitimar la trampa. Nominamos contra eso, para sobrepasar ese charco inmundo. Optamos por una Asamblea en sintonía con un presidente, que sostiene la dignidad de la patria y no ha traicionado el legado de Bolívar y Chávez.

  1. Por supuesto, la guerra económica y su hermano acompañante el bloqueo norteamericano, entendido como: hiperinflación y especulación cambiaria inducida, caída de los precios del petróleo, la corrupción (reconocida por el presidente Maduro), presente en todo gobierno donde se mueven cantidades millonarias en contratos públicos (desde México a la Argentina), entre otras calamidades económicas, sociales, políticas y otras, tendrán una influencia grande en la decisión final del electorado en Venezuela. Esto al margen, que ya conocemos que el pueblo venezolano, conoce el origen de estos males.
  2. Reconocemos que el gobierno venezolano tiene muchos defectos, como todos los gobiernos del mundo, pero el pueblo venezolano hablará a través de los comicios electorales, en las calles y dará un voto de confianza a Nicolás Maduro y los candidatos de la Revolución Bolivariana, para resolver una crisis económica inducida.
  3. Es claro que el chavismo, tiene más apoyo que el proyecto opositor, que tiene como objetivo la vuelta y la permanencia en el neoliberalismo, quien no respeta la soberanía política, económica, territorial y popular de un pueblo informado y politizado, que aun con la necesaria crítica y autocrítica, no quiere volver al pasado.
  4. Así mismo, el país continúa sometido a una feroz ofensiva mediática internacional de demonización, acompañada por la advertencia e insistencia de EEUU, que se deben suspender las elecciones. Sin embargo, el pueblo venezolano, concurrirá a las urnas, sin miedo y consciente, del entramado inmisericorde contra Venezuela, pero seguro de la victoria.
  5. No elegiremos a quienes representan a la Asamblea Nacional actual, que solo se ocupó de sabotear, de avalar agresiones al país, de conspirar y agudizar inmisericordemente las penurias del pueblo. Por esa oposición no se votará.
  6. No ejercemos el sufragio por quienes tras cada decisión del presidente Maduro, siempre le han buscado las cinco patas al gato, y luego, a pesar de que han sido acertadas, no han sido capaces de retractarse. No escogemos la ingratitud. Porque la duda ofende. Porque, más allá de la crítica, resulta sospechoso. Porque vacilar es perdernos, porque en estos momentos, en que está en juego la propia existencia de la República no se puede andar con guabineos.

Estos son solo algunos elementos, que marcarán la decisión del pueblo venezolano, pero como intuimos al inicio, el Gran Polo Patriótico, no pudo llegar a acuerdos con otros sectores, que apoyan el gobierno del presidente Maduro, lo que implica que tendremos una votación a favor dividida. Como en otras oportunidades, no sabemos el daño que esto nos puede causar. Los tentáculos del poder, sin entender mucho de política, impusieron sus criterios, imperó la apronta y muchos candidatos son producto de la amistad, la dedocracia y la familia.

Lo que favorece es que la oposición, concurre con varios sectores, y otro sector se opone al proceso, lo que implica una gran desventaja para este corrompido grupúsculo, conocido por sus trácalas y mañas.

Sí estamos seguros, que el pueblo no perderá la perspectiva. Por el lado de la oposición no hay nada que buscar.

El pueblo sabe que urgimos de una Asamblea Nacional, acorde con el proyecto de país que asumimos como horizonte. Una Asamblea Nacional, que no sabotee ni se detenga en intrascendencias, y que se ocupe de construir y fortalecer la institucionalidad de los nuevos tiempos, al cual ofrendamos con alegría nuestros esfuerzos y afectos más íntimos.

Vamos a ganar esta nueva contienda electoral y vamos a seguir dando la discusión, para que las equivocaciones no nos desvíen del camino que nos incluye como pueblo, lo cual solo se puede lograr si tenemos Patria, por tanto, la conciencia del momento histórico que no se pierda. No podemos entregar el país a los traidores.

Más allá de esta nueva batalla, está la guerra cotidiana y esa sí tenemos la responsabilidad ancestral de no perderla. Con los vende patria no hay nada que discutir. Nosotros somos quienes tenemos que debatir el proceso. Con el partido PSUV y con el gobierno que somos y más allá del partido que no somos y del gobierno que no somos, la Revolución es del pueblo y a nosotros como pueblo nos corresponde hacerla.

Sí estamos seguros, que la sabiduría y lo preclaro del pueblo venezolano, no abandonará el proceso revolucionario iniciado por el comandante Chávez y continuado con el Presidente Nicolás Maduro. Saben que hay mucho que perder y mucho más que ganar, luego de las elecciones, y más allá del futuro de la Nación en manos de la Revolución Bolivariana.

 

Foto tomada de Prensa Latina.

El caribe no es de EUA

Marlin Óscar Ávila Henríquez

Para quienes logran salir del encierro informativo en que nos mantienen los medios en poder de la oligarquía nacional, y otros internacionales como CNN y Fox News, los motivos del conflicto político actual entre Washington, Caracas y Teherán, a pocas horas de convertirse en un conflicto bélico de incalculables dimensiones, son más que evidentes. Lejos de ser por una democracia cacareada por la ultraderecha internacional, tiene mucho más de motivos económicos y, ahora, electorales en Washington.

Si se inicia esa guerra entre el Pentágono, Irán y Venezuela, será con graves consecuencias para América Latina. Los gobiernos de Colombia y Brasil ya tomaron partido y seguramente están listos a activar bélicamente. Sin embargo, potencias mundiales como China y Rusia, también parecieran estar listas.

Simplemente, el mercado, que está respirando a medias, por resultados con la pandemia Covid19 va a tener una «embolia respiratoria» de la cual no saldrá con «anticoagulantes».

 Los tres países del llamado Triángulo Norte de Centro América, va a querer asaltar a Nicaragua. A Nicaragua le falta poco para ser asfixiada comercialmente por sus vecinos, Costa Rica y Honduras, teniendo atrás de estos gobiernos las embajadas de EUA.

Al iniciar las primeras acciones bélicas por el Pentágono en las fronteras marítimas venezolanas, aún sin expandirse los ataques más allá de esa zona, los barcos mercantes detendrán sus viajes a la zona del mar Caribe. El desabastecimiento será regional, en toda Mesoamérica. El Canal de Panamá será obligado a cerrar y dejar pasar únicamente a la flota marina de EUA, más sus aliados.

Washington enviaría otras flotas de marinos militares a las costas del Atlántico y del Pacífico centroamericano.

Colombia estaría convertida en un territorio completamente militarizado, donde por algún tiempo, el poder total estaría en los Marines gringos y las tropas colombianas sometidas a sus dictados.

Bolivia, Perú y Ecuador no tendrán ninguna voz, excepto obedecer a Washington. Los Carabineros de Chile, nuevamente, dispuestos a reprimir a su juventud, aunque se quede en la retaguardia de ese casi probable conflicto bélico. Argentina, de igual manera que México, actuarían para «apagar» el incendio provocado por Trump.

Seguramente los gobiernos narco mercantes y la DEA ya tienen definida su reacción para «después» consolidar su negocio. Para lo cual invierten en paramilitares, mercenarios y terroristas (Ver caso fallido de hace pocos días en Costa Norte venezolana). Esperan que, los precios de sus estupefacientes aumenten. Así que tienen en perspectiva una celebración continental.

Igualmente están los halcones del gobierno de Trump, quien con un «posible triunfo bélico» espera extender su inquilinato en la Casa Blanca.

Sin embargo, como en toda aventura de esta índole, esto podría tener resultados adversos. Aunque estemos encerrados por el Covid-19, la juventud latinoamericana podría reaccionar contra la invasión yanqui. Si China y Rusia reaccionan militarmente, la fiesta de los Narcos y la ultraderecha gobernante en nuestro continente podría tener su fin por donde menos lo esperaban.

Está posibilidad no solamente acabaría con el imperio estadounidense, pero con toda la ultraderecha dentro de países como Brasil, Chile, Ecuador, Bolivia y Centroamérica.

Posiblemente se establezcan gobiernos de transición mientras sucedan elecciones limpias y democráticas.

Es seguro que una u otra alternativa será dolorosa para nuestros pueblos. Los que sobrevivan, después de la mortal pandemia, podrían morir en la guerra bélica, de inanición o de la angustia que se vivirá. No sería una guerra de uno o dos meses. Podríamos vivir en guerra hasta un año, quien sabe.

La decisión de entrar en esta aventura está en manos (porque su cerebro parece achicársele rápidamente) del señor Trump.

Para los pueblos sin poder, no sería, como nunca lo es, nada bueno que reviente una guerra en nuestros mares del caribe. Sin embargo, con los gobernantes que tenemos actualmente, es muy probable que aquí se dé el inicio de la última guerra mundial.

Costa Rica ha estado jugando a la «democracia perfecta”, siendo integrante activa del club conservador de Lima. Últimamente, no ha estado muy beligerante en ese club, pero si ha estado aliada a Washington en los organismos multilaterales, particularmente en la OEA, donde su secretario, Luis Almagro, se ha ganado una muy negativa imagen internacional.

Por lo anterior, quisiéramos que nuestra cancillería se mantenga lo más alejada posible de tales conflictos y no nos arrastre a tomar partido por Washington nuevamente.

Esperemos que el vaquero de Donald Trump mantenga «enfundado su revolver» en los días venideros, puesto que sus contrincantes saben usar igual o mejor sus armas.

Exijamos a Washington que busque otros territorios para ejecutar sus duelos escandalosos, puesto que el caribe es nuestro y no de Washington.

Condena a la participación de Costa Rica en el TIAR contra Venezuela

SURCOS recibió el siguiente comunicado:

Comisión Nacional de Enlace

Comunicado político Nº 62

Condenamos que Costa Rica se sume a las acciones de guerra contra Venezuela como parte del grupo de dementes que conforman el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR)

El pasado 23 de septiembre se llevó a cabo en la ciudad de Nueva York la trigésima reunión de ministros de relaciones exteriores, actuando como órgano de consulta en aplicación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca.

El pronunciamiento de este grupo de dementes, entre los cuales se encuentra el ministro de relaciones exteriores de Costa Rica, Manuel Ventura, no significa otra cosa que sumarse a las acciones de desestabilización y guerra contra Venezuela. Es decir, la irresponsable administración Alvarado Quesada respalda las acciones encaminadas a la agresión militar contra la República Bolivariana.

Los considerandos del pronunciamiento de ese grupo de psicópatas se basan solo en especulaciones y mentiras descaradas y por supuesto como es práctica común no presentan ninguna prueba. Pero es en los por tanto donde ese grupo de representantes de la extrema derecha continental pone en evidencia su demencial visión de las cosas que arrastra a la región a un conflicto militar.

Es allí donde se utilizan los términos como “perseguir, capturar, extraditar y sancionar” a personas vinculadas al gobierno de Venezuela. Solo les faltó la palabra “matar”. Es el lenguaje de corte neofascista de la derecha latinoamericano que no significa otra cosa que la intensificación de las políticas de agresión. Podríamos denominarlo un PLAN CÓNDOR 2.0”.

Pero es en el punto cinco del pronunciamiento de ese grupo de dementes donde se esconde el veneno de esa resolución. Se dice en ese aparte: “instruir a los Representantes Permanentes ante la Organización de Estados Americanos de los Estados partes del TIAR que den seguimiento a la situación en la República Bolivariana de Venezuela y su impacto en la región con objeto de evaluar la formulación de eventuales recomendaciones, en el marco del Artículo 8 del TIAR, para lo cual podrán conformar una o más comisiones ad hoc. Dichas recomendaciones serán elevadas al Órgano de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores en su próxima sesión.”

Pero qué nos dice el Artículo 8 del TIAR: “Para los efectos de este Tratado, las medidas que el Órgano de Consulta acuerde comprenderán una o más de las siguientes: el retiro de los jefes de misión; la ruptura de las relaciones diplomáticas; la ruptura de las relaciones consulares; la interrupción parcial o total de las relaciones económicas, o de las comunicaciones ferroviarias, marítimas, aéreas, postales, telegráficas, telefónicas, radiotelefónicas o radiotelegráficas, y el empleo de la fuerza armada.”

Eso fue lo que signó el ministro de Relaciones Exteriores de Costa Rica, un demente irresponsable que no tiene la menor idea de las consecuencias de lo que firmó. Es decir, al colocarse en el pronunciamiento el Artículo 8 del TIAR y el hecho de que Costa Rica avaló esa resolución, Costa Rica se suma a una muy cercana aplicación de ese artículo, especialmente el empleo de la fuerza armada contra Venezuela.

Es de tal gravedad lo acordado, que incluso el gobierno de Uruguay ha decidido denunciar y retirarse del TIAR, por cuanto “…esta resolución sienta un gravísimo precedente en materia de derecho internacional. Los que creemos en el sistema multilateral no podemos permitir que sucedan estas cosas”. Por el contrario, la administración de Carlos Alvarado nos arrastra a este escenario de confrontación militar en alianza con el gobierno de EEUU (Trump y sus halcones), con el gobierno paramilitar colombiano, con el narcomilitar gobierno hondureño y con los neofascistas de Bolsonaro y Piñera. Vaya alianzas de este gobierno del PAC.

Por tanto exigimos:

La renuncia inmediata del ministro de relaciones exteriores Manuel Ventura por la irresponsabilidad de sus actos que compromete a todo el pueblo de Costa Rica.

La denuncia y retiro de Costa Rica del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) vestigio vergonzante de la guerra fría y de las dictaduras militares latinoamericanas del cual Costa Rica no tiene por qué se parte.

La inmediata rectificación del gobierno de Costa Rica en materia de política exterior, de abandonar su estrategia de agresión a países y pueblos hermanos y que efectivamente contribuya desde mecanismos que promuevan el diálogo y la negociación, a fortalecer los principios de no intervención en los asuntos internos y el respeto a la soberanía de cada país con fin de ser un factor que propugne en la solución de los conflictos y el fortalecimiento de la integración regional y no como sucede ahora, el gobierno, es decir Costa Rica, convertido en una correa de transmisión de los intereses imperialistas en la región

Comisión Nacional de Enlace

San José, Costa Rica

25 septiembre 2019

 

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